Partida Rol por web

Las Tierras de los Valles

25. Tentar la Suerte.

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08/02/2011, 10:56
Tendera

Lo que siguió fue una frenética carrera entre tenderetes. A su paso, la misteriosa calishita derribaba algún cesto para dificultar la persecución de Lidda y sus amigas. Al final la siguieron hasta un oscuro callejón en el que tres hombres parecían afanarse sobre sus mercancías. Cuando vieron llegar a la mujer y a sus tres perseguidoras, dejaron lo que estaban haciendo y se acercaron amenazadoramente.

--¡Suficiente! --dijo la tendera recuperando el resuello--. Largaos de aquí o recibiréis vuestro merecido.

Ivodhra se adelantó un paso, protectoramente, y llevó la mano instintivamente a la empuñadura de su espada.

Notas de juego

Cuando quieras ^^

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10/02/2011, 09:38
Lidda Dudley

Olvidándome por completo de Dram, corrí con mis pequeñas piernas en pos de la calishita, sorteando no sin dificultad los cestos que ésta iba tirando a su paso y los traseúntes que se interponían de vez en cuando en nuestro camino cuyas airadas protestas nos seguían entra la multitud. Lo que me faltaba...sin dormir nada, con jaqueca y ahora echando el higadillo...qué mañana más emocionante...pensé lastimeramente mientras corría pesadamente, precedida por mis dos amigas. Finalmente, la persecución terminó en un callejón donde la mujer, protegida por tres fortachones, se encaró a nosotras furibunda. ¿Se había dirigido hacia ahí conscientemente? ¿la conocían realmente? medité mientras me detenía jadeando. Pensativa valoré la situación y a nuestros contrincantes, intentando hacerme una idea de si teníamos algunas posibilidades contras ellos. Desde luego, esto ha sido de todo menos discreto...¿cuanto tardará la guardia de la ciudad en venir? Suspirando alcé las manos en gesto conciliador ante mí.

- Señora...tranquilizaos por favor...sin ninguna duda ha debido haber un malentendido...no pretendemos en absoluto haceros ningún daño ni físico ni ningún otro tipo...- comencé hablando con calma y tono conciliador, sincero- usted conoce a Eomere ¿verdad?- dije señalando a mi amiga que hasta ese momento había estado callada, y para nada ayudándome en la tarea de tranquilizar a la mujer- es amiga de su familia...- continué-.. ellos son gente de bien...igual que nosotras..igual que usted...sólo queremos que nos instruya, que nos abra una ventana a ese vasto mundo del conocimiento que domina...sin repercusiones de ningún tipo para usted..se lo prometo por lo más sagrado- le aseguré. Mirando ligeramente hacia atrás añadí en un susurro- escuche, solo queremos hablar, de verdad...probablemente esta escena que acabamos de montar haya llamado la atención de mucha gente y de la guardia de la ciudad...y nosotras tampoco queremos que ellos vengan...que se inmiscuyan en esto...- me pasé la lengua por los labios y le miré con súplica-  ¿por qué no vamos a un sitio privado...hablamos con calma...nos aconseja...y luego nos olvidamos de todo esto? Como si nunca hubiera pasado.

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10/02/2011, 09:58
Director

Notas de juego

Haz una tirada de Diplomacia contra CD 15.

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10/02/2011, 10:03
Lidda Dudley
- Tiradas (1)

Notas de juego

hueeee pedazod e tirada!!!!! por cierto ¿viste que colgue la ficha en la otra partida??

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13/02/2011, 18:34
Matón

Los matones se detuvieron y se miraron entre si, aparentemente convencidos por la labia de Lidda. Uno de ellos se giró hacia la tendera.

--¿Por qué demonios has traído a estas mujeres aquí?

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13/02/2011, 18:51
Tendera

--Pero, pero...

