Partida Rol por web

   ¡ Q.que solo dije que se parece ! - me aclaraba al ver que ambos Ranger se me quedaban mirando por mi respuesta, pero al ver que no pasaba a nada seguía guardando mis pertenencias para partir cuanto antes.

   Ehhhh.. - me quedaba viendo el Pokémon que había salido de aquella pokeball, tal era mi desconcierto sobre que podía ser, que no me queda otra que sacar el Aparato parlante como lo hacia Ruby - ¿ Rotom... u..una ayudita ? - mientras apuntaba al arbolito nevado.

...

  Al poco caminar tuvimos que detenernos enseguida, otra presencia ajena al grupo hacía acto de presencia.

    Oigan... - apuntando a las grandes tenazas blancas que salían de la cabeza del robusto bicho -  ¿ Creen que se referían a éste muchacho marrón ?

Dejé el paquete y me fijé en que había otro Pokemon dentro del alamacén: un gran Arcanine durmiendo algo agitadamente en una esquina... estaría soñando en perseguir Bunnearys por los campos? No le dí mucha importancia y salí de alli.

Aunque al cabo de un rato, mientras investigaba a los pequeñajos comer, volví a repensar eso primero. Podría tener frío? Imposible, un Pokemon de fuego como Arcanine no podía pasar frío, a menos que significara que su energía interna no funcionara muy bien... Tal vez me lo pensaba demasiado y solo fuera lo primero. Observé que Manuka y Vaiana estaban en el tropel de Pokemon y empezaron a alimentarse de una forma casi caótica pero a la vez amigable con los demás a su alrededor, a su forma: Manuka corrió a por el plato mirando hacia atrás a ver si otros Pokemon le seguían, y Vaiana decidió coger unos trozos y volver al tejado con los otros Pokemon que había conocido en la noche. Era curioso ver como interaccionaban los Pokemon entre sí, en parte especies tan diferenciadas conviviendo los unos con los otros, al igual que nosotros, los humanos, otra especie a iguales que ellos.

Cuando María vino con el desayuno y los platos decidí ayudarla y esta vez bajar del porche para que se sentara en este, y empecé a comer el desayuno que huevos con bacon que hizo... y salir de la cocina hecha en casa a la comida que mi hermano y yo comíamos en el hostal se diferenciaba mucho... no era ni mucho menos lo que hacía mi madre, pero era mucho mejor que lo primero. -Gracias! Y claro! Iba en esa dirección igualmente asi que...-

María me pregunto el estudio que estaba haciendo... creo que se lo dije ayer cuando entré no es asi? Aunque no me importaba volverlo a repetir. -Al investigar los demás Pokemon y sus patrones sería más fácil identificar un pokemon "anormal"... diferente a los demás.. ya sea en cuanto a carácter o tipo esperado... Como el Manuka de allí... viene de una manada de su especie, algo casi inexistente...-

Una vez terminado todo, decidí coger a los míos y me acerqué a María. - Lo que necesites ayudar nosotros tres lo haremos! para agradecerte la estancia claro está!- Y asi de paso hacer un entrenamiento para mejorar su fuerza y sus características: ya fuera levantar sacos para mejorar la fuerza, ayudar con los pokemon para mejorar la intelingencia, etc.

Finalmente nos pusimos en marcha siguiendo a Moeko por el bosque. Mientras caminábamos estuve escuchando la respuesta de Aiko, lo cual me dio algo que pensar. ¿Podría esta joven ser hija de esa otra persona? Las posibilidades eran bajas, pero no nulas. No tuve mucho más tiempo para darle vueltas a mi teoría, pues un Pokémon con pinta de estar de mal humor nos salió al paso.

-Ah, justo lo que pensaba, es un Pinsir.- dije al ver que mi razonamiento había estado acertado. El Pokémon parecía distraído buscando algo, al menos hasta que nosotros llegamos. Viendo que ahora su objetivo parecíamos ser nosotros, me preparé y tomé una pokeball de mi cinturón, sólo por si acaso.

