Partida Rol por web

Mi plan había funcionado, los Repelentes habían surtido efecto y hanían formado una especie de barrera que impedía a los Spearow acercarse más. No sabía cuanto duraría, pero esperaba que lo suficiente como para encontrar alguna solución a aquél problema. Los ataques de los Pokémon de mis compañeros habían surtido efecto, paralizando y durmiendo a algunos pájaros, pero sería imposible hacer lo mismo con todos.

-Sandy, usa Malicioso para ahuyentarlos.- ordené a falta de una idea mejor. Quizá si esto sigue así deberíamos intentar huir corriendo, aunque no sabía si podrían ir más rápido que esas aves.

Si, estoy bien tranquila- le dije a mi amiga peliverde, antes de empezar a intentar ahuyentarlos con el movimiento de mi Capturador. Pero por desgracia parecía inefectivo, simplemente lo esquivaban.

Tuve que recoger el capturador mientras que el resto de mis compañeros al menos me hicieron caso y comenzaron a lanzar ataques de estado, que no dañasen a los pokemon... menos Miaka, ella seguía lanzando Nieve Polvo, y eso era muy dañino para los pokemon... quizás es que no tuviera más ataques. Escuché al chico de pueblo hablándonos -Mi objetivo no es capturarlos... son demasiados para que pueda hacerlo. Esperaba espantarlos... aunque no funcionó- le dije al chico como respuesta.

En fin... ¿y ahora que hago yo? Leaf no tiene ataques de estado, salvo Desarrollo y eso no servirá de mucho para asustarlos... ¿o si? Seguramente no... pero no quiero lanzarles un placaje o lanzarme yo mismo moviendo los brazos para asustarlos y que en vez de eso me piquen -Leaf, usa Desarrollo... ¡y luego grita!- le dije a mi compañero. Desarrollo aumenta estadísticas... ¿aumentaría el volumen? Quizás eso les asuste... y si no, pues los espantaré yo mismo moviendo los brazos como loco.

-Entonces solo los asustamos y ya ¿No Rick? Ya has oido Pollo, a gritar y asustarlos todo lo posible. GRUÑIDO, GROAAAAAAAAH - Imitaba un pokemon gruñiendo para ayudar a Pollo con su ataque

Los Spearows seguían sin poder acercarse hacia vosotros y los que lo hacian eran afectados por la paralisis, hipnosis, bostezo, heridos por el nieve polvo o fliteados y gruñidos por los demás. Poco a poco iban cayendo pero eran demasiados todavía. Cada vez parecía ser mejor idea la de correr a la siguiente ciudad sin pensarlo... Sin embargo...

-Preparados todos - Gritó una voz por detrás vuestra - Apartad a vuestros pokemon. - Ordenó aquella voz esperando que hicierais lo que decía, mientras tanto un Eevee saltaba por en medio de vosotros evolucionando a Jolteon en mitad del aire - Vee, Rayo. - Ordenó con seriedad y acto seguido el Jolteon cargó electricidad para liberarla contra los Spearows de alrededor siendo que poco a poco entraban en contacto con los rayos lanzados e iban cayendo uno a uno.

Green apareció a vuestro lado siendo que hizo volver al Jolteon - Bien hecho Vee - Lo acarició poco a poco - Debeis ir con cuidado. Iba a encargarme de esto después de daros vuestros pokemon, pero no he podido llegar antes. Deberiais aprovechar y capturar algún Spearow si quereis antes que los responsables de Paleta los lleven al centro pokemon antes de lejarlos libre. No lo habeis hecho mal... Pero necesitais tener más nivel antes de enfrentaros a una bandada completa, aprovechad ahora que en la ruta 1 no hay peligros para ir tranquilos. - Empezó a andar entonces para adentrarse en la ruta 1 hacia ciudad Verde. - Hasta luego, que os vaya bien. - Gracias a Green el peligro había desaparecido por fortuna, aunque no podiais considerar esto una victoria, habiais sobrevivido a vuestro primer peligro.

Como sabrá que va a evolucionar? Pensé mientras el jolteon solventaba nuestro problema de un solo ataque. 

¡Muchas gracias Green!, ¡no le digas esto a mamá! Era seguro que Green no iba a decir nada, aunque Oak quizá, y no quería que mamá se preocupara antes de empezar, estaba emocionada por ver a un entrenador haciendo una demostración así, pero un poco avergonzada por que tuviera que venir un héroe de verdad a salvarnos, ahora parecíamos unos críos. 

