Partida Rol por web

Más Allá del Sol

Un Viaje Inolvidable

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03/06/2020, 11:19
Andrea Marshall

Andrea, con la espalda en aquella dura y fría roca, desea morir, quiere que ese sufrimiento acabe ya.
Al dolor extraño en forma de zumbido que siente donde estuviera su oreja izquierda, se suma ahora también el dolor punzante que nota en el final de su pie izquierdo.
El cosquilleo macabro de la sangre emanada por sus dedos discurriendo por la planta de su pie hacia abajo y terminando en el talón, apoyado en alto sobre el altar, le eriza aún mas la piel.

No se consigue desmayar a pesar de sus ganas. No sabe si tiene los ojos abiertos o cerrados. Aquello no terminará nunca. El ambiente es afixiante.

Y después de una nueva vibración, la cual Andrea ya prácticamente ignora en sus pensamientos, LAS PUERTAS SE ABREN.

Andrea abre los ojos de par en par. No puede ser. Instintivamente intenta levantarse con la agilidad y gracia que había tenido hasta hace pocas horas, sin embargo se le olvida, que ella ya no volverá a ser la misma. Se tambalea un poco por la pérdida de sangre y por el dolor, que ahora sí, intentando levantarse, le sacude todo el cuerpo.

Como una muerto viviente, recoge rápido su calcetin y su zapato. Ve aquellos objetos allí.
¿Cojo la daga? El solo observarla le produce escalofríos. No volveré a tocar eso en mi vida.
¿La espada? Extrañamente la coje.

En ningún momento observa a Whitaker. Solo quiere salir de allí.

En una mano un zapato y un calcetín, en la otra usando la punta de la espada como bastón, avanza cojeando, a saltitos ridículos y patosos, gimiendo de dolor en cada paso. Continúa con las fuerzas que le quedan hacia el umbral de aquella nueva puerta.

No sabe si Whitaker viene por detrás. No le importa nada más que salir de aquel habitáculo.

Cruza el umbral. Se deja caer al suelo completamente dolorida, sobre todo mentalmente.

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06/06/2020, 02:33
Dr Cameron J Whitaker

Al acabar de hablar, Cameron no tuvo fuerzas sino para dejar que las cosas siguieran su camino. Estaba en manos de Dios, y de Andrea. No podía enlazar pensamientos con claridad. ¡tiene que salir, por lo menos ella tiene que hacerlo!. Intentó no pensar en nada, poner la mente en blanco. Se sorprendió de lo fácil que era. oh, así, si. Voy a quedarme aquí, tranquilo… Estaba tan cansado que seria fácil olvidarse de todo y, simplemente, irse. 

Mi corazón...

Podía sentir la respiración de Andrea. La oía como manipular cosas girar moverse y suspirar, pero apenas la escuchaba entre la vibración de la sala. El apoyaba la frente en el borde del altar, mirando abajo con los ojos cerrados y su brazo por encima hasta que 

TRATRATRRRRRR-BBBBR-RRMMMMMMMMM ¡BRA!

