Partida Rol por web

Problemas en La Mafia [HLdCN+]

El Preludio - La calma que precede a la tormenta

Cargando editor
08/02/2015, 17:32
Narrador

17 a 24 de Febrero de 1954
Chicago
Barrio Italiano

La noticia se extendió como la espuma por el barrio Italiano. La detención de los cuatro líderes había sido un duro golpe. Ahora todos los ojos miraban a la viuda de Andrea. Esa mujer nunca había sido una criminal, pero sí una persona a la que se debía respeto, por ella y por su difunto marido.

La mujer no tardó en reaccionar, convocó a todos los miembros de la organización en Il Ristorante el día 27 de Febrero a las 11:30 de la mañana, pero, aunque la mujer fue rápida, los rumores lo fueron más.

Pronto se había formado un gran revuelo en el barrio debido a las palabras que Andrea pronunciara en la cinta de su testamento... ¡Infiltrados! Por respeto a la viuda, esperarían para ver cómo actuar, pero nadie les impedía reunirse con antelación.

Durante los días siguientes a la detención y anteriores a la reunión organizada por la viuda, todos los miembros restantes de la mafia se reunieron en varias ocasiones. La amenaza de los infiltrados era demasiado fuerte para no hablar de ello y que comenzaran las suspicacias.

Notas de juego

Esta es la escena introductoria, el famoso día 0. Aquí podéis ir conociéndoos unos a otros, pero, como los roles aun no han sido repartidos, mientras dure esta escena no habrá votación ni tampoco los infiltrados detendrán a nadie.

Terminado el tiempo de esta escena, habrá una breve narración y después, comenzará la partida propiamente dicha.

Durante este tiempo de introducción también podréis conspirar en familia, con lo que las escenas familiares también estarán disponibles para vuestra interpretación.

Por último, igual que si una noche normal de juego se tratara, tenéis opción de realizar conversaciones privadas con las restricciones normales de partida (comenzar una conversación por personaje, pero responder a todas las que os comuniquen).

La siguiente fase comenzará el Jueves 28/09/2017 en torno al mediodía. Los roles estarán repartidos para ese momento. De momento, esta escena es de interpretación libre.

¡Que comience el juego!

Cargando editor
25/09/2017, 12:51
El Padre Filippo Cirillo (Montesco)

El padre Cirillo ingresa solemne pero en silencio y se acomoda con confianza entre los demás como pastor entre sus ovejas, a pesar de sus vicios, tenia vocacion, y acompañaba a las familias.
No profirio palabra ni discurso, no era el momento ni el lugar, y seguro serian otros, mas importantes, los que hablarian.
Saludo con educado gesto de mano y movimiento de cabeza al ingresar y se sento, meditando. ¿Que sucederia ahora? ¿Como seguirian las cosas? ¿Habria nuevas dispociciones en las familias? ¿Que diria la dolida viuda de todo esto? ¿Quien seria el nuevo lider? ... Demasiadas preguntas y pocas respuestas. Y principalmente, ¿Topos?¿Soplones? ¿Y si los habia?... El nunca habia matado a nadie... ¿Lo tendria que hacer ahora si descubria a alguno? ¿Se atreveria a hacerlo?
Todo lo que habia aprendido en sus años de ceminario se desdibujaba desde su llegada a america y cada ves era peor. Poco a poco se introducia mas y mas sin darse cuenta en un camino sin retorno, del que no podia volver, en una vida vertiginosa y acelerada, llena de excesos y placeres. Ya no era el Filippo que habia llegado de Italia, el ahora era, El Sacerdote de la Mafia, y haría lo que tuviera que hacerse sin dudarlo, ya era otro Cirillo, uno nuevo, y sus ovejas, las Familias.
Acomodó meditabundo su biblia sobre la mesa mientras pensaba y escuchaba. ¿Quienes serian los traidores entre nosotros? Lo averiguarian y los lanzarian al fondo del Michigan con zapatos de cemento, no cabia ninguna duda, asi sería. Amén.

