Partida Rol por web

-Vamos, tal vez consigamos alguna exclusiva para Lorena. Esta ciudad está definitivamente podrida.

Se lamentaba un poco haber venido a veranear a un sitio tan cutre como Marbella. Mira que Saint-Tropez se le había pasado por la cabeza. Pero no, se quedó en España. Y ahora estaba cazando tiburones y espiando a gordos corruptos en lugar de estar bebiendo Martinis en la piscina de algún hotel. 

Os acercáis a camión sigilosamente pues no sabéis si hay alguien por los alrededores, pero os podéis imaginar que sí al ver el coche aparcado cerca, nadie lo dejaría ahí y se iría andando para su casa....

Al llegar a donde estaba aparcado el camión podéis ver que es un camión muy raro... nunca habíais visto algo así, no era como los Pegaso o Barreiros que solían estar en el puerto, más bien parecía alguna especie de camión militar y por las inscripciones que podíais ver parecía ruso.... ¿Qué estaría haciendo un camión ruso inmenso en Marbella?

Gonzalo que para pescar tiburones era un desastre pero para encontrar cosas tenía una especie de sexto sentido encuentra una pequeña puerta por la que se puede acceder a la caja del camión. Al abrirla podéis ver interior, el camión está lleno de unos bidones amarillos con un símbolo que vosotros, biologos expertos, reconocéis al momento...

Otra cosa le llama la atención a Gonzalo y es que en los bidones viene escrito en unas etiquetas también un nombre que a Javier le resulta familiar... Timorov.

Una vez que nos metimos en el tren debemos seguir hasta el final. Y así fue...

Investigando como buenos curiosos que somos, nos amedrentamos en las cercanías del camión para revisar el contenido del mismo. Al ver los barriles mi ceño de frunció y comencé a sospesar ideas que no eran para nada buenas con aquello delante de mis ojos.- ¿Planeaban matar a todos aquí? ¿Piensan exterminar al tiburón blanco con esto?- muchas preguntas pero ninguna respuesta o tal vez no quería conocerla en realidad.

Mientras seguimos inspeccionando un poco más, figura un apellido. -Jummm Timorov... Me suena... ¿De donde?-  voy cuestionando en silencio, no quería hacer mucho ruido porque no sabía si regresarían en cualquier momento y dos tontos biólogos como nosotros tenemos las de perder si armas han de tomar.

-Oye, esto no me genera buena espina. ¿Qué piensas Javier?- le pregunto a mi amigo por lo bajo.

Al leer el nombre Javier empieza a atar cabos.

-Ese es el nombre del tipo que figuraba en los papeles que perdió la alcaldesa en el chiringuito. Hablaban de una finca y el don Jesús ese estaba involucrado. Me da que es algún mafioso ruso. Todo esto no tiene buena pinta. Como nos pillen aquí nos mandan a dormir con los peces.

Gustarrrrr camión????

-Mierda, tienes razón... -iba a seguir respondiendo cuando una masa grande de carne gorda y pelada se nos para enfrente hablando como un niño down. Abriendo mis ojos de par en par, vamos no soy Sylvester Stallone para hacerle frente pero al menos respondo a su comentario. 

-Que va, tuve uno y no me gustó su andar. Nos vemos, adiós. -  haciéndome el otro dirijo mis pasos en la dirección opuesta. Todo sea por evitar a la cosa esa.

Javier se oculta tras Gonzalo, nunca fue muy valiente.

-Sí, es un camión muy bonito. Aunque yo soy más de ir en taxi a todas partes. Bueno, nos vemos...

- Serrrrr Rrrrrrussoo!!  RRrrusos haserrr mejorrres camiones del mundo.... no mierrrrda esa de Pegasssso!!

- Mirrarrrrrr trrrransmisssion.... Seisss ejesss, DosssMil Caballosss... Este camión poderrr trransporrrtar missil nuclear!!! he,he,he...

De un simple paso el gigante ruso os cierra el paso por lo que tenéis complicada la escapatoria.... se acerca a vosotros.

- ¿Soiss pescadorres?

Podéis percibir algo en el ambiente, como un tufo fuerte a alcohol...

El grandote cada vez se nos acercaba más y más, lo peor de todo es que no teníamos escapatoria con semejante masa de músculos. - Pues si, somos pobres hombre. La pesca es dura a veces, durante semanas arriba de un barco sin ver a una mujer y oliendo a pescado es detestable. Que suerte tienes de tener este fierrazo. ¿Es tuyo? - pregunto haciéndome el idiota un buen rato, la idea era parecer ignorantes y brutos. 

El enorme ruso da bastante miedo y Javier sigue protegido tras Gonzalo (por si acaso vuelan las bofetadas). Se limita a asentir asustado cuando el soviético da rienda suelta a las especificaciones del camión. 

-Pues si que es grande este camión ¿Y ha traído en este maravilloso portento un auténtico misil nuclear? -pregunta con inocencia fingida.

Noooo, Misil Nuclearrr no poderr salirrr de Russia. Eso serr tonterrría... Nosotrrros traerrr porrrrquería de centrrral nuclearrrr parrra tirar en verrrrtederro. Su Alcalde alquilarrr finca... jojojo.... mejorrr no cazarrr ningún conejo en varrios kilómetrros...

El ámplio ruso reía como un crio ante la ocurrencia... jojo, cazarr conejos nuclearres.... se dió la vuelta y marchó riendo el solo.

Después de que el ruso tarado se haya ido, Javier agarra a Gonzalo de las solapas visiblemente alterado.

-¡Eso era lo que ponían los papeles que encontramos! ¡El lugar donde el desgraciado de don Jesús va a tirar todos esos residuos!

Asombrado por todo aquello y aliviado porque el grandote no se nos vino encima, escucho atentamente a mi amigo. - Tenemos que hacer algo y urgente, no podemos permitir que contaminen todo y mueran más personas. ¡Vamos javier! Tenemos que ser alguna vez los héroes de todo esto y no unas insignificantes personas. - respondo denotando entusiasmo, por fin comenzaba a sentirme útil.

-¿Y qué quieres que hagamos? No podemos ir a la policía y la prueba se la di a Lorena. Lo que tenemos que hacer es pirarnos de aquí antes de que nos maten y largarnos a pillar a ese jodido tiburón.

-Está bien. -  sin muchos preámbulos y una escueta respuesta salimos de aquel lugar buscando la forma de llamar poco o casi nada la atención del grandote. 

Una vez que la distancia fue prudencial y segura, retomo la conversación. -Busquemos a Lorena y veremos que hacer con esto. Tiempo tenemos antes de que zarpemos con el Chanquete I.-  no iba a perderme la cacería del tiburón blanco pero tampoco podía dejar pasar todo aquello, más aún si mi ex tenía información. 

-Lorena se ha ido con la alcaldesa y Ana en su enorme e inútil yate para hacer exactamente lo mismo que nosotros ¿No recuerdas en el puerto? No tenemos medio de avisarlas. Debemos equipar tu barco y zarpar lo antes posible. Tal vez necesiten nuestra ayuda.

-Está bien, tienes razón. Vamos por el barco, ya sé que la onda detective no me queda. -bromeo mientras regresamos al puerto para buscar a Antonio y ver si consiguió lo que necesitaba.