algo hizo clic… y de repente. Silencio. Levantó la cabeza desconcertado. Una línea de sangre marcada a través de la frente como un Sioux. Los ojos perdidos. Cuando consiguió enfocar, vio que la penumbra se extendía hacia delante. ¿El pasillo? LA LOSA Por un momento no pudo procesarlo ¿Andrea? Luchaba por salir de este espacio viscoso, entre la razón y el sueño y no habría sabido decir cuanto tiempo paso ahí, enmarañado, si no la hubiera visto pasar. Un animal herido, que se tambaleaba renqueante, apoyándose en el altar y las paredes. - Si, si…  Levántate. ¡Levan-TA-TE!. Recogió el lazo de cuero del suelo y todavía de rodillas lo pasó sobre su muñeca izquierda, tirando con todas sus fuerzas. - GGGMMmmmmmm… soltaba gemidos de dolor. - affff. Le da varias vueltas al lazo y mordiendo uno de los extremos consigue atarlo  - maffff para detener la hemorragia. El dolor lo estaba espabilado. Busca a Andrea en el pasillo ¡Venga! ¿Se cerrará? ¡¿se cerrará?! Intentó levantarse rápidamente, pero se le fue la cabeza y cayó más delante de rodillas. Arrastró hacia sí la bandolera, y gateo hasta alcanzar el bastón. Con su ayuda consiguió ponerse en pie. Lo usaba como muleta en su axila izquierda y así, poco consiguió recoger la antorcha. No prestó ninguna atención a la macabra escena a su alrededor, y no dejó escapar ni una mirada al altar. Le invadía una sensación de alivio, y de frustración. Gris. Como la de haber dado un bocado a una fruta suculenta y encontrar que no sabe a nada. A ceniza. Estaba vivo, pero no era el mismo. No voy a morir aquí. Malditas sabandijas. No podía pensar con claridad. Mientras avanzaba hacia el pasillo, y la negrura envolvía la cámara del sacrificio, los últimos destellos de luz se reflejaron en la paja de un sombrero panamá Jack a punto de recibir el avance de un fino charco de sangre.

Nada más salir de la sala se dejó caer sobre la pared junto a Andrea. Calvo, con las mangas remangadas, los brazos ensangrentados, la mano izquierda oculta tras una maraña de cuero. Sin gafas, y con una franja roja en la frente. ¿Estas bien? Hemos salido, hemos salido… hablaba mientras cerraba los ojos con alivio, abrir la piernas y preparaba la antorcha en el suelo. Va a doler. Es como marcar a los Bueyes. Echo mano a su bolsa buscando algo para morder Cuanto antes mejor cuando al volver a mirar a Andrea la vio mal, herida, indefensa...  ¿Cómo… como hemos salido? ¿estas BIEN? ¿Andrea?

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06/06/2020, 11:19
Andrea Marshall

Andrea continuaba soportando el dolor, ajena a todo lo que ocurría alrededor.
Solo cuando Whitaker estuvo muy cerca arrastrándose, se dio cuenta de su presencia.

El dolor la dominaba por completo, pero cuando vio la situación del arqueólogo, con aquel puño envuelto en telas, su dolor se hizo un poco más ameno.

¿Estas bien? Hemos salido, hemos salido…

Andrea se intentó arrastrar también hacia la pared, junto a él, en silencio.

¿Cómo… como hemos salido? ¿estas BIEN? ¿Andrea?

En cualquier otra situación hubiese alardeado, hasta la petulancia incluso, de su acto heróico, de su esfuerzo y su proeza. Pero no le daban las fuerzas.

Miró a Whitaker a los ojos, aguantando el dolor. Levantó su pie izquierdo un poco para que fuese visible su pie, aún con sangre, con solo el pulgar y el índice fijos, el corazón desaparecido, el anular agarrado por un pellejo de manera ridícula y el meñique se habría perdido por el camino saliendo de allí.

Doctor, Ya no me voy a levantar más con el pie izquierdo. Rápidamente empezó a reirse de su propia broma de forma incontrolada. Jajajajajaja, jajajjajaja. Mientras reía, las lágrimas brotaban de sus ojos. El dolor le atronaba la cabeza. Volvío a mirar su pie. La risa fue apagándose como la luz de una vela. Y se transformó en sollozos.

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06/06/2020, 11:47
Director

Notas de juego

Esta escena es "feelings" total.

Recordad que podéis rolear libremente hasta que marquéis un rumbo, yo estaré siempre vigilante.