Cargando editor
25/09/2017, 15:06
Nonna Isa Morosini

- ¡Santa Maria Magdalena! ¡Hoy! ¡Hoy teníamos que reunirnos! ¡Hoy! - La nonna entró montando un pequeño escándalo en la sala con su voz aguda y cascada. Movía los brazos haciendo aspavientos mientras con el culo golpeaba alguna de las sillas al pasar. Pese a su edad, no tenía especial dificultad al andar siempre y cuando no tuviese que pasar por  un pasillo especialmente estrecho - ¡La Primera Comunión del pequeño de los Gambolo! ¡Hoy! Lo que quereis es hundir mi restaurante... - señalaba a unos y a otros con el dedo índice huesudo mientras se acercaba al centro.

- ¡Qué desastre! Pobre Andrea... ¡Qué tragedia!. Andrea era grande - Ambas palmas señalaban al cielo. Iba repartiendo dos besos sonoros a algunos con los que se cruzaba hasta que encontró un asiento algo más ancho donde sentarse cómoda - Y la pobre Julietta.... ¡Cara bambina!

Se había puesto un vestido negro en deferencia con la situación. Esa tela tenía posiblemente más años que algunos de los invitados a esta reunion y estaba cubierto de harina por prácticamente todos los lados a excepción del delantal bordado con una gran N que tapaba su delantera. 

- Que sea breve - espetó al sentarse de golpe sobre la silla provocando que algo de harina se elevase en el aire - Me habéis hecho dejar a Rainaldo al cargo y seguro que ya se ha picado su propia mano para relleno de los cannelloni - Y se puso a esperar mientras se acomodaba su moño blanco y desmadejado.

Cargando editor
25/09/2017, 17:11
Melissa Wolf (Grimaldi)

Mucho escándalo. Siempre mucho escándalo...

Melissa se mantenía impasible en la esquina de la habitación, sosteniendo en sus brazos su pequeña libreta de cuero negro. Conocía a todos y cada uno en la habitación, sus notas guardaban cada detalle de sus vidas, lo que hacían, lo que dejaban de hacer, lo que comían y donde lo hacían. Su trabajo siempre fue sencillo pero metódico, y ella, como Caronte, se encargaba de llevar los compendios de sus fechorías a las manos de Grimaldi.

Ser de la familia no era una necesidad para ella. No buscaba interactuar con ninguno, tal vez uno que otro caso, en los que se sentía atraida por el cuidado de algunos en mantener su vida privada, pero ahora, que Grimaldi no estaba, ella era de nuevo una extraña en su propio espacio. No había necesidad de volver acá, podía haber hecho su vida normal fuera de todo este círculo de viciosos. Podía ser libre al fin de los silencios cómplices que a veces, solo a veces, atormentaban con secretos su cabeza.

Pero no, le debía a Grimaldi un último favor, un favor que debía pagarse con sangre. Habían traidores en la familia y, sin duda, Grimaldi lo había sabido desde antes. ¿Acaso esperaba su muerte? No, nadie espera el fin de manera tan trágica, pero en este mundo de criminales no se puede confiar ni de la propia madre...

Cargando editor
26/09/2017, 00:52
Jackie Estacado (Grimaldi)

Se podía oír el gentío desde la otra acera de la calle. Así se hacían las cosas en el barrio, a la italiana. La única forma de tener a mas de dos italianos juntos en silencio era en un entierro. En el de ellos mismos para ser exactos. Esa mañana hacía un frío de mil demonios y las nubes en el cielo amenazaban con descargar su furia sobre nosotros de un momento a otro. Un clima muy apropiado para el aire que se respiraba en su interior.

Entre en el restaurante e inspiré la heterogénea mezcla de olores del lugar: comida, cigarrillos, miedo... Sin lugar a dudas la Familia estaba allí. No soy dado a las reuniones, trabajo mejor solo. Pero esto es lo que el Zio Andrea hubiese querido. Se lo debo.

Me acerqué a la puerta y antes de estar lo bastante cerca como para tocar el pomo oí a Nonna quejandose como de costumbre. ¡Que pulmones tiene esa señora! Sonreí un instante y entre.

Decenas de cabezas se giraron. Demasiados lobos para un corral tan pequeño. No me gustaría tener que enseñarle a nadie quien es más feroz. No estoy de humor.

-Mia cara Nonna la única forma de arruinar tu restaurante sería que dejases de hacer ese fantástico ragu napoletano. Me alegro de verte- dije sonriendo a la anciana. -Señores, Señoritas buenos días- dije en deferencia al resto de los presentes en la sala.

