Partida Rol por web

Mientras íbamos por las escaleras Michael y yo decididos por encontrar al resto para contarles las novedades, seguía ojeando mi libro verde hasta el punto que me tropecé dos veces con la escalera, y si no fuese por un aviso de Michael casi me caigo por una escalera sin destino físico (literalmente llevaba a ninguna parte, un vacío de aire del cual te caerías a la escalera de abajo).

Y no fue hasta que él saludó a los demás que yo me di cuenta que ya estábamos reunidos, y dejé de leer el libro para volver a guardarlo en la mochila - nada, no leo su nombre en los primeros capítulos del libro. Ah, hola!... - miré a las chicas con algo de entusiasmo.

-¿Cómo os ha ido? nosotros hemos encontrado el nombre completo de quien hablaba la fundadora de Michael - comenté contento. Fue todo un éxito, teniendo en cuenta lo enorme que era la biblioteca. Entonces miré a Colton, y haciendo acopio de todas mis fuerzas para no sonar demasiado mal y intentar ser claro al mismo tiempo, para que lo entendiera, dije - Si James te pregunta, el trabajo sobre "Grymanfly" que te dio la profesora Taurus fue muuuy difícil - lo dije con más lentitud de la normal, sin exagerar, pero lo suficiente como para no tener que repetirme - y si crees que puedes, dale las gracias por haberte "ayudado" a buscar información para tu "trabajo" - hice gestos de "entre comillas" con ambos dedos de ambas manos. Y luego miré a ambas chicas y expliqué - Eso fue lo que le dijimos cuando vino a preguntarnos, y al final nos ayudó a buscarlo, para que no castigasen a Colton por no saber hacer su "trabajo".

Esperaba que Michael fuese quien diera más explicaciones, pues era su fundadora y el nombre se lo dio a él, cuando me di cuenta de que faltaban Ivy y Percy. - ¿Dónde está Ivy? ... - recordé que habían decidido volver a la sala de los fundadores. Tras un amargo sentimiento que reprimí, pensé que lo mejor era compartir mi teoría en voz alta - Si todo va como la última vez que entramos allí, probablemente re-aparezcan en sus salas comunes respectivamente cuando sea de noche. Con suerte, antes. Si nos buscan irán probablemente al gran Comedor, ¿vamos?, casi es la hora de cenar y sería sospechoso no estar por allí.

Úrsula le había entendido a la primera. Le sonrió. Parecía que se conocían de siempre, y en aquel mundo tan extraño era de lo más normal que había encontrado. Asintió y le dijo

- Mucho cuidado, punto en boca...

Y entonces les hizo el test del algodón, porque el algodón no engañaba y es que si eran Shadefian disfrazadas estaba seguro de que sus ojos de investigador los descubrirían. Lo que no esperaba fue una colleja más sonora que dolorosa y a la acusación posterior de ser un miraculos. Se quedó blanco, luego rojo y empezó a balbucear

- Yo...yo, yo no, yo no he.... yo solo.... - y la risa de Úrsula solo lo hizo todo peor, sintiéndose más y más escarnecido. Le había dado vergüenza, porque el podía jurar por todos los tirachinas que no les había mirado el culo, pero lo peor es que..... igual les tenía que haber mirado el culo y ni siquiera se le había pasado por la cabeza. Le debía faltar ese punto canalla de los malotes que tanto gustaban a las chicas, los que miraban los culos y los incipientes pechos de las niñas, pero es que él no miraba esas cosas, él miraba los ojos, y el pelo, y los labios, los labios le flipaban, pero ¿los culos?, aquello era una tontería, los culos solo hacían una cosa, pedos, y los pedos no eran nada femeninos. Sonrió, intentando seguir la broma, y suspiró de alivio al decirle que no iban a desalmizarlo pero en su fuero interno estaba decidido. En cuanto viera a una chica que no estuviera tan alerta como Luna y Úrsula le pensaba mirar el culo como si tuviera rayos X, resonancia magnética y TAC, miraría con tanta intensidad las posaderas que encontraría que es lo que veían los chicos en ellas o moriría en el intento.

Afortunadamente el momento embarazoso pasó, encontraron a Sir Nick y le pudieron hacer algunas preguntas con respuestas bastante impactantes. Luna estaba tan contenta que le quería dar 10 ranas de chocolate, pero Colt se quitó importancia y le dijo que con 3, una para cada uno, se daba más que pagado. Colton dio sus interpretaciones de lo que le sugería la información y que el mejor sitio para seguir era la biblioteca. Salieron los tres leones hacia allá comentando todo lo que les habían contado y sopesando si aquello era posible en el mundo mágico.

Corrían hacia la biblioteca sin saber que hora era, sin recibir señales de sus relojes biológicos que marcaban las papeo en punto. A medio camino de la biblioteca se encontraron con Michael y Kyle, que ignoró su presencia y saludó solamente a las chicas. Se sonrió con cinismo y dijo

- Hola, Michael. No nos ha ido mal, aunque no tan bien como a vosotros seguro - le dirigió una mirada a Úrsula y luego y entonces le vino Kyle a contarle lo que había hecho. Lo fulminó con la mirada porque le había utilizado sin su permiso, para que en caso de que le cayera un castigo o se metiera en un lío o lo que fuera el problema cayera sobre Colton y no sobre él. Lo miró y se rio, sobre todo cuando empezaba a hablarle como si fuera tonto, y comenzaba a hacer comillas en el aire. Aquello ya era demasiado y le espetó

- ¿Y por qué diablos tendría que mentir por ti, eh? Si James me pregunta le diré que no sé de que habla y que yo no tenía deberes de eso... Si quieres mentir no metas a otros en tus mentiras, que tienes más cara que un saco de monedas. Será posible..... menudo pecho frío, no podía decir que los deberes eran suyos, no, tenía que buscar a quien tirarle su mierda.... - Miró a Úrsula y a Luna - Yo me abro a comer, seguro que Ivy y Percy estarán allí, paso de quedarme más aquí que se me va a cortar hasta el apetito.

Y se dio la vuelta visiblemente enfadado. Farfullando entre dientes exabruptos que no podían ir dirigidos a otro que no fueran Kyle, aunque probablemente Michael hubiera tenido parte de culpa. Al menos le consolaba el hecho de que James hubiera decidido ayudar en unos deberes que supuestamente eran para él. No lo conocía mucho, pero ya le caía bien, tanto que hasta le daría las gracias, aunque si le preguntaba pensaba decirle la verdad, bueno, parte de ella, que una cosa es que Kyle fuera un pinocho y otra que el pobre se viera envuelto en la búsqueda de Shadefian.

Tras el éxito en la Biblioteca, Kyle y Michael no tardaron mucho en encontrar a otros miembros de la pandilla por los corredores de Hogwarts. Michael les hizo un gesto con la mano y se acercaron para poder cambiar impresiones. Al parecer, todos tenían mucho que contarse y Kyle puso al resto al corriente de la parte que les tocaba.

Lo que Michael no esperaba era que Colton se enfadase cuando se enteró de la historia que Kyle se había sacado de la manga en la Biblioteca. Pero después de pensarlo un momento, se dio cuenta de que el chico rubio estaba en lo cierto. El tono de la explicación de Kyle no había terminado de gustar al Ravenclaw, y en cualquier caso, no había estado bien poner aquella excusa sin que Colton lo supiera.

—Tienes razón, Colton —reconoció Michael—. Tendríamos que habernos inventado un nombre. Supongo que con las prisas, Kyle no pensó en que podía haber consecuencias y yo tampoco supe reaccionar a tiempo. Lo siento...

Miró a su amigo rubio sin saber muy bien cómo arreglar aquello, pero al final se dio cuenta de que fue el propio Colton quien había encontrado la solución.

—Si James o quien sea te pregunta, di eso. Que tú no tienes nada que ver, que hablen conmigo. Diré que era yo quien quería encontrar información sobre algo que había leído, pero que me daba reparo reconocer que no encontraba el libro.

