Partida Rol por web

El hombre hace el intercambio con la elfa y mira a Rain de reojo, prefiere no hacerle caso y muestra mas interés en lo que le pide el bárbaro, se notaba que estaba un poco molesto, porque ya no sonreía, se acerca a un estante y señala varias armas

- Estas son las que dispongo de dos manos, si quiere puedo enseñarle las de asta

El hombre se acerca a una zona con unos armarios de madera que abre y dice:

- Me temo que solo puedo hacerle entrega de estas armaduras todas con un coste bastante elevado

Levantó una mano y negó con la cabeza.

-Esas armaduras no están hechas para alguien como yo- no porque fuesen pesadas sino también porque se le antojaban aparatosas y sospechosamente caras... seguramente Zaira tenía culpa de eso y no podía arreglarse tan fácilmente.-por mi parte ya he terminado.

Retrocedió hasta la entrada de la tienda, esquivando a un individuo. Un individuo que le sonaba del otro grupo o, mejor dicho, del resto. Menuda suerte la mía. ¿Todos los interesantes están aquí? Esto es casi mejor que una fiesta de la universidad.

-Vaya, ¿te vienes con nosotros?- sonrió a Garret olvidando su rol como elfa altiva y repelente- escoge tranquilamente, yo espero fuera, mientras... para no atosigar a nuestro proveedor de armas.- Miró sobre su hombro revisando que todos estuviesen relativamente centrados en lo que querían conseguir y rezó para que tuviesen claro cuáles eran sus posibilidades según la ficha que se habían hecho.

Rain al ver que el armero no hacia descuentos dejo las 30 monedas y tomó su Dadao y salió de la tienda con Yenna no sin saludar al nuevo con dos golpes en la espalda.

En la calle miro alrededor, todo es tan… real? Quien diría que es un mundo fantástico? La gente hace su vida cotidiana como antaño, se respira paz…

Creo que no estaría de mas ir a la biblioteca o algo similar, le digo a la elfa cuando estamos en la calle,le hablo con naturalidad pero sin levantar mucho la voz, hay tiempo para hidromiel y grandes jarras de cerveza y jabalí asado, pero antes de eso estaría bien como mínimo saber sobre nosotros mismos, tia…. Soy un vampiro y no se de mi, no se si perderé la cabeza en cuanto me suenen las tripas, no me gustaría haceros daño a ninguno.

Se podía notar a leguas la preocupación creciente del vampiro, quizás tuvieras cientos de años en la ficha pero no dejaba de ser un adolescentes con mil inseguridades y un gran corazón. 

Vio el cambio de humor en el anciano y miró de reojo a Zaira con desdén. Tiene que aprender cuándo zorrear y cuándo no, o nos dará problemas...

Tomó el arco sencillo en sus manos. 40 monedas no estaba mal, pero... ¿Y las flechas?
-Disculpe...-hizo una reverencia-¿Cuánto se costean las flechas?- esperó a solucionar sus quehaceres con el dependiente antes de incorporarse al resto.

La mirada de Garrett aún estaba un poco perdida, pero al menos parecía bastante más calmado que cuando llegó al mundo de Gaia. Antes de decidirse a entrar a la armeria salen un hombre y una elfa los cuales saludan al hombre, el cual en su ensimismamiento simplemente les responde con un pequeño asentimiento de cabeza para hacerles constar que ha notado su presencia. Finalmente entra al establecimiento y empieza a observar el género del mercader de armas, aunque realmente no sabe que buscar puesto que en su vida ha tenido que empuñar un arma, pero se decantará por las espadas y escudos, siguiendo un poco el concepto del personaje que ahora encarna... de manera real.

Garrett observa todas las armas del establecimiento con relativo detenimiento y tras tomar una decisión mentalmente se acerca al mercader, al cual saluda con una pequeña reverencia de cabeza - Saludos. He visto sus armas pero he de preguntarle por los escudos ¿Tiene alguno? - pregunta con tono interesado mientras echa otra mirada al establecimiento, por si se le ha pasado alguna otra arma.

El hombre deja varios escudos:

Puse una cara de asco hacia el anciano y salí de la tienda sin mediar palabra alguna ni reparar en esperar a los demás.

Mas tarde salieron Rain y Yenna.

Cuando estos dos salen, se encuentran me encuentran refunfuñando apoyada con la espalda y un pie en la pared y de brazos cruzados.

-Maldito viejo amargado, tsk, que le den, ya encontraré algo por en otro lugar...

Al verlos salir me quedé u momento respirando hondo para relajarme y luego me dirigí a Rain.

