Partida Rol por web

Que el emperador se apiade de su alma y la acoja en su seno elevo una silenciosa plegaria mientras realizo la señal del águila en honor al compañero que había sido derribado por los disparos de aquellos dos soldados. Adiós compañero, nos veremos en la otra vida.

Lo que me preocupa no es la cantidad de gente que hay, lo que me preocupa es la cantidad de esos engendros de feth que hay. Y esos soldados parecían ser parte de las fuerzas del archienemigo. Se suponía que esto era un simple motín, ¿entonces qué pintan feth pintan ellos en todo esta mierda? le comento a mi compañero mientras me acerco al cuerpo del otro guardia de la prisión y lo registro.

Cojo los dos cargadores de rifle automático, parándome a observar un poco el que contenía munición Mata-Hombres. Si los guardias están equipados con esta munición, ¿a que feth se supone que le estaban disparando? Esto cada vez me da peor espina,

Cojo también el mechero y los cigarrillos, y por último unos pocos tronos que tenía en el bolsillo trasero del pantalón no creo que él les vaya a dar mucho uso a partir de ahora. Saco uno de los cigarrillos y lo enciendo mientras me levanto y me acerco a mi compañero. ¿Qué es eso, un armario blindado? ¿Alguna pista de cuál puede ser la contraseña? Tal vez tenga algún juguetito interesante le digo cuando me pongo a su altura mientras le ofrezco un cigarrillo.

Guardando lo que he encontrado en los cuerpos, le ofrezco uno de los cargadores laser a Lugh. Me guerdo los tronos y el medkit para mas tarde, mientras miro la nota y me pongo a pensar.
Cuando mi compañero me ofrece el cigarro, lo acepto con aire ausente y me lo coloco en la oreja, mientras con cara pensativa digo- Aqui hay un posible numero, pero no se si será. Voy a probarlo. E introduzco la fecha del cumpleaños de la hija- 54711... no creo que funcione, pero a unas malas lo he intentado. Digo sonriendo y encendiendo el cigarro.

El soldado introduce en el teclado del lateral la cifra {5,4,7,1,1} y presiona enter. Con un ruido de des-presurización, las puertas del armario se desbloquean y dejan al descubierto una serie de estantes donde antaño debía haber toda una colección de armas. Ahora tan solo quedan unas cuantas porras, unos cuantos cascos con mascaras anti-gas, dos rifles automáticos, una pistola automática y diversa munición, que va desde balas de goma hasta algún cargador de munición real, pasando por la munición de entrenamiento y la real-estándar. Los dos miembros del equipo se quedan sorprendidos ante lo que encuentran frente a ellos...

Han oído hablar de esas armas automáticas, aunque la verdad es que nunca pensaron en emplear una de ellas, según dicen pueden encasquillarse si no se emplean con mimo y cuidado, pero su potencia de fuego llega a permitir vacía un cargador de 30 proyectiles en tres ráfagas de 10 disparos gracias a su modo de fuego automático. Curiosos cuanto menos esas armas.

Cogí y sopese uno de aquellos rifles. Eran de esos que lanzaban proyectiles sólidos, cuya precisión no podía ni compararse con la de un arma laser, pero que tenían una ventaja que en este caso podía ser muy interesante: una mayor cadencia de fuego. Y visto que aquellas criaturas no caían de un solo disparo, cuantos más disparos pueda hacer a la vez mejor. Además tenía un cargador con munición especial por si, el emperador no lo quiera, tenían que vérselas con algo aun más grande. Pues no se tu, pero yo creo que me voy a quedar con uno de estos juguetitos de feth, a ver qué tal funcionan en combate real.