Aquello solo significaría pasar el marrón de Colton a él mismo, pero Michael lo prefería así. Lo último que quería era que se enfadasen en un momento como ese, donde todo empezaba a encajar de alguna manera. Ya tenían bastantes problemas con la ubicación del libro. Detalle que, por cierto, aún no habían comentado al resto...

—Es cierto, hemos encontrado el nombre completo de la bruja que me indicó Rowena Ravenclaw —dijo—. Se llama Kaima Grymanfly, y está relacionada con un objeto llamado "vasija del tiempo". Un objeto prohibido, por lo visto. Pero lo peor es que el libro donde se da más información sobre el tema está en la Sección Prohibida... No se puede acceder a él sin permiso de un profesor, y seguramente tampoco podamos sacarlo de la Biblioteca.

Miró un poco abatido a Colton, Úrsula y Luna. Contado así, no parecía tanto lo que habían conseguido... Esperaba que al menos los Gryffindor hubieran tenido más éxito. Pero antes de que pudiera preguntarles, mencionaron a Ivy y Percy.

—Es verdad, deberíamos encontrarles antes de seguir —dijo—. Ellos también querrán saber lo que hemos averiguado.

Y Michael sentía mucha curiosidad por saber cómo les había ido a ellos en su visita a las puertas de los Fundadores.

La maleducada respuesta de Colton fue como siempre, borde y estúpida. 

- ¿pero de qué diablos estás hablando? Estábamos en  un aprieto en la biblioteca y algo teníamos que decirle a James. Yo y Ivy somos Slytherin y los dos sacamos las mejores notas en clase de Tauris, ¿cómo iba a ponernos un trabajo a mí o a ella!? Michael es de la misma clase de James, sería absurdo decirle que la profesora le ha puesto un trabajo extra estando en su misma clase! Lo único que se me ocurrió fue decir alguien de Gryffindor, es evidente que la Tauris os tienen manía, y era la opción más creíble - acaso no entendía la lógica detrás de todo eso? - Y deja de ser tan mal hablado! creía que sólo los Slytherins eran así de bordes - Ya me había hartado, me había relacionado con la palabra "mierda" más de una vez, y delante de todos! nunca nadie se había metido tanto conmigo en un solo día - A ver si mejoras esa actitud. - le espeté finalmente, harto de sus pullas continuas.  *menudo maleducado desagradecido!! me tiene arto.  

Michael intentó meterse y decir que era suyo el trabajo - No creo que a James le importe a QUIEN tenía que ayudar, es un buen chico y gracias a él pudimos encontrar el nombre completo. Si Colton no lo entiende, pues haced lo que queráis. Menuda excusa más tonta para enfadarse! - estaba molesto y me di la vuelta, me fui en dirección contraria. Cualquier otro camino para llegar al gran comedor era mejor que ir detrás de Colton.

Rabiando y más molesto que nunca, me alejé y avancé por uno de los pasillos intentando encontrar un modo de alcanzar el Gran comedor sin tener que pasar por donde había ido Colton. Mascullaba pisando fuerte, estaba realmente irritado.

*Como alguien puede ser tan irritante!?? - encima que le había defendido con todo el asunto de la poción frente a una horda de serpientes vengativas en mi propio dormitorio!! y era la segunda vez que me decía que era como la mierda. Estaba acumulando unas emociones de rabia in-crescendo hacia el rubito de Gryffidor. - ...mocoso malcriado. Maldito niñato de Gryffindor! - y fue justo decir eso que giré una esquina y me encontré a Alondra de frente, haciendo que casi nos choquemos. 

-Oh! - Alondra? - Alondra!, perdón. Estaba... - miré hacia atrás y luego puse cara de enfado y asco - no importa. Voy de camino al gran comedor. Y tú?

olton y Úrsula casi todo era divertido. Cuando le dio aquella sonora colleja, mi primer instinto fue llevarme las manos a la boca, sorprendida, pero después me eché a reír, acompañando a Úrsula, porque había dejado a Colton completamente confundido.

-Creo que te ha pillado –le dije a Colton, guiñándole un ojo, antes de acabar con todo lo de Nick y dirigirnos hacia la biblioteca.

Subíamos por las escaleras muy deprisa, satisfechos por lo que habíamos conseguido, cuando sin darnos cuenta nos encontramos de frente, literal, con Michael y Kyle, que seguramente vendrían de allí

Kyle estaba mirando un libro mientras bajaba, por lo que ni siquiera se dio cuenta de nuestra presencia hasta que prácticamente chocamos con él y con Michael.

-Hola, chicos –les saludé, muy animadamente -. A nosotros nos ha ido bastante bien. Hemos hablado con Nick “Casi Decapitado” y nos ha dicho algo muy interesante.

Kyle nos dijo sin perder tiempo que habían encontrado el nombre que estaban buscando, lo cual era una gran noticia, aunque lo que explicó a continuación no terminé de entenderlo.

Miré a Colton y después a Kyle, confundida.

-¿Y eso por qué? –le pregunté. Entonces nos dijo que era algo que le habían dicho a James, para no contarles de que iba todo aquello y que de paso, les ayudase -. Ah, ahora lo entiendo. Bueno, me anotaré también eso, por si acaso nos dice algo.

Pero entonces me fijé en la mirada que Colton le estaba echando a Kyle. Parecía… enfadado. Yo eso tampoco lo comprendía, porque al fin y al cabo, solo había echado una mentirijilla para ocultarle lo que hacíamos. No me pareció muy mala idea.

Después nos preguntó por Ivy y yo me encogí de hombros.

-No la hemos visto. Supongo que todavía estarán con los fundadores. No deberían tardar mucho o de lo contrario, podrían tener problemas –comenté, porque efectivamente, era casi la hora de la cena.

Pero el rostro de Colton hizo que me olvidase de todo y me centrase en lo que a continuación ocurrió. Colton le recriminó a Kyle lo que había hecho.

Michael intentó quitarle hierro al asunto y mediar entre los dos, pero a mí me parecía que no había nada que hacer. Colton no confiaba en Kyle y parecía que cualquier cosa que hacía era una excusa o razón para enfadarse con él.

Yo no pensaba que fuese para tanto, que James seguramente no correría peligro… pero Colton se lo había tomado muy a pecho.

Michael intentó seguir con la conversación, explicándolos lo que habían hallado, pero parecía que no había nada que hacer. Colton se dio la vuelta para ir al Salón y Kyle hizo lo mismo, pero yendo en dirección opuesta, dejándonos a Michael, Úrsula y a mí cortados y sin saber qué hacer o decir.

-Creo… que no lo entiendo –les dije a Úrsula y a Michael una vez se hubieron alejado Kyle y Colton -. Colton no se fía de Kyle desde que defiende a Alondra así que lo mismo piensa que es como un espía o algo así. Es lo único que se me ocurre. Supongo que es mejor darle un poco de espacio. En fin, yo voy a la Sala de Trofeos, a ver si encuentro a PErcy y a Ivy. Ahora nos vemos en el salón.

Y me marché en dirección a la sala.

Subía por las escaleras a toda prisa, pero sin dejar de darle vueltas a lo que ahora sabían. Aún no salía de su asombro y daba vueltas a la idea de Colton y a la de ella misma, ¿alguna de las dos sería la verdadera?. Estaba segura de que no porque, como decía Mary, la realidad supera muchas veces a la ficción y, en aquella ocasión, seguro que la explicación sería una que nunca podrían averiguar en aquel momento. Necesitaban más información, conocer más que había sucedido...

-¡Oh!. ¡Hola Michael!, ¡hola Kyle!-saludó a sus dos amigos que bajaban en aquel momento la escaleras y con los que casi chocan-¡Sí!, tenemos cosas que contar y mucho en lo que pensar... 

Ellos parecía que también habían encontrado algo aunque que, para eso, habían tenido que soltar una pequeña mentira para cubrirse el trasero. Y la mentirijilla implicaba a Colton. Úrsula entrecerró los ojos y evaluó aquello, pensando a la velocidad de un tren de alta velocidad como se iba a tomar su amigo aquello. Pero él fue más rápido en procesar, no la mentira en sí, sino lo que podía implicar para él. Úrsula puso los ojos en blanco y se preparó para lo que pudiera venir. Si hubiera sido cualquier otro el que hubiera lanzado la mentira, vale pero, ¿Kyle?.

