Partida Rol por web

Kaylee: - Tú eres mayor - le respondo, seria, y...¿algo enfadada? Puede ser.

-Tu eres una niña y todos te protegen- asintio moviendo su cabeza, gran error pues la aguja se clavo donde no debia. ¿Acaso era estupido? Se ponia a discutir con una niña de 5 años-. Como sea, dime una razon por la que debas llorar

Kaylee: Es idiota. Complétamente idiota. ¿Por qué me pregunta? Se supone que soy una niña pequeña y tengo derecho a llorar.

No le respondo, termino de coserle la cabeza y vuelvo a guardar las cosas. Supongo que habrá que vigilar que no empeore, aunque no tiene por qué pasar si mantenemos la zona mas o menos limpia. Es por eso que cojo su cantimplora para echarle un poquito de agua y terminar de limpiarle la frente.

- Ya está - murmuro - Y no voy a responderte porque no lo entenderás - añado - Da igual.

-Jajaja Hey, no eres la unica en el mundo que perdiste a alguien- ladeo su enorme y desfigurada cabeza-. Y si entiendo lo que es sufrir... pero no se puede hacer nada con eso. Solo vengarte cuando puedes y olvidar.

Se levanto, no tenia espejo, pero supuso que no se veia tan mal como se sentia. Limpio una de las sucias ventanas con la manga de su ropa para poder ver el exterior. La noche era cerrada y no se veia una mierda.

-Mañana saldremos temprano, creo que hay un lago a unos tres kilometros..

Un lago... Solo escucharlo se me escapa un suspiro. Me encantaría pegarme un baño. Ya me he acostumbrado a muchas cosas de todo esto, pero no a estar siempre sucia. Eso no me gusta.

- Pues entonces vamos a dormir ya - digo cuando dice que madrugaremos.

Johner lanzó otro "bah" cuando la niña no presta atencion a lo que dijo, asi que se dispone a dormir. Se apoyo contra la puerta y dejo su pistola sobre su pecho. No sabia donde dormiria la niña, pero él siempre acostumbraba a dormir contra la puerta o en un rincon. Esa noche haria frio, pero el estaba abrigado, ni siquiera se le ocurrio pensar que Kaylee sintiera frio.

[unas horas mas tarde]

Apenas he dormido un par de horas pero el frío me despertó y no consigo volver a dormirme. Me abrazo agazapada en un rincón, contra la pared, temblando. Intento estirar mi chaqueta para que me cubra mas...pero no hay manera.

La niña sientió algo calido sobre ella, es una chaqueta, la de Johner. Huele a sudor, cuero y pudredumbre, pero esta calida porque la estaba usando hasta el momento. Por alguna razon el hombre se habia levantado y la vio acurrucada y abrazada a su misma. Asi que le dio su abrigo y se fue a un rincon... despues volvio a su lugar y se durmio.

- Gracias... - susurro sujetando su chaqueta, mas cómoda ahora que parece que no hace tanto frío. Luego le miro de vuelta a su rincón - Pero...¿no tendrás frío tú ahora?

-Na- fue lo unico que dijo, luego se acosto y puso las manos bajo sus axilas, una de ellas aun sostenia la pistola. Debia pensar que hacer mañana, llevar a la niña hasta el lago seria un problema, quizas deberia dejarla alli e irse. Seria lo mejor.

Por la mañana la luz entra por las escasas rendijas que hay en el refugio que han encontrado. Johner despierta con el cuerpo algo frío por haberle dado la chaqueta a la niña y la idea de ir al lago aún en su cabeza.

Kaylee duerme en su rincón, tapada con la chaqueta del hombre hasta la barbilla. Tiene una expresión inocente y dulce que se acentúa con su pelito despeinado.

Johner se despierta adolorido, como si cada musculo se quejara de su estupidez. ¿En que rayos estaba pensando al darle su abrigo a la niña? ¿Acaso se le habia atrofiado el cerebro? Cuando se levanto toda su espalda crujio como si estuviera partida en varios pedazos. Otro recuerdo mas de que ya no era un niño o un adolescente. Era un viejo amargado y con mucho dolor en su interior. Se acerco a Kaylee para recuperar su abrigo, pero esta dormia placidamente, si se lo sacaba despertaria...

-Es tu oportunidad, dejala alli y largate, ya conseguiras otro abrigo- le dijo el sobreviviente. Empezo a hacerle caso, podria escapar con facilidad y sin ser escuchado. Pero un gemido en el exterior lo paralizo. A ese se le unieron mas, el roce de pies en el suelo acompaño a los gemidos-. Genial, ahora te vas y ellas es comida para zombis.

Imagino la escena: él abriendo la puerta, ocultandose detras de ella y dejando entrar a los zombis, la niña despertaria y gritaria. Los zombis irian a por ella y él podria huir con facilidad. Dejarla para que muriera horriblemente, gritando y llorando. Todo para que él viviera un dia mas, un dia mas de soledad y abatimiento.

Se le hizo un nudo en el estomago, la niña aun dormia, como un angelito inocente, puro y bondadoso.

-Pu-ta madre- murmuro el hombre rascandose furiosamente la cabeza. Habia tomado una decision, una de la cual se arrepentiria y a la vez no-. Pu-ta madre- repitio acercandose a la niña y apoyando su enorme y callosa mano en su boca-. No hagas ruido...