Bien hecho brisa, dije mientras Le subía a mi hombro, seguro que querría ver la ruta y se lo había ganado con sus ataques. Lo has hecho muy bien, ¿estás lista para los gimnasios? Acabé mientras Le acariciaba el hocico, siempre estaba frío y era agradable. 

Me giré a mis compañeros, quería llegar al bosque para entrenar, y quizá ganar algo de dinero, dicen que en los combates se apuesta un poco. ¿Seré capaz de ganar? 

Chicos!¿ Alguien quiere algún Spearow? ¿O continuamos? 

—Gracias —susurró Miu con tono sombrío a Green tras su intervención.

Habían luchado juntos como un equipo. Estaba convencida de que las ideas del grupo habían sido brillantes. Que llegase el ayudante de Oak para rematar la jugada que tanto les había costado a ellos no le gustó un pelo.

Pero de nada serviría quejarse.

—Lo has hecho muy bien, Bart.

Sacó de su mochila una pokeball y se la lanzó al Spearow más cercano.

     Gra~cias...- decía al ver la intervención del asistente del profesor el cual parecía haber acabado con todo esto tan rápido como empezó ... lastima... me hubiera gustado ver como se desenvolvía Maggie... , a si que solo observe como la gran parvada antes molesta, ahora estaba en su mayoría en el suelo casi ya sin moral de la paliza que se habían tragado  mientras guardaba a Maggie en su pokebola para que descansara un poco de todo este ajetreo ... son Spearows... igual ésto es karma... o algo similar... 

     Ya sin problemas aparente me junto con los chicos con los que había llegado hasta la ruta, mientras escuchaba el consejo de capturar a uno de estos pajarracos - de momento... yo paso de capturar, pero si tu quieres, los esperamos entonces...- digo a Cobalto que era el ultimo en decidir mientras veía a Miu quien ya se adelantaba a intentar capturar a alguno de esos pájaros. 

La cosa no pintaba bien para nosotros... ¡por mucho que los espantábamos seguían apareciendo más! Pero entonces... ¡llegó Green! No me dio tiempo a alucinar de volverle a ver cuando dijo que apartásemos a los pokemon, ¿que iría a hacer? No lo sabía pero por si acaso abracé a Pollo... entonces sacó a su Eevee y lo evolucionó a Jolteon, y... -¡Ahhh!- me asusté mucho y por impulso busqué refugio tras Rick, apretando mi cara contra su espalda. Había usado un ataque tipo eléctrico... ¡y a mi no me gustaban los rayos! Al igual que a los pobres Spearows... sabía que tenían mal genio y nos habían atacado, pero eran monos y no quería verlos abatidos por un rayo.

Vale... estaremos tranquilos- dije con brevedad, aún detrás de Rick por la presencia de ese Jolteon. Era bonico... pero no me quería arriesgar a un calambre. Dijo de aprovechar para capturar un Spearow si nos interesaba... y hasta que no lo vi yéndose no salí de la espalda de Rick. Miaka también lo preguntó, pero yo negué con la cabeza -Yo prefiero que se los lleven al centro pokemon y los liberen luego- le respondí a la chica; aunque si alguno capturaba uno, seguramente le pediría jugar con él cuando pudiera -Por mi nos podemos ir, ¿tu Rick?

Nuestros ataques nunca conseguían espantar a todos los Spearows que nos atacaban... Esto pintaba muy mal, aunque esperaba que... En realidad no lo sabía, ojalá todo terminase bien para todos.

Aunque para ayudarnos, apareció Green para ayudarnos... ¿Con un Eevee solo? No, de repente lo hizo evolucionar seguramente con una piedratrueno en Jolteon... ¿no era un poco excesivo forzar evolución para repeler a unos pájaros? No lo se, vi como el Pokémon realizaba el ataque y preferí apartar la mirada... -Menos efectivo por favor- pensé. Podría haber usado un ataque más inofensivo, sobretodo después de estar intentando qué no salieran muy perjudicados. Noté también como Angie se me pegaba... Sabía que le aterraba los ataques eléctricos, así que la dejé sin dudar -Tranquila Angie- le dije acariciando su cabeza para calmarla.

Por mí también nos podemos ir- le respondí a Angie y a los compañeros. Prefería que recibieran todos los cuidados que pudieran -¡Espera Green! ¡Que me gustaría preguntarle por ese Jolteon! ¿No ha sido mucho para solucionar esto?- no me pude resistir preguntarle a Green para satisfacer mi curiosidad.

