Partida Rol por web

Mas elegidos? Si es así, lo que nos faltaba, como sea, nos sé que pueda ser peor, quizá nuestro verdadero objetivo sea ir tras esos otros…

Dejo de cubrirme tras el árbol y bajo mi espadón, mi mente me dice que debo seguir alerta pero mi cuerpo simplemente ya no quiere escucharle, ahora que ? me pregunto…

Gracias.

es la única respuesta a la curación que realiza la srow

ahora, que mas escuchas?, puedes decir cuantos hay?.

Lucius asiente a la reacción de Zenram y sin bajar la guardia con su espada en la mano espera lo que sucederá...

Más relajados ante las palabras de la drow, os manteneis en el mismo lugar durante un buen rato, obligando a vuestros musculos, asi como a vestra mente, a descansar durante un merecido rato...

Poco a poco os empieza a embargar una inmensa sensación de cansancio, los parpados os pesan y el sueño lucha con vuestras en mentes en una dura batalla, la cual empieza a ganar con facilidad. Sin siquiera daros cuenta, acabais sentados contra las dura corteza de agun árbol y varias veces caeis en una especie de sopor, pero vuestro sentido del peligro os despierta continuamente, impidiendo que el sueño logre la cercana e inexorable victoria que tanto anela...

Durante otros largos minutos luchais contra esa sensación, creyendo, sabiendo, que no os podeis permitir el lujo de dormir, pero sin poder oponeros a ello, acabais suscumbiendo a su poder. Vuestros ojos se cierran del todo y vuestra mente, rapidamente, e sumerge en la reparadora oscuridad...

Sobresaltada, te depiertas cuando el peculiar y peligroso ruido de varios arcos, tensandose, acude a tus oidos y alarma a tu relajada mente. Con la certeza de que estas en peligro, te pones de pie mientras empuñas tu arma y abres los ojos con rapidez, pero tan solo puedes divisar oscuridad... Cerca, percibes y escuchas como los humanos que te acompañan tambien intentan ponerse de pie a la vez que escuchas como luchan con sus armas para empuñarlas...

Los arcos se destensan, y sus proyectiles, mortales, vuelan hacia ti asi como hacia donde supones están tus compañeros. Asustada, esperas el dolorso y mortal impacto... y este no tarda en llegar, aunque la fortuna esta de tu parte y el proyectil tan solo logra realizarte un fino y doloroso corte en el hombro. Con todo, la sensación de tu sangre goteando levemente de tu nueva herida logra que tus musculos se tensen, y en el ultimo y deseperado intento te lanzas hacia un lado, evitando asi el resto de flechas dirigudas a tu cuerpo...

Caes al suelo con fuerza a la vez que escuchas como Lucius emite un grito de dolor. Varios pasos se acercan a tu posición, seguidos del inconfundible sonido de unas espadas surgiendo de su vaina. Olvidando el dolor y la ceguera que te impide ver a tus enemigos, te pones rapidamente en pie, desenfundando tu espada mientras eres rodeada por cuatro enemigos. Temerosa, pero sin otra opción, cierras los ojos para dejar que el oido guie tus estocadas y movimientos en el combate que se avecina...

Sobresaltado, te depiertas cuando una incipiente y alarmante sensación de peligro inunda tu mente. Con la certeza de que estas en peligro, te pones de pie mientras empuñas tu arma y abres los ojos con rapidez...

Ante ti, a tan solo 3 metros de tu posición, cuatro de los ya conocidos humanos disparan sus flechas con rápidez, pero tu agilidad es superior a lo esperado y rapidamente te lanzas hacia un lado, evitando que los proyectiles acaben con tu vida...

Cuando caes al suelo, con fuerza, te vuelves a incorporar con rapidez, empuñando tu espadon, al tiempo que observas a tu alrededor y ves como los ciegos, ya a tu lado, desenfundan sus espadas dispuestos a atacarte. En tension, y sabedor de lo que espera, te preparas para afrontar un combate de cuatro contra uno...

Mientras balanceas tu arma, dando pequeños pasos y con los cuatro enemigos rodeandote, ves de reojo como tus compañeros no andan en mejores condiciones. Cerca, a tu derecha, la drow parece sangrar de una herida en el hombro, y otros cuatro humanos la rodean. Al otro lado de la cleriga, Lucius, sangrando en gran cantidad de uno de sus gemelos y conuna flecha atravesa en el, se prepara para defenderse de los ataques de otros cuatro enemigos...

