Se me olvidaba explicártelo. Una tirada de COR 1/1d6
En las tiradas de cordura hay que poner siempre 1 en cantidad, y dejar D100 en Caras.
Si el resultado es un éxito como en este caso, se pierde la cantidad de cordura indicada a la izquierda de la barra invertida /, en este caso un 1
Si el resultado hubiese sido un fracaso tirarías 1d6 y perderías la cantidad de puntos que saliera en el dado.
Motivo: Cordura
Tirada: 1d100
Dificultad: 90-
Resultado: 18 (Exito)
Ya te resto yo de la ficha la pérdida de cordura.
Parecía que todo había acabado. Todo. Highway se miró nuevamente el brazo, se frotó el tatuaje y luego se sentó. Estaba sudoroso y agotado, como si hubiera estado luchando toda una semana en pleno frente de trincheras, avanzando con un barro que le llegaba a las rodillas.
El sargento se dejó caer en su silla y se echó hacia atrás. Quería pensar en todo lo que había pasado. Todo.
No se dio cuenta de que había estado conteniendo la respiración hasta que el dolor se fue e inspiró para coger aire. Se controló para no hiperventilarse. Era fácil hacerlo no sólo por el dolor, si no por la angustia provocada por aquellas enigmáticas visiones. ¿Qué había sido aquello? ¿Era real o sólo perversiones creadas por sus subconscientes? Tenía dos sentimientos enfrentados. De una parte su curiosidad de científico le impulsaba a esclarecer lo que había pasado allí. Por otra parte el terror que había sufrido le decía "ten cuidado Steffan".
Motivo: Pérdida COR
Tirada: 1d6
Resultado: 1
Ya hago la tirada de cordura y te apunto el 2% en mitos.
Motivo: Cordura
Tirada: 1d100
Dificultad: 63-
Resultado: 13 (Exito)
En el momento en el que las mujeres entraron, Matthew las miró pálido y se volvió hacia sus compañeros agachando la cabeza. La tensión que estaba sufriendo era insoportable pero no quería asustar más a las mujeres.
—No...no las digáis nada de lo de los niños... no tenemos porque ponerlas mas nerviosas
Cuando pudo reconrar el aliento Derek sencillamente dijo:
-¿Pero que coño ha sido todo esto?-
Gracias master. Útimamente estoy muy liado.
-¿Pero que coño ha sido todo esto?-
A lo que el sargento contestó igual de sencillo.
- Han vuelto, otra vez han vuelto. ¡Malditas visiones!
Motivo: Cordura
Tirada: 1d100
Dificultad: 65-
Resultado: 24 (Exito)
Ya te he tirado yo la cordura
En cuanto entra Shara se lanza a los brazos de Samid.
Un solicito camarero trae un vaso de whisky para ella, pero al contrario que su esposo, la mujer si que respeta los preceptos del profeta y descarta el vaso con un tembloroso gesto con su mano derecha.
Sus ojos están rojos e hinchados y su rostro está macado por las lágrimas recién vertidas. Incluso su respiración es entrecortada.
Jamil ha desaparecido- le cuenta a su marido- Alguien se lo ha llevado mientras dormía la siesta, en su lugar han dejado pintado en la pared el mismo símbolo que tenéis tatuado en el hombro. Mi hermana ha buscado por toda la casa pero no está. El pequeño Ahmed se encuentra bien. Dormía en la misma habitación que el mayor, pero a él no se lo han llevado.
Jamil es el hijo mayor de Samid. Algunos lo conocéis, porque lo ha traído a alguna que otra reunión.
Keeper escucha con horror las palabras de Shara. Por si no hubiese sido suficiente ver con sus propios ojos como se llevaban al hijo de King ahora se acababa de enterar que el hijo mayor de Samid también había desaparecido. -Te..Tengo que llamar a Mary.- Dice con un tono de piel blanco como la cera antes de salir del restaurante a buscar una cabina.
Los que habéis tenido contacto con Keeper (todos menos Derek) sabéis que Mary es su esposa y que el también tiene un hijo pequeño.
La broma sobre que la compañía Rainbow solo sabía hacer niños que os llenaba de orgullo y que repetíais cada vez que uno de vosotros tenía un hijo varón vuelve a resonar en vuestras cabezas.
La realidad es que los quince primogénitos de la compañía han sido todos varones, siempre ha sido raro, pero todo el mundo sabe que es mejor tener un varón que una mujer, así que a nadie le ha importado nunca demasiado.
Ahora te preguntas si los quince niños habrán sufrido el mismo destino.
Matthew se levantó al instante de la mesa tirando hacía atrás la silla. Le costaba respirar. EL hijo de Joe King, el hijo del bueno de Samid... De pronto el joven estaba pálido y las manos le temblaban. Una sombra de miedo había aparecido en su mirada.
—Daphne. Llama ahora mismo a mi hermana...—dijo mirando a su mujer—no...no te preocupes... seguro que no ha pasado nada. Solo...
El tono de voz indicaba que ni el mismo se creía lo que decía, mantenía la mirada baja, algo que jamás había hecho en el ejercito ni en su matrimonio. Ve...Comprueba que Matt esté bien...
La mujer tragó saliva y por un momento pareció que iba a desplomarse pero cuando su marido le habló salió corriendo torpemente en la misma dirección que Keeper para volver a hablar por teléfono. Aquello no tenía sentido.
Viendo como se desarrollaban los acontecimientos, el sargento apretó los dientes y dejó ver lo que pasaba, aunque en su mente se repetía una y otra vez, como si lo gritase:
- ¡No por Dios, los niños no!
Steffan no daba crédito a lo que escuchaba y no quería creer lo que empezaba a formarse en su cabeza.
- Deja el whisky y trae agua.- Dijo con tono seco al torpe camarero.-Si...si hay algo que yo pueda hacer...- Ya sonaba como si diera pro hecho que los primogénitos de sus compañeros hubieran desaparecido. Afortunadamente él no tenía hijos aún pues ninguna mujer le había aguantado lo suficiente.
Corriendo como alma que lleva el diablo sigues a Keeper hasta la misma cabina desde la que hablaste minutos antes con el mayor.
La operadora vuelve a pedirte el nombre y número de la persona con la que quieres hablar y en seguida escuchas el tono de llamada.
¿Diga?- Escuchas la voz de tu cuñada al otro lado de la línea.
Margaret...Margaret, soy yo, Daphne....Por favor dime que Matt está bien...dime que está bien—La voz de la joven estaba cargada de angustia. En aquel momento ni tan siquiera se planteaba las explicaciones que tendría que dar al resto por el hecho de que la hubiesen llamado por su nombre. De hecho ni siquiera se había dado cuenta de ello.¿Está bien?
Roderick terminó por tomar asiento para evitar que se notara demasiado que estaba temblando de pies a cabeza. No entendía nada de lo que acababa de ver, pero no hacía falta tener una mente privilegiada para ser consciente de que aquello no era nada bueno y menos aún si comenzaban a desaparecer niños...
Afortunadamente él no era padre, pero entendió perfectamente la turbación de los presentes, con el estómago encogido se sirvió él mismo un vaso de wiskey y lo bebió de un sólo trago esperando que el alcohol lo ayudara a pensar con más calma...
-Esta vez vamos a llevar balas y explosivos.- dijo un lacónico Derek mientras rememoraba los sucesos en una perdida cueva francesa.