Avance hasta sentarme en la mesa junto a Melissa. No es que nos lleváramos especialmente bien pero ambos eramos Grimaldi y ambos extraños en la Familia.

-Siempre es un placer Wolf- dije sin mirarla directamente, pendiente de los demás integrantes de la sala. Con el Don muerto, la cúpula de las cuatro familias detenidas y la sospecha de topos en la organización esta sala era como estar encerrado en un deposito de dinamita. Y aquí fuma todo el mundo.

Cargando editor
26/09/2017, 05:18
Melissa Wolf (Grimaldi)

Lo mismo digo - respondí por inercia. Al menos alguien de la familia tenía la educación de saludarme, aunque probablemente fuera una mera cortesía. La sangre caliente mediterránea les obligaba a ser así...

Cargando editor
26/09/2017, 10:36
Estefano Buscemi (Grimaldi)

Uno tras uno, fueron llegando al Ristorante, Stefano, los observaba en silencio, con absoluta frialdad en el rostro, la mayoría apenas se daba cuenta de su presencia, y el que lo hacía, no podía evitar un escalofrío al sentir su gélida mirada carente de emoción.

Su presencia aquí sería cuestionada por más de uno y él lo sabía, al fin y al cabo, no tenía ningún vínculo con los allí presentes, tan solo servía directamente a Andrea Grimaldi, y con la muerte del Don, más de uno querría perderle de vista. Sin embargo, ahí estaba, en un rincón, donde la luz ténue acentuaba las sombras de su rostro afilado y piel mortecina, mientras el resto de asistentes, se saludaba, pavoneaba o trataba de mostrar su fuerza ante el vacío de poder dejado por 'Il Don'.

La partida había comenzado, escudriñó una vez más a los asistentes, vio un par de lobos, varias ovejas esperando a alguien que les dijera qué hacer ahora, y algún que otro lobo con piel de cordero, los más peligrosos, sin duda.

La organización, pensada para perdurar de una generación a otra y dar cabida a toda la familia, había recibido un serio varapalo, primero habían destruído los cimientos, y los débiles pilares sobre los que aún se sostenía se habían reunido allí, pero Estefano no vio a nadie capaz de liderar de nuevo con éxito a todos, era cuestión de tiempo, que empezaran a matarse los unos a los otros entre calumnias y falsas acusaciones.

Cargando editor
26/09/2017, 12:15
Henrietta Grimaldi

De pronto, Henrietta irrumpe en la sala. Iba vestida de escrupuloso luto, tal y como se esperaba de ella.

En estos días no era frecuente verla en público dadas las circunstancias, por eso os sorprendió verla allí.

Bonna sera. Me alegro de veros a todos vosotros aquí. Confiaba en encontrarme con alguien de cada familia y que se corriera la voz, pero esto es mucho mejor.

Como siempre, apenas había saludado y ya iba directa al grano.

Disculpen la interrupción, pero traigo ciertas noticias. Vengo de ir a visitar a Nicola a prisión. No he podido. Tampoco a Julieta, Marcelo o Claudio. Los han incluído a los 4 en el régimen sin visitas de la prisión y no nos permitirán verlos durante un tiempo. No obstante, estoy segura de que se las arreglarán para comunicarse con nosotros si lo ven necesario. Aunque sea a través de terceros.

Por otro lado, la comisaría ha puesto en marcha la investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte de Andrea. Esta mañana han llevado a declarar a parte del servicio de nuestra residencia.

Pero no debéis preocuparos, no vamos a permanecer quietos. Los asuntos de Familia los resuelve la Familia. Si ellos quieren jugar a los espías, nosotros también sabemos. Seguiremos sus avances y nos adelantaremos a ellos.

La situación se está acelerando. Es de vital importancia que todos los que estáis aquí acudáis a la reunión del próximo 27. Necesitamos a las 4 familias unidas y por eso he invitado al mismo número de miembros de cada una. 5 de cada. Sé que algunos no os sentís acogidos como uno más o tenéis muchas tareas, pero esto es importante. - Mientras habla no centra su mirada en nadie concreto. Salta de uno a otro, pero casi como por azar, cuando menciona las objeciones, fija su mirada primero en Melissa y luego en la Nonna.

Roberta, Tony, Eduard, Joe, Michael. Os necesitamos. Necesitamos la templanza de los Giggio.