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07/06/2020, 00:05
Dr Cameron J Whitaker

Andrea se acercó por el suelo. ¿Qué te ha pasado?  Whitaker no podía desviar la mirada del reguero de sangre en su cuello, hasta que de repente vio como levantaba su piececito blanco, ensangrentado. ¡Santa Maria Magdalena! ¡pobre criatura!. La imagen de un dedo colgando y la sangre coagulada era terrorífica. No parece sangrar mucho, gracias a Dios. Contuvo las ganas de mirar a otro lado. La adrenalina volvía a recordarle que estaba vivo, y no volvería a estar asustado. Se había acabado el tiempo para tonterías. Eran supervivientes, y habían atravesado el infierno para salir al otro lado. Frunció el ceño, y la miró a los ojos con ternura - Lo siento, dijo sinceramente. - hhhffff resopló, haciendo un gesto cargado de sorna con el brazo izquierdo. Sonrió con tristeza. Al ver como ella bajaba la cabeza, ahogando sus sollozos, pasó el brazo derecho por encima de sus hombros, dejándola desahogarse y llorar. Descargar todos los nervios. - Estás viva, le decía mientras lloraba. Estás viva. Has sido muy valiente. Ahora, despierto, el dolor de su brazo se le empezaba a hacer insoportable. Sentía como latía si mano entera zuuuuuummmm. Miraba a la espada corta, de pie y apoyada en la pared boca abajo. La antorcha en el suelo, justo debajo. El fuego lamia la mitad inferior de la hoja de acero. Tiene que hacerse.

- Venga, vamos a limpiar esas heridas. Intentaba parecer animado. Hay que cauterizarlas. Es.. grrrrrmmm… es muy fácil. zuuuuuummmm. En la granja de mis abuelos, yo siempre ayudaba a marcar las vacas. Esto es, bueno, es lo mismo.

Retiró su brazo izquierdo, y fue al ir a apartarle el pelo de la cara en un gesto cariñoso, cuando Whitaker se dio cuenta de que ella también tenía la mejilla izquierda, y parte del pelo ensangrentado. Un pegote de sangre seca. Paró en seco. Se imaginaba lo peor y no quiso preguntar y hacerle más daño. Simplemente recogió las manitas de Andrea con la suya, y colocándoselas en forma de cuenco le derramó agua de la botella que guardaba en su bandolera, frotándole los dedos para limpiarlas de sangre. - Ves, no pasa nada. No pasa nada. Todo esta bien. Nos has salvado.

Saco un pañuelo de tela blanco de su bolsillo derecho.Lo abrió agitándolo con la mano sana y lo dejo en su regazo. iniciales CJW, bordadas en una esquina. Deshizo todas las vueltas del cuero en su mano izquierda zuuuuuummmm menos la ultima, dejando un desbarajuste de sangre negra y coagulada al descubierto. Tragó saliva. - Quitar la sangre seca primero... Echó un buen corro de agua en la mano mutilada y tras frotar bien la palma y la base de los dedos, la sacudió bien. Dejó descansar ese desastre sobre su pañuelo limpio. Libre de sangre, se veía bien clara su forma antinatural, acabando en tres heridas granates. La envolvió con mimo  - a-así, ¿ves? 

Y cuando esté limpio. Con el metal ardiendo, se, se desinfectan y bueno, pues con eso... cicatrizan. Si. Se cicatrizan. ¿verdad? Esto... lo hacen en las películas... Tio Albo también les quemaba los cascos a la yeguas, perooo... eso no es lo mismo. Las uñas no cicatrizan... ¿o si?  Mira, lo hago yo primero, y luego te ayudo. 

Echó un trago al agua de la botella, y se paso la mano sana y mojada por la cara, transformando la franja roja de su frente en una media franja corrida hacia abajo, como un rímel descorrido. De rodillas y con el brazo izquierdo encogido, recogió la espada. zuuuuuummmm. El centro de la hoja empezaba a tener un color naranja. Está casi a punto. 5 minutos más.

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07/06/2020, 23:44
Andrea Marshall

Andrea habia permanecido en silencio intentando acallar sus sollozos mientras el doctor hacía visible su mutilación, sin embargo, o quizás por ese mismo motivo, no podía contener las lágrimas, que se seguían deslizando por su rostro en dos surcos marcados y diferenciados en sus mejillas sobre un fondo de polvo y sangre.