-Moeko, si puedes hablar con los Pokémon, este sería un buen momento para intentar razonar con ese Pinsir.- le sugerí a la brujita. Si por mí fuera lo derrotaría para darle experiencia de combate a mis Pokémon, pero no quería tener que escuchar las quejas de los demás, así que pensé en darle tu na oportunidad a Moeko antes de lanzarme a la batalla.

Yo ya estaba listo para partir, acariciando la cabeza de Angie cuando la escuché hablar sobre el posible pokemon con el que Levy parecía haberme confundido con la descripción -Dudo que lo sea Angie, tranquila... los únicos que hay en el bosque son Pikachus- le dije a mi amiga con una sonrisa. Por otro lado, miré a Moetan cuando me preguntó que prueba podría tener de que hablase con los pokemon, y me encogí de hombros -Podrías decirme algo que le haya dicho a los Pikachu antes de que tu llegaras... eso sería una prueba- le propuse, aunque de todos modos sonreí mientras subía a la madre y a su huevo en los lomos de Skiddo mientras continuaba escuchándola aún sonriendo -Lo se, por eso tengo la certeza de que eres buena... Y espero que lo encontremos; o buscándolo o porque de verdad sabes hablar con los pokemon- le dije a Moetan con simpatía.

Entonces, abrí la pokeball que me habían dado... y admito que me impresionó bastante el pokemon que salió de él -¡Un Snover! Con... lucecitas de colores- dije sorprendido mientras lo veía con curiosidad, además de leer el cartel... el cual también me sorprendió -¿Ese Delibird de verdad me ha regalado un pokemon?- pensé mientras lo veía... aunque admito que no me podía quejar -Es un Snover Levy. Es de tipo planta y hielo. Suelen ser pokemon muy curiosos con los humanos, y algo bromistas... pero en primavera suelen darle a sus "víctimas" una de las bayas que les crecen en esa época como compensación. Son pokemon muy buenos- le expliqué a Levy que le pedía ayuda a Rotom... pero es que de los tipo planta me se todo de ellos, por lo que no pude evitar adelantarme -Así que eres mío... je, mola. Bienvenido a la familia- le dije acariciando la cabeza del Snover contento, antes de continuar con nuestro viaje.

Entonces, nos encontramos con... algo que si que encajaba más con la supuesta descripción de los pikachus -Pinsir- mencioné al verle... entonces, sintiéndome un pelín... ofendido -¿Entonces me parezco a un Pinsir?- pregunté en general... nada en contra de los Pinsir... pero hay pokemon más interesantes y... de mejor ver que un Pinsir -Puede...- dije a Levy, pensando en que... hmm, quizás era casualidad, pero quizás esto podría ser prueba de que Moetan hablaba de verdad... pero soy de los que piensa que "Una vez es casualidad, más veces es un hecho probado" De todas formas con un gesto indiqué a Leaf que se rezagara para que los pikachus estuvieran a salvo y los protegiera -Parece que estaba buscando algo... y no parece feliz de vernos. Ray, si tienes algo de miel sacala... les suele gustar la savia y las cosas dulces- le comenté al grupo y a Ray, antes de escuchar a Arion.

Me pensé lo que dijo y miré a Moetan -Bueno... hables con ellos o no, lo que si se nota es que los pokemons confian en ti fácilmente. Si quieres, podemos intentar tranquilizarle hablandole... ¿vamos?- le comenté a la chica con una sonrisa, ofreciéndome a ayudarla. A mi, siempre que podamos tratar con un pokemon salvaje de forma pacífica me gusta seguir esa linea. Y sería buena oportunidad de ver si dice la verdad o no...