Yo me quedaré con la pistola y tambien cambiare el rifle. Con el arco no puedo permitirme el llevar los dos rifles- Digo mientras busco una sobaquera para ella y si hay algun cargador. Despues, miro por todos los monitores a ver si veo a algun compañero de la otra escuadra, para saber hacia donde dirigirnos.
Tras un momento, me lo pienso mejor y me dirijo de nuevo al armario, cogiendo uno de los cascos con mascara antigas- Por si las moscas. -le digo a Lugh quitandole la mascara al casco y viendo si tiene el enganche standar para ver si cabe en mi propio casco

En el armario junto a las armas, hay dispuestos ordenadamente una serie de cargadores, que se encuentran encajados en sus correspondientes ranuras y dispuestos en una larga fila. 6 cargadores en total de rifle laser y 4 de pistola automática, que junto a la pistola automática que al parecer sacó el soldado que yace muerto del suelo para volarse el coco están dispuestos para su toma.

El joven recluta del regimiento aprende a toda velocidad, sin pensarlo dos veces se quita el casco y toma la máscara anti gas del casco de los agentes de prisiones. La mota y se la pone. Encaja perfectamente gracias a las gomas que se colocan alrededor de la cabeza, ajustándola sin dejar espacio libre para los gases. Unas gafas de opacos cristales encajan en la zona de los ojos. Tras colocarlo todo y tomar el rifle automático en sus manos, inserta una cargador de los tomados sobrantes en el armario. Parece que las armas están engrasadas y en perfecto estado. La corredera se desliza a la perfección en un fluido movimiento.

Los dos soldados imperiales llevan ahora mascaras anti-gas y su aspecto no es menos terrorífico que el del archí enemigo. Al menos, un ciudadano imperial normal se cagaria encima varias veces al verlos con sus equipos de combate, sus rifles negro-mate, sus mascaras anti gas y sus capas de camuflaje envolviéndolos como... FANTASMAS.

Bien pensado colega. Así estaremos protegidos si esos bastardos utilizan algún arma biológica le comento a Brom mientras cojo la otra mascara que quedaba que espero que sea un arma de creación humana. De ser alguna pestilencia de los dioses oscuros no sé si una de estas nos servirá para mucho.

Oye, ¿vas a coger esto? pregunto señalando la pistola automática porque si no me la cojo yo. Tiene pinta de ser otro juguete bastante divertido.

Mientras los guardias imperiales aprobechan todo el equipo a su disposicion y se equipan como para abatir un Marauder en pleno vuelo, desde el otro lado de la puerta los insistentes golpes de los asaltantes han cesado de golpe. Os mirais uno al otro, a traves de vuestras mascaras anti-gas.. ¿Por que habran parado? Pronto vuelve a haber actividad al otro lado de la puerta. Un sonido agudo y monotono cruza la puerta de metal y llega hasta vosotros. No sabeis que puede ser... pero no tiene buena pinta desde luego...

Rapidamente Lugh recuerda ese sonido, como el de una mangera a toda presión... Es el ruido de un soplete... Alguien al otro lado ha puesto en marcha un soplete o un soldador o algo similar. Probablemente sea el mismo que el equipo portaba consigo para abrirse paso por las zonas mas dificiles. Era un soplete potente...

Reviso rápidamente el rifle automático recién adquirido y sacando un cargador de mis bolsillos lo golpeo contra el casco levemente para alinear los proyectiles y evitar así que se encasquillen más adelante. Mientras hago esto un ruido demasiado conocido y familiar corta el silencio de la sala... y puede que también la puerta. Miro a Lugh y le digo con un gesto urgente:

Compañero, yo no tengo ni idea de codigitadores ni de proyectores de hologramas... jamás me había acercado tanto a uno... En esta sala no tenemos mucho más que hacer, y no sé que habrá tras la puerta número dos... pero seguro que es algo mejor que lo que viene tras la puerta numero 1...

Miro con cierta intriga la puerta que hay al final de la sala, cerca del cadáver del guardia de prisión.

Creo que es hora de averiguar que nos depara la suerte...