Mierda.... se va a liar...

Y vaya que se lio. Colton explotó y soltó todo lo que pensaba y Kyle le respondió en el mismo tono y, encima, diciendo cosas que no eran. Los ojos de Úrsula se convirtieron en una rendija, estudiando a Kyle milímetro a milímetro-¡Ey!, tranqui, Colt no te ha insultado...-aquello sí que le había molestado pero, lo malo de todo aquello, es que entendía a ambos realmente. Así que le hizo un gesto a Luna para darle a entender que no debían meterse por que cada uno llevaba su parte de razón-...la idea de la mentira no ha sido mala, el problema es que...¿en serio solo podías nombrarle a él?, bastante mal nos va en todas las clases como para...-en ese momento, Colt echó a andar hacia un lado alejándose de ellos a toda prisa y Kyle hacia lo propio en la otra dirección sin ningún intento de entender cada uno la postura del otro, y dejándola con la palabra en la boca. 

Se quedó mirando a Michael con cara de tonta-Ains... en fin.... gracias por el intento Michael pero... esto... va a ser difícil de arreglar. Por ahora, claro-y se volvió a mirar a Luna al escucharla-No entiende que defienda a Alondra, que esté de su parte y no de la nuestra siendo del mismo grupo de amigos. Es el único diferente en ese aspecto y es... realmente extraño después de todo lo que hemos visto que ha hecho Alondra, como se ha comportado con todos. Yo tampoco lo entiendo, realmente-se encogió de hombros y miró al techo un instante-Si es un espía, lo descubriremos o, mejor, se descubrirá. O entenderemos por qué Kyle está de parte de Alondra, quizás es por algo que no sabemos, ¡vete a saber!

Luna decidió ir a buscar a Ivy y a Percy a la Sala de Trofeos-¡Vale!, nos vemos abajo, no tardéis.

Y aquello hizo que se quedaran Michael y ella solos en las escaleras.

-Tiene tela, se supone que deberíamos estar ahora poniéndonos al día de todo lo que hemos averiguado-resopló y se intentó quitar con el aire que exhaló un mechón de pelo que le acababa de caer en mitad de la cara-pero, en lugar de eso, aquí estamos los dos. No se qué hora es, ¿se supone que deberíamos estar ya cenando?. Bajemos al salón para no llamar más la atención y procuramos vernos después todos juntos y ponernos al día. Tu agarras a Kyle para que no se escape, yo agarro a Colt para lo mismo. Tenemos que compartir información y... evitar que estos dos se peleen de nuevo. Aunque, si te soy sincera, yo tampoco confío en Kyle. No lo voy a perder de vista y no se hasta que punto nos viene bien que lo sepa todo, no sé si entre él y Alondra hay... algo, ya sabes-bueno, tampoco es que ella supiera nada sobre eso o intuyera algo, pero decirle que podía ser un espía de Shadefian quizás era demasiado, no tenían ninguna prueba de ello. Pero ella estaba de parte de Colt y entendía lo que pasaba por sus tripas de muggle. 

-Venga, bajemos-miró a su alrededor, ¿estaban solos?-Ummm...si quieres... te voy contando lo que hemos averiguado mientras bajamos. Vas a flipar. Bueno, yo he flipado, quizás tú no, pero yo sí...

Michael se quedó abatido mirando cómo Kyle y Colton se alejaban, cada uno en una dirección. No había manera de hacer que se llevasen bien. Cuando Luna anunció que iba a la Sala de Trofeos, cogió a Michael un poco desprevenido y no pudo seguirla a tiempo. Sonrió al fin cuando Úrsula comentó con fastidio cómo les habían dejado solos.

—Yo tampoco me esperaba una reunión así —dijo—. Pero qué le vamos a hacer... Tienes razón, será mejor ir bajando.

El Ravenclaw dudaba de que "agarrar" a Colton y Kyle para que no se escapasen fuera a resultar fácil, teniendo en cuenta la tirria que se tenían. Pero Úrsula tenía razón en que debían poner en común todos los detalles de sus hallazgos.

—No sé... lo de Alondra desde luego es algo raro, pero... ¿tanto como para que Kyle sea una especie de espía...?

Michael no sabía muy bien qué pensar. Después de todo, él mismo había tratado de dar a Alondra el beneficio de la duda. Al menos, hasta que había intentado hacer daño a Ivy. Pero por algún motivo, lo que la Gryffindor sugería no le sonaba descabellado ni siquiera a él, que siempre intentaba pensar bien de los demás. ¿Tal vez la tensión por todo el tema de Shadefian le estaba empezando a volver desconfiado?

—Si tú has flipado, seguro que yo también —sonrió de nuevo a Úrsula—. Va, cuéntame mientras vamos bajando...

Me dirigía a toda prisa hacia el salón para la cena, después de haber estado más tiempo del que pensaba trabajando en la sala común, cuando choqué de repente con Kyle justo antes de llegar a la puerta.

Sabía que las chicas estarían ya cenando o a punto de cenar, pero mis últimas notas no me permitían quedarme de brazos cruzados si quería sobre todo superar a esa Ivy Jade. El único problema era que desde que había hablado con Salazar Slytherin, ya no estaba tan segura de nada, ni del lugar en el que estaba ni tampoco de mis propias habilidades. Ese maldito cerdo había conseguido que no confiase en mí misma y que hasta necesitase leer las cosas tres veces más para enterarme de ellas.

¡Maldito fuese ese fundador y las puertas esas! ¡Seguro que ni siquiera era el de verdad! ¡No podía ser el de verdad!

Estaba tan concentrada en todo eso y caminaba tan deprisa, que lo último que esperaba era encontrarme con alguien, así que estuve a punto de caerme al suelo y reaccioné con más rabia de la cuenta.

-¡Mira por dónde vas, maldito estup.... !

Entonces me di cuenta de quien era. Kyle no me miraba ni hablaba de la misma manera desde que habíamos estado juntos en la Sala de Trofeos. Por una parte, me sentía incómoda con él porque me había visto venirme abajo, pero dentro de mí había una pequeña voz agradecida por no contarle nada a los demás, porque me parecía que no lo había hecho, y por no meterse conmigo al igual que hacía el resto.

Además, siempre era educado conmigo, algo que no solía pasar.

-Yo... no te preocupes, no ha pasado nada. ¿Con quién hablabas? -le pregunté, arreglándome la túnica. Me había parecido oír que estaba maldiciendo a alguien pero estaba solo, y por su rostro me daba que estaba enfadado por algo -. Sí, yo también iba al comedor. ¿Te... ha ocurrido algo? Tienes mala cara. ¿Y tus amigos, no están por aquí?

No se me daba bien mostrar preocupación por la gente, pero aquel chico no me había hecho nada y era de mi misma casa, por asquerosa que me pareciese en estos momentos, aunque no pude evitar decir lo de sus amigos con cierto desdén. Si eran tan buenos y Kyle estaba mal, ¿por qué no estaban con él?

Era la hora de la cena en Hogwarts y casi todos los miembros de las diferentes casas se encontraban ya reunidos para comentar entre ellos cómo había ido sus días y protestar acerca de todas las tareas que tenían. La temporada de quidditch se aproximaba por lo que también había mucho que hablar sobre los próximos y agobiantes entrenamientos, que prometían convertir el lugar en un infierno de dimensiones desconocidas hasta entonces.

Colton se dirigió visiblemente enfadado hacia su mesa, y unos momentos más tarde hicieron su aparición Úrsula y Michael. No había rastro de ninguno de los demás.

Al ver a Colton, Angeline se acercó a él para hablarle.

-Hola, Colt. No te he visto en la biblioteca. Habíamos quedado para hacer los deberes de Encantamientos. ¿Te has olvidado? -te preguntó la joven, con cara de inocencia y de ser alguien incapaz de enfadarse por cualquier cosa que le ocurriese.

Mientras tanto, James vio a Colton y se acercó a preguntarle sobre el trabajo.