Berlus, Hogan, Isabella, Berto, padre Filippo. También necesitamos la inteligencia de los Montesco.

Federico, Nonna Isa, Alessandro, "Cerradura", Fagottino. Necesitamos el ímpetu de los Morosini.

Ivanna, Melissa, Vittorio, Jackie, Estefano. También a vosotros. Necesitamos la intuición de los Grimaldi.

Ahora debo irme, una muerte lleva mucho papeleo y muchos quehaceres, y ahora no dispongo de la ayuda de Nicola. Por favor. Por Andrea. Cuento el 27 con todos vosotros.

Avanza hasta la puerta y se despide de todos una vez más. Antes de salir del local y de no volver a dejarse ver hasta el día de la reunión, os dirigió unas últimas palabras.

Me encargaré de que os llegue todo lo que podamos averiguar de los avances de la policía. Seguro que antes del fin del día, ya tenemos alguna noticia fiable. Arrivederci

Cargando editor
26/09/2017, 17:57
Roberta Pasadena (Giggio)

Malas noticias para los Grimaldi, buenas para el resto. La hipocresía resultaba incluso divertida en este juego de poderes y familias. El respeto por el muerto echaba freno a las lenguas más elocuentes, y también al plomo. La frágil tregua que en algún momento la traición echaría a perder.  

Entró en el nido de serpientes con tranquilidad, portando una rosa en la mano que había cortado expresamente de su jardín para entregársela a la viuda de Andreas. La única persona por la que sentía verdadera empatía era Henrietta. Las dos tenían algo en común, unas bonitas lápidas que visitar en el cementerio.

Al resto, simplemente les ofreció un gesto de consternación bien aprendido. Miró unos segundos a Jackie, el ahijado del Don. Aquel joven despertaba tanto agradecimiento como reproche por parte de los Giggio.

- Buona sera. - saludó a algunos de los presentes, entre ellos al padre Cirillo y a Nonna, les dedicó un leve asentimiento de cabeza a modo de saludo.

Observó  con recelo las sillas buscando un asiento libre. Cuando ya tuvo localizado uno, dejó allí su bolso y su abrigo y se acercó hasta donde descansaba la viuda antes de dar su discurso.

- Admiro tu fortaleza Henrietta. - le parecía increíble su  aplomo. - Mis condolencias querida. - besó su rostro con cariño y delicadeza. - Un hombre brillante el tuyo, fuerte e inteligente. Nadie le olvidará. - las lágrimas se agolpaban en los ojos de la viuda. Roberta calló y no dijo nada más, solo extendió la mano ofreciéndole la rosa.

Cargando editor
26/09/2017, 20:50
Bonny "Cerradura" Vizancy (Morosini)

Bonny llego tras los pasos de la Signora Grimaldi, escoltándola hasta el mismo Il Ristorante, donde quedo en la puerta de pie y con las manos en la chaqueta escuchando lo que tuviera que decir. A estas alturas conocía parte de la historia, pero no esperaba que fuera él uno de los invitados a esa segunda reunión y aunque en realidad ya supiera de que se tratara realmente esperaba mas confianza hacia su persona.

Fuera como fuera no pensaba contradecir las palabras de la mujer del Don y asintio agradecido cuando su nombre salio de sus labios. Cuando ella decidió abandonar el lugar "Cerradura" insistió en acompañarla, pero rehusó su compañía alegando que debía discutir con el resto de los presentes la situación actual. Y una vez mas acepto sus palabras acercándose ligeramente al resto, mientras los observaba con su único ojo.

-Buona sera.

Cargando editor
26/09/2017, 23:26
Eduard Giggio

Fueron días largos, desde luego...

La primera noticia, el 15 de febrero, casi ofrecía una carrera de bólidos criminales por encontrar al responsable del perjudicial revuelo, pues lo ideal para el equilibrio familiar sería un reclamo de sangre por sangre para la viuda del Don. Y posteriormente, con tiempo y una vendetta bien servida, rememorar esos viejos tiempos de negociación que iniciaron una alianza entre cuatro familias. Pero esa idea apenas duró un día sin expandirse hasta terrenos más pantanosos...