Mira, lo hago yo primero, y luego te ayudo.

Ella abrió los ojos completamente, entre asustada y sorprendida. No dijo nada. Solo miró la espada de reojo. Y permaneció en silencio

Notas de juego

Ya mismo decimos lo de la sala Máster!
Creo que Andrea y Whitaker necesitan un par de posteos más para maquillarse un poco y estar guapos y presentables para los bonitos acontecimientos que les esperan no? :D

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09/06/2020, 22:53
Dr Cameron J Whitaker

Whitaker miraba a Andrea con el mismo nerviosismo con el que su abuelo Abraham se enfrentaba a un televisor. Lloraba desconsolada. No sabía que hacer. Quería ayudarla, pero estaba fuera de su elemento. Impotente. Y aún así, la punta estaba roja. No ha hecho más que empezar. Apartó la antorcha, poniéndola en el suelo. De espaldas a Andrea, apoyó la rodilla en le parte superior de la espada, fría, apretándola contra el suelo En un par de movimientos desenvolvió la mano mutilada y deshizo el torniquete. Inspiró hondo. Con una media sonrisa en la boca se daba cuanta de lo que habían vivido Esto debería ser lo de menos. Presionó tres falanges amputadas contra el hierro al rojo, con fuerza. El dolor era brutal. Contuvo la respiración para no gritar, así que no pudo darse cuenta del olor a carne quemada. Él solo apretaba las muelas contra en un llavero de madera. 

- HHHHHHHMMM Un Mississippi MMMMmmmm Dos Mississippis  rrrrrrrrr Tres Mississippis   

- baafffff resopló, ya esta, fu, fu.... ffff… fuuuuuuuu. Hecho. Ves… intentaba no dar un puñetazo a la pared. Sobre todo, intentaba que el dolor que atravesaba su brazo hasta clavarse en el cerebro no reflejara en su cara cuando se volvió hacia Andrea – mejor, fu fu fu daba cortos soplidos para calmarse - Solucionado ¿Eh? Intentó sonreír mientras agitaba unas cuantas veces la mano con fuerza para sacudirse el dolor y dejar que la sangre circulara. Al poco el latido empezó a remitir. Recogió el pañuelo, y se lo ató sobre la mano izquierda, protegiendo sus dos dedos negros, cortos y el desaparecido meñique. Ahora estaba de pie, probándose, moviéndose de un lado a otro. Recogió en bastón probando con la mano derecha.  Se encontraba mejor. Cansado pero vivo. Dios te salve María Madre de Dios. Estamos aquí.  

Se acerco a Andrea y se agachó, de cuchillas frente a ella ¿estas mejor? ¡Estamos vivos! eh, le dijo dándole un toquecito cariñoso en el hombro, y sonriéndole. - Estos desgraciados no van a poder con nosotros. ¿qué tal esas heridas? ¿les echamos un vistazo?

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09/06/2020, 23:05
Director

Notas de juego

Estaría genial que vuestros personajes recibiesen atención médica antes de 24 horas, pero claro, igual eso es pedir demasiado en las circunstancias actuales XD

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09/06/2020, 23:11
Dr Cameron J Whitaker

Notas de juego

¡muy cierto! … y psicológica eh, y psicológica xDDDDD

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10/06/2020, 00:39
Andrea Marshall

Notas de juego

y una visita a Massimo Dutti, que Andrea tiene la ropa echa jirones, nunca mejor dicho.

PD: Mañana posteo

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10/06/2020, 22:38
Andrea Marshall

Andrea había observado TODOS los movimientos de Whitaker. Hasta el punto que casi se estremeció más que el propio arqueólogo cuando acercó su muñon a la hoja ardiente.

Incluso un pequeño grito se le escapó de su voz al tiempo que negaba con la cabeza.

