Partida Rol por web

La charla por la mejor forma de ascender se hace prolongada, algunos se atan y luego se desatan para exponer sus puntos y terminan volviéndose a atar. Otros no desean ser atados por más que algunos lo intentan aunque sea con palabras. Varios quieren ir despacio y otros rápido, también tardan mucho sobre ello.

El bárbaro incluso se queda en el medio del camino buscando huellas por todas partes a conciencia. Más de uno lo mira preocupado porque los buitres están dando vuelta pero el sigue en lo suyo. Aun con todo eso y con todo el tiempo que les tomó escalar terminan subiendo por la grieta hacia una área grande en forma de pecera, está alojada en parte trasera de la "boca" del buitre. Al parecer siglos de lluvia y viento han creado una depresión donde las aves ha construido sus nidos. Al sur de ésta, donde el suelo se alza de forma brusca hay diversas cuevas que descienden dentro del cerro.

La pared norte de esta depresión es roca pura que da sombra a la zona durante el día. La sombra mantiene frescos a las crías de buitre de los rigores del astro solar. En el suelo hay alrededor de quince nidos cubiertos con hojas secas, piedras y excrementos de ave. Cada nido tiene unos treinta centímetros de alto y sesenta de ancho.

Pero lo que llama realmente la atención del grupo son las aves que están alimentando sus crías y son sorprendidas por la intromisión de extraños.

No le vez sentido a lo que estás viendo, son muchas huellas sin ton ni son, no logras distinguir de que raza son, la cantidad y tampoco el tiempo de las mismas. Pero si sabes que algo o algunos seres han caminado por este lugar en algún momento del tiempo.

Si nos acercamos a los nidos, nos atacarán - digo en voz baja al grupo y dirijo mi mirada hacia los nidos con la ballesta cargada por si hubiera que usarla
 

Cierto, habría que dar un rodeo para evitar problemas. Dijo el joven que iba en vanguardia, ya que, aparentemente era el más ágil del grupo. Aunque también podríamos preparar una buena cena con ellos.... aunque este ultimo comentario era en broma. 

Ahora nos vendría de perlas alguien que supiera hablar "buitre".

Pero no parece que seamos capaces de ello, así que intento moverme con cautela para no mostrar signos de amenaza hacia las aves.
Preparo el escudo, eso sí, por lo que pueda suceder aquí o desde el cielo y empiezo a avanzar siguiendo a Iván.

Tras el ascenso llegamos a la zona donde anidaban los buitres, y al parecer no éramos de su agrado.
Bueno muchachos, y…… ¿que se supone que es lo que veníamos a buscar aquí?, dije encogiéndome de hombres en un tono bajo, mientras seguía con la mirada a la zona de los nidos.
No creo que quieran cazar un buitre ¿me equivoco?

Y me quede esperando la respuesta de alguno del grupo, para que me pudiera resolver mis dudas, ya que hasta el momento, solo me había dedicado ir con ellos sin hacer preguntas.

Creo que buscamos los restos de la caravana que fue atacada para recuperar unas hierbas medicinales, o me equivoco? digo sin dirigirme a nadie en particular pero no veo por donde pueda pasar un carro por esta zona, por dónde suelen pasar los carros? pregunto dirigiéndome esta vez a nuestra guía designado...

Los buitres se encuentran algo alterados pero no se alteran tanto como se esperaría, no son muchos los presentes pero suficientes como para complicar la misión. Tras arribar por la grieta que les permitió el ascenso ven que la "boca" contiene 3 caminos hacia las entrañas de la montaña.

Dos de un tamaño no mayor a los dos metros uno no muy lejos de donde ustedes están y el segundo del otro lado del lugar. La tercer entrada si es de mayores proporciones.

Ivan se adelanta con cuidado de no pisar nada extraño o alguna prueba que conduzca a la finalizacion de la misión, y observa detenidamente los tres caminos en busca del más idóneo. Se fija, sobretodo, en huellas o posibles restos de actividad "humana". 

Me sitúo a pocos pasos de Iván y sigo la ruta que vaya marcando; al fin y al cabo, si alguien puede encontrar el camino correcto es él. O Falanar. Cualquiera de los dos puede hallar indicios o rastros que ninguno de los demás seríamos capaces de ver. - Torm, permítenos salir de aquí con buen pie. - Murmuro a la vez que procuro mantener la distancia.

Así pues, dejo que abra la marcha y me coloco tras su espalda, para evitar que ninguna sorpresa desagradable le pueda afectar mientras nos guía en pos de la salida adecuada.

El joven Iván parte en un silencio no tan absoluto pero mejor que cualquiera del resto del grupo al parecer, evita los nidos con buitres para inspeccionar primero la entrada contigua, es uno que gira levemente hacia la derecha y del cual al parecer no hay sonidos de actividad como tampoco rastros que seguir.