Nada más le pediste a tu Aipom lanzar ese último ataque e hizo impacto, el caterpie cayó en el acto debilitado sin poder hacer nada más. El Weedle se quedó en tu pokeball al igual que el Wurmple si lo metias en una pokeball de nuevo. Lo único malo es que al tener más de seis, la pokedex te pedía confirmación para enviar un pokemon al pc

Tu Aipom sonreía como no era de otra forma alegre por el combate y un tanto más asustado Totodile te abrazó la pierna alegre de ganar. Nada como empezar el día con un buen combate, al menos si no estuvieras oyendo gritos desde donde estabas. Parecía que había alguien haciendo algo... ¿Quizás necesitara ayuda?

La RotomDex iba a ponerse las pilas para atender a la petición de Levy, hasta que Rick se le pasó por delante. Un tanto enfadado la RotomDex miró a Rick y exclamó - OYE QUE ESA ES MI FRASE - se aclaró entonces la garganta y dijo:

Nombre: Snover

Pokemon numero: 459

Tipo de pokemon: Planta-Hielo

Muy Debil: Fuego

Debilidades: Lucha, Volador, Veneno, Roca, Bicho y Acero

Son pokemon curiosos que conviven con humanos y... ¿Sabes que? Esta parte ya está dicha.

Dijo finalmente la RotomDex hastiada porque le robaran su trabajo.

-Pues los Pikachus me dijeron que les ayudariais a llegar a casa - dijo Moeko pasando por delante de Rick al pedirle una prueba de que hablaba con pokemon, aunque para cualquiera sería una prueba muy pobre. Al final la pequeña brujita dejó de insistir y se puso a caminar poco a poco junto a vosotros.

El camino fue sencillo y entremedias se rió por el caracter de la RotomDex, igual que Aiko y Angie al ver que Rick le robó su trabajo. Tanto así que Angie se acercó a su compañero para decirle - ¿No te da pena haberle quitado el trabajo a la RotomDex? Pidele perdón - dijo aunque con un tono un tano bromista el cual se acrecentó cuando rió al final.

Y al fin llegó el gran problema donde todos os detuvisteis siendo que cada uno reaccionó a su manera. Ray fue el primero junto a Arion que se puso en guardia, Aiko con un tanto de miedo dió un paso atrás, Angie por otro lado imitó un poco a su compañero pero preparando su propio capturador por si hacía falta y Moeko empezó a asustarse cuando Arion le pidió que hablara con el

-N-no hace falta. Ya está hablando el solo - Y es que el Pinsir no paraba de gruñir, al mismo tiempo que daba varios golpes al suelo y hacía gestos como de ser muy fuerte - Dice que atacará a todo el que pise su territorio... Que es el bicho más fuerte de todo el bosque, y que quiere encontrar ese huevo de Pikachu para ver que tal sabe - dijo esta vez con marioneta la cual también gesticulaba asustada. - N-no parece que nos v-vaya a dejar pasar. Ni que atienda a razones

Moeko se quedó con Rick escuchando su plan al igual que lo que le pedía Arion - ¿Que? ¿Confiar? No, no funciona así. Los pokemon confian en quienes quieren, hablar con ellos ayuda y entenderlos aún más, pero no funciona de esa manera. No voy a poder calmar al Pinsir, aunque pueda entenderle. - y sentenció finalmente quitando una vía de solución

De la misma manera, cuando le pidió Rick a Ray que usara su miel le miró incredulo - ¿Estás loco? Se nota que no sabeis nada sobre los pokemon bicho. Si es cierto que la miel atrae a los pokemon bicho, pero... ¿Que pasa si se la dás a un pokemon territorial, enfadado o grosero? Que no le importará tanto tomar la miel como arrancarla de nuestras manos. Nos atacará y mantendrá la guardia alta protegiendo su territorio y atacando tanto a los que se acerquen a el como a los que vayan por su miel. - dijo finalmente cogiendo la pokeball que guardaba a su otro pokemon bicho.

-La única manera de atravesar la zona de un pokemon territorial, es vencerlo. - mencionó con molestia aunque parecía también estar sonriente - Aunque este Pinsir debe de ser realmente el pokemon más fuerte de todo el bosque... ¿Que dices Zantet? ¿Te gustaría tenerlo de compañero? - no respondió que si ni no, simplemente se preparó para el combate.

