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Pokémon: El Reto Maestro

Pueblo Alba - El pueblo donde soplan vientos de un nuevo amanecer

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11/12/2017, 18:58
Alabaster

De rodillas y observando fijamente a Eevee, escuchaba de fondo la conversación de los 3 chicos con respecto al Pokémon. Esta clase de Pokémon me era bastante familiar, y me hacia rememorar mi infancia en mi pueblo natal Ecruteak City.

Allí en el Teatro de la Danza, las Chicas Kimono tenían toda clase de evolución de Eevee, y cuando era un niño me pasaba todo el día jugando con ellos, esperando a que las funciones acabaran. -Una gran sonrisa comienza a aparecer en mi rostro, por los buenos recuerdos.- De pronto la puerta del laboratorio se abre, y nuevamente volví a la realidad.

Saliendo del laboratorio Pokémon, vi la silueta de alguien bastante alto, los rayos del sol matutinos, impedían que viese con claridad. Así que desde mi posición, con una rodilla en el suelo -Me levanto y limpio mis ropajes. Intentando tapar el sol con mi mano intento mirar fijamente a la persona que acababa de salir.-

El aspecto del Señor no era muy afable, y la expresión en su rostro lo hacían ver aún más rudo de lo que era. No hubiese pensado nunca que se trataba del Profesor Abeto, pero tras escuchas las palabras de Miss Yew, me doy cuenta de lo equivocado que estaba. Debo dejar de juzgar a las personas por su apariencia... ¡Era obvio que se trataba del Profesor Abeto!. -Sacudo mi cabeza de un lado a otro.- 

Las palabras de la mujer proveniente de Sinnoh, me hicieron recapacitar: Estaba frente a un gran investigador Pokémon, famoso en varías regiones. Por lo que mi actitud cambió, así que esperé paciente a que la chica de cabellos azulados terminase su presentación.

En ese momento escucho un susurro a mi lado derecho:

-Entonces... ¿ese si que es el profesor?- 

 -Cubriendo mi boca e intentando hablar lo más bajo posible le respondo a Klaus: Sí, al parecer él es el Profesor Abeto. Así que deberíamos presentarnos... 

-Dando un paso adelante alzo mi voz: ¡Buenos días Profesor Abeto! Mi nombre es Alabaster, y vengo desde el Oeste, para ser más preciso, desde la Región de Johto. -Me inclino en señal de saludo.- He cruzado todo el océano, para poder estar frente a usted hoy, esperando que sea aquí, en Pueblo Alba donde mi aventura como Entrenador Pokémon comience, bajo su tutela. -Vuelvo a mi posición erguida y de reojo, le doy una señal a Klaus para que se presente.-

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12/12/2017, 00:07
Klaus Grayson

Su compañero confirmó su sospecha, aunque no parecía demasiado seguro, o quizás sentía algún tipo de vergüenza, pues no parecía muy cómodo, pero pronto acompañó a las chicas en la iniciativa de saludar al que parecía ser el profesor.
El chico se presentó de manera bastante formal, y dio pie a la entrada de Klaus al echarle una mirada al finalizar su discurso.
Klaus, quien no se lo había esperado, se señaló a si mismo con su dedo indice y con una expresión de duda en su rostro, pero al ver que no podía referirse a nadie más dio un paso adelante con los brazos en forma de jarra.

-Buenos días profesor, ¡soy Klaus Grayson, de ciudad Trigal, y este es mi compañero, Eevee!- Dijo el muchacho presentando a su amigo también con mucha alegría y energía.- Hemos venido para ganar la liga de Ámbar.- Concluyó finalmente sin ningún sentido del ridículo.

Dicho aquello el joven simplemente permaneció allí con una amplia sonrisa.

