Partida Rol por web

- Recuerdo haber leído algo sobre ese hombre. - Afirmó José. - Antoni Gaudí es un claro representante de la corriente modernista. Sus obras son extrañas y atrevidas (Casa Mita, Parque y Colonia Güell, Palacio Episcopal de Astorga entre otras). Sus obras bueno... provocan tanto admiración, como burla y rechazo. Está intentando terminar ese grandioso templo, la Sagrada Familia.

-Si, me suena.... parece que el templo que está construyendo genera bastante revuelo por eso de salirse de la ortodoxia... Yo no me meto en esas cosas pero -agitó los panfletos sobversivos- tener esto en su poder no es bueno; puede que tenga que ver con el caso, y que esté relacionado con las obras... en todo caso, otro fleco.

Miró y remiró la hoja con las letras....

-¿A quien se le ocurre tomar notas incompletas?.... tal vez sea un código para recordar algo sin que, quien lo lea, sepa de que trata... ¿Confesor Inmoral Biblioteca? ... no se... tal vez los compañeros puedan tener alguna idea brillante... Si el portero no nos dice nada más, deberíamos ir con el resto y poner los datos en común...

La visión de los recortes de periódicos no dejaba lugar a dudas. Aquellos hechos no habían pasado desapercibidos para el abogado.

-Mire, señorita Novoa. El señor Aureli se había fijado en esas muertes. De alguna manera, parecía como si sospechara algo, ¿no?

Antonio miró a su alrededor, algo nervioso.´Nunca había sido un hombre de iniciativa y no iba a empezar ahora.

-¿Qué hacemos ahora? 

No le gustaba estar allí. El lugar en el que se había suicidado,con la ventana tan cerca y las noticias de esas muertes... allí mismo, entre los libros. Era un lugar que transmitía malas sensaciones. 

- Ciertamente podrían ser muchas cosas... - Dijo entonces el inspector. - A mi no se me ocurre nada más... - Chasqueó la lengua fastidiado. - Tendremos que conformarnos con ésto.

Marro se encaminó hacia el vehículo. Iba farfullando algo por lo bajo. Se le notaba nervioso y preocupado. No era para menos con la que habían liado en la redacción. No tenía ni la más remota idea de que le iba a decir al comisario, pero lo que estaba claro era que algo tenían que decirle. Si los del diario ya la habían tomado con ellos, ahora que casi les queman la redacción, se iban a cebar de lo lindo.

- ¡Joder Zapata! - Exclamó de pronto, justo al llegar al coche y abrir la puerta. - ¡La que has liado, macho! - No estaba enfadado con él, simplemente nervioso y preocupado, pero no pudo contenerse más y explotó. - Bueno, bueno, bueno... ya veremos que le decimos al jefe...

Se introdujo en el coche y se dispuso a partir camino de regreso a la comisaria.

-Yo le evitaría... y echaría la culpa al periódico, que dejó un elemento inflamable encenido encima de una mesa... me parece una imprudencia intolerable por parte del responsable de esa redacción...

Se calló... estaba pensando....

-Leches.... me suenan esos trozos de palabra... la primera fila, la que ponía algo como...  No me sale!!...fíjate, que me suena de cuando estaba de catequesis, de crío... el título de un libro, que el cura se puso nervioso cuando lo ví, pero que me lo quitó de las manos sin que pudiese ni abrirlo... ¿como era? ¿como era?... cachis los mengues, que no me acuerdo!!!

-...¿Confesión inmortal? ¿Conexión inmoral?   Que rabia, lo tengo en la punta de la lengua... Quizá... en la biblioteca, pero... ¿en cual? ¿La del Colegio de Abogados? ¿alguna de temas eclesiásticos?...

Pensaba en voz alta... y sentía que en cualquier momento se podría acordar del dichoso título...

- No te preocupes, le diremos eso al comisario. - Respondió el inspector. - Que los periodistas habían dejado un candil en un sitio peligroso. Fue un accidente. ¡Si, un jodido accidente!

Tras un silencio, llegó una nueva reflexión de Zapata. Se trataba de un hombre inteligente. Torpe, pero inteligente. Parecía que razonaba bien. Le gustaba como compañero.

- Podría ser cualquier cosa, Zapata... - Le dijo en referencia al juego de palabras. - Lo que si es cierto es que parece que la última palabra es biblioteca. - Hizo una pequeña pausa. - Yo también había pensado en confesión. Tiene que ver con la iglesia esa palabra. Puede que como dices sea el título de un libro o algo y que esté en la biblioteca. ¿Debe haber alguna cerca de la construcción de Gaudí, o en el Ensanche? - Hizo memoria.

-Está claro que las había investigado, sí -comentó Teresa, poniéndose en pie y guardando los periódicos-. Usted que sabe más que yo, ¿puedo llevarme los periódicos a comisaría? ¿Hay que hacer algún informe al respecto? No tengo mucha idea del procedimiento policial, es la primera vez que estoy en... la escena de un crimen.

Se paseó por el despacho revisando otra vez la mesa, la estantería y luego se acercó al mapa.