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13/02/2011, 18:52
Matón

--Pero ¿qué? --le cortó el hombre, cruzándose de brazos--. Esta chica sólo está buscando información y piensa que tú puedes dársela. O vendérsela, según de lo que se trate. Al final sólo has conseguido atraer la atención de la guardia, tal y como ha dicho esta mediana.

El hombre se volvió hacia Lidda y señaló una puerta cochambrosa con un gesto vago de la mano.

--En fin. No creo que haya nada malo en que hagáis vuestras preguntas. Ese es el almacén. Allí podréis hablar a solas.

La tendera refunfuñó y se introdujo en el interior.

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15/02/2011, 09:25
Lidda Dudley

Sin duda en el proceso de ir a obtener información de manera inocente como había dicho el hombre, habíamos dado con algo mucho más interesante. Qué estúpida, ahora sabemos que tiene algo que ocultar...a pesar de que he prometido no usarlo en contra suya...me recordé mentalmente. Tras consultar a mis compañeras con la mirada incliné la cabeza en gesto aquiesciente.

- Gracias por acceder a ayudarnos, buen hombre...- agradecí con cortesía mientras haciendo tintinear mi espada me dirigía hacia la puerta por donde había desaparecido la tendera. Aún así no me fiaba del todo de ellos, por lo que hice un gesto con la cabeza hacia Ivodhra indicándola que se quedase fuera a vigilar.  Si habia problemas sabría apañárselas. Eomere y yo hablaríamos con la asustada mujer.

Con calma y cautela entré en el almacén de madera, cuyo contenido estaba cuidadosamente apilado contra las paredes y en el interior de bahúles. Mientras me detenía en el umbral para dar tiempo a mi vista a costumbrarse a la penumbra, no pude evitar arrugar la nariz ante la mezcla de olores de las hierbas que allí guardaban. De un vistazo recorrí la estancia, tomando buena nota de los detalles y busqué a la calashita.

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15/02/2011, 09:36
Tendera

El hombre te replicó con un gruñido que podía significar cualquier cosa e indicó a sus compañeros que siguieran cargando cajas. Al parecer, se dirigían al Puerto, a cargarlas en algún navío. Tal y como la indicaste, Ivodhra se quedó apoyada en el dintel de la puerta, vigilando ceñuda las idas y venidas de los porteadores mientras cubría vuestra única vía de escape visible.

Penetraste al interior del almacén en compañía de Emoere. De un vistazo de soslayo te percataste que tu amiga estaba tan nerviosa que temblaba ostensiblemente. Al contrario que Ivodhra, Emoere no estaba acostumbrada a lidiar con el tipo de malcarados que os acababais de encontrar.

La mujer de tez morena os esperaba de pie, apoyada contra un montón de cajas apiladas y cruzada de brazos. Había adoptado una mueca ofendida, y parecía querer acabar con aquella conversación cuanto antes.

--Tú dirás --dijo simplemente.

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16/02/2011, 08:55
Lidda Dudley

Ay qué ver qué carácter tiene esta mujer...pensé suspirando interiormente. Dirigiendo una mirada de soslayo a Eomere, instándola a calmarse, avancé hasta situarmente entrente de la mujer pero a una distancia prudencial.

- Necesitamos información acerca  de una hierba que es conocida comúnmente como Mente en Penumbra- solté sin más preámbulos. La tendera estaba bastante irascible y endulzar las cosas iba a servir más bien de poco. Apoyándome a mi vez en unas cajas alcé la mano tranquilizadoramente y continué en tono conciliador- Por supuesto, no estoy diciendo si vos la vendéis o no, simplemente deseo saber qué aspecto tiene, cómo huele, cómo se suele administrar y qué efectos tiene. Cualquier conocimiento que tengáis al respecto será bienvenido- señalé con amabilidad, ignorando por completo su actitud.

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16/02/2011, 09:16
Tendera

La tendera se cruzó de brazos.