Sobresaltado, te depiertas cuando una incipiente y alarmante sensación de peligro inunda tu mente. Con la certeza de que estas en peligro, te pones de pie mientras empuñas tu arma y abres los ojos con rapidez...

Ante ti, a tan solo 3 metros de tu posición, cuatro de los ya conocidos humanos disparan sus flechas con rápidez, pero reaccionas con rapidez y con un pequeño esfuerzo saltas hacia tu izquierda. Emitiendo un leve quejido, te das cuenta que una de las flechas a perforado tu gemelo izquierdo...

Cuando caes al suelo, con fuerza, te vuelves a incorporar con rapidez, empuñando tu espada e ignorando el intenso dolor de tu pierna, al tiempo que observas a tu alrededor y ves como los ciegos, ya a tu lado, desenfundan sus espadas dispuestos a atacarte. En tension, y sabedor de lo que espera, te preparas para afrontar un combate de cuatro contra uno...

Mientras balanceas tu arma, dando pequeños pasos y con los cuatro enemigos rodeandote, ves de reojo como tus compañeros no andan en mejores condiciones. Cerca, a tu izquierda, la drow parece sangran de una herida en el hombro, y otros cuatro humanos la rodean. Al otro lado de la cleriga, Zenram no parece herido, pero otros cuatro adversarios le atacan con sus espadas, obligando al guerrero a defenderse lo mejor posible...

Tras el rapido vistazo vuelves tu atencion a tus contrincantes, son cuatro y parecen decididos a acabar con tu vida...

mientras acaban de rodearme mis enemigos empuño el escudo y me concentro en los sonidos que emiten al atacar para poder situarlos en mi radio de acción y poder esquivar sus golpes, una sonrisa aparece dibujada en mi rostro,...

por fin un combate nivelado, gracias Diosa, dame fuerzas para poder matar en tu nombre...

Alarmado ante la situación balanceo mi espada cual péndulo frente a mí, haciendo manteniendo a mis enemigos a distancia…

Veamos que sucede….

DELANTE BASTARDOS ATAQUEN CUANDO QUIERAN, AQUÍ ESTOY, VENGAN POR MI…!!!!Gritando

Los cuatro humanos se mueven lentamente a tu alrededor, buscando un huevo en tus defensas e intentando quedar bien lejos de tu enorme espada...

Uno de ellos arremte de repente, buscando alcanzar uno de tus costados, pero tu reaccion es rápida y segura, y mueves tu gran espada para desviar la leve acometida para, rápidamente, plantar cara al resto de ataques, que se suceden instantes después aprovechando tu primer movimiento...

Con una enorme sonrisa, detienes cada uno de los lentos espadazos de tus enemigos, mientras te das cuenta de que, todo y la superioridad numérica, eres muy superior a ellos. Confiado, golpeas con fuerza la espada del último de ellos en atacar, y esta cae de las manos de su amo sin apenas resistencia... El humano da un paso atrás, reflejando el miedo que sufre al quedarse desarmado...

Los cuatro humanos se mueven lentamente a tu alrededor, y aunque no los ves, poco a poco vas acostumbrandote y entendiendo los sonidos que llegan a tus afinados oidos. Con rapidez, deshechas los porducidos por los combates cercanos y tan solo te centras en los de tus adversarios...

Uno de ellos arremte de repente, buscando alcanzar uno de tus costados, pero tu reaccion es rápida y segura, y mueves tu el brazo que empuña tu escudo para desviar la leve acometida para, rápidamente, plantar cara al resto de ataques, que se suceden instantes después aprovechando tu primer movimiento...

Con una enorme sonrisa, detienes dos de los lentos espadazos de tus enemigos, mientras te das cuenta de que, todo y la superioridad numérica, eres muy superior a ellos. Confiada, intentas golpear con fuerza la espada del ultimo de tus adversarios, pero tu confianza te delata y el humano finta hacia un lado para después arremeter con furia. Indefensa y engañada, intentas retirar tu cuerpo, y con ello logras que la herida no sea mortal, pero el filo oxidado de la espada penetra entre tu armadura y te inflinge un feo corte en el costado izquierdo...

al recibir el espadazo en el costado izquierdo intento alcanzar al que me golpeó, pero la herida sufrida y el cansancio acumulado me hace errar el golpe

Agotada, y todavia algo confunidad a causa de tu ceguera, intentas contratacar lanzando una estocada hacia el humano que logró herirte, pero tu atque es lento e impreciso, y tu enemigo repele tu ataque interponiendo su arma con rapidez...