Tras la muerte de Andrea Grimaldi, las detenciones del 16 empeoraron con los rumores, y finalmente llegó la confirmación del día. Eduard acudió a la actual cita bañado en su aparente e irreal despreocupación. No fue el primero en llegar, pero tampoco el último. Buscó afines y familiares invitados, hasta llegado el momento de escuchar a la viuda del Don, callar, arrugar la frente, y meditar lo ya meditado. El presunto grabado del difunto Don Andrea no solo manifestaba topos y por ende un buen taco de informes comprometedores sobre la organización, sino que también vaticinaba encontronazos para dar con ellos, y tal vez, algún que otro "error"...

Ésta pedía unión. Lógico. 

Los maestros en el juego sucio eran una mayoría tan aplastante que ni mucho menos se preveía imposible dar con un par de canes traidores - Cinco cabezas influyentes por cada apellido bastará para dar solución a los actuales problemas - dice - aunque para que engañarse. Si están en las raíces, tampoco será fácil.

Cargando editor
27/09/2017, 01:22
Don Hogan (Montesco)

-Cierto Eduard.- Habiendose ido la viuda Hogan manifesto su presencia, ¿Estaba ahi? Si, habia estado todo el tiempo. Y ya habia saludo de seguro, pero lo volvio a hacer.

-Cierto Eduard, buen a todos. Pido la palabra si me permiten, hace escasos días ha fallecido por la mano de un asesino estupido Don Andreas. Si, estupido, es un terrible atentado contra la organizacion, contra el equilibrio. Un acto irracional, tal ves promovido por alguien que quiere el puesto del Don, sencillamente un acto atroz.- se levanto de su silla con sus dos metros de estatura, camino entre las mesas y sillas mirando a todo mundo. Puso una mano en el hombro de "Cerradura", su mano derecha, y dedico una mirada a Isabella, su hija.

-Y si eso fuera poco, topos y soplones nos rodean, comparten nuestras mesas, ¡Nuestras Mesas Nonna!¡Nuestras Mesas! ¿Entienden lo que eso significa? Entre nosotros, incluso hoy, ahora, aca mismo, se siente,... Se siente el olor, ¡El olor a rata! ¡Señores! ¡Y seran atrapados! Confio, creo y espero, que entre todos, olvidando las diferencias y rivalidades entre familias, atraparemos a esas sucias ratas para poder seguir en Paz con las familias. Levanto una copa de vino tinto, ¡Salud por eso! ¡Por la prosperidad de las nuestras familias!-

Finalizo su discurso y se sento.

Cargando editor
27/09/2017, 10:26
Joe Salvatore (Giggio)

Joe se aproximaba al restaurante, cruzando la acera con un aplomo y una determinación exuberante. A escasos dos metros de la puerta se quitó su sombrero y lo apoyó sobre su pecho, de manera afligida, mostrando respeto a la familia del ya fallecido Don. Una vez que entró en el restaurante mostró sus condolencias a los mas allegados inclinando ligeramente la cabeza, desde la distancia. Postró su sombrero y su larga gabardina en una percha y se sentó algo apartado del resto.  

- Que las emociones no nos cieguen, intentemos pensar de la manera mas pragmática posible. El asesinato ha podido ser llevado a cabo por alguien externo a las cuatro familias... o por alguien demasiado ambicioso que quiere ascender a Don... 

Mientras Joe decía estas últimas palabras miraba atentamente el resto de caras, a ver si alguna se daba por aludida, como si de un investigador profesional se tratase... Pero ninguna reaccionó... Por lo que decidió terminar su intervención en aquel lugar. 

- Henrietta, nos vemos, sea fuerte. 

Joe se sirvió una copa, cogió sus pertenencias y salió del establecimiento...

Cargando editor
27/09/2017, 10:50
Nonna Isa Morosini

La gente llegaba lentamente, uno a uno, gota a gota.... tan lentamente que Nonna no pudo evitar quedarse ligeramente traspuesta. 

(...) ¡Nuestras Mesas Nonna! (....)

Los gritos de Hulk le sobresaltaron. Agitó la cabeza levantando un poco más de harina e intentó seguir la conversación del grandullón.

- ¡Ratas! ¡Hay que matarlas a todas! ¡Haremos albóndigas de traidor! - gritó enérgica levantando su copa a tiempo del brindis de Hulk y mirando a toda la sala. 