Ella, con el pie doblado para no ver la herida, miraba en dirección a su pierna igualmente, con la esperanza que sus tres dedos apareciesen de nuevo por arte de magia creciendo en su pie.

Tras un rato doloroso, el doctor se dirigió a ella.

Estos desgraciados no van a poder con nosotros. ¿qué tal esas heridas? ¿les echamos un vistazo?

Andrea que aún negaba con la cabeza. Al escuchar las palabras agradables de Cameron, cambió rápida y dócil el sentido de sus movimientos de horizontal a vertical, asintiendo, mientras se mordía los labios y las lágrimas nuevamente escapaban de sus ojos.

Con esa postura tan sumisa, alzó un poco la planta del pie para que fuesen visibles sus heridas, mientras cerraba los ojos.

No era capaz de pronunciar ninguna palabra

Notas de juego

Andrea está a tu mercer, doctor. :D

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12/06/2020, 00:56
Dr Cameron J Whitaker

Al verla en ese estado, acurrucada, se le cayó el alma a los pies. Al bueno del doctor le llevó un segundo darse cuenta de que quería decir exactamente esa mirada, y que la pobre Andrea ofrecía el pie como diciendo, adelante. Le dio un vuelco el corazón. eeeeeeee vale, mierda… vale, vale… a ver. Lo intentaba, pero no acababa de sentirse cómodo quemando a... bueno, a nadie. Venga hombre ¡No seas pamplinas! Necesita ayuda. Asintió - Te ayudo joder ya veras, no va durar nada joderjoder… recogió la espada y la puso a su lado. Se sentó con las piernas cruzadas delante de Andrea con la idea de poner el pie en su regazo… eeee bueno, la pierna… tengo que… titubeo como un viandante cruzando una autopista. Para un lado, para el otro. ¡¿por donde se coge la pierna de una chica?! al final lo hizo por el tobillo malhumorado por su propia estupidez, con dos dedos… y acto seguido se encontró de bruces con el problema de donde ponerla… e… aquí… nonono, aquí no…. eeeee aquí…. estoooo… en la rodilla, si... Como había hecho antes, limpió la sangre reseca y la secó con un pañuelo. Vale. Mucho mejor la miró con una sonrisa y casi pidiendo perdón ¿verdad?. Estaba sudando y rígido como una plancha. Listo. Ahora lo que vamos a hacer  es quemar la herida para que se cierre ,y no se infecte glup. Con la mano izquierda agarraba como podía su planta del pie y con la derecha sostenía la espada por la parte fría de la hoja, de pie sobre el suelo. Es igual que con una vaca, pum, zas, fuera. Igual. Igual.

Muerde esto. Ayuda. Le pasó el llavero de madera en el que se leía Harvard Crimson, y cuando estaba lista, le hizo un gesto de ánimo con los ojos. Fue rápido - A la de tres ¿eh? y sin darle tiempo a responder. - Uno…….diosdiosdios…. dosytres. Presionó con fuerza la punta de la espada contra los tres últimos deditos del pie. En un acto reflejo encogió los hombros y trago con fuerza. Un Mississipi. Se podía distinguir el olor. Tuvo que apretar para fijar ese pie en su sitio. Dos missisipies. Sentía como se retorcía la pierna. Whitaker no estaba muy acostumbrado al contacto. Menos con chicas. Verse ahora así, quemando el pie de una como Andrea, mutilada y ensangrentaba… en fin, le superaba un poco. Algo gore, medio demoniaco, sacado de esas historias de súcubos que le gustaba contar a su abuelo Abraham. Sabe lo que le diría. “Lo ves joven, si, mmm, si, es el infierno que te viene a visitar. Una visión del castigo por pecar contra el noveno mandamiento chico”. Whitaker no estaba tan anclado en el pasado, pero la situación le rompía los esquemas. Sentimientos encontrados. Pudor y rechazo. Ganas de ayudar y también orgullo. Era fuerte. Una versión que no tiene miedo, que se juega la vida. Y por lo que parece, ahora también cura a chicas desvalidas. Tres Missisipies. Al acabar, retiró la espada a un lado, froto con ambas manos el pie y empezó a soplar y a agitar al pañuelo para aliviar el dolor. Ya está… Se acabó. Se acabó.