Después toma hacia el camino del centro, mucho más amplio que el primero y con varios nidos de los cuales no puede esquivar tanto. Se acerca lentamente pero un ruido detrás le alerta, es Ghius que lo está siguiendo y el si que hace ruido por todo lo que lleva encima. Tres buitres se alterna primero emitiendo sonidos estridentes y atacando tanto a Ivan como a Ghius. Por suerte no salieron lastimados por los picotazos aunque esos graznidos le dan mala espina.

Lo que si llegaron a ver es que dentro de la boca amplia del túnel había más nidos, pero estos de un tamaño gigantesco al lado de los otros y por lo menos hay tres de ellos.

Sigo con la mirada A los dos intrépidos, que se adelantan, para ir a mirar las entradas de las cuevas.
Se me escapa una sonrisa al ver el escándalo que está montando el “hombre de hojalata”, alterando a los buitres.
Pero, al parecer, no era tan gracioso para los buitres que terminan picoteándoles, sin que aparentemente, sufran daño. Me están recordando a cierto grupo de mujeres, ¿verdad padre?
digo en tono bajo.

Rebusco algo en mi mochila de comida, que pueda lanzar a los buitres para que se alejen mientras el resto pasamos.

Permanezco agachado esperando la guía de Iván y de Ghius que se han adelantado en el camino.
-También dudo que la caravana haya pasado por aquí. Espero que no nos estemos adentrando en peligros innecesarios para la consecución de nuestro objetivo.- comento uniéndome a las palabras de Sateru.

Esos nidos parecen demasiado grandes para ser de buitres normales, siguiero que los más ruidosos, nos quedemos aquí mientras los silenciosos exploran más adelante e ir adelantando según vayan explorando y dando seguridad que no hay peligro - digo en voz baja para no molestar a los inquilinos de las cuevas pero que me oigan mis compañeros de viaje.

Mientras sus compañeros hablaban, Iván se adelantó un poco para observar. Lo que quería comprobar era si en los nidos de los buitres había restos de la caravana. Puede que los animales hubieran cogido parte del material de la caravana para terminar de construir sus nidos o alimentar a sus polluelos, y  puede que entre esos materiales estuviera las medicinas que buscaban. 

Cuando escucho a Sateru decir "mientras los silenciosos exploran más adelante" pienso: Espero que no se esté refiendo a mí...

Entono una plegaria interna y sigo a Iván. - No sé dónde nos estamos metiendo y parece que no tenga relación con nuestra misión actual. Si pudieras encontrar algo que nos indique si vamos bien o no, sería genial; así decidiríamos si seguir adelante o marcharnos de aquí cuanto antes.

El grupo otra vez duda sobre como actuar, les había pasado en el camino con los sonidos que confundieron el lugar de la amenaza y ahora también están dudando de como proceder con respecto a la incursión en el cerro. Iván aprovecha la charla del grupo y la distracción generada por Falanar adelantándose abierto por el lado norte evitando acercarse a los nidos.

El estar desde un punto de vista diferente le permite ver con más detalles algunas cosas, que el primer túnel está cerrado a los pocos metros de comenzar, al final del mismo hay un gran nido que está vacío. El segundo túnel se va cerrando hasta formar uno más estrecho y a la vez gira hacia un costa.

Finalmente el tercer túnel sigue recto y se pierde en la oscuridad, lo que destacas es que en uno de los nidos hay un buitre dando de comer a sus crías y notás a un costado la presencia de jirones ensangrentados de ropa.

Te estás por acercar más a observar pero sientes un ruido metálico detrás tuyo, giras y ves a Ghius que se vienen en tu camino. El buitre comienza a alterarse nuevamente y tu desearías tener compañeros más pacientes.

Falanar se te adelanta bastante en un principio pero su paso es lento y logras alcanzarlo rápido, en un comienzo todo sale como lo pensaste. Avanzar en sigilo lejos de los buitres aprovechando la distracción pero todo cambia cuando el sonido de tu armadura y arma hacen que la atención gire en torno a ti. Un para comienzan a quejarse y ves que Iván gira su rostro para ver que produce el sonido y cruza la mirada contigo.

Siguen hablando buscando una posible solución a la actual situación, dudan si están en el camino correcto. Pero hay un integrante que parece decidido, aprovecha la distracción generada por Falanar que lanzó alimento a los buitres. Pero todo parece ser un esfuerzo inútil cuando Ghius se puso a seguir al sigiloso Iván. Los buitres vuelven a alarmarse aun cuando los aventureros están lejos de ellos y comienza a ser algo preocupante.