-Hey, Colt. ¿Qué tal llevas ese trabajo? He estado ayudando a tus amigos a encontrar información y la verdad es que ha costado un poco. Casi nos matan esos malditos libros de la colección de yo-qué-sé-qué-magia que cayeron sobre el pobre de Kyle como si fuesen jugadores de rugby. ¡Por poco no lo matan del golpe! Espero que cuando necesite ayuda para hacer un trabajo también me echéis una mano como ellos a ti. Ah, hola Angeline, no te había visto, perdona.

En ese momento se fijó en Michael, que acompañaba a Úrsula, y se dirigió hacia su amigo.

-Mickey, ¿te has enterado? Mañana tenemos entrenamiento de quidditch. ¡Va a ser la bomba! Eso si sobrevivimos, porque nuestra capitana está deseando demostrar que somos los mejores y tengo entendido que planea darnos una paliza. Tío, me parece que está obsesionada. Más nos vale tomar una buena cena.

Úrsula, por su parte, todavía estaba algo conmocionada por lo que había sucedido entre Colton y Kyle y no sabía si era mejor no hablar con los dos o si intentar reconociliarlos, aunque la intervención de James, que hablaba de manera inocente, sin saber nada del tema, podía ser toda una bomba para Colton. 

Lo mismo lo mejor era irse al otro extremo de la mesa.

Obviamente viniendo de Alondra, si alguien se chocaba con ella su primer instinto sería llamar estúpido a quien le tocase. Por eso mismo, ni siquiera podía decirse que me molestase en absoluto que casi lo hiciese conmigo. Era como conocer a alguien y saber que va a decir antes de que lo diga. Como si fuese un clásico de Alondra. 

Lo que no era tan habitual era que no acabase su insulto y además me preguntase si me había ocurrido algo. Debía de notárseme mucho si incluso ella se estaba fijando en alguien como yo, aunque a decir verdad cuando Alondra estaba sola no se comportaba tan exageradamente altiva como cuando estaba con sus amigas. De hecho no se había vuelto a meter conmigo desde el incidente con el maldito Salazar.

Durante las primeras palabras no parecíamos mirarnos directamente, pero cuando me preguntó con quien hablaba y dónde estaban el resto, automáticamente me salió un bufido nasal de reproche - Sí ya... mis  "amigos" - el tono fue idéntico al de Alondra, con el mismo desdén. Bueno, no es que los demás me hubieran hecho nada, pero estaba enfadado y me costaba disimularlo. Uno no se enfría tan rápido como se calienta, y ¿qué clase de amigos dejan que me llamen mierda dos veces seguidas? cada vez tenía menos ganas de compartir el oxígeno cerca de aquél liante infantil provoca accidentes - bueno, los demás estarán yendo al gran comedor supongo. Pero no quiero ir por allí... - la duda de si decirlo o no sólo duró una milésima de segundo, pues de mi boca salieron las palabras casi por sí solas - con el idio... maleducado... de Colton. Ya sabes, el rubio. - hice un gesto sobre mi cabeza como si mi cabello fuera desordenado y estúpido, si es que eso fuera posible.

Ante la posible mirada extrañada de Alondra, las palabras seguían saliendo solas - Nunca nadie me había sacado tanto de quicio. Es un chulo. Y no me cae bien. Si no fuese por los demás del grupo, hasta pensaría que tienes razón cuando dicen que los de Gryffindor son unos cabezahuecas. - *por no decir algo peor. - Tras eso hubo un silencio incómodo. No iba a darle detalles de lo de la mentirijilla del trabajo, porque eso involucraba tener que dar detalles sobre lo que estaban planeando el grupo, y tampoco podía explicarle que estuve intentando defenderle durante el ataque de las pociones explosivas, o que era tan desagradecido que desde entonces lo único que hacia era meterme pullas y criticarme en toda la cara. A decir verdad, empezaba a pensar que a los demás nos les importaba la actitud de Colton hacia mí. *Seguro que si hubiera estado Ivy hubiera dicho algo para defenderme. 

-Disculpa. Olvídalo, no quiero rallarte con tonterías, y menos con tonterías  suyas. - dado el tono cada vez que lo mencionaba, era evidente que no se me iba a quitar el enfado que tenía encima contra él . Fue en ese momento que reconocí que ella también estaba realmente sola - ¿Anemone y Breezy no están contigo? Ah, estarán esperándote para la cena - obviamente, la estarían esperando para no quedar mal, suponía. Alondra no se contentaría con llegar y que  no  le guardasen asiento, o eso suponía.

-Ehm... te acompaño al gran comedor. Si quieres. Estaba intentando buscar una ruta alternativa con tal de no cruzármelo. Ya he tenido  bastante  por un día - esto era ridículamente extraño. Un intento de conversación casual con Alondra. Aunque quizás no era tan extraño, pues hasta ahora habíamos tenido una fuerte experiencia en común bastante importante. *maldito Salazar... 

Si al final no me mandaba a freír espárragos, durante el camino alternativo hacia el gran comedor tuve la necesidad de decir algo. Improvisar, o lo que fuese. Andar en silencio al lado de Alondra ya era extraño de por sí, pero es que necesitaba sacarme el cabreo hablando de otras cosas. Terminé por susurrar, más que hablar, para que no se oyese a los cuatro vientos lo que iba a decir - ... sabes que Ivy también fue a ver a... al fundador?. Le dije que no fuera y lo hizo igualmente. Resulta que fue igual de horrible con ella que con nosotros - nadie más que Alondra podría entender a qué me refería. O eso pensaba. Como siempre, con Alondra nunca se sabía. Pero ahora estábamos solos, y eso me hizo sentir más seguridad a la hora de hablar abiertamente sobre eso con ella.

Lo normal era encontrar a Kyle rodeado de Ivy, ese Colton y el Michael recursi de Ravenclaw, así que era natural que mostrase sorpresa porque estuviese solo y además con gesto contrariado. Pero lo que no me esperaba fue haber acertado de lleno al decir lo de sus amigos de aquella manera.

Su reacción prácticamente como la que habría podido hacer yo, sonándome como si les tuviese asco o algo por el estilo.

-Vaya, no me digas que te has dado cuenta de que solo piensan en ellos -le dije finalmente, colocando mis brazos en jarra. Kyle, en cambio, pareció no querer hablar mal de ellos... al menos en un principio, porque no tardó en soltarse.

-Sé quien es Colton. Es ese chico tan estúpido y que dice tantas cosas que nada entiende. Por su culpa me quemé en la clase de pociones, ¿recuerdas? Está siempre gastando bromas pero en el fondo lo único que quiere es hacer daño -le dije. Kyle reconoció después que no le caía bien y que era un chulo, lo mismo que yo pensaba.

-Es que se creen que son los mejores. Nosotros al menos intentamos demostrarlo pero ellos se pasean por ahí como si tuviesen el liderazgo moral de todos los magos y las brujas. Oooh, soy Gryffindor, soy valiente y me tienes que hacer el pasillo cada vez que me veas -le dije, falseando el tono -. No deberías darle más vueltas. Cuando alguien es idiota lo es y punto.

Lo peor de encontrarse con alguien así era que sentías como si te apuñalaran en la espalda, porque habías confiando en alguien a quien considerabas amigo y descubierto que en realidad era todo lo contrario.

-No, no te preocupes. Si es que además te entiendo perfectamente -le dije en respuesta a su disculpa. Entonces me preguntó por Anemone y Breezy y yo desvié ligeramente la mirada -. Eeeeh... sí, estarán... están en el comedor, claro. Voy a reunirme con ellas. Seguro que se están preguntando por qué no he llegado. ¡Son tan inseguras!

No le dije que últimamente Anemone parecía preferir la compañía de Breezy y que esta me miraba como si quisiera desafiarme o algo así, solo que como era una cobarde no se atrevía. Desde luego, si quería quitarme de en medio iba a tener que aumentar su consumo de calorías porque no dudaría en lanzarle un buen puñetazo si fuese necesario.

Finalmente me dijo que me acompañaba al comedor aunque fuera por una ruta alternativa.