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12/12/2017, 22:49
Profesor Abeto

-Ah, sí. Recibí una llamada del bueno de Serbal hace poco. Así que tú eres Sabine, ¿eh? - pregunta amablemente Abeto a la susodicha, sonriendo y asintiendo. - Serbal espera grandes cosas de ti, y ahora yo también. Y tú eres... ¿Lena? - pregunta, girándose hacia la otra chica. - Tú... me suenas de algo, aunque no sabría decir de qué. - comenta, ladeando la cabeza mientras se sujeta el mentón. - Bueno, ya me acordaré. Y vosotros... - se gira hacia los chicos. - Alabaster, ¿no? Esas ropas... ¿eres de Ciudad Iris? - el Profesor asiente, girándose al final hacia Klaus. - Y tú vienes de la misma región... ¿Trigal, dices? Oh, ¿y a quién tenemos aquí? - el Profesor Abeto se inclina para ver mejor a Eevee, que lo saluda con un alegre gritito. - Un Eevee, ¿eh? ¿Lo has traído contigo? ¿Por qué razón? - pregunta mirando a Klaus, pero luego niega con la cabeza. - Bueno, ya me lo cuentas luego. No está bien que os retenga aquí, hablando en la puerta. Acompañadme al interior, por favor.

El Profesor Abeto os hace un gesto con la mano y se gira hacia el interior del Laboratorio Pokémon, y después comienza a caminar. Vosotros lo acompañáis a petición suya, y lo seguís hasta el despacho más al fondo del laboratorio. Por el camino observáis distintas salas del Laboratorio Pokémon, todas ellas repletas de estanterías a su vez repletas de libros, y amplias mesas de laboratorio repletas de cacharros tecnológicos de todo tipo cuyas funciones no llegáis siquiera a imaginar. El Profesor parece que tiene varios ayudantes trabajando con él ya desde primera hora de la mañana, y veis a algunos de ellos por estas salas. Todos ellos os saludan amable y brevemente, volviendo rápidamente a sus tareas, escribiendo complicadas ecuaciones en pizarras, tomando apuntes o realizando algunas mediciones con varios de los aparatos.

Tras un pequeño paseíto guiado por el Profesor Abeto, llegáis al cuarto al que os estabais dirigiendo. Se trata de un despacho bastante amplio, con un elegante escritorio de madera maciza, una cómoda silla de escritorio acolchada, algunas sillas para posibles visitas, varios armarios ahora mismo cerrados y un videoteléfono, entre otras cosas. Sin embargo, lo que más os llama la atención ahora mismo no es otra cosa que las siete Pokéball perfectamente alineadas y colocadas sobre un soporte que hay sobre el escritorio del Profesor. Éste os indica con un par de gestos que apartéis las sillas de las visitas y os coloquéis delante del escritorio, mientras que él se coloca en el lado opuesto.

-Bien. Creo que lo primero es presentarme. - dice el Profesor, con las manos cruzadas a la espalda y mirándoos con cierto aire de solemnidad. - Mi nombre es Abeto, y como sabréis soy Profesor Pokémon. Tengo el honor de ser una de las tres personas encargadas de entregar un Pokémon inicial a aquellos entrenadores que deciden iniciar un viaje en la Región Ámbar. En concreto, me encargo de entregar los Pokémon de Tipo Planta. - con un gesto, señala las Pokéball que hay sobre la mesa. - Doy por hecho que eso ya lo sabíais, claro. - dice con un cierto tono bromista. Después, el Profesor se hace a un lado para dejar visible un monitor que tiene a su espalda. Tras pulsar un botón de un mando a distancia que saca del bolsillo, el monitor se enciende y muestra la imagen de un Pokémon. - Dejad que os presente a los candidatos a convertirse en vuestros primeros compañeros de la Región Ámbar. En primer lugar...

-Bulbasaur, el Pokémon semilla. Originalmente procede de la Región Kanto. - explica Abeto, asintiendo para sí. - El siguiente es... - con sólo presionar un botón del mando a distancia, la imagen del monitor cambia inmediatamente.

-Chikorita, el Pokémon hoja. Procede de la región vecina a la de Bulbasaur, ¡es de Johto! A continuación... - sonríe Abeto. De nuevo, pulsa el botón para hacer cambiar la imagen.

-Treecko, el Pokémon geco bosque. Éste viene de la Región Hoenn. - asiente Abeto. De nuevo, hace cambiar la imagen.

-Turtwig, ¡el Pokémon hojita de Sinnoh! El siguiente es... - una vez más, la imagen vuelve a cambiar.

-Snivy, el Pokémon serpiente hierba. Procedente de Teselia, nada menos. A continuación... - Abeto presiona el mando a distancia de nuevo.

-¡Chespin! El Pokémon erizo, procedente de Kalos. Y, por último... - dice Abeto, haciendo cambiar la imagen por última vez.