Con todo el movimiento, vio de perfil a Andrea y que le faltaba ¿una parte de la oreja izquierda? Santa María. No dijo nada. No parecía una mala herida, y solo la disgustaría recordarlo.

Notas de juego

Ea, ya estamos arregladicos :DD, en plan John Rambo. A ver como se animan estos dos a seguir ahora... ¿como lo ves? dijimos la sala 9 antes ¿no? en principio... se puede seguir el plan, al fin y al cabo... va saliendo ferpecto :P

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12/06/2020, 10:29
Director

Notas de juego

Seguís vivos, teniendo en cuenta el índice de mortalidad de esta partida, es claramente que todo va ferpecto jaja

Que Andrea confirme si vais a 9 y os narro.

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12/06/2020, 10:33
Andrea Marshall

Andrea cerró los ojos, intentó pensar en otra cosa, y a pesar de las dulces palabras del doctor y sus educadas formas, no podía evitar dar un pequeño salto ante cada toque sobre su cuerpo. Por más que quisiese engañarse, sabía qué iba a pasar más pronto que tarde.

Tantos años asistiendo a clases de yoga y habiendo invertido bastante tiempo también en sesiones de meditación, para que en el momento de la verdad, no sirvieran absolutamente de nada. Su corazón nuevamente se le iba a salir por la boca, y dadas las circunstancias vividas en los últimos momentos, tenía hasta miedo de que fuese a ser una sensación literal.

Seguía intentando abstraerse, volver a imaginar cualquier otro lugar y conseguía que las palabras de Whitaker vinieran a su mente como un ligero susurro, pero nuevamente ante cada nuevo roce en su piel, fuese donde fuese, su mente volvía a lanzarla en picado por un acantilado sin paracaídas y tenía que volver a comenzar el trance.

Ni siquiera el zumbido persistente de su oreja izquierda pudo ocultar a su oido derecho escuchar de una manera tan leve el sonido de la hoja de acero. Instintivamente se mordió el labio. Andrea era frágil, no estaba hecha para eso, pero quizás, solo quizás, era más fuerte de lo que pensaba.

O no... Ya que al primer contacto de la hoja con su pie, su cuerpo se agitó con tal fuerza que pensó que se había partido algún hueso. Abrió la boca como nunca antes y gritó, gritó con tal fuerza que ni sus cuerdas vocales lo asumieron y no se escuchó más que un gemido ligero mientras se seguía sacudiendo. Sus fuerzas se apagaron ante tanto dolor y sus sacudidas fueron disminiyendo como la sacudida de un pastel de gelatina. Un pastel de gelatina le vino a la mente. El cerebro es asombroso.

Andrea se quedó retorcida con los ojos cerrados.

Finalmente los abrió. Gracias. Fueron sus únicas palabras

Notas de juego

¿Sala 9? ¿¡Seguro que no te apetece volver a la SALA CATORCE!? xDDD

Por cierto Máster, esa sala ¿se ha cerrado? ¿o ha seguido abierta?

Rumbo a la Sala 9

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12/06/2020, 11:25
Director

Después de aquella pesadilla en la sala anterior, avanzasteis hasta la siguiente sala (9), la cual mostraba de manera majestuosa una gigantesca estatua de mujer gato con ropajes egipcios. Dicha figura tenía las manos extendidas y en ellas parecía albergar un medallón.

Un rápido vistazo hacía comprobar dos detalles:

Uno de ellos era que el medallón, al igual que el que encontrasteis anteriormente, parecía estar elaborado de cobre pero éste en cambio tenía grabado el símbolo de un sol con una firmeza exquisita.

