Partida Rol por web

Jonny observaba cómo sus compañeros estaban dedicándole mucho tiempo a tratar de comunicarse con aquellas - ¿personas? - y lamentaba no poder aportar mucho a la misión. Por ello, continuó estudiando sus mapas y organizándolos, para así poder ayudar de alguna forma.

En uno de los momentos en los que se pasaron Arymo y Joanna por la nave, aprovechó para decirles:

- ¿Creéis que habría alguna forma de transcribir las conversaciones? quizá si pudiéramos tener escritas las conversaciones, teniendo en cuenta el contexto que Anthond le está dando a ellas y lo que responden, pueda echar una mano. Soy bueno resolviendo puzles que se encuentran escritos, así como mapas.

Se iban dando pasos pero, por desgracia para todos, el reloj no perdonaba y el aburrimiento empezaba a instalarse en la mayoría de los involucrados en el proceso. No en Anthond, que procuraba atesorar cada palabra y concepto que lograba comprender, consciente de la oportunidad que suponía aquello... Pero quizás sí en otros, frustrados ante la falta de resultados.

Horas, días... la noción del tiempo se perdía en la rutina. Dado que la nave estaba parada, y los sistemas en mínimos operativos, salvo la vigilancia a los indicadores de estado, y las eventuales vigilancias sobre los nativos, poco más tenía que hacer especialmente productivo, de modo que dedicaba bastantes horas al día a revisar lo que iban conociendo del lenguaje de aquellos seres.

En especial, se dedicaba a comparar los códigos cuyo conocimiento concreto ya tenían anotado, con las estructuras gramaticales en que parecían incorporarse, esperando encontrar patrones sujeto-verbo-predicado, o al menos, reglas de conversión más o menos estables.

Una vez conseguido eso, pasar a describir abstractos en base a concretos, sería razonable, pero había que asegurar el primer paso antes del segundo. Recordaba... si en el ya lejano siglo XX, se descibraban complejos sistemas de encriptación, muchas veces a pelo, y otras diseñando primitivas máquinas que lo hacían automáticamente... ellos deberían poder hacer algo similar.

Finalmente me decido por nuestro siguiente paso. Anthond le llamo, tiene hasta final de este mes (30 días desde que aterrizamos) para intentar conseguir alguna respuesta. Sobre el tema de combustible para hipersalto, sobre los seres que dijo que les visitaron, sobre alguna cosa concreta. Si no hay resultados, nos iremos e intentaremos seguir aprendiendo por el camino con lo que tenemos grabado.

La vida en la nave parada en tierra se vuelve un poco mas distante, arymo y jonny se pasan mas horas conversando y jugando a cartas que nada mas, fuera de sus horarios de trabajo claro. En esas conversaciones llegan a buscar planes absurdos y fantasiosos, pero algunas ideas que llegan a dar sus frutos para intentar mejorar la compresion por parte de Anthond.

Después del nuevo fracaso niego con la cabeza. No podemos seguir así eternamente. Necesitamos recargar combustible. Creo que desde aquí podíamos dar un salto hasta el planeta dónde encontramos reservas de cristales. Vamos a ir allí mientras estudiamos lo que hemos aprendido de su idioma, recargamos la nave para hiper saltos y luego regresamos una vez hablemos un poco mejor su idioma. Pero aquí no hacemos nada y tenemos gente que depende de nosotros. Así que nos vamos a marchar ya, ya hemos perdido suficiente tiempo.

Asintió.

Muy a su pesar, sería lo mejor. Si tuviesen tiempo ilimitado, quedarse y estudiar a esas gentes, su idioma, etc..., entablar una relación diplomática y comercial... sería de sumo interés.

Pero no tenían tiempo ilimitado. La orden de la Capitana le pareció la mejor posible, dadas las circunstancias.

Pues la orden estaba dada. No podía decir que estuviera de acuerdo, aún a pesar de la urgencia que tenían, pero... Así era la vida, y un soldado debía obedecer. Así que se preparó lo mejor que pudo para el adiós, intentando dejarles unas últimas lecciones de su idioma y, quizás, una promesa de vuelta.

- Bien pues. Pongamos marcha al planeta Gasolinera. Recuerdo que tuvimos que salir a picar cristales nosotros mismos - pensaba que por fin podría salir de la nave para hacer algo de ejercicio físico, aunque fuera de picaor.

Anthond en nombre de toda la nave se despide de los autoctonos, con el poco vocabulario y lecturas faciales puede entender su falta de comprension y sorpresa, sin duda no se esperaban algo asi.

La despedida es algo extraña, se puede decir que no hay ni despedida, varios soldados junto con el interlocutor de Anthond se despiden cuando la nave se eleva y rapidamente deja la atmosfera y se aleja del cuerpo celeste para estar a una distancia prudencial para activar el motor de hipersalto.

Hace dos horas que la nave cruza el subespacio en direccion al unico sitio donde hay comida y combustible, eso si comida insipida tanto como el pollo sin sabor. 

Interesante... cuanto menos, había resultado interesante; habían conseguido una cantidad de conocimiento para procesar bastante grande, y liosa, o sea, muestras de lenguaje y algunas equivalencias; desde luego, "chicha" con que entreternerse durante el viaje, tendrían, pues se podía seguir trabajando en su análisis.

Pero ahora, en vuelo, primaban otras cosas; ante todo, asegurarse de que el estado de los sistemas era el correcto y que la nave resistía bien las tensiones del tránsito; lo demás, para él, era secundario.

Lamentablemente, su estómago no se alegraba al pensar en los manjares de los que harían acopio en su destino, aunque sí que ansiaba hacerlo de combustible; de eso nunca estaría saciado.

-Capitana; con lo poco que sabemos de esa lengua... ¿cree que en caso de encontrarnos con otra raza, sería viable intentarnos comunicar de ese modo? Quizá, aunque no sea universal, la conozcan otros "tipos"

Jonny encendió la nave y al subir el resto de la tripulación a sus puestos, la puso en marcha al planeta gasolinera (pensó que ahora empezaban a llamarlo así).

Una vez en el hiper espacio, volvió a sus estudios de mapas para terminar unos temas que ya tenía comenzados.

¿Aquello había sido un error? La verdad, no lo sabía, aunque aquella gente no parecía haber entendido demasiado por qué se habían ido de aquel planeta tan pronto. Y no podía culparles, aún faltaban muchos avances que hacer, aunque la necesidad seguramente obligaba...

El viaje empieza e iba a decirle a Anthond que se pusiera a estudiar lo que hemos recopilado del idioma de los nativos, pero lo hace por propia voluntad. Afirmo cuando le veo y me acerco poniéndole una mano en el hombro. Si necesitas en algún momento ayuda para terminar de comprender el idioma de aquellos nativos, tan solo dínoslo y cualquiera de nosotros te ayudaremos. Es más, creo que debería poner a Markus a ayudarte con esto. Quiero volver a ese planeta, pero será cuando estemos seguros de poder continuar la investigación a partir de lo que nos digan, y no tener que estar pendiente es de si tendremos comida o si tendrán combustible para la nave. Terminar de comprender ese idioma es una prioridad, ¿vale?

El resto del viaje lo utilizaré, aprovechando que Markus estará más ocupado con Anthond, para aprender sobre el manejo de los sensores de la nave. No está mal saber un poco de todo, especialmente si tengo que ser la capitana.