Estaba por correr hacia atrás para que no acabar mal parada cuando Green apareció e hizo que su Eevee evolucionara a Jolteon " Ese Eevee es..." Rápidamente sacó de su pokeball a Midori y se quedó con este abrazándolo mientras observaba como el poderoso pokemon acababa con toda la amenaza de un solo ataque. Entonces fue cuando decidió dejarlo en el suelo y que ambos se reunieran, después de todo eran padre e hijo, supuso que el separarlos sin más estaría feo solo... Se castigaba un poco por dentro al no haberse dado cuenta antes de ese detalle. 

- Midori, es hora de que se vayan... Ven. ¡Señor Green, gracias! 

Despidió al gran entrenador con la mano, con energía y una sonrisa pero le dolió un poco separar a padre e hijo, viendo como se daban ciertos mimos ambos pokemon entre ellos pero por como volvió Midori al recibir la órden no parecía enfadado con Ruby así que supuso que se le pasaría la pena con cariños en unos días siendo que lo tomó de nuevo en brazos y este rápidamente se acomodó en los mismos. Lo que más le sorprendió fue el grito de Rick quien al parecer deseaba hablar con Green, ¿A caso iría con el? Por su parte sacó una PokeBall vacía y miró a Arion quien por estar usando también el repelente era quien más cerca tenía. - A mi... Me vendría bien saber como se captura un pokemon. Lo miró enseñando la bola y luego miró a un Spearow de los que estaban en el suelo algo heridos por el ataque. - Creo que esta... Es una buena oportunidad para aprenderlo. ¿Me ayudas?  En ese momento dejó que Midori se subiera a su hombro, rodeando la parte trasera del cuello con su cola como si fuera una esponjosa bufanda mientras aún miraba como se alejaba caminando su familiar. Podía sentir en cierto modo la tristeza del animalito, ella pasaba por algo similar y eso que se iba por propia voluntad, ¿Como sería separarse de alguien por orden de otros? Empezó a acariciar entre las orejitas con cariño esperando la respuesta del pelirrojo. 

La situación parecía hacerse más crítica por momentos. De momento podíamos mantener alejados a los Spearow, pero cuando el repelente se agotara y nuestros Pokémon comenzaran a cansarse, nuestra única esperanza sería correr de vuelta al pueblo.

Seguía pensando cómo escapar de allí, cuando reconocí una voz a nuestra espalda. Al mirar comprobé que se trataba de Green, que acudía a nuestro rescate. Al ver como su Pokémon evolucionaba a Jolteon, decidí regresar el mío a su Pokeball, no fuera a ser que resultara herido por accidente. El Pokémon de Green realizó un poderoso ataque que dejó fuera de combate a la bandada, lo cuál fue bastante sorprendente. Yo esperaba volver a mis Pokémon incluso más fuertes que eso.

-Gracias por la ayuda.- dije antes de que el castaño se fuera. No me interesaba atrapar a un Spearow, después de todo Charmander hacía la misma función incluso mejor -Por mí podemos irnos ya.- dije a la espera de que el que lo deseara atrapara alguna de esas aves. En ese momento escuché la petición de Ruby.

-Claro, es sencillo. Elije el Spearow que quieres atrapar y lanza la Pokeball. Cuando toque al Pokémon esté resultará atrapado.- expliqué rápidamente la teoría de la captura. Realmente no era algo complicado, sobretodo cuando los Pokémon estaban fuera de combate, como era el caso de estos Spearow.

Green nos había sacado las patatas del horno y no sabía como debería sentirme. ¿Agradecido, aliviado tal vez? La verdad es que me sentía bastante inútil. Todos esos años ayudando a mis abuelos, creyéndome que era mejor que esos entrenadores que dejaban sus pokémons en la guardería solo para buscarlos un tiempo después decepcionados que estos no aprendieran algún movimiento alucinante al estilo de hiperrayo -¿Acaso creen que el abuelo maneja algún tipo de lugar de peleas clandestinas? ¿O es que esperaban que esto fuese un campamento militar?- Solía preguntármelo bastante a menudo sintiéndome superior. Y ahora estaba aquí sin siquiera poder salir del primer pueblo de mi aventura por mi cuenta, patético.

Levy me había preguntado algo, dado como me sentía no le presté demasiada atención pero pude intuir que tenía algo que ver con los spearrows. Negué con la cabeza, no iba a dejar que alguien hiciera el trabajo por mi y este no era momento para lamentarse. Mire a Sal con fuego en los ojos como esperando complicidad de este. No se si fue porque este me entendía o era que simplemente estaba viendo lo que esperaba ver, pero cuando este bostezó y miró al horizonte yo avancé decidido.