-Rowlet, el Pokémon pluma hoja. Es originario de la exótica Región Alola. - explica Abeto.

Después de daros un tiempo para que visualicéis todas las imágenes, Abeto apaga el monitor y vuelve a colocarse frente al escritorio. Con un gesto de una mano, extendiendo el brazo y señalando con la palma abierta, os invita a acercaros a las Pokéball. Parece ser que están colocadas de izquierda a derecha en el mismo orden que acabáis de ver a los Pokémon en pantalla.

-Adelante, no seáis tímidos. - dice el Profesor Abeto con amabilidad. - Es el momento de que os acerquéis y toméis la Pokéball de aquel que queréis que sea vuestro primer compañero en Ámbar.

Notas de juego

Lena y Sabine, podéis escoger vuestra primera opción :) Klaus tiene una situación especial... y Alabaster ya sabe con qué Pokémon se va a quedar. ^^

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13/12/2017, 00:28
Sabine Yew

Al entrar en el laboratorio, Sabine no pudo evitar mirarlo todo con una curiosidad infinita. Ese olor a desinfectante, a comida para pokémon, a bata limpia, a libro viejo… Era sin duda el olor de la investigación y un perfume que le traía recuerdos del primer día que pisó el laboratorio de Serbal. Qué lejos y qué cerca le parecía que quedaba aquel momento crucial en su vida. ¡Y ahora estaba a punto de vivir otro momento crucial! Tal vez uno de los más importantes en su vida: la elección de su primer compañero pokémon.

Sabine no era estúpida. Había elegido al profesor Abeto y a sus pokémon tipo planta porque sabía de sobra que era uno de los tipos más fáciles de criar. Pero no era esa la única razón.

 -Muchas gracias profesor Abeto.

Sabine se adelantó hacia las pokéballs y miró detenidamente cada una de ellas. Conocía muy bien a Turtwig, ya que había visto a muchos pasar por el laboratorio y llegar a manos de entrenadores jóvenes y responsables que los criaban con cariño. Pero precisamente por conocerlo tan bien no pensaba elegirlo. Sabía que era un buen pokémon, fuerte y robusto, pero su evolución final tenía una combinación de tipos que no la acababa de convencer. No, si quería un compañero bien fuerte y capaz de aguantar todo lo que se le viniera encima, sabía a cuál elegir.

 -Tú serás mi compañero.

La aspirante a profesora cogió la primera pokéball, la que correspondía a Bulbasaur, el pokémon semilla. La mejor elección de todas. Con cariño y buenos cuidados, se convertiría en el compañero ideal para sus trabajos de campo.

Ardiendo en deseos de conocer a su primer pokémon en persona, Sabine abrió la pokéball dejando salir al bulbasaur.

 -Hola amiguito, encantada de conocerte. Hmmm, ¿eres un chico o una chica? -la investigadora empezó a examinar a su nuevo compañero- Vas a necesitar un buen mote que te diferencie del resto de bulbasaurs del mundo.

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13/12/2017, 16:16
Lena

Ante el comentario del profesor, Lena pareció sorprenderse por un momento antes de recuperar la sonrisa, no sin antes mirar a sus compañeros de soslayo, afortunadamente ninguno prestó mayor atención a sus palabras.

Terminadas las presentaciones, siguierona invitación de Abeto. Entraron al laboratorio cruzando varias habitaciones, hasta llegar a lo que parecía el despacho del profesor. Lo que más le llamó la atención de aquello, fueron claramente, las siete Pokéball que estaban sobre el escritorio, perfectamente alineadas. ¡Madre mía ahí están!

Había estado leyendo sobre los iniciales que más le llamaban la atención, incluso mucho antes de subirse al avión, pero cuando el profesor Abeto pasó las diapositivas sintió como una punzadita en el estómago al ver su imagen... Tenía que ser ese. ¡Decidido!

Estaba segura de que cualquiera de los Pokémon que había allí eran una fantástica elección, pero desde siempre había sentido cierta predilección por aquellos que tenían una presencia elegante a sus ojos. Y al venir desde Hoenn, buscaba algo que no hubiera visto antes, más exótico que un Treecko, con el perdón del susodicho.