 

 

Cargando editor
27/09/2017, 11:05
Vittorio "Vic" Grimaldi

Todos los presentes me eran conocidos, algunos incluso familia, pero me sentía ajeno y extraño. Aún me costaba digerir la muerte del Don, pero el que hubiese traidores me hacía mirar a todos con desconfianza.

En mi mente sólo había lugar para una palabra, que fue la primera que pronuncié en voz alta:

- Vendetta.. sangue chiama sangue.*

La rabia por no haber podido salvar al Don de sus enemigos me hacía hervir la sangre, y el crimen no podía quedar impune.

 

Notas de juego

*venganza. La sangre llama a la sangre.

Cargando editor
27/09/2017, 12:15
Federico Morosini

Decidí acudir a la cita caminando. El frío envolvía mi rostro y provocaba que con cada respiración una nubecilla de vaho saliera de mi boca. Paseaba absorto en mis pensamientos y no era consciente de la ligereza de mi paso hasta que mi cuerpo paró para recobrar aliento. Salí de mi ensimismamiento y me embriagó el olor de la floristería cercana al restaurante comprobé que efectivamente estaba de pié en la puerta. Me descubrí a mi mismo reflejado en el escaparate, la edad no pasaba por todos igual. Numerosos surcos bordeaban mis ojos y atravesaban mi frente, tenía un gesto continuo de desapobación en mi rostro y recordé al que un día fuí, un chaval alegre, con ilusión, ciertos aires de grandeza, sí, pero disfrutaba de las pequeñas cosas. ¿De verdad quería acabar como Andrea? Mi ego ansiaba ese puesto, claro, pero, ¿a qué precio? Ahora además estábamos más acorralados que nunca, no me pillaba por sorpresa, habíamos campado a nuestras anchas y sólo era cuestión de tiempo que llegara sangre joven a la policía y nos metieran mano.

Aproveché y compré un ramo para mi esposa, la mejor mujer, por supuesto. Anduve la manzana que me separaba del restaurante y entré por la puerta trasera. Pasé al despachito de madre y colgué el abrigo y el sombrero. En un gesto inconsciente me atusé el pelo y me dirigí al salón.

Ciao mamma. ¿Qué tal la mañana? La tomé el rostro con ambas manos y la planté un beso en la mejilla. Me gruñó algo sobre una comunión que oí ya de lejos. Con un levantamiento de mano saludé al resto y me acomodé pesadamente en una silla. Al recostarme sobre el respaldo la madera cujió levemente quejándose a la par de mi peso y de su estado. Crucé las manos y las apoyé sobre mi regazo preparado para escuchar y sacar conclusiones.

Cargando editor
27/09/2017, 17:08
Darek Houston

Mientras tanto

21 de Febrero
Comisaría 29 del Departamento de Policía de Chicago.
Sala de interrogatorios.

A Darek siempre le había gustado ser policía. A veces tenía recompensas y a veces penitencias, pero, incluso en los peores momentos, alguien tenía que hacerlo.

Este era sin duda un momento de los malos. A nadie le gustaba perder tiempo y esfuerzo en esclarecer las circunstancias de la muerte de tu enemigo. De alguien que sabes que es el responsable de la muerte de muchos inocentes. El responsable de la muerte de varios de tus compañeros. Pero un crimen es un crimen.

Nadie en toda la comisaría, ninguno de sus subalternos, quería ocuparse de esa investigación. Nadie quería darle justicia al villano. Y Darek protegía a sus hombres, así que había acabado por ocuparse él mismo del caso:
El caso del asesinato de Andrea Grimaldi, líder de la organización criminal Las Cuatro Familias.

Y no iba a engañarse. A pesar de todo, estaba disfrutando. Todo este asunto le había traído de vuelta a la calle y él lo agradecía. Desde que había ido acomodándose en la silla de comisario, cada vez le aburría más su trabajo, y encima, el último año con Fergusson al mando había sido un suplicio. Un poco de acción era lo que necesitaban sus viejos y cansados huesos.

Levantó la mirada y la posó en la mujer que tenía delante. Una mujer afroamericana de unos 45 años de edad que trabajaba como criada para la familia Grimaldi. La familia de la víctima.

