Partida Rol por web

Esta noche, te despiertas como siempre tras tu visita a Deline y tras tu conversacion con el. No sabes anda de Soren, ni de ninguno de los demas. Suena tu movil en Hurricane

Me despierto algo agitada y malhumorada por el hecho de que tarden tanto en llegarme noticias de las únicas y escasas pistas que tengo acerca de todo el asunto de las espadas. La paciencia no es en absoluto mi virtud y supongo que hoy deberé visitar varias mezquitas cómo me aconsejó Isabella.

El teléfono sigue sonando con cierta insistencia aguda. Hurricaine... Bueno, puede ser un paso adelante, al menos eso espero.
-Buenas noches, esperaba tu llamada- digo con tono cordial, disimulando la impaciencia mientras abro el armario para buscar algo de ropa que no siga maloliente.

Cita:

-Vaya... ¿tan urgente e importante? Está bien, te veré allí en una hora...- asiento más para mí misma que para él puesto que no me ve. Mi voz es decidida y segura de sí misma antes de colgar el teléfono y meterlo en uno de mis bolsillos.

Aún así obviamente esto ha sido muy sospechoso y después de todo no le conozco demasiado así que saco del altillo de mi armario mi única espada en buen estado, una réplica de katana. No es que sea de lo mejor del mercado pro para eso debería tener mucho más dinero del que dispongo, con esto me bastará para cortar algunas extremidades si a alguien se le va la mano.

Acabo de vestirme, desenvainando la espada para ocultarla en el interior de un portafolios que cuelgo en mi espalda. El único escondite viable para este tipo de armas, es lo malo... Aunque con un poco de suerte no me topo con ningún pesado o indeseable, supongo que de ser mortal podría "convencerle".
Me aseguro de que el móvil está bien cargado y después de dejar la comida preparada para Kesha salgo de casa con paso rápido. Creo que me sobrará tiempo.

Suena tu movil cuando llegas al lugar de reunion, ves a Hurricane un poco mas adelante.

Cita:

es Anderson

-Ahh... usted...- me limito a decir mientras aminoro un poco el paso antes de llegar hasta mi corpulento amigo -Lo cierto es que ahora tengo una especie de..."cita", o reunión. En fin, espero que se trate de algo importante pero me temo que no tengo demasiado tiempo... ¿Quiere que le llame en cuánto termine?- pregunto de la forma más educada que sé, lo cuál admito que no e sgran cosa, llegando junto al fortachón y observando su expresión al hacerlo.
Por teléfono parecía muy preocupado...

Hurricaine escucho la voz de Irina, hablando por celular... Se incorporo levantandose de la moto para ir a saludarla.

Espero a que terminase la llamada y le tendio la mano

- Gracias por haberse molestado en venir aqui señorita Kozlov... aun sin saber para que era...Pero para eso estamos aqui... le explicare todo...

Cuelgo el teléfono cuando me responden al otro lado y lo guardo adecudamente en uno de mis bolsillos, colgando bien el portafolios de mi espalda mientras me acerco a Hurricaine y le asiento, mirando a nuestro alrededor con suspicacia antes de volver a centrarme en él.

-Está bien, supongo que se tratará de algo importante...- comento con un suspiro antes de arrugar la nariz -No me trates de usted, no soy ta vieja- en realidad quizá sí, pero es un formalismo que no me agrada aplicado hacia mí. Le estrecho la mano enérgicamente y espero a que empiece su explicación a la expectativa.

La cainita caminaba con un aire de seguridad en si misma, casi le hacia acordar a el mismo. Era una noche despejada en el muelle, al parecer no habia absolutamente nadie, tal como lo esperaba.

Ambos se estrecharon la mano con un fuerte saludo.

Con una sonrisa en la cara Hurricane que no pudo evitar respondio ante el comentario tipico de una mujer. - Disculpame, es que como aun no nos conocemos tanto, preferia guardar algo de respeto a tu persona... Pero no tengo problema en tener una reacion un poco mas casual y no formal. A mi me vale perfectamente, me cuestan concentrarme en los formalismos

Te parece si caminamos por el muelle mientras te comento como es el asunto? Es un tema delicado, me temo... - Dijo mirando el estrellado cielo. La imagen de Elena se le iba a la mente.