Durante los siguientes instantes, y con el sudor perlando tu frente, te dedicas unicamente a afianzarte defensivamente, repeliendo continuos ataques, tanto con tu escudo como con tu espada. Mientras agotas tus escasas fuerzas en el combate, tu sentido auditivo mejora rapidamente, y poco a poco te ves más capaz de saber que clase de movimientos realizan tus adversarios... Con el intercambio de golpes, y tu mejora en la lucha a ciegas, empiezas a ganar confianza pero tu estado fisico, al borde de sus fuerzas...

El espadazo llega desde atrás, y todo y que escuchas como el metal rasga el aire que te rodea, tu movimietno no es lo suficientemente rápido, y la espada de tu enemigo golpea a tu escudo tan solo de refilón, lo justo para que logres desviar la trayectoria, pero no lo suficiente para impedir que la espada golpee en tu estomago. Por fortuna, el golpe no logra atravesar tu armadura, y tan solo sientes el intenso dolor del golpe antes de volver a girarte para detener una nueva estocada. Sudorosa, y con ambos brazos doloridos a causa del combate, sonries al pensar en el hematoma que te saldrá a causa del ultimo golpe...

nuevamente golpeo hacia los que tengo delante, pero cuando estoy a punto de impactar a mi enemigo, me golpean por la espalda haciéndome perder el equilibrio....

...la perdida de equilibrio te obliga a dar dos rápidos y peligroso pasos hacia adelante, y para tu sorpresa, creyento indefensa, niguna de las armas enemigas logra impactarte. Tan solo el roce de una de ellas se acerca peligrosamente, pero tu coraza logra repelerla sin más... Afortunada, te enderezas para continuar con el combate...

abro la guardia para dejar pasar a uno de los atacantes y en el último segundo esquivo su espada sintiendo tan sólo el roce en mi coraza, él sorprendido ante la treta se teme lo peor, una sonrisa cruel se dibuja en mi rostro

ya eres mío...

pero cuando va a golpearle...

Jajaja!!!!, confiado ante la inferioridad de mis enemigos hago un semicírculo para mantenerlos a raya, mientras elevo mi espada por sobre mi hombro, con una sonrisa en el rostro descargo un ataque vertical desde mi hombro, intentando herir a los cuatro enemigos en un solo golpe, la sonrisa pronto es sustituida por la frustración al ver como mis enemigos esquivan fácilmente el ataque.

Diablo, nuevamente me a ganado el exceso de confianza.

De reojo observo que ninguno de mis compañeros haya vito la pifia sufrida…

Mientras me preparo a recibir los ataques que ahora vendrán…

Lucius se da cuenta de lo apremiante de la situación.

maldita sea, no escaparé, si esta es mi hora, pues que así sea!!

Eliiya Aelyn!!!

Miro fijamente a uno de los guerreros y avanzo a su encuentro.

AAA!!!!!

Tras tu estratagema, te dispones a golpear, lateralmente al sorprendido humano, pero, sea causa de tu ceguera o por tu suficiencia en el movimiento, no logras apoyar, con firmeza, tu pie derecho y este se dobla, produciendote un pinchazo de dolor que logra arrebatarte la concentración. Tu espada, desviada a causa de tu torcedura, golpea el aire, lejos de tu adversario...

Sin tiempo a reaccionar, los tres humanos aprovechan tu error para lanzarse sobre ti atacandote sin pausa y obligandote a defenderte desesperadamente. Frustrada y con diversos dolores recorriendo tu cuerpo, interpones tu escudo, como buenamente puedes, para intentar detener todas las estocadas, pero nuevamente tus defensas son atravesadas por uno de los ciegos, que consigue rozar tu mejilla, produciendote otro nuevo corte...

Temblorosa a causa del cansancio y las heridas, buscas en tu interior las fuerzas suficientes como para mantenerte en pie, auqnue sabes que no lograras aguantar en pie mucho más tiempo...