Repasemos los hechos: Usted llegó como cada mañana a las 8:00 de la mañana a la mansión Grimaldi. Se puso el uniforme de trabajo y comenzó la limpieza por las estancias del piso inferior. Como cada mañana, aproximadamente a las 10:00 AM, usted de encontraba limpiando la habitación de la víctima cuando encontró su cadáver junto a la cama.

Exactamente comisario. Fue horrible. Estaba todo el suelo lleno de sangre y el señor Andrea... ahí... - La mujer ahogo sus palabras en sollozos mudos. Parecía dolor sincero. No entendía como se podía querer a alguien como Grimaldi, pero esa mujer parecía sentir gran aprecio por él.

Y dice que en el tiempo que estuvo en la vivienda no oyó ni vio nada fuera de lo normal

La mujer, incapaz de hablar, asiente con la cabeza.

Esto es una total pérdida de tiempo. La autopsia ya ha fijado la fecha de la muerte entre las 12 de la noche y las 4 de la madrugada. Esta mujer no va a aportar nada. A quién debería estar interrogando es a los sospechosos...

Harto de la situación, pero con amabilidad, Darek pone fin a la entrevista.

Pues eso es todo, señorita. Puede retirarse, lamento la experiencia que ha sufrido y procuraré que no sea necesario volver a citarla para así evitar que tenga que volver a rememorar una escena tan dolorosa.

La mujer aliviada salió de la sala de interrogatorios dejando solos a Darek y al gran espejo, tras el cual se ocultaba el odioso comisario jefe Horace Fergusson.

Cargando editor
27/09/2017, 17:08
Horace Ferguson

El comisario jefe vio salir a la mujer de la sala de interrogatorios a través del falso espejo y, en seguida, salió de la sala de escucha y entró donde estaba Darek Houston.

¿Y bien, Houston? ¿por qué deja que se vaya? ¡esa mujer es sospechosa! ¿no comprende que necesito que de carpetazo al asunto del muerto cuanto antes?

Señor, esa mujer no ha podido ser la asesina, la hora de la muerte según la autopsia...

¡Al cuerno! ¡encasquétele el muerto a alguien y centrese! ¡si no es la asesina diga que es la que ordenó la muerte de Grimaldi y la empapela igualmente! ¡Recuerde que necesito cerrar este tema de inmediato! Sólo quedan unos meses para las elecciones y la publicidad que todo esta asunto de la mafia proporcionaría me catapultaría directamente a la alcaldía.

Fergusson, como siempre se comenzó a marchar dejando a Darek Houston con la palabra en la boca. Tenía por costumbre escucharse sólo a si mismo y ya le había prestado demasiada atención al comisario.

Aun así, este intentó una vez más continuar la conversación antes de que su jefe abandonara la sala.

Señor, ya hemos hablado de eso, no puedo encarcelar a una inocente por...

¡Y un cuerno! Houston, le falta visión global. Esta es una oportunidad única. ¡Ah! Por cierto. Quiero que me traiga a esos agentes que han propiciado el encarcelamiento de los dirigentes. Quiero tener unas palabras con ellos.

Y dicho eso, se fue cerrando la puerta.

Cargando editor
27/09/2017, 17:08
Darek Houston

Por encima de mi cadáver. A esos agentes no les pondrás tus zarpas encima si yo puedo evitarlo.

Darek, azorado, salió en busca del expediente del caso. Le esperaban varios días de recopilar información e interrogatorios.

Esa morsa de Ferguson no iba a provocar una mancha en su expediente.

Cargando editor
27/09/2017, 17:09
Narrador

De vuelta en la reunión

El propio comisario, un hombre al que algunos os habíais enfrentado en el pasado, se iba a ocupar de la investigación de la muerte de Andrea.

Lo habíais averiguado por los informadores que la organización tenía dentro del cuerpo. Después de todo, colar topos funcionaba en dos direcciones. En seguida la noticia se convirtió en rumor.

Quizás eso fuera una buena noticia. Era un hombre meticuloso. Seguramente si os manteníais al día de sus avances, la propia investigación de la policía os ayudase a encontrar al verdadero asesino de Andrea.

Notas de juego

Las escenas que se narren en los hilos públicos representan que, de un modo u otro, os habéis enterado de lo que ha ocurrido. Informadores, notas de prensa, sobornos...

Todo lo que en estas píldoras narrativas se diga es información accesible por todos vosotros.