--La Mente en Penumbra no es una hierba, aunque se le de el nombre de su componente principal, el Sakrash. Es una droga que se administra líquida y que se elabora en los Países del Este y que se considera ilegal en todo el Faerûn Civilizado --hizo una pausa enfática--. La composición no la sé exactamente, pero es una mezcla de Sakrash y otras hierbas junto a savias de árbol disueltas en vinos especiales. Tiene olor y sabor dulzón, y la consistencia del brebaje es aceitosa. Se utiliza mucho en Thay para bloquear los intentos de control mental sin que el agredido necesite conocer El Arte. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Por si no lo sabes, El Arte es la forma en el que se llama a la Magia Arcana en los Reinos Olvidados.

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17/02/2011, 16:58
Lidda Dudley

Asintiendo conforme la calashita hablaba, tomé buena nota mental de lo que me iba diciendo. Desde luego la información nos iba a resultar bastante útil.

- Ajá...muchas gracias por la información...sin duda nos va a resultar bastante útil...- incliné la cabeza amablemente, aunque teniendo en cuenta mi estatura y su gesto adusto, el detalle quedó un poco absurdo. Durante unos segundos vacilé, antes de formular mi siguiente pregunta con cuidado y mucho tacto- me...me preguntaba si usted, señora, no tendría alguna noticia de si hay alguien que haya estado vendiendo esa sustancia en la ciudad. Sé que, como dice, es algo ilegal...pero, bueno, todos sabemos que ese pequeño detalle no tiene por qué parar al comercio...una droga como esa debe ser sumamente codiciada..- enarqué una ceja y la estudié con atención, atenta a cualquier cambio en su expresión. Puede que se negase a admitirlo ante mí, dadas las circunstancias pero quizás su rostro podría revelarme algo.

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18/02/2011, 09:48
Tendera

--¿En la Rastra? --se mofó la tendera antes de negar con la cabeza--. No veo por qué una sustancia como esa fuera a ser tan codiciada aquí. Si exceptuamos Halruaa, Thay es el país con más magos de todo Faerûn. El estricto gobierno de los zúlkir impide que la gente se tire bolas de fuego a la cabeza, pero los ataques más sutiles, en especial los mentales, están a la orden del día. Esa es la razón por la que esa sustancia se comercializa allí.

Se cruzó de brazos.

--Pero los rastreños odian la magia: hay muy pocos magos en la ciudad. No veo cómo nadie se iba a arriesgar a vender una sustancia parecida para tan pocos clientes potenciales. ¿Hay algo más que necesites saber?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Crees que está siendo sincera.

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18/02/2011, 16:43
Lidda Dudley

-No, muchas gracias por su colaboración, señora...- concluí separándome de las cajas donde había estado apoyada.- Y realmente, siento las molestias que les hemos causado...espero que ésto lo compense y ayude a que se le olvide el susto y esta conversación- añadí mientras rebuscaba en el saquillo que pendía del cinto una moneda apropiada y se la tendía con una sonrisa amable.

Notas de juego

no me aclaro con las monedas pero le doy algo que compense la ausencia de su puesto el tiempo que hemos permanecido hablando así como un extra por lo de la persecución y su silencio ^^ tu me diras

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19/02/2011, 10:11
Director

La tendera cogió las monedas que le tendían y asintió con un cabeceo seco.

Lidda y Emoere salieron al exterior y se reunieron con Ivodhra. Las tres amigas se alejaron del callejón en silencio, lo suficiente para estar fuera del alcance de oídos indiscretos. Al final fue la semielfa la que rompió el silencio.

--¿Y bien? ¿Cómo ha ido?

Notas de juego

5 Piezas de Oro está bien. Serviría para pasar un mes si se administran bien. Réstalas de tu ficha.

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20/02/2011, 10:17
Lidda Dudley

Una vez lejos del callejón me detuve y me volví hacia mis amigas frunciendo el ceño.

