Partida Rol por web

El único gran trasgo de la línea que quedaba da un paso lateral para atacar a Dwama, sabe que su armadura es peor que la del clérigo y prefiere dejarle este a su líder, que pega más fuerte.

El golpe falla, Dwama lo esquiva agachándose, haciendo enfadar al trasgo.

Maldita!!

De pronto Dwama siente que ha cometido un gran error, nunca debería haber salido de la habitación, que dice de la habitación! De su casa! Ahora podría estar merendando en su turno de descanso en la mina del alcalde de su Rastor natal, pero ahí estaba, a punto de morir estúpidamente en un templo destruido a manos de unos trasgos a los que los guardias del pueblo dejaban asaltar a los viajeros... Quien la mandaba meterse ahí?

En la niebla, algo se mueve y trata de atacar al líder de los trasgos, pero falla y se delata.

ouch!

El líder vuelve a atacar a Godofredo, pero su armadura, nuevamente, vuelve a salvarle el culo.

Joder! Maldita armadura! Como te de te reviento maldito!

La enana tenía que matar a aquellas bestias. Era la única forma de tratar de salvar el culo. No quedaban tantos grandes trasgos, pero mientras quedará uno en pie no podrían salir, menos ahora que Jack saltara estaba en el suelo inconsciente.

La enana lanzó dos ataques. Falló. Algo le había afectado a sus fuerzas. Algo mágico. De no ser así, sin duda sus ataques hubieran sido más efectivos. La cosa pintaba mal, de cada vez peor.

Godofredo  trató de golpear con su maza al amenazante enemigo que le confrontaba.

Joder! Nos han dado gato por liebre! Nos han hecho salir! Concentraos en un enemigo hasta que caiga, que sean menos los que nos peguen, que dan muy duro! dijo mientras se metía en la niebla donde se hayaba el ?cadáver? De Jack.

Su perro, por su parte, atacó al trasgo que había ocupado el lugar del que acababa de matar (T10). El ataque fue brutal, el cual, gracias al golpe que Godofredo le acababa de dar, hizo que cayera al suelo.

Buen chico!

Desde la niebla, Chatrilon se colocó sobre el recién asesinado trasgo para disparar al que estaba más cerca (T5), fallando como un novato en su primera batalla.

Mierda!...

El líder de los trasgos comenzo a brillar, algún conjuro le acababa de afectar.

Uno de los trasgos, el que acababa de esquivar un flechazo de Chatrilon, fue a por él.

El golpe fue fuerte, pero no mortal.

El otro se fue a por Godofredo, ha que no le quedaban enemigos cerca, fallando este. Sin duda la armadura completa que le había regalado su Rey, valía hasta la última pieza de oro.

Inútiles! Colocamos para que flanquee!

Dicho esto, se internó en la niebla para atacar a Dwama desde allí, sabiendo que vería menos, pero que a los enemigos les pasaría lo mismo.

- ¡Bien hecho Chucho! - Exclamó la enana. Desde luego ese perro estaba haciendo más por el grupo que alguno de ellos, Dwama incluida.

Otro de aquello batdardos había caído. La enana quería eliminar a los esbirros cuanto antes. Eso significaba menos objetivos a los que estar atenta. Podía equivocarse, pero eso le parecía lo más lógico.

Descargó un ataque con el filo de su hacha. Falló estrepitosamente. El gran trasgo contra el que combatía sonrió contento de haberse salvado. No contaba con el pico del urgrosh, el cual se le clavó en la pierna abriendo una brecha horrible y haciéndole gritar de dolor.

- ¡Te está bien empleado! - Le dijo iracunda.

El pequeño Hobbit estaba tumbado en el suelo, ya no sentia nada de cintura para abajo, sabia que su jugada era arriesgada, pero lo tenia que intentar para darles ventaja a sus compañeros de aventura.

Poco a poco se le hacia más dificil respirar, el contorno de su vision se iba tornando borroso, su vision se oscurecia de fuera para adentro, y muy en el centro de su mirada, a lo lejos, como si atravesara el techo de roca, veia una luz que cada vez crecia más y más, cuanto más crecia más ligero sentia su cuerpo y menos sufria por sus heridas.

¿Era quizá su destino dejar este mundo?, solo las deidades lo saben.

Godofredo al ver a su compañero gravemente herido y haciéndolo a la defensiva realizó una sencilla plegaria de curación sobre el mediano al menos para tratar de contener la sangre en el interior de su cuerpo.

-¡Castigador, cierra alguna de las heridas de este mortal, mantenlo un poco más en el mundo de los vivos!

Chatrilon, viendo que la situación empieza a ser compatible con sobrevivir otro día, suelta su arco, da un paso lateral para colocarse en un lugar con mejor movilidad y sacando su daga de plata intenta golpear al gran trasgo que tiene a su lado.

Godofredo! Primero mata a estos cerdos o Jack morirá igualmente!!

El ataque se clava en el trasgo, aunque no le hace daño suficiente para matarlo, sin duda este aún tenía vida para rato.

Perro!!

Al gritó de su amo, el can mordió al gran trasgo, de un bocado le arrancó un trozo de su pierna. el gran trasgo aulló de dolor aunque no soltó su arma... Moriría matando.

Era el turno de los trasgos, el primero en atacar fue el que acababa de recibir el mordisco, que se giró al can que ya había causado la muerte de alguno de sus amigos.

Muere perro traidor! el can se agachó, pasando el filo del espadon sobre su cabeza, le había ido justo.

Al ver que fallaba dio un paso atrás para alejarse de la niebla y de los enemigos... Estaba en las últimas.

El otro trasgo, al ver a Godofredo conjugando para curar a su compañero, se echó atrás un paso y tiró sobre el clérigo un frasco de vidrio con un líquido color azulado en su interior.

esquiva esto cerdo!

Al ser golpeado por el frasco este estalló causando una gran llamarada que se extendió a cuántos se encontraban a su alrededor, encendiéndose los ropajes del clérigo.