Partida Rol por web

Me rasco el mentón con la mano correspondiente al brazo en el cual no está la mascota de la chica Entiendo, pero has sido descuidada... podría darte una insolación con facilidad. Haciendo un gesto ante su disculpa que simboliza "gracias, pero ya no pasa nada", comento como de pasada Pues no entiendo por que lo dices... Bueno, es hora de volver y el sol no va a darnos tregua, ¿nos vamos?

No están dispuestos a que la sangre de unestra estirpe termine en cualquier familia de mago... se acercó al chico, saliendo de la sombra y haciendo que el sol le diese un tono dorado oscuro a su pelo. ¿Irnos ?¿A dónde?

Sonrío a medias Ya veo... puedo observar que todas las antiguas familias tienen las mismas preocupaciones en mente. Su pregunta me pilla descolocado, pues la respuesta me parece obvia Al caserón, ¿donde si no? Ya debería haber vuelto hace rato y mi madre, cuando se enfada, da más miedo que una cueva de dragones a la hora del almuerzo...

No creo educado presentarme hoy. Si mi familia dijo que vendríamos mañana sería una falta de respeto presentarme hoy. Quizás tus padres estén preparando algo para recibirnos e ir ahora sería dejarlos mal a ellos y a mi familia Razonó mostrando que también había recibido una estudiada educación. Da igual, ve tu, yo me quedaré un rato por aquí. De todos modos, ya encontré los que buscaba... Zaida no pudo dejar en toda la conversación un tono de voz cortante y desconfiado, a diferencia del tono amistoso de Emilio.

Cierro los ojos por un momento ¿De verdad piensas que sería educado hacer eso? Es cierto que hasta mañana no está planeado vuestra llegada, pero tampoco puedo dejar a alguien a solas por este sitio... si pasa algo sería una mancha dentro de mi "savoir-faire"... El tono vuelve a ser como al principio Eso pasa, estúpido, por bajar las defensas...

...Zay antisocial... Bueno, gracias por preocuparte, ¿si? esbozó una sonrisa y se dio la vuelta volviendo al arroyo. Sucy, ven... La salamandra dio un salto y se escudriñó hasta Zaida. Se volvió a sentar. Tranquilo, no diré a nadie que te he visto. Mañana será como si nos viésemos por primera vez, así que no tendrás que excusar nada...

Desconfiado ¿Estas segura? No me cuesta retrasarme un poco... Observo que parece tener la situación controlada, así que no insisto más. Sacando unas gafas de sol de un bolsillo en apariencia demasiado pequeño para ellas Bueno, entonces me marcho... ya nos veremos mañana, "chica-aparecida-de-unas-matas". Empiezo a caminar en dirección a mi casa poniéndome las gafas para evitar el sol en los ojos.

Al rato llegas a casa pero ves que tus padres no han salido afuera a buscarte.

Algo extrañado, acelero el paso pero sin aparentar estar inquieto. Voy pasando por las habitaciones en busca de alguien.

Encuentras a tus padres adentro. No ves a tu madre haciendo ninguna poción: ambos están en la sala de estar, hablando algo.

Sería lo correcto...pero tenemos que pensarlo bien. Es la voz de tu madre.

Entrando con paso firme en la sala, el aire que muestro es el de la confiaza que muestro generalmente Madre, la tarea ya se ha realizado... ¿puedo retirarme por un rato? Estoy algo cansado y me gustaría reposar un poco...

Emilio...hemos hablado de esto con tu padre. Mañana vendrá una familia muy importante a casa, y nos gustaría poder unir nuestros lazos para aumentar aún más nuestro honor... Tu madre tenía la voz seria pero con unr egusto amargo Así que cuando termines los estudios en Sorgintasun es posible que confirmemos el lazo. Aún hay mucho que hablar...

El rostro permanece impasible, pero el interior adolece de cierta ironía SI no hubiera sido por el encuentro de antes, esto no me lo creería ni a empujones... Me trago el sarcasmo y pregunto con tono neutro Entiendo madre, pero... ¿por que no se me ha informado con algo más de tiempo? Supongo que esta visita se ha sabido con algo de antelación...

Si, pero justamente mañana lo hablaremos formalmente. Aún así, tomaremos la decisión hasta finalizar tus estudios. De todos modos retírate, tu padre y yo tenemos que seguir hablando...

Si madre, ya me marcho... Me marcho de la sala en dirección a la planta superior, en dirección a mi cuarto para descansar y cavilar un rato a solas.

En tu cuarto encuentras a tu gato, que se acerca a tí a ronronear.

Sentándome en la cama, le paso la mano por el lomo, acariciádola de forma ditraída mientras murmuro Como siempre, Yoru, nunca tengo palabra para nada... sólo hacer tareas, sonreir, aguantar y callar. Espero que algún día sea má poderoso que ellos, entonces veremos quien da las órdenes aquí...

Una lechuza que parece una cría picotea tu ventana.

Sorprendido ¿? ¿Que pasa ahora? ¿Un mensaje? Me levanto y abro la ventana, para poder dejar entrar al pájaro en la habitación.

La lechuza te deja una nota y se posa en tu hombro, esperando recompensa.
En la nota lees con una caligrafía impecable:
No te preocupes por nada. Yo me encargaré.
Pero no había firma ni nada.