Partida Rol por web

Si me hubieras preguntado hace un año, te hubiera dicho que me conocia, pero claro tambien podria ser mentira. Entonces tenia las ideas muy claras, demasiado digo mirandote y luego al suelo Angel lo cambio todo, ver a Alex, impedir que le mataran. Creo que de lo unico que estoy segura es de que no se quien soy realmente sonrio y me rio Puede que lo haga, hablare con Alex cuando lleguemos y tener una conversacion, o una cita quien sabe. Despues tomare mi decision, Irina gracias eres como la hermana que nunca tuve

-Sabes... no es tan malo tener dudas. Cuando estás tan segura de sí misma sueles cometer errores pero no te detienes a pensarlos, con esto recapacitarás sobre lo que eres y quieres ser, tienes que ver el lado positivo- cuando añade lo último, tengo que admitir que me deja totalmente perpleja, al fin y al cabo la conozco desde hace realmente muy poco, me parece que lo único que echa en falta en realidad es algo de cariño y comprensión, pero tiene que darse cuenta ella misma.

-Venga, no ha sido para tanto... ¿salimos ya?- me levanto esperando su respuesta y le doy un pequeño abrazo antes de volver al avión propiamente dicho.

Asiento devolviendote el abrazo

Volvamos con el resto, ire a ver cuanto nos queda de viaje, ademas quiero comprobar algo. Creo que hay algo suelto abajo, no me gustaria que acabaramos en mitad del oceano, nunca se me dio bien nadar Me rio y te guiño un ojo abriendo la puerta y saliendo.

Elena sale del baño y despues Irina, una vuelve a lo que este haciendo y la otra se va a la cabina donde cierra la puerta, poco despues tambien va Viktor. Cinco minutos, diez y ninguno vuelve, no hay ruido alguno ni nada extraño

Tras mis palabras, parece que Graziella se ha guardado algunas que quizá tenga que decirme, y parecen bastante importantes. Yo no tengo la mas mínima intención de engañarla si no.. ¿qué demonios hago aquí? un alocado artista que busca reconstruir su vida fuera de todo este infierno que está apunto de comenzar. Espero no sentirme engañado yo por ello..

Me llevo la camisa sucia y pegada al sudor de varios días, tras ayudar a Graziella a tomar asiento no muy lejos de Viktor si es posible. Mostrando mi torso completamente desnudo, me asiento con las piernas cruzadas encima del asiento al lado de la toreadora..

-Si tienes que decirme algo importante, me gustaría que me lo dijeras ahora.. no quiero estropear nada por mi culpa...-
Justo en este momentos, observo como Viktor se levanta por el pasillo y se encierra en la cabina tras una de las chicas

-¿Va todo bien..?- lo deja en el aire tras ver como se encierran allá adentro..

Sonrio al mirarte y me abrazo las piernas mirandote a los ojos y luego miro a la ventana.

Blake, no puedo negar que me gustas, pero tambien me gusta alguien mas. Mi corazon esta dividido y...iba a hacer algo pero creo que al final no lo hare y me quedare en la ciudad. Creo que no puedo aferrarme al pasado y tengo que seguir adelante. Lo que significa que espero una cena romantica en cuanto lleguemos y un paseo los dos solos

MIro a la cabina El avion es de el querra saber si va todo bien y por que ella ha ido, no te preocupes. me quedo callada algo extrañada y miro a Alexander como queriendo decirle algo y luego a la puerta.

Salgo del cuarto de baño animadamente. Miro cómo Elena se mete en la cabina un poco dubitativa pero no quiero insistir, no tiene porque mentirme, ¿no? Bueno me temo que aún no la conozco demasiado pero tampoco puedo obligarla a que me cuente todo así que me siento junto a Arturus esta vez.

-Me parece que tú también tienes cosas interesantes que contar según me han dicho... ¿No les sacaste en mitad de un terremoto? Estaría bien saber cómo y por qué...- arqueo una ceja y me quedo mirándole inquisitivamente.
Cuando veo que Víktor se va hacia la cabina la sombra de la sospecha me embarga pero no lo suficiente para hacer algo.

Alexander sigue cómodamente tumbado y bastante relajado. Si no fuera vampiro se habría quedado dormido hace rato pero sin embargo no puede así que se limita a escuchar de fondo las diferentes conversaciones con una sonrisa ladeada.
Será mejor no interrumpir en ninguna, si se olvidan de él por un rato le harán un favor.

Cuando Víktor se levanta del asiento parece no pasar desapercibido para ninguno de los presentes pero tampoco e algo que les incumba.
La discusión con Anna, Elena la clon de la justiciar...umm... bien, quizá si le incumbe después de todo.
Se levanta del asiento con cierta desgana y se dirige a la cabina pretendiendo abrir la puerta. Si permanece cerrada no le costará demasiado hacer saltar el pestillo.

La verdad es que ya habia pasado el terremoto, estaba paseando y vi las ruinas, asi que me acerque para ver si habia alguien en peligro digo quitandole importancia al asunto y haciendo un gesto con la mano Lo peor fue hacer que el sol no os quemara, pero con un vehiculo cercano lo consegui, fue facil

La puerta de la cabina esta abierta, no se han preocupado por cerrarla. Dentro no estan, pero la trampilla que da abajo esta abierta y oyes voces, son los dos, estan hablando puedes escuchar

Claro, por eso estas aqui y no arriba con el. No eres nada de lo que intentas aparentar. Ademas dudo que llegue a comprenderte

Eso es cosa mia, soy lo que soy y...me da lo mismo si no llega a apreciarme, a quererme si el es feliz me dare por contenta. Ahora dejame en paz....