- ¿Podemos entonces..? - dijo mientras se acercaba con paso firme, parándose junto a Sabine. Inspiró hondo mientras alargaba la mano para posarla sobre la segunda Pokéball en la fila, casi notaba como los dedos le temblaban ligeramente, aquel era un momento muy especial. Chikorita.. A partir de hoy empieza nuestro viaje, espero hacerte muy feliz. Pensó mientras estrechaba la Pokéball contra su pecho, con ambas manos, en actitud calmada sin despegarse.

Prefería hacer las presentaciones con su nuevo compañero una vez todos hubieran elegido para no entorpecer al profesor. Más que nada porque sabía que si no esperaba un poco, apenas prestaría atención porque estaría achuchando al pobre Chikorita sin parar. ¿Será chico o chica? ¡Tengo que pensar un nombre apropiado sin duda!

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13/12/2017, 20:46
Alabaster

Tras escuchar las presentaciones de mis compañeros, me siento como el menos preparado entre ellos para ser un entrenador Pokémon. Sabine por su parte, parecía que sus conocimientos Pokémon eran tremendos y la determinación de Klaus, con querer ganar la Liga Ámbar eran admirables. Mi motivación no era tan férrea, por lo que muchas interrogantes fueron pasando por mi mente.

El constante cuestionamiento me persiguió mientras caminábamos dentro del Laboratorio del Profesor Abeto. De hecho, ni siquiera había decidido el Pokémon que elegiría. Ugh! Creo que todo esto no lo pensé muy bien... Debí prepararme mejor y no tomar esto a la ligera. 

Una vez frente al escritorio pude observar las 7 Pokéballs, la expectación en la habitación era tremenda. Con el pasar de las imágenes mi corazón se aceleraba, pero todavía no tenía nada claro cuál escogería, todos parecían buenas opciones. Por lo que aguardé a que los demás escogieran su Pokémon.  

Pacientemente observé como Sabine y Lena tomaban las primeras Pokéballs. Miré hacia mi derecha, donde estaba Klaus, esperando su decisión, pero él estaba calmado. No parecía un niño en navidad, con ese brillo en los ojos esperando abrir su obsequio. Por lo que comprendí que yo seguía.

-Con parsimonia caminé frente al escritorio, partiendo de izquierda a derecha, pasando por detrás de mis 2 compañeras- Sólo me dejé llevar por el momento y las fortunas hicieron que me detuviese al final de la gran mesa. Por mi parte tomaré este... -Cojo la última Pokéball, y dando media vuelta de frente al Profesor Abeto: Prometo cuidarlo de la mejor forma. -Una amplia sonrisa inunda mi rostro- Desde ahora serás mi compañero... Rowlet

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14/12/2017, 02:27
Klaus Grayson

Cuando el profesor le preguntó por Eevee estuvo a punto de soltarle toda la retahíla, pero el profesor decidió que mejor lo dejarían para después, por lo que Klaus simplemente frunció el entrecejo, quería resolver aquello lo antes posible. No porque tuviese prisa por salir, sino porque aunque confiaba  plenamente en que podría comenzar su viaje junto a su mejor amigo, no estaría del todo seguro hasta que ese hombre se lo confirmara.

Observó el laboratorio algo aburrido, pues había esperado más pokémon y menos libros y cachivaches, aunque habría mentido si no afirmaba que se vio tentado en toquetear varios de ellos. Aun así se mantuvo quietecito, debía mostrar la profesionalidad que parecían tener el resto, no quería quedar como un niño pequeño.

Una vez más Klaus se desilusionó al ver que no les mostraban los pokémon en directo sino en imágenes, pero una vez más se aguantó las ansias de protestar, limitándose a observar como la "profesora" tomaba la iniciativa eligiendo un bulbasaur, sin duda una gran elección desde el punto de vista de Klaus. Este se acercó a ver expectante al pokémon cuando la mujer lo sacó de su pokéball.

-Hola, soy Klaus.- Se presentó al pokémon saludándole divertido desde detrás de la mujer.

No había entendido muy bien a que se refería con aquello del apodo, pero lo guardó para su posterior lista de preguntas, por el momento prefería centrarse en las elecciones de los otros dos. Estos eligieron un chikorita y un pokémon que Klaus no había visto en su vida, pero por el momento se quedó con las ganas de verlos en directo. Quisó pedirles que los sacaran, pero se dio cuenta de que había llegado su turno...
Klaus se puso serio y miró directamente al profesor cerrando con fuerza los puños por la emoción.