-Bueno, podemos ir por ahí -le dije, señalando en dirección opuesta -. Creo que da a uno de los laterales. Aunque me parece que es en donde está la mesa de los inútiles de Hufflpepuff pero supongo que podemos entrar sin problemas.

Mientras caminábamos para dar la vuelta, me dijo que Ivy había ido a ver al fundador de nuestra casa. Yo me detuve un instante, antes de darme cuenta de que no debía dar muestras de debilidad, y entonces, sin mirarle, hablé de manera casual.

-¿Ah, si? -pregunté, aunque no me atreví a decir nada más. 

En realidad, sentí pena por ella, casi tanto como de mí misma, porque ninguna de las dos nos merecíamos que nos hablase mal. Si no nos querían allí, ¿por qué nos había colocado en Slytherin el sombrero?

-Yo... creo que ese no es el verdadero Salazar Slytherin. Estoy segura de que no lo es. El verdadero no nos habría hablado de aquella manera. Si somos de su misma casa será porque lo merecemos y debería felicitarnos o algo así, ¿no? -le dije finalmente, esquivando mis verdaderos sentimientos al respecto que no eran otros que dudar de si era allí en donde quería estar.

Cuando por fin llegamos a la puerta, me di cuenta de que no me apetecía demasiado entrar e instintivamente, mi mano agarró la de Kyle. Al darme cuenta, enrojecí hasta la coronilla y le solté rápidamente.

Pero qué haces, tonta. Le coges la mano como si te gustase, dijo una voz en mi interior. Y otra acudió velozmente al rescate.

Es que me gusta, pero no puedo decírselo. Pensará que soy idiota. Seguro.

Colton sentía un calor que ni el beso de 15 Angelines podría causar. Había entrado en un estado en el que pocas veces entraba, pero cuando entraba, no atendía a razones. Estaba rabiactivo, preso de una rabiación como nuna antes había sentido, y es que Kyle sacaba lo peor de él. Ni siquiera le había podido decir a su amigo Michael que no pasaba nada, y que lo que habían descubierto era una pasada, no, no podía escuchar, solo taladraba con la mirada al estúpido de Kyle que lo trataba como si fuera estúpido y se pavoneaba delante de él de sus buenas notas, con sus modales de colegio caro y millonario....y esa manera de ignorarle.. hola chicas. Estaba harto, lo iba a pagar, ese niñato fino la iba a pagar, estuviera alondrizado o no, había iniciado una guerra que no podía ganar, ya lo sabría, ya...

Michael hablaba, intentando explicarse, pidiendo que lo implicaran a él, pero es que Colton no podía procesar, estaba en rabiación máxima, más cuando Kyle se puso chulito... Tuvo que irse, bajar en dirección al comedor, no es porque pudiera comer, pero es que necesitaba poner tierra por medio o acabaría dándole un puñetazo en un ojo. Entró en el comedor casi dándole una patada en la puerta, en plan sheriff en una peli de vaqueros y miró desafiante a un lado y a otro del comedor, como desafiando a que alguien le dijera algo de Kyle, pero nadie lo hizo. Colton bufó como un búfalo camino de su mesa después de una estampida y no vio que se acercaba Angeline hasta que la tuvo prácticamente encima, y lo primero que pensó es si le habría oído bufar, porque un bufido de búfalo no era la mejor manera de ligarse a una niña, a no ser que hubiera nacido en una granja de búfalos o algo así. ¿Que podía decirle? ¿Que palabras secretas había que decirle a una chica preciosa y de pelo largo para que te quisiera? Ni idea, pero cuando le dijo porque estaba hablando con él se quedó mirándola, parpadeó varias veces intentando encontrar en su memoria de mosquito si le había prometido eso y cuando lo encontró bajó la mirada y se dio un golpe sonoro en la frente.

- Soy un ultradesastre con patas, perdón, perdón, perdón - Por el tono de la voz y la expresión facial se podía ver que se sentía fatal. Al menos ya parecía haber olvidado todo el affaire Kyle - La neurona de los deberes no la tengo encendida, y se me olvidan.... - Suspiró soplándose un mechón rebelde - Pero, si te parece bien, te puedo compensar, ahora mismo no tengo mucha hambre, así que podríamos ir a la sala común y hacerlos allí, todo el mundo estará comiendo y estará tranquilo, no creo que haya nadie más.... - y entonces la miró y enrojeció levemente - que tonto, seguro que ni has comido.... Solo quiero arreglarlo, si quieres que los hagamos después, o que te los haga... Me quedaré despierto toda la noche si hace falta. - La verborrea de Colton parecía inagotable - Dame un segundo, que le tengo que decir una cosa a Michael y soy todo tuyo, que no es que sirva para mucho en los estudios, pero aquí estaré.

Y se iba a dirigir hacia la mesa de los Ravenclaw para ser interceptado por James. Compuso una mueca cuando le dijo que los libros casi mataban a Kyle y entonces le dedicó su sonrisa más luminosa.

- Tío, muchas gracias, te debo una, que digo una, te debo mil y prometo que la pagaré en cuanto pueda, menos en quidditch, en eso no hay amigos - sonrió cuando saludó a Angeline y estudió la reacción de la rubia. ¿Le gustaría? Ella era guapa, y rubia! así que podía elegir, era la ley universal, como la ley de la botella, de quien la tira va a por ella, pues eso, si le gustaba James se podía dar por fastidiado, entonces miró a Úrsula, le dio una palmada a Michael y le dijo

- Oye, ¿Te acuerdas que me tenías que explicar lo del floreo ese de varita? Pues me lo tienes que contar en dos minutos, así que vente para acá y me lo cuentas

Se apartaron un poco de todos y le dedicó una sonrisa a Michael antes de decirle

- Por ti si merece la pena mentir. No me ha molestado que me usárais, pero si que lo hiciera Kyle. En clase de pociones la lié, y él me cubrió, como hacen los amigos, pero luego me lo echó en cara, y eso no lo hacen los amigos...y está muy tonto con Alondra, aunque es guapa, si te gustan las psicópatas, claro, y es tan condescendiente, hola chicas, como si no me hubiera visto.... pero por ti mentiría, porque eres mi amigo Michael, y ahora florea la varita que nos pillan.

Volvió a sonreír, asintiendo y tratando de imitar los movimientos de Michael. Bajó la voz para contarle

- Hemos descubierto cosas aluflipantes. Nuestro amigo, al que estamos persiguiendo, era Gryffindor, y.... parece ser que mientras estuvo aquí su novia murió, y lo pasó muy mal, y si lo mezclamos con lo del delorean dentro de la vasija que nos has contado, hace que 2 + 2 son cuatro, creo que está intentando vengarse de todos los que mataron a su chica, o hicieron que se muriera, o traerla de vuelta.... Creo que todo esto está relacionado con amores y venganzas, como en los culebrones turcos!!

Miró de reojo a Angeline y le dijo a Úrsula.

- Mejor se lo cuentas bien a Michael, que ya sabes que yo lo de contar historias no es lo mío.....- elevó la voz - Gracias Michael! Eres un crack!

Se dirigió hacia Angeline, pestañeó en una mirada pícara y le dijo mientras imitaba una reverencia burlona

- ¿Me concedería hacer estos deberes juntos?

Úrsu le sonrió a Michael, afirmando y haciendo un gesto para que fueran bajando las escaleras. No había casi nadie por allí que pudiera escucharles así que debía aprovechar antes de llegar al comedor.

-Fuimos en busca de Sir Nicholas, ya sabes, el casi decapitado fantasma de mi casa...-comenzó su relato-Estuvimos casi casi casi a punto de que se fuera sin decirnos nada, pero Colton lo manejó todo superbien y consiguió que se quedase y respondiera a nuestras preguntas. Es un fantasma un poco quisquilloso y hay que andarse con cuidado con lo que dices delante de él, apúntatelo por si algún día necesitas hablar con él por cualquier cosa.

Bajaba dando saltitos por los escalones, vigilando que ninguno de ellos se escaqueara de su función y la hiciera caer, tropezar o vete tú a saber que más.