Kaylee: Me despierto de golpe cuando siento una mano en mi boca. Abro los ojos para encontrarme que es Johner, sin entender qué hace... Hasta que escucho los gruñidos de fuera; hay caminantes fuera.

Asiento con la cabeza para asegurarle al hombre que no haré ruido, aunque ahora mismo siento bastante miedo. Si entran...estamos encerrados aquí.

Cierro los ojos con algo de miedo cuando escucho un golpe fuerte en la puerta, uno de ellos debe estar intentando abrirla. Me quedo muy quieta.

Ahora ya no tenia plan de escape, pues ese tenia como objetivo dejar a la niña de cebo.

-Bien Johner, ¿ahora que haras?- se pregunto sarcasticamente. Uno de los podridos empezo a golpear la puerta, seguramente los habria oido u olido, no tenia la mas minima idea pero tampoco le importaba. La puerta trasera estaba bloqueada, tal vez por algo del otro lado. Gran idea tuvieron los antiguos inquilinos en dejar una sola puerta-. Idiotas, por eso deben estar muertos.

No tenia otra opcion que romper la puerta, rogar que ningun podrido este alli y poder derribarla. Tambien podria intentar quitar las tablas de las ventanas, pero estaban cerradas del lado de adentro (idiotas) y no tenia nada con que hacer palanca.

Los golpes aumentaron en cuanto comienzó a golpear la puerta con su hombro. Cada golpe suyo venia acompañado por muchos desde el otro lado. Ya no habia que hacer silencio por lo que daba rienda suelta a sus insultos, hacia los que cerraron esa gasolinera, hacia los zombis que querian entrar, su condenada suerte y su gran estupidez.

Kaylee: Niego un poco con la cabeza cuando le veo; ese no es un buen plan, así solo conseguirá que nos devoren a los dos. Si abre esa puerta, se acabó.

Miro alrededor, buscando algo que él no haya visto... Una salida o... Algo.

Entonces, veo una ventana que debe ser de ventilación, algo mas alta, casi donde el techo. Es bastante grande así que creo que Johner también podría pasar por ella.

Hay una escalera muy vieja apoyada en una de las paredes así que me muevo para arrastrarla y después me acerco para tirarle a Johner del pantalón. Sin hablar, le señalo la escalera y la ventana alta.

Estuvo a punto de responder con que "QUE?" pero vio que la niña le señalaba algo. Sin siquiera pensarselo dos voces arranco la tapa de la ventilacion con sus manos y luego levanto a Kaylee como si fuera una muñeca acercandola a la entrada.

-Vamos niña- pero por alguna razon sonreia. Le paso la mochila, la cual no era nada pesada, pues sus reservas de comida eran mas bien escasas. En ese momento la puerta cede ante el peso de una docena de zombis. Johner se lanza detras de la niña, haciendo grandes esfuerzos por meter su cuerpo en el conducto. Siente como unas manos frias y duras tratan de tomarlo de los tobillos, pero este patea y maldice mientras sigue con su camino. Kaylee seria la primera en salir, esperaba que no hubiera nada recibiendola...

Kaylee: No tardamos mucho en llegar al final del camino. Abro la ventana de salida y me asomo para asegurarme de que no hay ningún caminante cerca antes de deslizarme y saltar al suelo.

- Vamos - le digo a Johner bajito, para que se de prisa.

Johner se dejó caer con gracia felina, sin hacer el menor ruido. Apunto a cada ricon, buscando cualquier amenza. Luego se coloco la mochila y empezo a caminar. Vio que los zombis empezaban a rodear el lugar, buscandolos...

-Espero que sepas correr..- murmuró a Kaylee mientras empezaba un suave trote, no tan rapido, ideal para ahorrar energia y dejar atras a los muertos. Mas adelante vio un tejido con alambres de puas-. Muy bien, vamos alla...

Asiento con la cabeza y echo a correr con él, a su paso o intentándolo al menos. Al ver el alambre de púas, sé perfectamente lo que pretende pero...¿cómo pasaremos nosotros por él sin hacernos daño?

El alambre de puas estaba a unos cien metros, por lo que Johner no se apresuro, detras suyo aumentaban los gemidos. ¿Cuantos de esos malditos iban tras ellos? No queria saberlo, por lo que no se molesto en mirar.

-No mires atras, concentrate en mantener tu respiracion tranquila- eso se lo dijo un atleta, lo encontro de casualidad. Buen tipo, lamento su muerte.

Al llegar levanta a Kaylee una vez mas y se la pasa a su espalda rugiendo un "Agarrate". Sin bajar la velocidad, trepa por uno de los pilotes mas gruesos los cuales tienen los tensores de los alambres. Pasa por el otro lado sin ningun problema, como si eso fuera algo normal y familiar.

-Ahora podemos bajar el ritmo, pero no tanto, no durara mucho. Lo romperan...

Ahora se dio la vuelta, el panorama no podia ser mas terrible. Debia haber un centenar de esas cosas, llendo directamente hacia ellos, algunos apenas caminaban, otros rengeaban y muchos deambulaban como si les costase mantern una direccion. No sabia si eran atraidos por su olor o que, pero los tendrian detras suyo un buen tiempo.

-Genial..