Maria comió al mismo tiempo que tu le explicabas aquello, aunque se extrañó cuando dijiste lo de anormales, tanto que se quedó un tanto pensativa mientras miraba a tu Rockruff - Oh, entonces tu lo que estás buscando son pokemon "atípicos". Como el Onix del monte Moon. - aclaró poniendo otro ejemplo de un pokemon, aunque al contrario que Manuka, a este no lo conocías. - Pues si que es verdad que ha habido varios informes de algunos pokemon extraños como ese, aunque solo conozco al Onix, lo siento.

Entonces al ver que te ofrecías tanto a ayudar por la estancia se volvio a poner a pensar mirando al cielo e incluso al infinito - Si me ayudaras podría ir antes a Ciudad Plateada... Y me vendría bastante bien, sobre todo si me acompañas. - Se levantó cogiendo su plato y asintió con una amplia sonrisa - Está bien. Acepto tu propuesta, de hecho esa es la meta de la mañana. Salir de casa antes de la hora de comer para poder estar en Ciudad Plateada antes. Así que pongamonos a ello - Te dijo para meteros ambos en la casa.

Ambos dos, junto a Manuka y Vaiana, entrasteis en la casa, y Maria sacó una lista de tareas que suele hacer ella cada mañana. Entre ellas estaba alimentar a los pokemon que estaba hecho, pero lo siguiente iba a ser trabajo duro, pues era limpieza. Además de ir a buscar agua a un río que estaba cerca del bosque cercano. Te dijo que no profundizaras mucho más allá porque era facil perderse y no volver, y ese no era el bosque verde.

A lo largo de la mañana tuvisteis que realizar varios viajes a ese rio, pero juntos ayudasteis a limpiar todo el lugar, hasta Vaina parecía más colaborativa limpiando el techo. Mientras tu hacías eso, Maria limpiaba la ropa y camas improvisadas que tenía para los pokemon, además de que preparaba compresas frías para el Arcanine el cual pudiste confirmar que estaba enfermo. Quizás por eso quisiera salir antes.

Al cabo de toda la mañana al final acabasteis cansados, aunque jugando con unas pelotas con los pokemon salvajes que corrían por fuera de la casa. María finalmente salió de la casa y suspiró - Todo listo. Y aún es temprano. Makani, has sido de mucha ayuda de veras. Con todo listo puedo dejarle las comidas a los pequeñines para poder ir más tranquila a Ciudad Plateada. - y los cuencos estaban llenos, solo que a diferencia de la mañana nadie había acudido aún, no tendrían hambre.

-Cojo mis cosas y vamos ¿Vale? - dijo finalmente recogiendo sus cosas de casa para salir juntos hacia la ciudad, siendo seguidos por el Umbreon de Maria

Miré a Moeko cuando dijo su "prueba" de que hablaba con los pokemon... y me reí levemente -Eso se sabe desde hace rato, ¿no crees?- le pregunté sonriendo a la chica. Creo que era evidente que todos nosotros queríamos ayudar a los pikachus, sin necesidad de preguntarles a ellos... además porque se lo habíamos dicho a ella varias veces que ese era nuestro objetivo; es por eso que no pude evitar reírme.

No pude evitar reírme cuando el Rotom apareció y se quejó de que hubiera hecho su trabajo... no pude evitarlo, me apasionan los pokemon de tipo planta y me vengo arriba diciendo datos -Si, quizás me deba disculpar... perdona Rotom; para cualquier otro pokemon, dejaré que te expliques... pero dejame los tipo planta porfi- me disculpé con el pokemon pokedex y le pedí ese favor, esperando que se sintiera mejor.