-Nos contó que Shadefian estuvo estudiando aquí hace muuuuuchos años, pero ¡no termino los estudios de magia!. Se fue antes, supongo que... pilló la puerta un día y se fue, o algo así. Sir Nicholas nos comentó que aquí en el castillo pasó una gran tragedia, tan grande, tan grande, que Shadefian no pudo soportarlo y por eso decidió marcharse. ¿Qué sucedió?, Sir Nicholas no nos lo dijo exactamente, pero nos dijo que la chica de la que Shadefian estaba enamorado murió-miró a Michael en aquel punto para ver cómo reaccionaba pero devolvió su atención rápidamente a los escalones para no terminar en el comedor después de bajar rodando como una croqueta por todos ellos si tropezaba-Sir Nicholas comentó que entendía que Shadefian quisiera vengarse de todo el mundo...pero que no compartía lo que él estaba haciendo ahora. Dijo que Shadefian estaba loco y que el... amor... provocaba esas cosas. Nos recomendó no enamorarnos nunca, por cierto. Bueno, no enamorarnos o procurar no morir nunca después de la persona a la que queremos... ¡Ah! Y lo más flipante para mi. Shadefian es de Gryffindor. No pensé que en mi casa ningún mago pudiera matar a nadie. Quizás por eso Nicholas dice que está loco-Úrsula se encogió de hombros-¡Hemos llegado! ¡Mira, Colt esta aquí!

Si, acababan de llegar al comedor y, caminando hacia la mesa de Gryffindor pudieron ver a Colt junto con... la rubísima. Úrsula arrugó la nariz y resopló sin ni siquiera pensarlo.

-¡Ven!, vamos a ver si se le ha pasado el enfado. Colt es así, igual de rápido que se enfada se le pasa cuando ve que sus amigos están con él.

Se acercaron a donde estaba Colt junto con Angeline y vieron como James se les unía. ¡Que solicitado estaba Colt!. Úrsula sonrió, sabía lo que iba a significar eso. El enfado no tardaría en disolverse como el Cola Cao en la leche caliente.

-¡Qué...!-exclamó cuando Colt los cogió a Michael y a ella y los llevó a un aparte, un poco retirados de James y de Angelina. Úrsula se volvió a mirar discretamente a la rubísima a ver cómo se tomaba aquello y después miró a Colt con cara de "¿Que se supone que estás haciendo?, la acabas de dejar tirada en mitad del salón...."

Pero allí estaba, lo que ella suponía, el enfado se disolvía poco a poco. Era cuestión de tiempo. Si ella ya estaba conociendo a Colt poco a poco. Escuchó en silencio.

-¿No te saludó Kyle?-se mordisqueó un mechón de pelo intentando recordar aquel momento mientras movía la varita para disimular ante el resto de alumnos que se fijaran en ellos tres. No se había dado cuenta de aquel detalle, pero entendió que a él le hubiera sentado mal porque había sido excluido del saludo-Ummm ya veo...-Se fijó en la mirada de Colt y no pudo evitar seguirla a ver qué miraba con tanto interés, descubriendo a la rubísima al otro lado-Oye, Colt. Tranqui, termino de contarle todo a Michael... -no le dijo que ya le había contado lo más importante mientras que bajaban al comedor porque algo le decía que su amigo ya no la estaba escuchando. Y supuso que, si no iba en busca de Angeline en ese preciso momento esta se enfadaría y él no quería eso, y ella tampoco la verdad, así que dio un paso atrás para que pasara como un huracán por su lado en busca de su amiga rubia y dejando por fin de tener que mover la varita como si no hubiera cosa más importante que hacer en aquel momento-Cierto, ¡gracias Michael!-dijo también en voz alta para terminar el teatrillo ante los que estuvieran fisgando al trio.

-¿Lo ves?, ya se le ha pasado. Además, creo que Angeline tiene parte de culpa en eso esta vez-dijo con una sonrisilla pícara-En fin, lo que ha dicho al final son nuestras teorías de lo que ocurrió, o de lo que ocurre. Solo es está vengando por lo que sea que le sucedió a su amada-levantó un dedo-o puede que esté haciendo algo para traerla de vuelta-levantó otro dedo-Los desalmizados hasta el momento tienen que ser de una forma u otra culpables de lo que pasó. Tenemos que saber qué ocurrió exactamente para intentar averiguar que es lo que Shadefian está haciendo en realidad y, así, poder hablar con los profesores.

Michael bajó las escaleras junto a Úrsula, sin mirarla para poder vigilar dónde pisaba. No quería tropezar en algún escalón y hacer el trayecto rodando, pero iba asintiendo de vez en cuando para que su amiga supiera que le prestaba toda su atención. Lo que la Gryffindor contaba era fascinante. ¡Shadefian había pertenecido a su casa! A Michael jamás se le habría ocurrido imaginarlo, pero después de todo el mago tenebroso tenía que haber pasado por Hogwarts. Sin embargo, Michael había asumido que su casa habría sido Slyhterin. Por lo visto, él tampoco se libraba de los prejuicios.

—Vaya, tuvo que ser muy duro pasar por eso —murmuró, tratando de ponerse por un momento en la piel de un Shadefian adolescente. Perder a la chica que uno quería... ¿cómo debía sentirse algo así? Por algún motivo, el rostro de Ivy le vino a la cabeza en aquél momento, pero no quiso imaginarse que su amiga de Slytherin moría.

Continuó escuchando el relato de Úrsula y en poco tiempo estuvieron en el Gran Comedor. Se dirigieron hacia Colton mientras mientras este hablaba con James. Michael tragó saliva, pero el chico rubio le sorprendió diciendo algo que el Ravenclaw no esperaba.

—¿Varita...? ¿Qué...? ¡Ah! Ah, sí... voy...

Siguió a Colton hasta donde el Gryffindor les guió. Lo que le dijo a continuación dejó a Michael sin saber qué contestar, e incluso se puso un poco colorado. Sonrió, contento de que Colt le hubiera contado aquello.

—Gracias, Colton —respondió al fin—. De verdad que siento lo que pasó. Pero me alegro mucho de que me consideres tu amigo. Yo también te considero un amigo a ti. En cuanto a Kyle... no sé, tal vez tengáis razón. Lo cierto es que no sé muy bien qué pensar sobre él y Alondra...

Pero Colton pasó a contarle de nuevo lo que ya había escuchado por boca de Úrsula. Todos se daban cuenta de que aquello era un hallazgo importante, quizá mucho más que lo de Kaima Grymanfly. Michael asintió cuando Colt propuso lo de que tal vez Shadefian buscaba venganza por eso. Pero le cuadraba mucho más lo de "traerla de vuelta".

—Eso explicaría que esté manipulando el tiempo —asintió pensativo, mientras floreaba la varita para seguirle el juego a Colton—. Tendremos que seguir tirando del hilo...

Pero Colton se marchó en pos de Angeline, haciendo que Michael sonriese de nuevo al ver cómo se alejaba. 

—Yo también lo creo —respondió a Úrsula—. A ver si tiene suerte y le va bien con ella. Y sí... estoy de acuerdo con vosotros. Lo que os ha contado Sir Nicholas tiene algo que ver con todo esto, cuanto más lo pienso, más convencido estoy. 

Caviló durante un momento, asintiendo mientras Úrsula proponía seguir averiguando exactamente qué había ocurrido.

—Y tenemos que conseguir ese libro —dijo muy serio—. El libro que habla sobre la "vasija del tiempo". Estoy seguro de que es clave en todo esto.

La cena comenzó para todos exactamente a las nueve de la noche y no había rastro alguno del resto de vuestros compañeros, ni de Luna que había ido a buscar a Ivy y a Percy, ni tampoco de estos, por no decir que no había tampoco aparecido Kyle. Quizás el enfado entre él y Colton hubiese hecho que se quedase en la sala común, pero en cuanto a los demás... eso ya daba que pensar.

En la mesa de Gryffindor, Angeline había sonreído ante la reverencia de Colton y por supuesto, asentido con convicción, divertida con aquel chico que le parecía tan simpático y que le gustaba. Colton quizás no estaba seguro de que alguien así le prestase su atención pero podía ser tan sencillo como que no todo el mundo era tan estirado en el mundo mágico como él pensaba.