-Profesor, yo he elegido, quiero decir... quería pedirle si...

El muchacho se agachó para coger a Eevee pero este lo esquivó gracilmente. El muchacho volvió a intentarlo con igual resultado, y acabo correteando detrás del pokémon, que parecía tomarse aquello como un juego, por todo el despacho.
Finalmente tras una dura persecución el muchacho consiguió hacerse con él, y mientras lo acariciaba se acercó al profesor adelantandose a los demás.

-Este es Eevee, venimos juntos desde lejos, y quería que le permitiera ser mi pokémon inicial.- Dijo con mucha determinación, a pesar de sus tonterías, cuando Klaus hablaba en serio se hacia notar.

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15/12/2017, 22:47
Bruteroot

La Pokéball que Sabine escoge, la primera, se abre por la franja negra que la divide en dos mitades y deja escapar un chorro de energía pura de color blanco que acaba impactando en el suelo frente a la aprendiz de profesora. El Bulbasaur no tarda más que unos instantes en perder el color blanco de la energía que lo rodeaba y aparecer frente a su nueva entrenadora, a la cual saluda con un enérgico gritito.

-¡Bulbasaur! - dice el Pokémon semilla mirando a Sabine. ¡La está saludando!

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15/12/2017, 22:49
Hanako

Como si intuyese que es el momento de las presentaciones, o tal vez porque los Pokémon del interior de las Pokéball son conscientes de lo que está sucediendo a su alrededor, la Pokéball escogida por Lena también se abre de golpe, con un chasquido, y deja escapar un chorro de energía blanca que impacta también contra el suelo, en este caso frente a Lena.

-¡Chiko! - grita Chikorita incluso antes de que la luz blanca que lo rodea se desvanezca, y se acerca rápidamente a su nueva entrenadora. Apoyándose sobre sus patitas traseras, Chikorita apoya las patas delanteras en las piernas de Lena, mirando hacia el rostro de la chica con ilusión, moviendo su pequeña colita de lado a lado.

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15/12/2017, 22:53
Kuro

La Pokéball escogida por Alabaster no podía ser menos y también se abre de golpe al ser escogida por el chico de Johto. En este caso, sin embargo, el chorro de energía blanca no se dirige al suelo sino que toma forma en el aire, frente al rostro de Alabaster. La luz se desvanece y Rowlet queda aleteando suavemente frente a los ojos de su nuevo entrenador, clavando una mirada curiosa en él.

-¿Row? - dice, girando su cabeza mientras aletea en el aire y sin dejar de mirar a Alabaster.

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15/12/2017, 22:55
Profesor Abeto

-Hmm... - el Profesor Abeto ha escuchado la petición de Klaus mientras el resto de Pokémon escogidos se liberaban del interior de sus respectivas Pokéball. El Profesor baja su mirada para observar al Eevee de Klaus, que ladea su cabeza para mirarlo de vuelta. - Cuando he visto a Eevee, ya imaginaba que me harías una petición así. - murmura el Profesor, tomando aire y luego soltándolo poco a poco. - No sé si sabes que una de las normas de la Liga Pokémon de Ámbar es que todos los entrenadores deben comenzar con un Pokémon de esta región, y no se les permite traer ningún Pokémon de otra región consigo. - dice con seriedad mirando a Klaus a los ojos. Su expresión, sin embargo, se relaja unos segundos después. - Aunque... a pesar de que este Eevee parece que está bien cuidado, me da la sensación de que no ha recibido entrenamiento, ¿me equivoco? - pregunta. - Si es así, y teniendo en cuenta que Eevee es un Pokémon que puede encontrarse en Ámbar... creo que podremos arreglar esta situación, sí. No estaría bien que el pequeñín hubiera hecho todo este viaje para nada, ¿eh? - dice el Profesor, algo más risueño, palmeando la cabeza de un alegre Eevee.

Tras la pequeña conversación que mantiene con Klaus, el Profesor Abeto se gira hacia los demás y, tras ver a los tres Pokémon ya fuera de sus Pokéball, se echa a reír.

