Partida Rol por web

Le guiño el ojo nuevamente.

-Que te quede delicioso - Le digo, luego hago una pequeña reverencia de despedida, miro la puerta del baño y niego con la cabeza - Supongo que no hay nada que pueda hacer, mejor vuelvo con los demás. 

Vuelvo sobre mis pazos al comedor para poder seguir disfrutando del banquete. 

Takame espero a que se fuera la persona que hablaba con Kuu, y cuando lo hizo, abrio ligeramente la puerta del baño.

-Pss, Kuu. Aqui, en el baño. Ven aqui- hizo señas a Kuu para que viniera, todo empezaba a mosquearle bastante.

Miro en todas direcciones y me encojo de hombros, me dirijo hacia donde Takame y me meto con él en el baño. 

-¿Que sucede Takame? ¿Porque tanto secretismo? ¿Se te ha acabado el papel? A mi una vez me paso eso, que momento mas incomodo... - Niego con la cabeza y pongo una cara de como si hubiese recordado algo terrible, suelto un suspiro y le miro - ¿Estas bien?.  

Takame sacó pecho -Si, yo estoy perfectamente. Hay algo que me mosquea, ya que hablando con el alcalde, se le escapó un "detalle" que me hizo pensar que aqui hay algo raro. Entonces fuí a ese cobertizo de allí- señaló hacia fuera de la ventana -conseguí entrar, pero soy nulo para ver cosas escondidas, aunque se que hay algo ahí- la miró fijamente -Tú que eres francotiradora tendrás mas ojo para encontrar algo oculto ¿verdad?-

Mientras conversais dentro del lavabo, el cocinero sale por la puerta con un gran pastel de carne servido en bandeja de plata en las manos.

El cocinero al escuchar a Takame le pregunta: Ya te encuentras mejor? Te perdiste el cerdo, pero aun puedes disfrutar de deliciosa carne.

Su cara refleja el orgullo de un buen pastelero, como haber hecho una obra de arte.

Desde el pasillo se venía un delicioso olor a pastel de carne. El mayordomo iba recogiendo platos y colocandolos en carrito que tenía al lado. El alcalde estaba con el puntillo mientras Dexter y Becca cantaban canciones marineras agarrados por la espalda sentados uno al lado del otro. Sin duda bien borrachines.

Takame abrio los ojos como platos, pillado por sorpresa por la voz del cocinero.

En un acto reflejo, tapo la boca de Kuu y le dijo -Si si, ahora ire, estoy limpiando el estropicio que he dejado aqui- miro a Kuu con con mirada nerviosa, pensando en que mas decir para hacer tiempo -Y tambien tengo que refrescarme un poco, un esfuerzo de esta magnitud te irrita la parte trasera- hizo un gesto de desaprobacion al pensar durante un segundo en lo que habia dicho.

Apruebo las palabras de Takame con una solemne aprobación de cabeza. 

-Es cierto, no quiere ni mirar lo que ha causado al pobre retrete, no no no - Suelto un suspiro - Si no lo limpia el alcalde se muere, ya volveremos al banquete, yo esperare a mi compañero, gracias por la información guapo. 

Espero a que el cocinero se vaya y vuelvo mi atención a Takame y le hablo en voz muy baja. 

-Podríamos echarle un vistazo pero primero dime que es lo que sucede, o que crees que sucede, de todas maneras no te hagas muchas ilusiones, tu lo dijiste, francotiradora, no detective - Me llevo una mano a la cabeza y me cuesta trabajo suprimir una risa - Además, soy muy tonta. 

Ver al capitán con aquel comportamiento era algo nuevo, pero ¿quién era él para decirle que se comportara? al fin de al cabo este banquete, que al final se convirtió en fiesta, era para ellos, así que era mejor disfrutarlo.

Sus compañeros ya se estaban tardando y perdiendo toda la diversión, pero peor para ellos, sin nada mas que hacer siguió al capitán y sus compañeros en los festejos, nunca estaba de mas aprovechar un fiesta y mas si era gratis.