-Deseo concedido, mi noble señor -dijo entre risas Angeline -. Pero antes, llenemos nuestros estómagos para coger las fuerzas que necesitaremos.

Úrsula había empezado a comer relajada, mientras pensaba en todo lo que habían averiguado y cuál debía ser el paso siguiente. Desde luego, había muchos hilos de los cuales tirar pero el tiempo corría en contra de todos.

En la mesa de Ravenclaw, en cambio, la ausencia de Percy era bien conocida por Michael, pero al mirar en dirección a la mes de Hufflepuff también se dio cuenta de que no había rastro de su propia hermana, Keira. Entonces le pareció oír como algunos compañeros hablaban de que había escregutos en el castillo que habían aparecido unos cuantos en la Sala de Trofeos. Eso era como para preocuparse, porque a lo mejor sus amigos estaban encerrados sin posibilidad alguna de salir de allí, cercados por aquellos bichos*.

Finalmente, la mesa de Slytherin permanecía la mar de tranquila, aunque para cualquiera que se fijase** notaría que además de Ivy y Kyle, tampoco estaba Alondra. Eso podía significar una mejora en el ambiente general, desde luego, aunque no dejaba de resultar desconcertante.

Aparte de eso, todo parecía ir bien, o como siempre, hasta que de pronto sonó un grito y en la mesa de Hufflepuff uno de los chicos se puso e pie rápidamente y empezó a señalar hacia el lugar en el que estaba. Una figura, otra alumna, que estaba sentada a su lado, cayó al suelo, y al igual que en los otros casos, nadie la conocía.

-Ha aparecido de repente. En un momento no estaba y ahora.... ¡mirad! -dijo el chico, para asombro de todos.

Eso hizo que cundiese el pánico desde todos los puntos posibles, y habría podido ser terrible de no ser porque la directora se puso en pie y habló en voz alta.

-¡QUÉ TODO EL MUNDO PERMANEZCA EN SUS SITIOS! -pidió la directora, aunque sonó casi a una orden. Cuantos se habían puesto en pie volvieron a sentarse entre murmullos -. Sé que ahora sentís miedo, pero no hay por qué alarmarse. Todos estamos bien y es el momento de permanecer calmados. Es en estas situaciones cuando debemos ser fuertes y demostrar nuestro valor. Por favor, que los prefectos de cada casa conduzcan tranquilamente a sus alumnos a las respectivas casas. Los profesores nos encargaremos de esa pobre chica. Mañana se reanudarán las clases como siempre pero esta noche, os pido a todos, por favor, que para mayor seguridad nadie salga de las salas comunes. Gracias a todos.

Y poco a poco, los prefectos se pusieron delante y empezaron a ordenar los grupos... salvo en Hufflepuff, pues la ausencia de Keira añadió algo de confusión a la situación.

La mirada de Colton siguió a la de Úrsula y cuando vio que miraba a Angeline, con esa cara de "¿Pero que haces panoli?", una gota de sudor le recorrió la espalda. Tragó saliva, aquello era malo, pero entre amigos y chicas guapas, los amigos tenían prioridad, a no ser que hubiera beso de por medio que entonces, vamos, ni amigos ni familia ni perrito que te ladre. Se los llevó a parte, bajo el pretexto de un hechizo que no lo sabía hacer y allí descubrió cosas sorprendentes:

1. Úrsula tenía tanta hambre que se mordía el pelo, y eso debía ser poco higiénico, aunque por algún motivo no podía dejar de mirarla hacerlo.
2. Úrsula y Michael ya habían hablado, y a solas, y se les notaba, porque sino Michael hubiera aluflipado con sus explicaciones. Uuuuuh, como se enterara Ivy, le sacaba los ojos seguro.
3. Ninguno de los dos se ganaría la vida como actores y actrices, pero le ponían ganas, así que estaba decidido, si alguien tenía que decir alguna mentirijilla piadosa mejor que fuera él.

Sonrió y le dio una palmada a Michael afectuosa.

- Pues claro que eres mi amigo, es un poco raro tener un amigo tan listo, pero bueno, quien sabe, igual se me pega algo de ti - Le sonrió de nuevo, aunque la mención a Kyle hizo que se pusiera más serio, se encogió de hombros - No pienso pediros que elijáis entre él y yo, pero no puedo ser amigo suyo hasta que me pida perdón y deje de tener esa actitud tan prepotente conmigo...... - Suspiró y negó con la cabeza - Le tendré un ojo encima, a él y a..... ¿Alondra?, seguro que se ha ido a contárselo todo - dijo entre dientes.

Aquello era súper sospechoso. Seguro que se había ido a contárselo todo, seguro, seguro, pero eso tendría que esperar porque el tiempo en que una chica te esperaba, más si era una guapa, tendía a cero y ya se estaba alargando. Se despidió con una mano de sus amigos después del teatrillo pensando en que decirle a Angeline, aunque no podía dejar de darle vueltas a si Kyle y Alondra estarían hablando, la vasija teletransportadora, del tiempo, lo que fuera. No veía a Luna, ni a Ivy, ni a Percy, y se estaba haciendo tarde. Llegó frente a Angeline y le dijo lo primero que se le ocurrió para que no se enfadara con él. Le sonó tonto, pero es que delante de ella se ponía nervioso y no sabía que decir, así que le propuso una cita para hacer los deberes, pero sin comer ni nada, a palo seco, deberes-or-die, pero ella se rio, y jo, tenía una risa súper musical, y es que no había nada que hiciera que a Colton no le pareciera adorable. Sonrió y dijo

- Así será entonces, llenemos los estómagos mi dulce señora, que las fuerzas no nos falten.... si no.... si no.. - se encogió de hombros - los deberes serán un desastre, y ahora a comer, este pollo asado no se va a comer solo.

Empezaron a comer todos y cada vez se ponía más nervioso por la ausencia de sus amigos. Colton estaba serio, y aquello no era muy normal. Entonces escuchó algo sobre unos cagarrutos en la sala de trofeos, y aunque él no entendía nada de cagarrutos parecía que era cosa seria así que lanzó una pregunta al aire

- Oídme, ¿Eso de los cagarrutos es muy peligroso? Lo digo porque parece que son como Godzilla, y bueno, salvo ser un poco apestosos y eso no le veo tanto peligro.

Los cagarrutos podían estar apresando a Ivy y entonces, puff, gritos, otra alumna en el suelo. Colton dio un salto y se iba ir corriendo hacia la chica para hacerle un masaje cardiaco en las pelis, pero entonces la directoria dijo que quieto paraos, así que se paró y se fue corriendo a su asiento. No sentía miedo, él lo que sentía era rabia porque otra persona había muerto y pena, y un poco de excitación por tener ganas de resolver el asesinato, pero no, que se tenían que calmar y que los iban a llevar a la cama, y Luna e Ivy sin aparecer. Había que actuar, sus amigos podían estar en peligro y los profesores lo único que iban a hacer es encerrarlos a cal y canto. Podía tratar de llamar su atención y decirles donde estaban, pero eso era poner en problemas a las ranas, así que debía actuar. Se mordió la lengua, aquello le daba mucho rabia porque había quedado con Angeline y al final no iba a poder quedar, y seguro que nunca jamás le dirigía la palabra, pero aquello era una emergencia emergente y los amigos están por delante de las chicas, más si las amigas eran chicas, más si las amigas eran rubias, pero no era el caso. Sonrió con cara apenada a Angeline y le dijo

- Angeline, Luna no está, ni Ivy, y tengo miedo que estén retenidas por los cagarrutos esos, escrabutos, como se llamen. Tengo que ir a rescatarlas, pero, para ello necesitaré de vuestra ayuda – Miró a Úrsula también - ¿Me ayudaréis verdad? Tengo que librarme de los prefectos para ir a buscarlas y asegurarme que están a salvo, si no no podré estudiar ni dormir ni nada. - Suspiró – Perdóname, soy un desastre, de verdad que quiero hacer los deberes, te lo prometo….. Esperadme un segundo.

Se metió debajo de la mesa, sacó su varita mientras la directora daba órdenes y lanzó un conjuro

- Imaginum Multum.