Yo tampoco tengo ni idea de esas cosas, y sinceramente tampoco tengo ganas de aprender. Pero lo que si se es que si no salimos por patas de aquí antes de que tiren la puerta estaremos jodidos le respondo a mi compañero mirando preocupado a la puerta desde la que venía el ruido.

Probemos a ver que feth nos depara la otra puerta. Dudo mucho que podamos encontrar algo peor al otro lado o al menos eso espero, porque no quiero ni imaginarme que puede ser peor que esto… Saco la multillave del bolsillo por si las moscas y empiezo a buscar el mecanismo de apertura de la puerta, en caso de tenerlo.

La puerta es de código simple, con la multi-llave se abre y despresuriza la sala... De buena os podéis haber librado, si los agentes del caos no hubieran conseguido tirar abajo la puerta y no hubieseis salido de esta sala... Quién sabe si el suministro de oxigeno hubiera durado, o si los recicladores de oxigeno funcionaban en la sala... Podíais haber acabado durmiéndoos para siempre tranquilamente sin daros cuenta de nada. Una suerte.

La puerta se abre y los dos apuntáis con vuestras armas hacia la abertura. Un túnel desciende, de paredes de hormigón solido y resistente, una serie de escaleras descienden formando una galería subterránea. Cada 20 metros una luz fijada al techo ilumina el camino. Desde allí abajo viene un olor a humedad intenso. Los viejos conductos de la prisión, puede comunicar un lado con otro, o muchos de los puntos de la misma en un intrincado laberinto...

Bueno, está claro que aquí no hacemos nada, y yo no pienso volver a salir por allí señalo la puerta de la que provienen los sonidos del soplete con el pulgar derecho así que probemos a ver a donde feth lleva este pasadizo.

Yo iré primero, avanzaremos de forma escalonada cubriéndonos el culo el uno al otro, que no me fio ni de mi sombra aquí dentro. Deberíamos de buscar a la otra escuadra, puede que el estirado del comisario sepa algo más de lo que pasa aquí. Dicho esto cojo mi nuevo rifle fuertemente con ambas manos y me adentro por el pasadizo, observando con cuidado hasta la última sombra y esquina en busca de enemigos.

Os adentráis en los fríos túneles. Son espacios en los que caben 3 hombres hombro con hombro sin problemas, iluminados, (cada vez menos) por unas débiles luces que se encuentran fijadas a la parte superior del túnel. El primer tramo que completáis son una serie de peldaños, que descienden poco a poco hasta las profundidades del túnel. En total habréis bajado unos 20 metros.

Se puede ver que los túneles habían sido construidos con el fin de transportar material de un un punto a otro de la prisión sin tener que pasar por las innumerables puertas con rejas que plagan las secciones del colosal edificio. Ese es otro punto, es un lugar complicado, construido hacia abajo de modo que el escapar sea más complicado aún si cabe. Pocas estructuras están situadas en la superficie de la prisión, y esas pocas habían sido dejadas atrás hacia mucho tiempo por el grupo, cuando aun lo formaban 12 miembros y no dos...

El par de soldados avanzaba con cautela con sus nuevos rifles, con pasos cortos pero rápidos dejaban intersecciones del túnel atrás con gran rapidez. En verdad no sabían muy bien a donde iban, pero... su instinto rara vez fallaba, eran hombres de los bosques, procedentes de la extinta Tanith.

Esto no me da buena espina... No oigo nada, no estamos haciendo mas que cruzar intersecciones una tras otra... Pero algo me dice que es por ahí... ¿Que te dice tu instinto?

Le preguna Brom a su compañero en voz baja haciendo un alto en el camino.

Mi instinto me dice que estamos jodidos y con pocas posibilidades de salir de esta. Vamos que como siempre respondo a las palabras de mi compañero mientras me muevo con cautela por los pasillos, buscando cualquier indicio que nos indique como salir de aquel agujero si las cosas fuesen fáciles no tendría gracia apuntarse a la guardia imperial, ¿no crees? pregunto con tono irónico más a la nada que a mi compañero.