Partida Rol por web

Se oyen pasos y pocos segundos después aparecen Sheila y Koriah en la biblioteca. Sheila se queda sombrada al ver el desastre, pero os mira con gesto serio.

¿Estáis bien? ¿Qué ha ocurrido? No tendría que haberos dejado con un objeto potencialmente peligroso...

Kharask se gira con la espada a dos manos en alto y la sangre del bicho resbalando por ella y manchando la alfombra que previamente ha rajado, no puede evitar enfundar el arma y ruborizarse.

- Mis más sinceras disculpas por el destrozo que hemos organizo, no tengo palabras....

El enano desgreñado tenía también su hacha manchada de sangre de las criaturas mezclada con astillas de la mesa.

Esto... esto... - empezó a mirar a todos lados, bastante apurado. Dio un par de caladas a su pipa para volver a encender las ascuas y miró un tanto avergonzado a la mujer. - Verá, Lady Heidmarch, conseguimos descifrar la caja y abrirla pero estas dos criaturas se encontraban en su interior y tuvimos que acabar con ellas antes de que tirasen la habitación abajo.

Aunque... - movió el hacha en sus manos, sin saber muy bien qué hacer con ella en esos instantes - ha habido ciertos daños colaterales...

Erik mira a Sheila mientras con disimulo golpea un trozo de silla del suelo para que acabe debajo de la mesa.

- Nos han pillado por sorpresa, pero no se preocupe, nos haremos cargo de los daños. - mira a sus compañeros rojo - Es decir, yo me haré cargo de los daños, si mis compañeros quieren ayudarme lo agradeceré - habla mirando al suelo, sin saber muy bien donde meterse.

En cuanto ve que Opik empieza a tomar las riendas de la situación, poco a poco se va moviendo hacia atrás, dejando que el enano arregle la situación.

- Por supuesto que puedes contar conmigo para pagar los desperfectos, si son muy caros puede descontarlos de la recompensa de la misiones venideras hasta haberlo saldado todo.

Sheila relaja el gesto, y agita la mano delante suyo, restando importancia a lo ocurrido.

No digáis tonterias, por favor. Si hay alguien responsable de lo ocurrido aqui, soy yo. Yo me hago cargo.

Bueno, vamos a lo importante. Estoy entusiasmada por la habilidad que habéis demostrado al abrir la caja. Y además, os habéis tenido que enfrentar a unas criaturas convocadas seguramente por una trampa. Así que, algo ha salido bueno de todo esto, ¿no? Por cierto, ¿habéis mirado si hay algo dentro? A mi me interesa la caja en sí misma, así que podéis quedaros lo que haya.

Sheila se acerca a la mesa, recoge algunos de los pergaminos y estudia la caja desde un metro más o menos.

El enano, que ya tenía el hacha sujeta con dos manos semioculta por la vergüenza, como un niño pequeño escondiendo una travesura, sonrió de oreja a oreja cuando la mujer se pronunció respecto a lo sucedido.

Ciertametne no nos ha dado tiempo, tratando de contener a esas criaturas, Lady Heidmarch. - se acerca a la caja para revisar su interior como ha sugerido su anfitriona. - Aunque estarías en todo vuestro derecho de reclamar cualquier objeto en su interior pues somos meros invitados bajo vuestro techo...

Mierda, me siento como un niño pequeño cuando le pillan en una travesura... y esa humana debe tener menos de la tercera parte de mi edad...

Contempla los destrozos y sonríe.

-Creo que puedo ayudar a reparar las cosas. Tengo un conjuro que repara éstos pequeños daños... pero tendrá que ser mañana, cuando lo estudie...

Luego espera a ver que encuentra Opik en la caja.

Karash sonríe tímidamente: Vuestra generosidad solo es comparable a vuestra inteligencia y belleza, pero no se acerca a la caja

La respuesta de la señora hace que Erik de involuntariamente un paso más atrás alejándose más de la caja. En voz tan baja que casi no se le oye contesta:

- Gracias.

Tinuviel, al igual que Opik, se acerca al enano para ver que contiene la embrujada caja. Al comprobar que son algunas gemas y una daga, lanza uno de los conjuros menos poderosos pero aún así de los más útiles. Un detectar magia.

Erik no pierde el tiempo en negociar, rápidamente, con una sonrisa da, un paso, saliendo de detrás de sus compañeros y de forma poco reflexiva se compromete:

- Por supuesto que cumpliremos la misión, cuente con ello - dice con entusiasmo.

- Si puedo ser de ayuda estaré más que satisfecho, responde con una sonrisa Karash.

Quizá deberíais guardar las pociones - dijo a los compañeros tras hacer una inclinación de cabeza a modo de agradecimiento a Sheila - para cuando se presenten los problemas, que escuchado lo escuchado seguro que no tardarán.

Por ahora podría invocar las bendiciones del Forjador para sanaros y guardar tan generoso regalo para cuando las cosas se compliquen.

Por cierto, Lady Heidmarch. - dijo a la dama - Decís que esa banda con la que operaba era sumamente directa y violenta, ¿no? ¿Portan algún distintivo o color que les identifique?

Además, - se frotó las manos - supongo que, en vista del ambiente en el que se movía Natalya, quizá sea necesario algo de dinero para sobornar a los rateros de la zona de forma disimulada y poco violenta...

Tinuviel mira a Koriah mientras se marcha. Otra atractiva mujer que me desea suerte en la vida. Osea lo de siempre...

-Es una recompensa más que apropiada para unos pathfinders. Capitana. Pero haremos lo que podamos. ¿Algún sitio por el que empezar?

Y se nota que el Decemvirato la ha financiado bien, tiene dinero para tirar en cualquier chuminada pseudomística...