Lo lanzó sobre él con la esperanza de crear varios Coltons y poder desaparecer en el caos, pero no, no le salió muy bien, solo le salió uno, y no era rubio, era pelirrojo, no tenía la mano izquierda y el escudo de su túnica no estaba. Hizo que la imagen metiera la mano en el bolsillo para que no se la viera y masculló entre dientes cuando salió de su escondite

- Maldición, me ha salido fatal. El plan es el siguiente, cuando salgamos del comedor hablad con Colton-fake como si fuera de verdad, y yo me escabulliré para rescatar a Luna, ¿Vale?. El plan es que si hay dos chicas guapas hablando con un chico, todo el mundo mira a las chicas y no al chico, y colará….Aunque si podéis hacer que el Colton-fake sea más real mejor, y lo mandáis directo a la cama para que no se descubra el engaño - Un rubor intenso le cubrió las mejillas, se le había escapado que las dos eran guapas. Sacudió la cabeza, no era momento de vergüenzas cuando estaba a punto de liarla – Si no puedo volver a la sala común me quedaré en la clase aquella a la que fuimos el otro día Úrsula, y os mandaré a Tortícolis para que sepáis que estoy bien. ¿Vale?

Sus amigas podían preocuparse pero él sabía que era escurridizo, todo un ninja, y no le caía una bronca cuando hacía una travesura, era como un superpoder que tenía. Se puso en la fila inocentemente con todos sus compañeros de casa, a media fila, y cada poco iba retrasándose un poco más, y un poco más, esperando que nadie se diera cuenta de la presencia de dos Coltons, y en cuanto llegó a una esquina saltó detrás de una armadura y se quedó muy pegado, esperando que sus compañeros se fueran a su casa. Esperó un minuto, para estar seguro de que nadie se había dado cuenta y emprendió la búsqueda de Luna, Ivy y Percy….y que Dios impidiera que se cruzara con Kyle o se llevaría un tirachinazos.

La opinión de Alondra coincidía obviamente con la mía. O quizás era yo que estaba tan cabreado que sabía que Alondra entendería lo que estaba diciendo, aunque fuese más un desahogo. El problema es que ella parecía meterles a todos en el mismo saco. Aunque, quiero decir... "Dios los cría y ellos se juntan", solía decir Rob cada vez que me hablaba de algunos de los acompañantes de mi padre con los que tenía que lidiar. 

Asentí con todo lo que tuvo que decir acerca de Colton, sobre todo cuando remarcó el tema de la clase de pociones. Seguía pensando que aquello podía haber salido mucho peor! Hasta me sacó una sonrisa cuando se puso a imitar el preconcepto de los de Gryffindor. 

Pero no, no eran todos como él. Aunque había hablado poco con la mayoría, en general se veía que eran genuinamente amigables. Suspiré sacando aire, me sorprendí lo bien que me sentó hablar con Alondra. Era como con Ivy, parecía que ellas dos sabían como entender a la gente en el fondo. Alondra era más drástica y directa, esa era la diferencia.

Cuando dijo "cuando alguien es idiota lo es y punto", no pude hacer más que estar de acuerdo con ella. -Sí, tienes razón. He sido un tonto al dejar que me afecte tanto. - le sonreí - Pero es el único que se comporta así, y sólo conmigo. Aunque a los demás les cae bien. No entiendo porqué... créeme cuando digo que no parecen ser tan ignorantes, o creo que sí que se preocupan por los demás... - Pero ¿era eso cierto? ¿o llevaban intentando meterse en líos desde el principio?. Se sembró esa duda dentro de mí al igual que todo lo demás que se estaba sembrando desde hacía ya unos cuantos días, desde que aprendí lo que significaba ser un Slytherin.

Cuando dijo lo de que me entendía perfectamente, me pareció entrever un toque de preocupación cuando desvió su mirada mencionando que Anemone y Breezy estarían donde supuse que estarían. Algo dentro de mí quiso preguntarle sobre ellas, pero... Alondra era Alondra y sus amigas eran sus sombras. No me acababa de gustar ese comportamiento pero quizás era lo que ella prefería... Aún así, como cambió de tema señalándome el pasillo opuesto que daba a la mesa de los Tejones, dejé la idea y marché con ella.

-Sí. Gracias, está bien saber rutas alternativas para cuando vuelva a pasar. Hogwarts es enorme. - durante la conversación de Salazar, ella también era de la opinión de que no eran los verdaderos Fundadores - curioso, algunos de los otros también creen que quizás no eran los verdaderos Fundadores. Yo no sé que pensar, ODIÉ cada segundo. Lo poco que estoy aprendiendo de Salazar... - saqué el libro verde de mi mochila con cuidado - ...es lo que leo aquí. - abrí el libro y mi expresión se tornó fría, con una sonrisa y brillo en los ojos muy distintas a mi expresión habitual. - y es DETESTABLE... - no encajaba mi expresión con el tono usado.

Odiaba todo cuanto leía. Pero cada vez tenía más lógica y razón. A veces. No sabía como gestionar esa información, era confuso. - A veces entiendo lo que dice, sobre ser un Slytherin. Por ejemplo algunas cosas que dicen sobre los Hufflepufs. yo no conozco a ninguno. - pasé las páginas rápidamente recordando un comentario específico, señale la línea - ¿es verdad que casi todos los que acaban en esa casa son los más lentos de sesera, y por eso conviene tenerlos ocupados haciendo trabajos manuales? En este artículo menciona que solían mandarles siempre a trabajos de campo precisamente por su falta de habilidad mágica, o culta. - fruncí el entrecejo - empiezo a entender lo que dice sobre los Gryffindor pero... - no. No, no todos los Gryffindor eran como lo que mencionaba a veces el libro. Tuve que sacudir mi cabeza para apartar la vista del libro. A veces soñaba con él, pero es que hasta que no encontrase información sobre Kaima Grymanfly y su relación con Salazar... quizás tendría que empezar otra vez desde el principio por si había pasado por alto alguna "kaima".

Me di cuenta que me había parado en mitad del camino por eso de señalar lo del libro. Me lo volví a guardar. - como sea... Lo que tu dices, mejor que no le dé más vueltas. Tanto si era el verdadero como si no... me hizo sentir fatal. - y la imagen de mi madre me flasheó inesperadamente. De nuevo. Aquella imagen que me punzó como la primera vez que la recordé, "gracias a" Salazar. O "por su culpa". Según cómo lo mirase.

Nuevamente perdido en mis pensamientos, llegamos a la puerta, y justo antes de entrar Alondra me agarró de la mano, se puso roja y me soltó al instante. No entendí, ¿me quería decir algo? porqué habíamos parado justo antes de entrar al gran comedor. *Ah, claro...- lo comprendí al momento.

-... oh, entiendo - le sonreí comprensivamente. Era Alondra al fin y al cabo, tiene una reputación que mantener. La reputación es importante para los Slytherins. Di un paso atrás e hice el gesto de dejar pasar a una dama. - Adelante. Si nos ven entrar juntos empezarán a hacerte preguntas estúpidas - me refería obviamente a sus dos amigas. - Yo... me espero un par de minutos antes de entrar. Así tienes tiempo de llegar a la mesa.

Obviando cualquier otro motivo posible existente, me había apartado para dejarla pasar. Y tras un segundo de pausa incómoda, antes de que se marchara, tuve la necesidad de decirle - ah... y gracias. Me ha... sentado bien hablar contigo. - y sin saber bien bien por qué, yo también me puse colorado. Nunca antes me había expresado de forma tan emocional como desde que pisé Hogwarts. 

De pasar a intentar camuflar todo lo posible lo que pensaba para no aparentar debilidad, había pasado a llorar frente a Ivy y a desahogarme con Alondra sobre todo lo que odiaba. Tenía que empezar a trabajar más sobre mi cara de Póker si no quería acabar pareciendo un perdedor frente a ninguna de las dos. O peor, frente a Colton!! No iba a permitir que me sacara de mis casillas nunca más. Al fin y al cabo el idiota maleducado era él. Como casi todos los Gryffindors.