-¡Parece que esos pequeños tenían ganas de conocer a sus entrenadores cuanto antes! - dice, para después asentir con satisfacción un par de veces. Hecho esto, el Profesor Abeto abre uno de los cajones de su elegante escritorio y saca una caja de él. Se trata de una caja metálica, alargada, que deposita sobre la mesa.

El Profesor desbloquea las pestañas que la mantienen cerrada y la abre ante todos vosotros. Sobre su interior acolchado descansan cuatro aparatos que os resultan muy familiares. Todos son de un color distinto, pero indudablemente son el mismo tipo de aparato: Pokédex.

-Pokédex. - el Profesor Abeto es el primero en decir la palabra en voz alta, y lo dice con algo de orgullo en su tono de voz. - Estoy seguro de que habréis oído hablar de las Pokédex. Se trata de aparatos realmente útiles para los entrenadores Pokémon. - explica. - No sólo podréis utilizarlas para consultar información de todos los Pokémon que habitan la Región Ámbar, sino que tiene bastante funciones muy útiles. Tiene una función de análisis Pokémon, tiene instalado un mapa... ah, y también os sirve para identificaros como Entrenadores Pokémon y para utilizar el Sistema de Intercambio Pokémon de los Centros Pokémon. Y hablando de Centros Pokémon, con la identificación de la Pokédex os podéis alojar de forma gratuita en éstos. - dice, mirando él mismo los cuatro aparatos. Al final, niega con la cabeza. - Disculpadme, me enrollo más que las persianas. Estoy seguro de que vosotros, como jóvenes que sois, sabréis descubrir rápidamente todas las opciones de la Pokédex. - asiente, y os mira a todos. - ¡Hay una para cada uno! ¡Adelante, cogedlas!

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17/12/2017, 00:46
Klaus Grayson

Klaus se mantuvo tenso y expectante a la decisión del profesor, una que marcaría no solo la dirección de la liga para él, sino de su vida. Tenía que emprender el viaje con su compañero, no podía ser de otra forma.
Notó como el corazón se le partía al escuchar las palabras del profesor, estaba preparado para protestar, pero antes de que lo hiciera el profesor soltó aquel "aunque" que devolvió la esperanza al muchacho y el brillo a sus ojos.

-¡No!- Gritó de alegría.- ¡Ni si quiera hemos participado en un combate pokémon!- Añadió encantado por la respuesta del profesor.

Aquello si que era un golpe de suerte, Eevee llevaba bastante tiempo a su lado, pero nunca habían participado en un combate pokémon, en parte porque la pareja tampoco había viajado demasiado, y ahora aquello jugaba en su favor.

-¡¡Siii!! ¿¡Has escuchado Eevee!? ¡tú y yo colega!- Le dijo a su compañero orgulloso soltándolo con cuidado y lanzándose sobre el profesor sin ninguna vergüenza para darle un abrazo.- ¡Gracias! ¡es usted el mejor!

Ya mas consciente de la situación una vez hubo pasado el momento de euforia, el chico lo soltó un poco avergonzado, pero sin dejar de sonreír como un tonto mientras escuchaba el resto de la explicación.
Tardó un poco en comprender lo que le habían dicho, pues seguía en una nube, pero finalmente cogió la pokédex azul, sin duda era la que le parecía más molona.
Hecho aquello Klaus se entretuvo en mirar la información de la pokédex sobre Rowlet, ya que era el que le parecía más extraño, además de que estaba deseando usarla, aquello lo convertía en un entrenador de verdad.

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17/12/2017, 01:33
Sabine Yew

Cuando el bulbasaur la saludó de aquella manera tan adorable, a punto estuvo de dar un gritito de felicidad absoluta. ¡Era muchísimo más adorable de lo que se había imaginado que sería! Sabine acarició la cabeza de su nuevo amigo cariñosamente.

 -Eres un encanto. Ya verás qué bien nos lo vamos a pasar de viaje tú y yo.

Los demás habían elegido también a sus pokémon y al parecer Klaus había conseguido el permiso necesario para que su eevee fuera registrado como su pokémon inicial. Así que eran un eevee, un chikorita y un rowlet. Interesantes elecciones, ¡muy interesantes de hecho! ¿Cómo construirían el resto de su equipo aquellos chavales? Eso era algo que la profesora en ciernes quería ver. Y, llegado el momento, poner a prueba con algún que otro combate. ¿Podía todo aquello ponerse aún más interesante?