El otro detalle es que a los pies de la estatua había un jeroglífico que podía ser fácilmente traducido.

Throne Of Egypt Regular

El Corazón de mi hermana

Además, comprobáis que la estatua está decorada con motivos que hacen referencia a la diosa Bastet

Bastet - Solid cast bronze statue of the cat goddess, Egypt 664 ...

Notas de juego

Sigue abierta 14 :D

 Coger el medallón de cobre 

Continuar hacia otro destino (indicar sala) 

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14/06/2020, 00:40
Andrea Marshall

El avance entre salas esta vez fue mucho más diferente a como lo había hecho hasta entonces.

Andrea se puso el calcetín con mucho dolor, pero desgraciadamente no consiguió ponerse su zapatilla, así que se la ató de forma extraña alrededor del cuello, dejándola que colgase en la parte más alta de su espalda.

Ella avanzó cojeando, como pudo. Apoyándose a ratos en su espada y en otros sobre Whitaker.

Un escalofrío le recorrió el cuerpo cuando pasaron el umbral de aquella sala. De reojo miró hacia atrás cuando cruzaron la línea, con el terror de volver a escuchar la sala cerrarse.

Miró aquellos elementos nuevos entre indiferencia y asco. Calló y esperó a que Cameron hiciese alguna de sus explicaciones. Ella se limitó a observar el resto de la sala, con la espada mucho más fuerte sujeta y agresividad en su rostro. Además con su otra mano, rozó la pistola para comprobar que seguía en su sitio.

 

Notas de juego

Te dejo los honores, como siempre Doc. Para algo eres la estrella :D

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16/06/2020, 01:46
Dr Cameron J Whitaker

Cameron comió media barrita de chocolate derretida que se encontró en la bandolera y ofreció la otra a Andrea. Parecía que recuperaba el aliento, pero se la veía ausente, en shock. Tras descansa, no pudieron seguir ignorando la situación. Al fin y al cabo, tenían un plan y solo podían avanzar. Whitaker recuperó sus gafas. Le faltaba el sombrero, pero no volvería a esa sala. Con el tirante que le quedaba, improvisó un cabestrillo. Avanzaba usando la mano buena para apoyarse en el bastón-hacha, y de vez en cuando en Andrea, que aunque renqueante, iluminaba el camino. En la penumbra, Whitaker se sentía perdido, desconcertado por lo que había pasado en esa sala. Corriendo por el filo de la navaja, libraba una batalla de la que era vagamente consciente ¿como canalizar todo esto?. La tentación de dejarse caer en la desesperación, el cansancio y la culpabilidad era fuerte. Eran su lugar común. Pero su orgullo se resistía. Le invitaba a abrazar el riesgo y confiar en si mismo; aceptar que aunque estaba viviendo el sueño de su padre, era posible que no viviera para contarlo. Al entrar en la cámara, cerró los ojos y trago saliva. No paso nada. Pero al descubrir la estatua gemela y el medallón, un torrente de emociones le recordó porque estaba aquí. Y se decantó. El riesgo, la belleza de la historia. Escribirla. Recordó que este complejo había permanecido oculto durante milenios. Que muchos, más fuertes y más sabios habían muerto buscándolo. Recordó que ellos dos, entre todas las extrañas posibilidades en este mundo, todavía estaban aquí. Y se enorgulleció. No tenían de que avergonzarse. No tenía que darles miedo lo que habían pasado. Ellos habían sobrevivido. Nada más. Y cada paso que daban entre estas paredes era historia viva.