-Uff....menos mal que al final atendió a razones...-exclamé meneando la cabeza.- No sé qué demonios le dio para salir corriendo de esa forma...si solo le dije que queríamos información...- disgustada y aún sin entenderlo del todo chasqueé la lengua, para a continuación pasar a explicarle a Ivodhra lo que nos había dicho la tendera en el almacén- Parecía sincera cuando decía que no sabía si había alguien comercializando la droga y desde luego su argumento a lo absurdo de su uso aquí tenía sentido...- pensativa acaricié el pomo de mi espada en un gesto inconsciente- Realmente no entiendo por qué a Yhalandra le ha dado por hacerlo, si es que lo ha hecho...-suspiré- Eomere, tu estuviste conmigo ahí dentro, ¿crees que la calashita decía la verdad?- me volví hacia mi amiga, la cual empezaba a recuperar el color de sus mejillas.

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20/02/2011, 10:33
Emoere de Tymora

--Yo también creo que estaba siendo sincera --asintió Emoere--. Sus argumentos parecían sólidos. Quizá estemos un poco paranoicas con este asunto y si trató de escabullirse fue otros motivos.

Emoere frunció el ceño pareció pensativa un momento.

--Hmmm... quizá deba decirle a mi padre que revise las mercancías que haya comprado de esa mujer --masculló más para ella misma que para las demás.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Ganas 250 puntos de experiencia por haber conseguido la información sin recurrir a la violencia.

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20/02/2011, 10:39
Ivodhra

--¿Y por qué es absurdo su uso aquí? --inquirió Ivodhra.

Emoere repitió la explicación que les había dado la calishita.

--Sí, bueno... --replicó la semielfa haciendo un vago ademán con la mano para restar importancia al comentario--. Pero nuestras sospechas se ciernen sobre un club de aventureros, ¿no? Es verdad que hay pocos magos viviendo en la ciudad, pero seguro que hay muchos más yendo y viniendo sin demasiado control en las habitaciones de la Lluvia de Estrellas, ¿verdad?

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21/02/2011, 17:33
Lidda Dudley

Alzando la mirada desde el pomo de la espada que había estado toqueteando miré a Ivhodhra asintiendo.

-En eso tienes razón...visto así no parece algo tan extraño...en cualquier caso da lo mismo para la tarea que tenemos, por la razón que sea alguien está comercionalizando con ello- me encogí de hombros y miré hacia el cielo, escasamente visible entre los edificios que nos rodeaban- hum...debe ser casi la hora de comer...quizás sea un buen momento para dejarnos caer por el Club de Aventureros y ver qué se está cociendo. A la gente se le suele soltar más la lengua cuando está reunida entorno a una mesa con una jarra entre las manos ¿no creéis?- enarqué una ceja y parpadeé incómoda. El mirar al sol me había dejado deslumbrada y durante unos segundos sólo pude percibir las siluetas oscuras de mis amigas junto a mí.

Notas de juego

que bien!!! todo gracias al gran don de gentes de Lidda ^^

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21/02/2011, 17:47
Director

La Lluvia de Estrellas presentaba el mismo aspecto que el conjunto de casas viejas y lujosas que había sido en su día. Las edificaciones seguían en pie, pero ahora estaban unidas por un salón de celebraciones construido en el lugar en que estaban los antiguos patios, cuadras, cocheras y callejones de la manzana.

Lidda sabía que actualmente sólo dos de las antiguas puertas se seguían utilizando con frecuencia por los clientes y visitantes, y ambas situadas en el lado occidental de la calle Sempidendo. Pero también existía una puerta de carruajes que se abría al Callejón Hediondo y que utilizaban los repartidores y sirvientes. La última puerta que la mediana conocía era la Puerta de la Piedad de la Callejuela Lunfaz, por donde entraban los socios heridos.

Notas de juego

Por cierto, cuando fui a meter la imagen de tu pj en el montaje del can-can me di cuenta de que la imagen que tenías en grande se ha caído. ¿La tienes aún por ahí?