-Como yo lo veo acabo de perder mi oportunidad con esos spearrows, me derrotaron así que se libran de mi por esta vez. Por otro lado esto no ha hecho más que comenzar ¿no lo crees así, Levy? -

Green se detuvo por un momento al escuchar a Rick y entonces se giró siendo que su Jolteon también lo hizo. Dieron un par de pasos hacia vosotros y entonces respondió a la pregunta del propio Ranger - No, no ha sido tanto. ¿Verdad Vee? - preguntó a su compañero al agacharse y luego acariciarlo, a los pocos segundos Jolteon parecía evolucionar de nuevo, solo que esta vez parecía retornar a Eevee. Parecía un acto imposible, o algo así como un milagro. - Hay ciertas cosas en este mundo que escapan a nuestra comprensión y otras que sin embargo sabemos entenderla y a pesar de que no nos guste a veces lo usamos a nuestro favor. Dejar que vuestros pokemon evolucionen es una de ellas, ya que cuando un pokemon evoluciona es capaz de cambiar por completo o seguir siendo como antes.

Se levantó y entonces os miró a todos de nuevo - Vee por su parte puede evolucionar y retornar las veces que quiera, a diferencia de otros Eevees. Si algún día quereis saber el por qué... Primero me tendreis que demostrar que sois merecedores de saberlo. - Por un momento denotó las expresiones de algunos y luego miró a los Spearows. - Y creo que aunque os queda un largo camino, ya habeis dado un paso de gigante... Siento haberme metido en vuestra primera pelea, pero ni los repelentes iban a durar eternamente ni las variaciones de estados ayudarían lo suficiente. Aún así... sin duda no os hubiera hecho falta, pero no quería que vuestros pokemon salieran heridos nada más salir de Paleta. Me sentiría culpable y responsable.

Finalmente suspiró y se dió la vuelta - Si pasais por ciudad Verde, estais invitados a pasar por mi casa. Buena suerte en vuestro viaje.

Mientras Green se iba, parecía que Miu logró atrapar al Spearow y ahora estabais solos con una tranquila ruta 1... al menos hasta que enfermeros y voluntarios del centro pokemon de ciudad Paleta llegaran para recoger a los Spearow

      No puedo evitar dejar lo que estaba viendo, para notar aquella... escena... quedándome sin palabras pues sabia que por lo poco que me manejaba en el tema solo iba a terminar mas confundido, pero si, si alguien estaba observando la sonrisa natural en mi rostro se había vuelto una linea recta mientras las ideas me comían la cabeza ...C...calma~calma... D-de seguro... q-que hay una explicación... p-puede que sea cosa de una nueva raza... de esas excéntricas... claro como el Muk de colores o el Vulpiz que lleva Miaka... respirando un poco fuerte buscando recuperar la compostura.

     La voz de mi compañero Cobalto me ayuda a reaccionar sacándome del pequeño trance en el que me había metido - Ohh...eh...si~si... comenzar...- un tanto distraído mientras no podía dejar de ver extrañado aquel Eve, queriendo alejarme del sitio, aunque eso se soluciono... pues el mismo asistente del profesor se fue solo dejándonos mientras se escuchaba en el fondo el sonido de una pokebola terminando su captura. 

   F-felicidades Miu...- decía aun un tanto distraído a mi compañera - Tal vez quieras ir centropokemon... para curar las heridas y la parálisis del emplumado... o pregúntales a ellos...- mientras veía como empezaban a llegar los primeros enfermeros - de todas maneras, nosotros te esperamos... - intentado recuperar parte de mi confianza habitual, aunque se notaba que eso me iba a costar un rato en pasar. 

Guardé a mi pokemon contenta con su actuación, lo has hecho bien pequeño. 

Después me acerqué a Miu y Levy, increíble Miu! Es un pokemon muy guay dije ilusionada, era la primera vez que veía capturar un pokemon, observé como lo hizo la entrenadora de Pueblo Lavanda para saber que hacer cuando fuera mi turno. 

Despedí con la mano a Green, esperando que hubiera escuchado lo que Le había dicho y no se '' chivara'' a mamá.

Que quieres hacer Miu, volvemos al centro pokemon?, yo creo que tengo alguna baya para tu pajarillo si la quieres. 