El Profesor Abeto se encargó de contestar a eso haciéndoles entrega de lo que probablemente era el objeto más importante que todo entrenador tenía que llevar encima: la pokédex. Los ojos de Sabine brillaron emocionados mientras miraba aquellas maravillas tecnológicas.

 -Es un honor aceptar algo así, Profesor Abeto. Muchas gracias.

Con dedos temblorosos Sabine eligió una de un encantador tono morado, la que le pareció la más bonita de todas. Había visto muchas pokédex antes, pero nunca había tenido una para ella sola. Ahora tenía su propia enciclopedia pokémon, identificación de entrenadora y mil cosas más en un cómodo y elegante aparato que le cabía en el bolsillo. ¡Tenía que estrenarla pero ya! Así que con una sonrisa emocionada, abrió la pokédex y la apuntó hacia su compañero bulbasaur para analizar sus datos. Porque sabía muchas cosas sobre los bulbasaur en general, pero quería empezar su viaje sabiéndolo todo sobre su nuevo amigo en particular.

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17/12/2017, 17:52
Lena

Al final hasta el chico que venía con Eevee, Klaus, tendría suerte ya que el profesor había aceptado su petición. Lena le dedicó una sonrisa a Klaus, contagiada por la felicidad del joven. 

Y en ese momento, las pokéball de Chikorita y Rowlet se abrieron solas, si dijera que estaba preparada para lo que se venía, sería la mentira más gorda jamás contada. Los gestos de su pokémon eran los más adorables que había visto en su vida. Aunque le hubiera gustado evitar montar una escena, era demasiado tarde, no podía contenerse. No ante una "verdurita" tan monérrima como Chikorita.  

- ¡Pero que cosita más adorablee! ❤❤ - exclamó, agachándose para ponerse a la altura de Chikorita, pasando una mano por la mejilla del Pokémon hoja, y luego le acarició el lomo con suavidad, toda sonriente. - ¡Hola! ¡Mi nombre es Lena! - y entonces tomó a Chikorita en brazos. En ese momento, Lena olfateó el aire. No me lo puedo creer.. Huele igual que mamá.. Pensó entusiasmada, achuchando a Chikorita. - Me alegro mucho de conocerte Chikorita, cuidaré bien de tí ya verás. - dijo con alegría, acercando una mejilla a la del Pokémon planta en gesto cariñoso.

Tras una efusiva presentación, la peliazul volvió a darse cuenta de dónde estaba. Carraspeó ligeramente, serenándose después de su "espectáculo" y escuchó de nuevo atenta al profesor Abeto. ¡Oh claro! ¡La Pokédex! - ¡Muchísimas gracias profesor Abeto, le prometo cuidar muy bien a Chikorita! - dijo tomando el aparato de color aguamarina, en verdad era un objeto realmente útil, era la primera vez que tenía una. Incluso parecía más completa que su PokéNav. 

Estrenemos esto.. Veamos... Pensó para sí, apuntando con la Dex a su Pokémon, quería saber todo lo que pudiera sobre su nuevo compi, eso sí, no pensaba soltarla de sus brazos aún.

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18/12/2017, 09:17
Alabaster

Con la Pokéball en mis manos, me sorprendí bastante cuando el chorro de energía salió de esta. Pero al ver a mi nuevo compañero frente a mí, aleteando y mirándome fijo, me presento: ¡Hola pequeño! Yo soy Alabaster. -Guardo la Pokéball en mi bolsillo y extiendo mis brazos, abriendo mis palmas para que Rowlet pueda posarse sobre ellas- Había esperado este día toda mi vida... Rowlet.

-Comienzo a observar de cerca al Pokémon, mientras susurro: Row-let, Rowlet... Me sentía raro diciendo su nombre
-Reclino mi cabeza hacia un lado imitando a mi nuevo camarada- Creo que debería darte un nombre, ¿no? 

-Durante unos segundos me quedo en silencio pensando-. Tu nombre "tradicional" es Mokuroh. -Asiento tras mis palabras: Sí, me gusta mucho más que Rowlet... ¡Está decidido! Tu nombre será Mokuroh, y tu seudónimo sera Kuro, como la oscuridad de la noche.