Bueno, no creo que sea una mala idea informarnos un poco, no se si debería saber algo más de mi aparte de lo que ya se.-Me incorporé-Además, he pensado que en una ciudad como esta, dentro de un juego, tal vez cuando caiga la noche haya lugares más interesantes que visitar y conseguir alguna arma. O tal vez tomarla prestada.-Les guiñé un ojo para que me entendiesen.- Espero que no tarden mucho más.

Esperé a que pasara algún tipo con pinta de intelectual, o al menos que pareciese algo culto y me dirigí hacia el tomando la iniciativa a pesar de preguntarle a Rain.-¿Vas tu o voy yo?..-Pero llegué hasta este y le di un par de toques en el hombro y puse una cara inocente y de estar algo perdida.-Eh...hola, perdone, mira, es que estamos buscando algún lugar donde encontrar unos libros algo fuera de lo común sobre un poco de historia de Gaia y bueno, sobre las razas que han habitado en esta y las que aun lo hacen, ya sabes, estoy algo perdida, no somos de por aquí y estamos tratando de hacer unos estudios...¿sabrías...donde podríamos ir?

Siguió con la mirada a Zaira y por un instante se le ocurrió que, si todo era tan oriental como parecía, lo que había en la biblioteca (si la había) estaría en el mismo idioma.

Se cruzó de brazos reservándose ese pensamiento para ella mientras pensaba si había alguna habilidad idiomática en la tabla de skills de la ficha. Quizá tuviesen suerte después de todo y usaden todos un lenguaje común.

Miro como Zaida encamina sus pasos a un oriental, cierro los ojos, bajo la cabeza y me froto la cara,reza por que no nos maten,esta es capaz de enseñar sus tetas.....

Suspiro y miro a Yenna a los ojos y me muerdo nervioso el labio inferior.

Que pasará cuando sea de noche? quiero decir... yo,bueno ya sabes...

Arqueó una ceja y miró a los ojos al vampiro.

-Tendrás que morder a alguien-pensó automáticamente  en Entrevista con el Vampiro, cuando Lestat se alimentaba de "la sobreteta" de una mujer y el pensamiento de pillar a Rain con Zaira (cuyo volumen mamario permitía tal recreación) casi le resultó divertido-quizá no... eres un...-suspiró y se acercó hasta Rain, apoyando una mano en su pecho y los labios a su oido, pasando la otra mano por el cuello de él como si pretendiese seducirle. Lo que dijo se perdió en la intimidad de su cercanía, solo perceptible poe el propio Rain

-Eres un vampiro y estás bajo la luz, quizá lo de morder no entre en tu dieta...-por lo que ella sabía el único vampiro que podía hacer eso era el caraplancha de Corpúsculo... o Blade, como mucho-si tienes hambre avísame, buscaremos algo que no llame la atención... Zaira, por ejemplo-se separó de él y buscó a la demonio peliblanca y sus avances y retrocesos en el trillado cliché de tío llevando una golfa sin tener ni idea de cómo hacer que sea bonito de ver.

Negó con la cabeza ante el gesto de Zaira. Siguió palpando los arcos que le había expuesto, pero el arco simple le gustaba. Era más manipulable que el largo, y más barato. Cogió el arco y la daga arrojadiza, considerando que sería bueno tener una a mano. Y puestos a elegir, mejor que pudiese ser arrojada si la situación lo requería.

Depositó las monedas con cuidado hacia el señor e hizo una breve reverencia.
-Muchas gracias-se despidió muy educadamente y se giró hacia el resto, colocándose a la espalda el arco y oculando la daga debajo su armadura-Terminé también-sonrió a Yenna. Al girarse se encontró con el otro chico, y se tomó el segundo que no se había tomado antes para mirarlo. ¿Estaría escondido detrás de La Montaña?

Vale, necesito celebrar ésto. Me voy de party en un juego de rol y mi grupo es el que tiene el porcentaje más alto de chicos guapos. Sonrió de lado y miró a Yenna. Y ella, claro está. Se hizo a un lado para dejar pasar a Garret y le puso una mano en el hombro a él y otra en el brazo a Morduk-Os espero fuera con el resto, chicos-sonrió divertida con un guiño de ojo y salió afuera con Rain y Yenna. Allí también estaba Zaira, enfurruñada. Hacer morritos con ésos labios tenía que ser pecado en algún lugar del mundo. Se paró junto al grupo y le dio un leve codazo a Rain.

-Colmillitos, baja el tono de voz o aparecerá Blade para hacerse de tí un collar-le sonrió y se acomodó, esperando de pie-Yo quiero beber. Y encontrar la quest de los cojones-ésa parte era menos divertida que beber, claro.