Gracias a las explicaciones de Arion y que pudo ver cómo Miu capturaba uno, logró hacer lo propio en el que tenía más cerca tras lo cual recogió la pokeball del suelo y se la quedó mirando con curiosidad. -Es idéntica a la de Midori, ¿Cómo sabré cuál es cuál? Tomó con la otra mano la pokeball vacía de su Eevee quien seguía sobre sus hombros y empezó a compararlas pudiendo comprobar que, efectivamente no sabía ver las diferencias. Al ver que eso sería un problema se guardó una pokeball a cada lado de sus caderas en el cinturón. -Creo que de momento con esto bastará. Izquierda Spearow y Derecha Midori. Había dejado que su Pokémon se sentara  en el suelo, acababa de ver cómo Ver volvía a ser como era su hijo, para Ruby quien no entendía nada era impresionante y algo nuevo el simple hecho de ver la evolución por lo que cuando este volvió hacia atrás pensó automáticamente que eso era normal. 

-Bueno, en la ciudad hay un centro Pokémon también y teniendo en cuenta que nos han abierto el paso, mejor ir ya hacia allí. Si no es posible que cuando volvamos a intentar cruzar la ruta encontremos el mismo problema.

Por su lado esperaría a ver qué querían hacer los demás ya que no quería ir sola pero tenía bien claro que sí siguiente paso tendría que ser hacia la ciudad.

Al ver cómo Green volvía hacia nosotros, le miré algo curioso. Mi mandíbula casi toca el suelo cuando vi como el Jolteon de Green volvía a ser un Eevee, desconectando del resto de conversaciones a mi alrededor. Ese era un acto técnicamente imposible, y jamás lo creería de no haberlo visto con mis propios ojos. Las siguientes palabras de Green me dieron a entender que eramos demasiado débiles, y hasta que no pudiéramos plantarle cara, no nos revelaría el secreto que se escondía tras su Eevee capaz de involucionar. Apreté los puños con el fuego dentro de mí renovado y más ardiente que nunca. Para cuando salí de mis pensamientos, Ruby ya había capturado al Spearow.

-Felicidades. Con el tiempo te acostumbraras a recordar la posición de cada Pokémon en tu cinturón.- dije para tranquilizarla un poco y que no se agobiara. Después miré al resto del grupo -Yo voy a avanzar ahora mismo, debo hacerme más fuerte cuanto antes.- tras decir eso miré de reojo a Ruby. Aún teníamos algo de lo que hablar, pero si ella prefería ir por su lado, tendría que ser más adelante.

Sin esperar mucho más, decidí avanzar por el camino, evitando pisar a los Spearow que aún estaban inconscientes, y viendo con satisfacción que los equipos médicos ya se los estaban llevando.

-Okay ese Green es mucho más de lo que aparenta, al menos le hace justicia a su mote de "Leyenda"- Pienso cuando veo que su Jolteon involuciona a su forma de Eevee. Aún así, y por más curiosidad que esto me traiga, mi camino está claro en ese momento. Presto atención a Levy, Miu y Miaka, que son con los que tenía planeado comenzar el recorrido del bosque verde. Estos están planeando ir al centro pokemon para tratar al nuevo pokemon de Miu, y por noble que esto sea yo ya estaba un poco impaciente -No es que quiera aguar la fiesta pero pienso adelantarme un poco, Sal y yo estamos llenos de energías, ¿Verdad Sal?- Este simplemente bosteza mientras sigue colgado de mis hombros - Si ustedes van al centro pokemon puedo esperarlos en la entrada del bosque verde un tiempo.- Tras esto meto a Sal en la pokeball, recojo mi mochila y comienzo a caminar por la ruta 1 en dirección al bosque verde -¿Quien sabe, tal vez ahí si encuentre a un amiguito para Sal?-

Recuperó la bola y se la quedó mirando como si fuera la primera vez que la veía. Su botón central ya no desprendía ninguna luz y esa era la certeza de que había añadido a un miembro más a su equipo. Hasta hacía un segundo, ese pokemon estaba libre y, ahora, estaba encerrado en un espacio diminuto que...

Miu dio un respingo cuando se dirigieron a ella. Miró a Levy y a Miaka sin comprender muy bien a qué se referían. Se había distraido tanto que no había escuchado lo que decían. O, más bien, sus palabras habían quedado grabadas en su mente para más tarde. Las repasó con cuidado, echando mano de contexto. Fue Cobalto quien le dio la llave de la conversación:

—¿Al centro pokemon? ¡Oh! Sí, claro. Será lo mejor... Será un momento, estoy segura. Solo tengo que tratar a Spearow, así que si queréis esperar... O adelantáos, yo os alcanzaré enseguida. Gracias por preocuparos —añadió por último a Levy y a Miaka.

Y antes de que dijeran algo más, Miu echó una carrerita hacia el Centro.