-Está bien...- asiento y le miro inquisitivamente, arqueando una ceja visiblemente y sin disimular al notar que se evade en las musarañas enseguida.
Espero que no sea de nuevo uno de esos que se va pro las ramas diciendo la información a medias porque empiezo a cansarme de todos esos prepotentes estúpidos...

Empiezo a andar y estoy a punto de meterme las manos en los bolsillos pero finalmente no lo hago, las dejo libres por si debo reaccionar con velocidad de repente. Nunca se sabe, y menos últimamente.

Comenzaron a caminar por el muelle, puso su mano izquierda en el bolsillo del pantalon y la otra aun la tenia al aire...

Hurricane bajo la vista y pateo una lata que habia tirada en el suelo. - Bueno, hablare sin rodeos... ya que no soy de los que hacen politica... - Hizo una pausa y miro a Irina. Vio como un gesto de relajacion se le marcaba en la cara. Al parecer tenia otras cosas por hacer.

- Seguramente estas ocupada, ya que venias hablando por telefono, por lo que sere lo mas conciso posible. La cuestion es asi... Anoche me paso algo muy extraño... Estaba en la mansion cuando de repente algo rompio la ventana. Sali para ver que era y algo, porque no se que era realmente me amenazo... pero lo mas curioso es que tenia los ojos rojos cuansi estuvieran repletos de sangre... y con alguna especie de telequinesis comenzo a estrangularme y a la vez estaba inmobilizado... En un abrir y cerrar de ojos desaparecio. Pero lo mas curioso fue que me dijo que me aleje de Elena o la proxima moriria... No es que eso me preocupe, algun dia tendre que morir, pero quiero que si asi ha de ser mi destino, por lo menos quisiera hacerlo siguiendo lo que yo crea correcto. - Hizo una pausa y volvio a hablar

- Cuando todo esto termino hable con Elena sobre las espadas... y lo que me dijo me resulto muy curioso. Resulta que traiciono a todo su clan y al Sabbat, que por eso tuvo que cambiarse el rostro... Pero me llamo la atencion sobre que ella tenia una fuente que seguramente sabia algo al respecto. Por lo que fue en busca del principe para contactar a esta otra persona... Y todavia no ha habido ninguna señal de ella. Te llame porque si mal no recuerdo un hombre te llamo primogenita... por lo que algun contacto con el principe tendras...

-Bueno, podría haber sido algún Tremere psicópata, no es lo habitual pero...- la imagen de Paul me viene a la cabeza pero la sacudo quitándolo de inmediato de ella y continúo escuchándole, esforzándome por contener la risa.
Los hombres son así, un cuerpo bonito y "fácil" y caen cómo moscas.

-Si traicionó a todos los suyos imagínate lo que podría hacer con nosotros... Parece que ya que Alexander no le hacia caso ha decidido buscarse otros "hobbies"- callao durante unos segundos -Debes haberte confundido de conversación, ya hace un tiempo que no ostento ese cargo y en realidad el Príncipe y yo nos llevamos bastante mal. Puedo intentar ponerme en contacto con el Sheriff al que sí conozco, pero no te prometo nada, anda muy liado últimamente...- saco el móvil nuevamente de mi bolsillo comprobando que aún está casi al máximo de batería. Abro la tapa pero no marco ningún teléfono todavía.
-¿Te dijo algo útil sobre las espadas?, ¿o sobre quién podría tener alguna?- espero a que responda antes de decidirme a llamar o no.

Freno el paso y se puso delante de Irina, mirandola a los ojos.

- Hablo de que una tal Anna sabia todo sobre el asunto. Y que algo o alguien... no estoy seguro si sera esa tal Anna, la que esta buscando las espadas hace ya bastante tiempo... y me dijo tambien que esta segura de que ese individuo lograra encontrarlas... -

Muy pocas cosas iban teniendo sentido, pero siempre se giraba en unos pocos vastagos... Algo le olia mal, algo importante estaba por ocurrir, a su entender...