Entonces, llegamos al tema del Pinsir... empezando a escuchar lo que Moeko y Ray tenían que decir sobre el pokemon. En primer lugar, escuchar a Ray sobre la locura que pensaba hacer -Yo soy experto en tipo planta, perdón- me disculpé por él si mi sugerencia le había parecido mala. También le escuché hablar sobre que solo podríamos derrotarlo peleando con él... aunque entonces ya estaba escuchando a Moeko. Decía que ese Pinsir nos atacaría por estar en su territorio y que quería encontrar el huevo de los Pikachus para comerselo -Quizás por eso no dejaba pasar a la familia...- pensé, aunque aún pensaba que eso no estaba confirmado solo porque Moeko lo dijera. Aunque ella parecía asustada por el Pinsir y prefirió no quedarse a hablar con él...

Pues bueno, entonces, viendo todo el paronama... suspiré -Ains... Pues nada... entonces solo queda algo que hacer- dije guardando el capturador -Leaf, quedate con Moeko y con los Pikachus y protegeles... Snover, conmigo. Porque no sabré mucho de tipos bicho, pero se que Pinsir odia el frío- le dije a mis pokemons diciendo eso último en referencia a Ray, antes de mirar al resto... y suspirar otra vez -Ains... Pues parece que pelearemos... seguro que algunos se alegran de oírme decir eso- dije, mirando de reojo a Arion que seguro le gustaba oírme decir que podía pelear. No me gustan las peleas... pero mira, le haré caso al experto en insectos -Nuevo plan. Debilitemos a este pokemon, hasta que Ray pueda capturarlo... ¿os parece buen plan?- terminé proponiendo, esperando que todos estuvieran de acuerdo para prepararme para combatir con mi nuevo pokemon.

No pude evitar mirar a Moeko sorprendido cuando tradujo lo que ese Pinsir había dicho, ¿de verdad pretendía comerse el huevo de la familia Pikachu? Con razón no querían ni acercarse. Tal parecía que nuestra nueva compañera no podría razonar con ese Pokemon, por lo que íbamos a tener que tomar otras medidas, unas más acordes a mi forma de hacer las cosas.

Escuché la conversación de Ray y Rick sobre la miel sin comentar nada. También me parecía una mala idea, sin duda ese bicho nos la arrancaría de las manos por la fuerza y todavía querría comerse el huevo. Por tanto, cuando Rick pareció resignarse y tomar a uno de sus Pokémon para combatir, no pude evitar que una sonrisa adornara mi rostro.

-Y que lo digas. Drake, al ataque.- dije sacando de su Pokeball a mi compañero de fuego, que era el que tenía ventaja en aquella situación -Por mí bien, se lo puede quedar Ray.- dije estando de acuerdo con Rick. No tenía planeado usar un Pinsir en mi equipo, así que se lo dejaría al experto en bichos, seguro que él lo entrenaría mejor -Bueno, ya está bien de cháchara, vamos a empezar. Drake, usa Ascuas.- le indiqué a mi Pokémon. Yo no tenía tanta paciencia como los demás, la adrenalina del combate ya fluía en mi sangre.

Pese al consejo dado por Jade, que en mucho tenía razón y era dicho sin pensar a la ligera, la Hemlock avanzó y lanzó su ball impulsada por pura ansiedad inesperada, lo que desembocó en un tiro más bien impertinente, casi a ciegas, que ponía las habilidades de entrenadora de Connie a la altura del betún... por lo que el giro que siguió fue todavía más extraño, gracioso.

Merced de gran suerte coordinada con las condiciones adecuadas, tras una lucha intensa pero finita el kakuna salvaje de hecho entró en la bola y se quedó allí, sellando su libertad para pasar a ser parte de la compañía venenosa que parecía estar recolectando la estudiosa; fue un momento lleno de tensión, de sorpresa, pero al final todo parecía haber ido para la que hace poco había tenido casi una crisis. La definición de "suerte de novata" y nada más.

— Ese kakuna quería venir conmigo, lo vi en sus ojos — acto seguido Connie aseguró al entrenador de Spike mientras en medio de tres campos de batalla avanzaba para recoger a su conseguida presa, siendo que solo entonces la cordura le volvió un poco a la de Fucsia y comenzó a notar los otros combates: mientras que Jade y Ruby al parecer habían acabado o casi, Miaka seguía enfrentando al Wurmple, sin embargo la joven entrenadora no parecía decepcionada sino motivada, y esa impresión aumentó todavía más al escucharla hablar.