-¿Y se supone que me tengo que creer eso? Ten la decencia de no tomarnos por gilipollas por favor...- frunzo el ceño algo ofendida por lo que acaba de explicar. Absurdo se mire por donde se mire.
-Sabías que había alguien ahí, nadie se pone a pasear pro el desierto porque sí. ¿Y porque les sacaste a ellos y no a otros? Además sabías que eran vástagos... Se agradece la ayuda pero la información tampoco vendría mal, ya sabes- le sujeto entonces el antebrazo con firmeza y me aseguro de su temperatura corporal, porque por su color ya diría que no es de los nuestros aunque sé que hay excepciones.

-Claro Anna, luego hablamos-acurruco un poco más a Anna entre mis brazos mientras observo el movimiento de gente que entra y sale del lavabo. Irina, Alex, Elena, Viktor que se mete en la cabina tras Elena... mucho ajetreo privado, pero me da igual. Ya son mayorcitos para saber donde se meten y saben las consecuencias de sus actos.

Irina recrimina a Arturus la falta de credibilidad de su historia y no le falta razón, la verdad es que es algo esperpéntica-yo tampoco me creo esa historia, pero lo único que quiero es llegar a casa y olvidarme de este maldito calor y esta tierra llena de estatuas sangrantes y terremotos.-Etudio atentamente los movimientos de Irina ya que parece convencida de que Arturus trama algo extraño. ¿Le agarra del brazo esperando qué?

Alexander entorna los ojos empezando a cansarse un poco del tema, parecen críos de parvulario...
Desciende con cuidado por la trampilla intentando no hacer mucho ruido, con la intención de pasar desapercibido y simplemente echar una hojeada a lo que diablos están haciendo allí abajo.
No es un sitio muy normal para "reunirse" que digamos, y que Víktor se interese por Elena es casi igual de raro. Exceptuando su físico, claro.

TE miro y luego como me sujetas el brazo Deberias soltarme, no te gustaria verme enfadado. Suelo pasear por el desierto desde hace mucho tiempo, lo extraño es ver a un tigre paseando por alli sin ser su habitad. Camiones y vehiculos militares como si fuera su campo de practicas digo mientras el gesto se recrudece se que sois vastagos por que mi padre lo es, me tuvo antes de ser uno de los vuestros. Se que os afecta, le estuve cuidando hasta que se marcho.

Ella esta con cara de malos humos con esa marca recorriendola el rostro mientras esta cerca de uno de los trenes de aterrizaje, demasiado cerca tal vez y esta abierto. El la esta mirando mientras sus ojos comienzan a brillar con un tono rojizo y sonrie enigmaticamente. Un paso adelante, uno de ella hacia atras, la caida hacia el vacio, se gira ha oido algo y te mira a los ojos para acercarse al tren. Tal vez aun este viva, aunque notas en tus huesos que pronto amanecera.

-¿Y se supone que los raros somos nosotros? En fin, cuando el mundo se acabe no vengas a pedirme ayuda- le respondo levantándome del asiento y negando con la cabeza.
Su historia sigue sin tener demasiado sentido, es obvio que necesitó algo más para sacarlos de allí a todos a salvo pero si no quiere hablar no le obligaré. Se acaba de ganar mi desconfianza por mucho que les ayudara, podría se runa perfecta estrategia para clavárnosla por detrás a la mínima, no sería la primera vez que lo veo hacer.

Vuelvo hasta el asiento de John, sentándome sobre sus piernas. Creo que le sobresalto un poco porque debía estar medio en trance... O mejor dicho en las musarañas, no ha abierto la boca en todo el trayecto.
-Cuando lleguemos vamos a jugar en tu casa, ¿no?- le digo con una sonrisa traviesa antes de limitarme a apoyarme en él tranquilamente.

Salgo de mi ensimismacion mirandote y sonrio levemente mientras te rodeo con mi brazo por los hombros.

Claro que si, mi casa es tu casa, pero ya sabes que vivo en un antro lleno de suciedad. digo medio embroma y te beso en la mejilla Anda deja de hacer maldades y estate quieta, que no quiero que te separes de mi lado durante lo que queda de viaje, creo que me he acostumbrado a tenerte aqui junto a mi

-¿A qué se supone que estáis jugando? Está a punto de amanecer, volver al interior del avión o alguien acabará haciéndose daño- el ceño de Alexander queda fruncido, observando a ambos sin fiarse demasiado y algo malhumorado.
Está claro que ambos son unos inconscientes poniéndose a hablar aquí abajo, aunque más bien parece una especie de discusión pero eso es lo de menos.

-Si queréis charlar hacerlo civilizadamente arriba, vamos- espera a que empiecen a moverse antes de hacerlo él mismo.
Tener que hacer de niñera... lo que faltaba.

Viktor te mira y se marcha de la bodega dejandote alli mientras Comienza a subir Elena flotando con algunas quemaduras del sol y se sienta en un rincon mientras se cierra el puente de aterrizaje. Las sombras la rodean en actitud protectora mientras una figura se forma tras ella protegiendola tambien, sus ojos te recuerdan a los de tu hermano.

-Vamos Elena, no te quedes ahí o acabarás quedándote dormida...- la mira pacientemente, cada vez le recuerda más a Graziella aunque no imaginaba que acabaría resultando así. Quiere hacerse la duda y en realidad está tan indefensa cómo una palomita.
Observa esas frías sombras que tan poco le gustan y después parece formarse otra siniestra figura detrás, parece que la española cada vez tiene más problemas para dominarse y al final... Bien, es sabido cómo acabará si la cosa continúa así.

Por un momento le viene la imagen de su hermano Gerard a la cabeza, pero no, es imposible, niega con la cabeza y se marcha de allí algo precipitadamente hasta volver a su asiento de antes.