Partida Rol por web

Akania se notaba distraída, su mente estaba enfocada en un problema que tenía, pero antes que nada necesitaba energía para trabajar en buscar una solución.

— Hola, hermanos, ¿cómo se encuentran hoy?

Dijo como saludo a los demás dioses que estaban en la niebla, luego empezó a flotar y fusionarse con la misma niebla que los rodeaba.

Mientras relajaba su cuerpo, las ideas en su mente empezaron a aclararse y tomo su decisión, pero tendría que esperar pues aún no poseía el poder necesario para realizar los pasos para solucionar los conflictos que aquejaban sus pensamientos.

Mientras Hekima iba a compartir conocimiento con Mond, en la niebla se sintió una perturbación, poco a poco la silueta de Akania fue tomando forma, al observarla con atención el dios de orejas de gato pudo ver que la diosa de cabellos blancos parecía desanimada, contestando a su pregunta dijo, — yo me encuentro bien, ¿pero qué te pasa a ti?, te ves desanimada.

Mientras espera la respuesta de su hermana, Mond concentra su poder hacia su territorio, tratando de visualizar su nueva creación.

Tras compartir el conocimiento con Mond, una conexión surge entre nosotros, un vínculo. Hemos compartido saber, lo más íntimo que puedan tener dos seres. Tras ese momento, veo llegar a Akania.

- Oh, Akania, cuanto tiempo sin vernos. Espero que tus criaturas estén mejor que la última vez que les vi, parecían... idos.

La voz de Akania se escuchó entre la niebla en respuesta a sus hermanos, empezó a materializarse mientras respondía.

— ¿Eh? ¿cómo estoy?, ¿mis criaturas?, bueno, si mis criaturas están portándose un poco mejor, pero apenas, y eso es lo que me tiene un poco dispersa, pero creo que ya sé cómo solucionar ese problema, aun así tengo demasiado trabajo para arreglarlo, los veré después, ju jum.

Tan rápido como había aparecido empezó a desvanecerse nuevamente.

— Bueno, hermanos, si me disculpan, hay un pequeño caos que debo intentar enderezar.

Al ver a Hekima marcharse me giro hacia Mond.

- Mond, ¿quieres venir a ver a mi gente? No hace falta te conviertas en invisible ni nada, cuanto más conozcan sobre el mundo, mejor. Además, debería aprovechar estos nuevos conocimientos que me has otorgado. Si quieres, sígueme.

Al acabar la frase, una parte de mi se despega y empieza a andar hacia la niebla, primero despegándose de mi cuerpo como una réplica exacta de mi, y finalmente fundiéndose en la niebla, si así lo quiere Mond, de su mano para guiarle a Terra Incógnita.

Mond, estaba visualizando como se vería su territorio con sus nuevos árboles, de tamaño mediano, con corteza café, de troncos gruesos y copas redondas de verde vivo, brindando jugosas manzanas rojas.

Mientras él estaba perdido en sus pensamientos, Akania, se desvaneció nuevamente, una visita muy rápida para su gusto, el dios de cabellos blancos suspiro mientras pensaba, al menos pude escuchar su respuesta. Entonces voltea a ver a Hekima y con una sonrisa en su rostro y ojos ilusionados dijo, -¡en serio!, eso sería genial, claro, voy contigo, mientras el dios orejas de gato toma la mano de su hermana para ir con ella a su territorio.

- ¿HAY ALGUIEN AQUÍ? ¿GORGUN? ¿ARAO? 

Busco entre la niebla, buscando la presencia de estos antiguos seres, o, en caso de no encontrarles, la presencia de algún otro Dios.

Por algún motivo Hekima estaba alterada y sus pensamientos aullaban en la Niebla. Sin embargo, la llegada de la presencia del dios Khan ocultó cualquier otra que pudiera encontrarse en la Niebla

La diosa del Placer se manifiesta en la Niebla, encontrando así al dios depredador y la diosa del conocimiento en el Mar.

Le presencia del elemental de piedra se hizo denotar. Era un pensamiento rígido, duro y estable. Difícil de moldear. Acudiendo a la llamada de Hekima se hace patente.

- Diosa.- Es un pensamiento que saluda con cierta reverencia.- Nuevos dioses.- Se dirigió a Akania y a Khan.- Mi nombre es Gorgun, el espíritu elemental de la Tierra, creado por Jun, el que Baila bajo la luna. Uno de los seis primeros dioses. Si puedo seros de ayuda no dudéis en acudir a mi. Asímismo, permitidme haceros entrega de este recuerdo que mi creador me encomendó proteger para las siguientes generaciones de dioses.