Luego de darle un nuevo nombre a Rowlet, escucho la explicación del Profesor y me acerco para tomar mi Pokédex. -Cojo la de color negro, perfecta para la ocasión.- Veamos qué es lo que tiene que decir este aparato sobre ti, Kuro. -Con Rowlet posado en mi antebrazo derecho, abro la Pokédex y apunto a mi Pokémon.-

Notas de juego

*Cuando mi pj dice "nombre tradicional" se refiere al nombre en Japonés. 
Alabaster normalmente usa algunos nombres de Pokémon en Japonés, como también se refiere a su Ciudad natal como Ecruteak City en vez de Ciudad Iris. 

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21/12/2017, 20:20
Pokédex de Klaus

Rowlet, el Pokémon pluma hoja. Es cauteloso, desconfiado y de naturaleza nocturna. Durante el día acumula energía mediante la fotosíntesis. Usa sus afiladas plumas como arma arrojadiza y la fuerza de sus patas le permite asestar poderosas patadas que es mejor no subestimar.

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21/12/2017, 20:21
Pokédex de Sabine

Bulbasaur, el Pokémon semilla. La semilla de su lomo está llena de nutrientes. La semilla brota a medida que el Pokémon crece. Es fácil verle echándose una siesta al sol.

Análisis Superficial del Pokémon

Nivel: 5
Género: Macho

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21/12/2017, 20:23
Pokédex de Lena

Chikorita, el Pokémon hoja. Al luchar, Chikorita agita la hoja que tiene para mantener a raya al rival. Pero, al mismo tiempo, libera una suave fragancia que apacigua el encuentro y crea un ambiente agradable y de amistad. Con la hoja de su cabeza puede medir la temperatura y la humedad. Le encanta tomar el sol.

Análisis Superficial del Pokémon

Nivel: 5
Género: Hembra

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21/12/2017, 20:24
Pokédex de Alabaster

Rowlet, el Pokémon pluma hoja. Es cauteloso, desconfiado y de naturaleza nocturna. Durante el día acumula energía mediante la fotosíntesis. Usa sus afiladas plumas como arma arrojadiza y la fuerza de sus patas le permite asestar poderosas patadas que es mejor no subestimar.

Análisis Superficial del Pokémon

Nivel: 5
Género: Macho

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21/12/2017, 20:29
Profesor Abeto

-No es nada, muchacho. No es nada. - ríe el Profesor Abeto al ser abrazado tan alegre y efusivamente por Klaus. Después de que el chico le suelte Abeto mira a su alrededor con satisfacción, observando a Eevee saltando alegremente con Klaus, a Chikorita sintiéndose a gusto siendo abrazada por Lena, a Bulbasaur esperar con expectación la reacción de Sabine y a Rowlet, ahora Kuro, posarse en el antebrazo de Alabaster. - Me reconforta ver que todos adoráis tanto a los Pokémon. - dice, asintiendo contento, con los brazos cruzados tras la espalda. - Muchos jóvenes de hoy en día entrenan a sus Pokémon como si jugasen a un videojuego. - dice, con un notable desagrado en su voz. - Capturan un montón de Pokémon sólo para poder decir que tienen muchos... y luego los mandan al Laboratorio Pokémon de turno y no vuelven a interesarse por ellos nunca más. - niega con la cabeza. - Recordad: los Pokémon son seres vivos, y capturar uno supone una responsabilidad. No os estoy diciendo que os limitéis a un equipo de seis Pokémon, que son los que por norma podéis llevar con vosotros en todo momento. - vuelve a negar con la cabeza. - Si acabáis con más de seis Pokémon estaré encantado de cuidar de los que no quepan en vuestro equipo sin ningún problema. Simplemente os pido que no los abandonéis. - su mirada es seria durante unos segundos más, hasta que luego sonríe. - Ah, disculpadme. A veces me pongo demasiado serio, ¡y este es un momento alegre! - dice, asintiendo. - Ya sois Entrenadores Pokémon. ¡Vuestra aventura acaba de empezar! - os dice de forma grandilocuente. - Al este de Pueblo Alba se encuentra la Ruta 1, perfecta para entrenadores novatos. Ese será vuestro primer reto. - el Profesor Abeto se cruza de brazos. - Por supuesto, si tenéis alguna pregunta que hacerme... no os cortéis.