— ¡Ánimo Miaka, Algodón! ¡Ustedes pueden! — inspirada por ello Connie empezó a apoyar al dueto desde un lugar donde no resultara estorbarles, de paso llamando a Nebbia, quien no dudó en acercarse ya mucho más calmada, y guiñando el ojo a Jade apenas coincidieran sus miradas como si con haber capturado a kakuna intentara probar un punto; por otro lado estaba feliz también por Ruby, quien a pesar de haber dicho que no capturaría a más pokémon de momento había logrado superar su enfrenamiento actual, lo que significaba nueva experiencia para sus compañeros...

Y finalmente con el último ataque del Buneary de Miaka el Wurmple cayó debilitado ganando la primera batalla en el bosque.

      Ahhhhhh con que un Snow- le iba a responder a Rick, pero Rotom también se lo tomaba muy enserio el que no pudiera hacer su labor dándome algo mas de info.. aunque tensando un poquito el ambiente - No..no problem Rotom u.un gran trabajo - levantando ambos pulgares a como de felicitarlo ... pues si que se nota que esta vivo.

    .....

       Del resto no pude agregar mucho mas que el resto no hubiera dicho ... vamos.. es un bicho cabreado con la mirada de zamparse a la familia entera si le dejamos ir a su anchas... y crean me que es lo ultimo que quiero confirmar... así que dejando a Pit y Mandy en mis hombros para que no intervinieran de momentos - Maggie ayuda un poquito aquí...- a lo que la oveja de piel azulada se revolvía un poco antes de posicionarse enfrente mio y si eran perceptivos podrían apreciar un pequeño collar que terminaba en una especie de filosa uña..

   Vayamos a lo seguro Maggie...¡¡  Brzzzt !! - apuntando al cabreado insecto ... mientras mas restringido tenga su movimiento menos problemas nos puede causar...

El combate acabó y Buneary ganó sin mayores problemas, sin embargo, había sido un poco más duro que el anterior, lo cual me alegró bastante, en eso consistía donde quería llegar, en ganar combates cada vez más dificiles hasta hacerme con todas las medallas.

Cogí a mi pequeño pokemon y lo puse sobre mi mochila, donde le gustaba estar. Para volver al grupo, Gracias Connie, mira, parece que a Algodón le gusta que le animen, Sonreí, era una broma a judgar por la cara de Algodón de no entender nada.

Comencé a caminar con mis compañeros pensando en lo que Jade había dicho acerca de que cada lider de gimnasio tenía sus propias reglas, ¿Cuál será la regla del primer gimnasio?, Seguro que es interesante. ¿Y ahora? Pregunté con curiosidad,

Mientras caminaba, pregunté acerca del gimnasio de Ciudad Plateada, ¿Cómo podría saber si estoy preparada para el combate?, Dije al aire por si alguno de los entrenadores que me acompañan sabían algo acerca del nivelde Brock.

-Atípicos...? Sí! ESOS! - Por poco la excitación que tenía en el cuerpo me hubiera atragantado completamente. -*COF* *COF*- ¿María acababa de confirmarme un Pokemon atípico nuevo que no sabía su especie? -¿Qué tipo de Pokemon es un "Onix" María? No me suenan para nada... - Saqué rápidamente a Dex para que me ayudara a localizar a ese Onix en la extensa base de datos del laboratorio de Oak. -En el monte Moon decías?- Según ví en el mapa estaba pasando Ciudad Plateada, justo donde nos íbamos a dirigir.

