Partida Rol por web

En el pasillo, allí os encontráis todos. Y menos mal, porque el estrés se estaba acumulando con tanta gente moviéndose por la casa sin tener claro quien es quien.
En el extremo más alejado del pasillo están Carla y el sheriff Hamilton que han entrado por una ventana. En el centro del pasillo se encuentra el grupo formado por Craig Swartzosky, Gary Doodes, Margaret Flick y Samantha Redlum que han entrado por la puerta principal. Y al final del mismo están John A. Schnautz, Max Gordon y el sheriff Taift.

La habitación situada al final del pasillo es de donde proceden las voces así que allí os dirigís. Al abrir la puerta esta chirría pero podéis ver una habitación desordenada, de un olor rancio. Una cama deshecha, otro montón de latas de cerveza vacías, una triste bombilla desnuda y sucia como única fuente de iluminación interior, el papel de las paredes sucio, raído y húmedo en algunos lugares.
En el suelo, apoyados contra la cama, dos figuras están enzarzadas: por un lado un hombre de unos cuarenta años muy mal conservado, con pinta descuidada, barba de varios días y una bata miserable y sucia; por otro lado, imposible de confundir, Brenton, que es bastante más mayor que el otro va vestido con un traje mojado pero elegante, y parece llevar la parte ganadora del combate. Con las facciones alteradas por una ira homicida, araña con fuerza la parte del vientre del otro hombre, donde su camiseta aparece marcada por una mancha de sangre creciente, mientras muerde como un perror rabioso la parte lateral izquierda del cuello de su presa. La víctima sigue gritando todavía, con expresión desencajada y cada vez más débil.

Carla va a irrumpir en la habitación y lo que va a ver se va a trastornar tanto que voy a interpretarlo como que se ve tan asustada que disparará "al bulto" con la esperanza de alcanzar a esa "cosa"...

Carla se ve sorprendida al ver la sangre que había salpicado todo el suelo, al principio parecía que estuvieran peleando aquellos dos pero pronto se dió cuenta que la ira que movía el cuerpo de Brenton era anormal, sin duda se hallaba intoxicado por algún tipo de dropa alucinógena. Los gritos aterrorizaron a la ayudante del Sheriff que ordenó nerviosamente :

- ¡¡ Ma-manos arriba Brenton !! - gritó temblando cuando de repente el arma reglamentaria de la agente se disparó accidentalmente - BANG !! - retumbó el disparo en toda la casa...

El sheriff no salía de su asombro... Lo que vio le dejó paralizado, pero el disparo de Carla le despertó. Apuntó con su arma a Brenton mientras avanzaba con precaución. 

Tranquila Carla. Luego se dirigió al tipo y le ordenó en voz bien alta:

YA HAS OÍDO BRENTON, APÁRTATE DE ÉL, YA!!! ESTÁS DETENIDO.

La reacción ante lo que estáis observando es distinta en cada uno. Hay quien esta acostumbrado al dolor y a los espectáculos dantescos y quien pese a todo no puede evitar un espasmo o una arcada.
No os cabe duda de que Brenton no os hace ningún caso pues ni siquiera ha reaccionado al disparo y sigue intentando acabar con el viejo que tiene delante sin prestaros atención y si no reaccionáis pronto lo va a matar.

Un rayo de luz solar se cuela por la rendija que ha provocado el disparo de la agente rinaldi en la pared.

Extrae su automatica y no se lo piensa, con la sangre fria que la caracteriza, efectua un disparo al asaltante, pero parece ser que la penumbra dificulta su disparo y su acierto.

A Gary le hubiese gustado cojer al sospechoso vivo pero visto el estado ene l que se encuentra lo mejor es acabar con la amenaza de una vez , asi que sin dudar dispara sobre el asaltante . Pero la oscuridad hace que su disparo no sea precisamente bueno eso si ha conseguido abrir un hueco mas de luz .

Al ver que todos disparan, de perdidos al río piensa Craig, él no va a ser menos que el resto y apuntando como es debido y calculando el posible retroceso del arma -que no es mucho - aprieta el gatillo, intentando dar a aquel loco que no atendía a razones.

En cualquier caso, el tiro le sale por la culata, nunca mejor dicho y sólo Dios sabe a qué ha dado.

Hamilton había visto lo que ese de hijo de puta era capaz de aguantar, asi que aprovechando que estaba distraído se acercó a el con la pistola desenfundada la puso a escasos centimetros y apretó el gatillo.

Schnautz respira fuerte, qué cojones, el sonido de los disparos lo sacan de su trance y los viejos hábitos hacen que responda, el disparo se va alto, hace tiempo que no disparaba, debería volver a entrenarse duro en el campo de tiro.

La ayudante Rinaldi soltó la pistola se cubrió la cabeza dejándose caer al suelo. La situación era dantesca, la sangre salpicaba las paredes y la intromisión del efectivo al completo de Agentes descargando sin piedad sus cargadores contra el sospechoso había acabado por convertir la situación en algo totalmente surrealista. - Ahhhhhhhhh !!!! - gritaba mientras se sujetaba la cabeza intentando no escuchar la multitud de disparos que estallaban a su alrededor.