La flecha de Megara se cuela en el matorral al mismo tiempo que la mano enguantada lanza el cuchillo contra la elegante dama. El cuchillo se clava en su espalda, donde ya estaba la mancha de sangre, y la dama cae al vacío. La mano se pierde entre las hojas, junto con la flecha. No se escucha ningún grito del interior del matorral, y tampoco de nadie que esté cayendo al vacío.
¿Decidís examinar algo?
Disculpa Megara, pensaba que habías usado Disparar.
Escucho el razonamiento de Snorri y asiento con la cabeza.
- Seguiremos juntos entonces - digo al tiempo que comienzo a caminar hacia donde se encuentran Dunkan y Megara. - Pero me debes una excursión por el bosque... jajaja - añado con tono burlón...
Nos dirigimos al encuentro de nuestros compañeros
Veis que Megara ha lanzado una flecha contra un matorral, y a continuación, Dunkan y ella han salido corriendo hacia la zona del matorral, que se encuentra cerca del borde del acandilado, y por lo tanto, del puente.
-Parece que hay problemas-digo en voz baja- Vayamos con cuidado, es probable que lo que sea que les haya espantado no sepa de nuestra presencia, así que quizás podamos pillarlo desprevenido.
Dunkan se detuvo confundido a pocos metros del seto. Sus ojos habían visto lo ocurrido pero el resto de sus sentidos no parecían devolverle una información consistente. Había presenciado una cuchillada, una flecha que debía haber ensartado al atacante y una mujer cayendo al vacío.
Debería haber ruido- pensó- porqué no hay gritos, maldiciones, golpes. Todo está en perfecto silencio.
- ¿Qué demonios está pasando aquí?
Dunkan se giró hacia Megara, con mirada interrogante.
Como Snorri y Kepoope han corrido hacia Megara y Duncan, ahora volvéis a estar los cuatro juntos.
Con los sentidos alerta, Megara se acercó hasta el puente. Había algo que no encajaba. Detuvo a la mula con un gesto de la mano: necesitaba concentrarse.
Olisqueó el fresco aire de la mañana buscando algún aroma extraño, clavó la mirada en la espesura intentando detectar movimientos, forzó sus oídos para captar el rumor de hojas pisoteadas que delataran a alguien corriendo a ocultarse...
Motivo: Discernir la realidad
Tirada: 2d6
Dificultad: 7+
Resultado: 6(+1)=7 (Exito)
Como he sacado un 7 en Discernir la Realidad, puedo hacer una pregunta: elijo "¿Qué hay aquí que no es lo que parece?".
De hecho, podría haber añadido la Astucia de la mula pero me he olvidado. En cualquier caso, el resultado es el mismo.
Me acerco junto con Snorri al puente donde se encuentra Megara y puedo ver que está inspeccionando el bosque como buscando algo.
- ¿a que juegas? - le pregunto. ¿Puedo jugar yo también?
Has estado rápida, no caí yo en el Movimiento de Discernir la realidad.
Una escena trágica y ni rastro de "los protagonistas"... Piensas que quizá era algo más extraño. Quizá espectros o fantasmas, que recrean un suceso o una idea para la eternidad. A veces has oído historias de viajeros fantasmas que siempre piden orientación en el mismo cruce, o caballeros ejecutando los mismos movimientos de combate siempre que son vistos en las celdas de cierta mazmorra, hasta que uno de ellos es atravesado. Se comportan como un fallo de la realidad que perdurará por siempre. ¿Quién sabe? Quizá indiquen algo, o simplemente sean ajenos al discurrir del tiempo.
Al mirar al fondo del barranco, veis el caudaloso río Averia, que con sus golpes de agua ha ido redondeando las piedras de alrededor. En un lado, a los pies de la pared vertical de piedra, hay una zona con abundantes rocas y os parece distinguir varios huesos. Algunos parecen humanos, aunque claramente hay otros de animales grandes que han debido despeñarse, así como de planchas de madera podrida caídas del propio puente.
El puente se encuentra en un estado precario. Parece capaz de aguantar el peso de un par de personas, pero... ¿una mula? Además, faltan varios tablones de madera, por lo que atravesarlo incluye dar algún que otro peligroso salto.
Al lado, cerca del matorral, hay una herradura de metal con el número 13 grabado en ella.
- Esto no me gusta- rumió Dunkan- no me gusta nada. No soy supersticioso pero yo diría que eso que hemos visto ha sido un... una... ¿ilusión?- sonrió al encontrar una palabra menos sobrenatural que las otras que le rondaban por la cabeza- ¿alguna idea?
- ¿Una ilusión? ¿Qué habéis visto? - pregunto con excitación tras escuchar las palabras de Dunkan.
Observo con atención los huesos de animal que hay en el fondo del barranco intentando averiguar a que especies pertenecieron en vida...
¿Cabría un uso imaginativo de "Estudiar esencia" para identificar los huesos animales?
Mmm... Es un poco cogido por los pelos, Kepoope, pues deduzco que para el movimiento necesitas ver el animal vivo, para saber exactamente su forma (no sólo la de los huesos, sino la de su musculatura, pelaje, etc...) y manera de actuar para poder convertirte en él.
Me refería a usarla más bien para identificar los huesos, como una habilidad de tipo "conocimiento", no con la idea de poder transformarme sin ver al animal en vida...
A eso me refería con lo del uso imaginativo, jeje...
Distingues huesos de mulas, burros, caballos... Hay también huesos humanos y quizá algún mediano y enano. También hay vacas, cerdos y jabalís. Hay huesos de aves y raspas de peces, así como algunas conchas de moluscos.
Según el manual, al menos como yo lo interpreto, no es necesario conocer la morfología del animal para convertirse en él (sólo observarlo), así que supongo que no otorga ningún conocimiento especial en cuanto a zoología. De todas maneras, como tu personaje sí ha tenido quizá un contacto con los animales "por encima de la media", te concedo el que puedas distinguir los huesos.
Motivo: detectar magia
Tirada: 2d6
Dificultad: 10+
Resultado: 3(+3)=6 (Fracaso)
ops, que fallo
Tras realizar una serie de gestos con la mano y pronunciar unas palabras en voz alta, me giro hacia msi compañeros y les digo:
-Yo no noto ningún atisbo de magia en este lugar, debe haber sido otra cosa.
Megara frunció el ceño. Desconfiaba de las cosas que no podía examinar con sus cinco sentidos.
-Fantasmas-murmuró haciendo un gesto de protección-Este lugar... este bosque... Aquí pasan cosas muy raras . Yo digo que nos larguemos cuanto antes pero no por ese puente.
- ¿Fantasmas dices?- el enano no pudo evitar un escalofrío- estoy contigo, larguémonos de aquí, volvamos a la senda de nuestro destino original, y olvidemos este asunto... y ese puente.