Pero decidí contenerme y ayudé a María en todo lo que se debía de hacer por la mañana. -Venga Manuka, Vaiana! toca recompensar esta hospitalidad por la nuestra! - Manuka no se enteraba de mucho, pero al acabar de comer volvió con energías hiperactivas renovadas y con ganas de hacer cualquier cosa, y conocer pokemon, Vaiana estaba igual de agitada, pero esta vez era más de querer quedarse con los que había conocido en la casa. Eso era la perfecta oportunidad de entreno!

Una vez acabado de ayudar con María, estaba en parte cansado y eufórico, debido a que mis ganas no se contenían de ir a conocer ese pokemon atípico... Cómo sería ese Onix? Que anormalidad tendría? Muchas cosas que investigar! En cuanto a mis Pokemon estaban más o menos igual, aunque la hiperactividad de Manuka no cesó, hicieron un buen entrenamiento escondido como tareas de casa. La razón de porque se quería marchar María cuanto antes se podría suponer al Arcanine que ví en el almacén, tiritando de frío, y cuando pasaba por allí en parte me dió pena, le habría pasado algo malo? En parte me gustaría saber más sobre él...

Asentí cuando María me dijo de marchar y partimos hacia Ciudad Plateada... no tardaríamos demasiado para llegar allí, y menos aun con otra entrenadora y el impotente Umbreon que no paraba de vigilar sus alrededores. Manuka intentaba imitarle, haciendo lo mismo, pero al rato se aburría y salía corriendo de un lado a otro, feliz de volver a pasear por una ruta. Vaiana estaba iba alejada de mí, aunque poco a poco se acercaba hacía mí. Había pasado un día y al menos confiaba algo más en mí, asi que me sentí feliz que siguiera.

-Por cierto María... ese Arcanine que había en tu almacén que le pasa? muchos temblores no son normales... Ha enfermado? Y cómo ha podido enfermar? Y en cuanto al Onix? Qué sabes de el? En qué sentido es atípico?-

— Quizás traiga el show por dentro — la científica por estudios y coordinadora en proceso expresó en respuesta a la broma de Miaka, buscando ser graciosa también pero a su modo, y es que la determinación conseguida a través de los ánimos no siempre era para tomar a la ligera. Por su parte Nebbia giró 180° en concordancia con Algodón, ya que la fantasma tampoco parecía enterarse de mucho en esa plática entre humanas.

Acorde a la siguiente pregunta Connie se encogió de hombros pues desconocía si el resto que no fueran ellas (o sea Jade y Ruby) querían seguir entrenando, pues si le preguntaban solo a ella diría que estaba conforme tras conseguir a su objetivo de una manera tan eficiente como inesperada — Te llamaré Lanciere, ¿vale? — y por cierto ya que estaba, aprovechó para susurrar a la ball que ahora guardaba a Kakuna. Si bien aquel nombre podría parecer raro para una pupa, lo cierto es que la nativa de Fucsia pensaba a futuro...

— ¿Sientes como si pudieras partir rocas? — con su propia pregunta respondió a la cuestión de la animada castaña, si bien un poco a modo de broma...

Ray sorprendido ante la decisión de sus compañeros finalmente salió adelante ganando terreno para ponerse a la altura de aquellos dos entrenadores - ¿De verdad no lo quereis ninguno? - mientras Levy llegaba preguntaba y viendo que el plan estaba más que claro sonrió con suficiencia - Zantet, protege junto con Leaf a los Pikachus. Como dije, no voy a combatir hasta vencer a Brock con Zantet. - dijo claro sacando la pokeball de su otro pokemon

-Ash, es tu turno. Hagamosle saber a ese Pinsir que no es el rey del bosque Verde. - Al contrario que con Larvesta, el Caterpie y Spinarak de Levy retrocedieron en sus hombros a su espalda y de esta buscaron las pokeball de su entrenador para encerrarse mostrando puro terror en el proceso.* - Los capturaste aquí ¿no? Es normal que estén temerosos, a fin de cuentas es un pokemon territorial. - y solo los expertos sabrian lo que significaba.

-Ash, juntate a Drake, Ascuas. - le ordenó entonces a su Larvesta señalando con un dedo al objetivo: Pinsir.