El alcohol y la comida no dejaban de salir. En un principio Becca no estaba dispuesta a compartir los lujos dudosamente merecidos del alcalde pero después de la primera copa de vino le acompañaron sus amigas y ya fue un no parar. - Bajo el maaaaar, bajo el maaaaar viven serenas siendo sirena eres feliiiiz... ¡Bryo! ¡Tenemos que ir a la isla de los tritones! ¡Sirenas, Bryo, sirenas! - Sí, porque no. Después de Newgate la isla de los tritones era territorio de Monkey y ahora que estaba preso la marina podría volver... - ¡Ver el mundo Bryo! ¡Eso es lo mejor de ser marine! Surcar infinitos océanos, conocer nuevas islas, matar piratas... ¡Esto es vida! - ¡VIVA EL VINO! De un trago otra copa de vino entra por el buche de Becca. Esta noche iba a dormir como un lirón.

EL cocinero entraba por la puerta con un suculento pastel de carne en una bandeja de plata. El mayordomo de mientras se retiraba con el carrito con todos los platos sucios. Su mirada era totalmente seria ante el panorama que veía, en cambio el cocinero venía con una cara bien alegre.

Menuda fiesta teneis aqui!! Pues que este pastel sea la guinda a la victoria frente a Bocagrande!

El alcalde se levanto y con su copa llena y un par de HIPS! añadio: Brindemos por la mejor carne de estos mares!

EL cocinero puso en mitad de la mesa la bandeja de plata con el pastel de carne, mas poco despues el mayordomo volvía con platos de postre para todos junto con las cucharas.

Quien quiere pastel!!

El cocinero se marcho de la puerta del lavabo hacia el comedor. Desde allí procedía cantos y risas con tematicas marineras. El olor al pastel todavia se mantenía al aire como si de un perfume fuera.

Al ver el gesto de Kuu sonrió, era una chica muy mona cuando quería.

-Bueno, no importa, 4 ojos ven mejor que 2- y miró por la ventana para ver si estaba todo despejado -Creo que el alcalde tiene entre manos algún tipo de contrabando, pero no se de que es- señaló por la ventana -pero me apuesto una birra a que está en ese cobertizo- dijo sonriendo.
 

Sonrió ante la afirmación de Takame y asiento con la cabeza, le tomo del brazo esperando a que me muestre por donde salir para llegar al cobertizo. 

-Espero que sea un trafico de carne... - Digo, viéndome algo obligada a limpiarme la boca con la mano, ya que al pensar en la deliciosa carne que producen acá se me hace agua la boca - Soñar no cuesta nada - Digo finalmente soltando un suspiro - Bueno, vamos a ver que encontramos. 

Por favor, dejeme probar un poco de ese pastel de carne! Le dije al cocinero. La verdad que no tenía muchas ganas de carne, pero tenerme ocupado en algo, no soportaba ver borrachos al capitán ni a Becca con sus canciones.

Que estarán haciendo Takame y Kuu? Creo que se tardan un poco.

El cocinero amablemente sirvio un buen trozo de pastel para Bryo, el cual le dio la sensacion de haber comido poco. Aqui tiene caballero. En un tono cortés, complacido de su producto. Espero disfrute de esta delicia autóctona.

- Yo también quiero, qué demonios. - Iba a tener que ayunar una semana para compensar todo lo que se estaba comiendo hoy pero merecía la pena, jamás había comido nada igual. ¿Así come esta gente a diario? ¿A este tipo de caprichosos glotones protegían? - ¿Qué será de nuestros compañeros? Se están perdiendo todo un festín... Más para nosotros.

Yo prefiero no comer nada mas, pero que el vaso no quede vacío- la verdad es que ya estaba un poco harto de comer, pero la bebida era otro cantar, de eso nunca se cansaría.

La verdad es que ya era demasiado raro que tardaran tanto en volver, una de dos, o Takame se estaba ligando a la hija del alcalde, cosa muy poco probable; o de verdad pasaba algo malo y algo o alguien les impedía volver. Pero bueno de momento disfrutarían de la comida y la bebida, sobretodo de la bebida.

Tampoco basto mucho para que Kuu localizara el cobertizo viendolo a través de la ventana del lavabo, la cual estaba abierta.

Todos recibis un trozo del pastel, a pesar de la negativa. El capitan, bien borracho, veia el pastel de carne, como si fuera más cerdo. Más cerdo todavía? Este no lleva manzana? O es algún tipo de turrón de chocolate? La forma apenas la distinguía, solo viendo algo rectangular. Beberé otra copita mas de vino. Tras beber un sorbo y alzar el vaso. IAAA!!!! Este vino es carne líquida!!!

El alcalde no hacía mas que sonreir, y disfrutar del pastel. Algún sorbito de vino bien saboreado y otro cachito.