También se manifestó a petición de Hekima, el espíritu elemental del agua, mucho más divertido y voluble. 

- Soy Arao, el espíritu del Agua, mi labor es mantener a vuestros vivos hidratados hasta que les deis una fuente de agua. También cargo conmigo uno de los recuerdos que Jun nos encargó proteger y difundir con cada generación de dioses.

Akania estaba de suerte, llegando a la niebla, recibió la información de dos entidades que Hekima acababa de llamar y justo uno de los elementales le hablo sobre el tema que ella venía a buscar, seguro había más información al respecto, pero eso era más que suficiente para ella, al menos por el momento, además las entidades se habían ofrecido a responder sus dudas, hola Hekima, hola Khan, un placer conocerlos Arao y Gorgun, me llamo Akania, veo que llegue justo a tiempo para la lección de historia, ¿ya se manifestaron los demás elementales?, espero la respuesta de sus hermanos antes de seguir.

Bueno, ahora quiero investigar un poco sobre los animales, para mi gente, igual creo que tendré que improvisar un poco mientras adquiero aquellos recuerdos. Preparándose después de esas palabras para buscar recuerdos en la Niebla.

Veo a los elementales con curiosidad.

Saludos Arao, Gorgun estoy seguro de que podremos aprender mucho de vosotros. Ya que a todos nosotors todavía nos queda mucho por aprender. Digo  a modo de saludo. Por mi parte voy a tratar de seguir aprendiendo lo máximo posible.

-¿Manifestarse?- El elemental parecía ofendido.- No es nuestra obligación buscar vuestra atención. Nosotros siempre estamos, cumpliendo nuestras funciones. Las generaciones de dioses podéis morir con el apocalipsis cien veces más y a nosotros nos daría lo mismo. Somos eternos, por la obra y gracia de Jun.

- Lo que quiere decir, es que nosotros no podemos expandir nuestra mente en la niebla. Si no establecemos contacto con un dios o no somos buscados no podemos responder al llamado. Si Hekima no nos hubiera encontrado y ahora nos hubiera llamado no podríamos manifestarnos. Ahora que os hemos conocido también podemos responderos.

- En todo caso es irrelevante. Nuestro trabajo está a punto de terminarse, no queda tanta niebla en el Mar. Podremos descansar hasta que el cosmos vuelva a empezar tras vuestra muerte.

Akania se veía algo apenada por la reacción que causo en Gorgun, mis disculpas estimados elementales, no fue mi intención ofenderlos, pero no conocía su existencia ni la naturaleza de su presencia aquí, y quisiera hacerles más preguntas, pero antes necesito hacer unas cosas por mi gente, la que ahora sé que es la razón de mi existencia, nuevamente les ofrezco mis disculpas mientras voy a buscar unos recuerdos, luego de ello la deidad se dejó caer en la niebla para flotar y desvanecerse en ella, persiguiendo conocimientos, uno en particular, buscaba crear animales.

¿Nuestra muerte? me niego a desaparecer. Digo con confianza. Si la niebla se esta agotando solo tendremos que encontrar otra fuente de la misma. Encontraremos alguna forma de evitar ese apocalipsis, puedes estar seguro.

La certidumbre con la que habla de nuestro fin me cabrea ya que aun queda demasiado por hacer.

-No eres el primero que lo dice, me sorprendería que fueras el primero en evitarlo. En todo caso no he dicho que el fin del Mar de Niebla esté vinculado a vuestra muerte. He dicho que el fin del Mar de Niebla supondrá el fin de nuestras obligaciones, principalmente por la ausencia de Niebla que consumir para cumplir con ellas.

El elemental no parecía tener ningún tipo de emoción en la información que trasmitía. Para él era un hecho probado e inamovible.

La diosa de rostro oscuro se materializó nuevamente, disculpen la distracción mis estimados espíritus elementales, regresando al tema, ¿les molestaría decirme cuantos son ustedes?, me da la impresión que no son solo ustedes dos, por otro lado, respecto a tu preocupación mi querido Khan, podemos traer niebla de los creyentes de regreso a aquí, ¿no es así apreciados elementales?, ju jum, Akania habló con calma y confianza al dirigirse tanto a los recién conocidos espíritus como a su hermano cazador.

Luego, como si supiera lo que debían hacer se dirigió a Hekima y Khan, habría que informar al resto de nuestros hermanos de la situación, debemos reducir el consumo de niebla, principalmente del mar de niebla y aumentar todo lo posible las reservas que hay aquí ¿no creen que sería lo más conveniente, mis hermanos?