-Tenemos que ver si los puntos marcados en el mapa se corresponde con las muertes de estas personas. Si el señor Aureli estuvo investigando sobre esto, debería tener también algún cuaderno donde anotar sus pesquisas. Sería lo lógico. De algún modo, si seguía de cerca las muertes, tuvo que encontrar una relación. Tenemos que relacionarlo nosotros también.

Solo recuerdas la Biblioteca de la Universidad de Barcelona. No está muy lejos del hospital forense.

En ese momento, mirando el mapa, caéis en que las muertes están situadas en el mapa, las tres acaecidas antes de la del pobre Aureli, todos muy próximos unos de otros. Además, hay algo que te llama la atención.... aunque no sabes exactamente qué.

Mientras tanto, Antonio se pone a revisar de nuevo el despacho, en busca de una posible libreta o cualquier cosa en la que pudiera anotar algo sobre aquel caso.

Por desgracia tras un rato, llegáis a la conclusión de que allí no hay nada más.

Aquí no hay nada. O bien si lo había, alguien se lo llevó, pero hasta ahora no hemos encontrado pruebas de que haya una persona implicada en estas muertes -comentó Antonio, mirando de nuevo el mapa -. Lo que parece evidente es que estaba al tanto de lo sucedido, pero eso no significa nada. Pudo llamarle la atención y simplemente guardar los recortes.

Por experiencia sabía que las casualidades pocas veces existían en casos de asesinatos, pero aquel era demasiado extraño como para poder asegurarlo.

Yo creo que aquí no tenemos nada más qué hacer.

- Sólo recuerdo ahora mismo la biblioteca de la Universidad de Barcelona... - Le dijo a Zapata. - Estoy casi seguro de que no hay ninguna en el Ensanche. La de la universidad está cerca del Anatómico. - Se rascó la cabeza. - Aunque... ir allí a buscar... ¿Qué? 

Como si tuviese un resorte en el culo se levantó de su asiento quedándose rígido como una estaca y se llevó la mano a la sien en saludo marcial.

-¡Buenas noches Señor Comisario!-Chilló mirando hacia la pared, demostrando así subordinación absoluta.

-Solo estaba avanzando un poco de papeleo, señor-dijo manteniéndose en posición de "firmes"

El Comisario no parecía estar de buen humor. Cerró la puerta con violencia y se acercó al joven policía.

-¡Déjese de historias, Julián! ¡No está el horno para bollos!

Se detuvo un momento y miró a su alrededor, frustrado.

-Supongo que no hay noticias de Zapata y el resto del turno de noche, ¿verdad? Está bien. Se ve que necesitan que alguien les recuerde lo que está en juego. Acompáñeme.

Sin perder tiempo, se giró para salir de la comisaría.

-Les dije que no podían perder tiempo. Se están sucediendo una serie de muertes sin sentido y esta noche mismo se ha producido otra. Va a usted a echarles una mano. Iremos al hospital forense a ver este último cadáver y así sabrá en que se va a meter. 

Pensó unos momentos...

-Si el redactor tenía anotado el nombre de un libro, es que debía tener algo de interés... Para no dejar cabos sueltos... habría que ir a esa biblioteca, y consultar el registro de préstamos de libros, además de preguntar al biblotecario por el título del libro que pudiera contener esas palabras, con la pista añadida de que recuerdo que era de algún tema relacionado con la religión...

-... Y... también habría que mirar si ese libro está entre los del abogado Aureli...., e incluso, si estaba haciendo un reportaje sobre la Sagrada Familia, en el Obispado...

... Muchas cosas para revisar, y todo por unas notas incompletas..., pero no sabías si una pista era buena hasta que la seguías y veías que llegaba a algún sitio.

Por eso le gustaba ser un sabueso

-Podemos reunirnos con el resto del grupo y dividir la búsqueda, o ver que han encontrado ellos, por si hay mejores pistas para seguir

- Bueno ​​​​​​creo que el mapa es la clave, podemos ver las calles donde se produjeron las muertes en el mapa ver si están cerca o lejos, si forman algún símbolo cuadrado, rectángulo, redondel o rombo. Si hay una trayectoria o línea recta entre las calles, podemos ver más cosas...

Si cerca de esos lugares hay un cementerio o una iglesia con salón para los difuntos... ¿Acaso no le parece raro que estuviera todo cerrado? Si nadie pudo entrar y el hombre cuando murió reflejaba esa cara de horror, quizás sea un fantasma el que esté acechando a estas personas. 

Veamos si hay algún edificio o lugar emblemático por los alrededores de esas calles, o si dan a una urbanización o barriada en particular, debemos de ver si todo esto está relacionado con algún sitio en particular.

Agarrando con prisas su sombrero y su casaca se encaminó detrás del comisario al grito de -¡Si, señor comisario!

En la comisaría se rumoreaba que algo raro estba ocurriendo desde hacía un tiempo y en honor a la verdad le daba rabia que le mantuviesen fuera del caspo, por lo que en su rostro no pudo evitar que, pese a las circunstancias se dibujase una sonrisa de satisfacción.