Me detengo cuando me irrumpe el paso, le miro de forma directa y brillante llena de confianza e incluso algo imponente. Está claro que su robusta constitución no me cohíbe lo más mínimo.
-Anna... a ella si la conozco, es una justiciar, de hecho es a la que le robó la cara así que si te la encuentras procura no confundirte aunque el cabello de Elena es más oscuro... -"y está todavía más loca" pienso para mis adentros con un pequeño carraspeo.
-A ella creo saber cómo encontrarla, y sí sabe bastante pero no parece demasiado dispuesta a compartir los datos las pocas veces que he coincidido con ella- me quedo pensativa entonces unos segundos.

-Alexander me dijo que todas las espadas estaban en España antes de empezar a dispersarse por aquí, tal vez sea ése tipo el que las quiere recuperar. Angel, Angelo o algo por el estilo...- asiento para mí misma, aunque sigo sin tene rmuy claro lo del atacante misterioso pero... Preferiría saber el nombre de algún otro portador.
-Llamaré al Sheriff, te devolveré la llamada si averiguo algo de ella y si no... Es que simplemente no he podido encontrarla- busco en la agenda y pulso el botón de llamada antes de empezar a andar.

El telefono suena un par de veces mientras esperas. Suena musica de fondo

Y la voz que esperabas.

¿SI? Irina estoy trabajando. Scott por amor de Cain termina de matarle o dejale irse. ¿Que ocurre? tenemos a alguien que trabaja para uno de los que se llevaron a Graziella y ademas una de las espadas

-¿¿Sí?? Esa es una estupenda noticia, buen trabajo...- entrecierro un poco uno de mis ojos, a pesar de que la música no está mal para mi gusto resulta bastante molesta para mantener una conversación telefónica.
-Necesito saber si has tenido noticias de Elena recientemente, ¡o de Soren! ¿recuerdas? ¿De quién es esa nueva espada?- pregunto alzando la voz, interesada en el tema aunque dudando que pueda darme toda la información... Bueno puedo conformarme con parte de ella, aún tengo que hacer un par de cosas que pueden darme pistas.

De Elena ninguna noticia, bueno una llamada perdida que me hizo para no se que, por que su movil esta comunicando, la llamare mas tarde digo mientras escuchas golpes de fondo y a alguien gritar de dolor mientras le gritan algo en otro idioma.

Estoy buscando a tu amigo y la verdad el tio se esconde, pero puede que tenga algo que me sea de utilidad. Te tendre informada voy a ver a uno de mis informantes. La espada es enorme, es para cogerla con dos manos.

-Ah... está bien, gracias por todo, ya me llamarás. Suerte con vuestros "interrogatorios"- sonrío aunque él no me vea -Quizá esta vez el portador seas tú- es lo último que dijo antes de colgar y cerrar el teléfono, girándome hacia Hurricaine.

-Tenía una llamada perdida de Elena pero cuando la intenta llamar comunica así que... Intentará buscar algo de información, te avisaré si lo consigue- ahora sí, meto las manos en mis bolsillos junto con el teléfono y espero por si quiere añadir algo más antes de ir a mi próximo destino.

Hurricane miraba fijamente a Irina, prestando atencion hasta el ultimo detalle. Solo un nombre no le venia a la mente. Este tal Alexander... quien seria, no lo sabia, pero lo iba a preguntar. Mientras miraba al cielo y a la luna. Siempre le habia atraido ese fenomeno redonde que brillaba en la oscuridad de la noche. Quien iba a pensar que terminaria viviendo el resto de la eternidad con ella como compañera y amiga.

Espero pacientemente a que termine de hablar por telefono y hablo.

- Bien, esperare por el... Irina quien este Alexander que hablas? O Soren? No tengo oidos ninguno de esos dos nombres... No dijo nada de las espadas? -