- ¡ SIIII ! ¡ VAMOS ! gritaba casi con rabia. La tensión que le subía a la cabeza necesitaba una vía de escape. Gritar, llorar. Dio un golpe con el bastón en el suelo, para demostrar su euforia. No estaba acostumbrado a tal demostración de agresividad, así que no le salió lo contundente que se había imaginado; más bien un poco apocado. Pero sentir el peso del arma, el frío al tacto, resultaba revitalizante. Apretó el puño al avanzar hacia la estatua. Miraba de lado a Andrea, con una sonrisa ¡el otro! el otro medallón, pero parecía nerviosa - ¡SI!. Ya está. YA ESTA. Las dos guardianas del Sol. Dejó el bastón apoyado en la pared. Tras el sudor, la tierra, sus gafas dobladas y las costras de sangre seca en la barba, se veía felicidad - Justo lo que decíamos. La diosa de la guerra, Sejmet en su viaje al inframundo y la de la venganza, Bastet, la protectora de la sombras, acompaña al Sol en su victoria… dijo mientras levantaba el medallón del sol con el brazo alzándolo bien alto para verlo la luz de la antorcha… al amanecer.

En su excitación, en ningún momento se le pasó por la cabeza no recogerlo *…

Notas de juego

Ea, "On the road again..." : )

 nah, naaaaaah, de estrella nah :D. Whitaker habría palmado cien veces aquí sin ayuda... sin contar con lo pelmazo que se podría poner solo :P. Pero eso si, al final los dos más enclenques son los que se han tenido que arremangar a tope eh xDD...

* A Whitaker no se le pasará... peroooo a mi si que se me pasa si ; ). En el último medallón no andaban preguntando estas cosas :/. Oye, no hemos llegado hasta aquí para no cogerlo, amos venga... échanos tus peores maldiciones Seth :PP

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16/06/2020, 18:54
Director

Notas de juego

Menuda fama, como si Seth os arrojase una maldición cada vez que entráis en una sala o algo.

Cogéis el medallón con total normalidad, no sucede nada extraño, ni se activa ninguna trampa ¿era por fin una señal de buen augurio?

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20/06/2020, 10:26
Andrea Marshall

Mientras Whitaker hablaba lleno de emoción al ver aquel medallón, Andrea no quitaba ojo a ninguno de los rincones.

Extrañamente había crecido un instinto de supervivencia más fuerte en ella, ahora que observaba como el profesor tenía una mano menos. Con la antorcha intentaba alumbrar aquella estatua para que Cameron pudiese contemplarla, pero con su espada y su mirada apuntaba en todas las demas direcciones, temiendo que algo se abalanzara sobre ellos.

No era fuerte, pero si el rol de cabeza pensante estaba asignado sin ninguna duda al profesor, tras lo último acontecido, tenía que ser ella quien asumiera la valentía si querían salir con vida. No podía dejar todas las cargas sobre Whitaker y mucho menos tras el gran sacrificio que había hecho. De vez en cuando miraba la mano de Cameron con mucha tristeza.

Cuando el arqueólogo cogió aquel medallón con determinación, Andrea no pudo más que entrecerrar los ojos, como cuando entrenaba atletismo en los campos de rugby y escuchaba algún "¡cuidado!" sin saber de donde podía venir el susto o el golpe.

Para su sorpresa, ninguna puerta se cerró ni tampoco el profesor sufrió daño alguno.

El corazón de mi hermana... Fue lo primero que marmulló Andrea mientras observaba a Whitaker, sano y salvo, o todo lo sano y todo lo salvo que se pudiese considerar su situación actual. ¿Doctor, piensa que los dos medallones serán para colocarlos en aquella puerta? De repente, la visión de Yusuf calcinado le provocó una nueva sensación de angustia.

¿Cómo salimos de aquí? ¿Por dónde? Y Andrea orienta su antorcha en la posición opuesta a la que entraron

Notas de juego

¿Vemos alguna otra salida? Creo recordar que esta sala estaba cerrada desde fuera ¿no?

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20/06/2020, 11:46
Director

Notas de juego

Efectivamente. No existe salida de 9 salvo por el mismo lugar que habéis entrado. Aunque en el mapa haya una marca al oeste de la sala 9, ustedes veis pura y dura roca.