Partida Rol por web

Mientras De Alba esperaba que el ingeniero de la Excalibur hablara y le diera un pequeño informe, el timonel volvió a intervenir y fue entonces cuando la capitán lo miró con mucha seriedad.

- La gran jefa es su superior y le aconsejo encarecidamente que tenga cuidado a la hora de dirigirse a sus "jefes", su deber es servir a la flota y las ordenes que se le dan han sido previamente meditadas en pos del bien común, haga el favor de no olvidarlo- era de sobra conocido que las faltas por insubordinación eran del total desagrado por parte de Cristina, entre otras cosas porque la misión anterior había estado plagada de ellas y si había sido despojada de sus galones era precisamente por no haber sido capaz de controlar a sus hombres, en especial a su primer oficial- ¿Quien más hay en la sala de conferencias?- demandó tratando de centrarse en resolver al situación actual

- Yo se donde encontrar armas. Y puso la mano para que el arma reglamentaria del guardia llegara a las suyas. - ¿Le importaría ayudarme comandante? Preguntó al mando MACO con la voz que su mentor, Silky, hubiera puesto.

Le explicó: - Las armas las tienen los enemigos. Sólo hay que hacerse con algunas de ellas, y eso se consigue arrebatándoselas. Si me sigue, le presto la pistola del guardia. Si no, voy solo

La Comodoro detiene sus pasos para explicar rápidamente. - Ellos están cerca de la salida, sobre ud precisamente. Solo tiene que decirle de bajar y listo, no es más que eso. - afirma al dedicarle una mirada de que la orden no era difícil de hacer, no le había pedido que suba al conducto. - No alertara a nadie si se sube a la mesa y les pide de bajar, coge la silla que tampoco le será problema para trabar esta salida así nadie ingresa. Nosotros vamos a la Sala de Control para activar la alarma, ver la situación, etc. - no era un algoritmo, sino algo simple. Ya tras decir eso, considerando que ese lugar estaba despejado se retira de allí junto al vulcano. 

-Muy bien comodoro.  Les aconsejo que busquen algún panel de camino a la Sala de Control, creo que la alarma también se puede activar desde alguno de ellos, es más, no me extrañaría que aquí hubiese alguno.

Tras hablar con la comodoro, Aakesh se coloca lo más cerca de la trampilla y habla a la capitán mientras la comodoro y Sirril se alejan.

-Capitán, ¿puede oirme?, siga mi voz, creo que podrá ver la trampilla de la ventilación abierta.

-¡Lightma...! -grité por última vez, intentando hallar al desaparecido timonel, cuando ví a Cristina junto a él. Parecían estar discutiendo sobre algo, buen momento para hacerlo...- ¡Capitana! -saludé, cuadrándome lo mejor que pude en el escueto espacio- ¿Cómo ha llegado aquí? ¿Dónde estamos?

De Alba parecía requerir información sobre lo que ocurría.

-En realidad sé bastante poco, apenas Lightman desapareció me lancé detrás. Allí abajo está el Comandante Jankowsky, la Doctora Walker y el Sargento Urmoz. Además, justo antes de subir, me pareció ver refuerzos llegar. Puede que ya estén coordinando el escape. Lo mejor sería volver, capitana.

Mi mirada desconcertada se paseaba de uno en otro, no entendía lo que se estaba cocinando en un conducto de los Cuarteles Generales, pero fuera lo que fuera, podía esperar.

Sirril echó un último vistazo, finalmente el único phaser se quedaría en manos del oficial en retaguardia. Desde luego aquello no parecía lo más lógico pero Sirril consideraba que ya habían perdido demasiado tiempo discutiendo por lo que no añadió nada más.

Una vez vio que la comodoro seguia sus pasos se dirigió a la sala de control con la debida cautela.

Ya siguiendo los pasos del vulcano observa el entorno e intenta escuchar algún movimiento cercano ya sean pasos o algo similar, pero nada solo el agitado latir de su corazón era el único sonido capaz de discernir entre tanto silencio. 

El trayecto no era muy extenso, sabía que en algún momento podía aparecer alguno y lo extraño de todo esto, es que estaban uniformados como los oficiales de la flota siendo un punto a favor para ellos dado que nadie abrirá fuego a un compañero. Salvo que Erika no era como el resto y al parecer el Vulcano tampoco. 

- Quizás algo más de meditación y se soluciona. - susurra en la cercanía de Sirril mientras la mirada está sumamente atenta al entorno, moviéndose a través de un mayor sigilo posible con la barra de metal en la mano. Más que nada haciendo mención a la verdadera naturaleza de los Vulcanos y como a través de una rigurosa práctica lograron controlar aquello, al margen de que para Erika contrarrestar ese lado con placebos no era la solución. 

Ya dejando atrás el comentario, dando a entender de que existía una mínima posibilidad de no haber podido controlarse y por esa razón la exposición del Primer Oficial reflejaba eso, ella no lo juzgaría puesto que en una situación así no haría un juicio de valor. 

- Al final del pasillo a la izquierda esta la sala. - indica con la mirada hacia todos lados, esperando que el Vulcano detecte algún movimiento. 

El vulcano asintió dirigiendose hacía donde Erika señalaba, debían darse prisa pues aunque estuviera despejado cada segundo aumentaba la probabilidad de un encuentro.

Las instalaciones son muy grandes, necesitarían demasiados hombres para controlarlas todas. Seguramente se centren en su principal objetivo. ¿Porque ahora comodoro? ¿hay algún plan o movimiento de la flota que haya podido propiciar esto?

- Evasión... Mecanismo de defensa muy utilizado cuando la verdad es demasiado punzante. Me gusta. - piensa al mantener la mirada hacia el entorno, atenta a cualquier movimiento o sonido en particular por más que la distracción era evidente. Nada se le escapa a la Comodoro pese a estar en una situación que la mantiene alerta. 

-Ya jugaremos de nuevo. -  murmuró entre dientes mientras mordía su labio divertida, aunque solo duró un breve instante para regresar a lo que estaba en medio. - No había ningún plan ni movimiento en especial,  el problema es que solo se encuentra aquí como alto cargo el Almirante Leonard y yo. Lo cual podría ser una ocasión perfecta para meterse dentro de la Flota, ha sido a simple vista una maniobra muy bien pensada al coincidir con la ausencia general de los altos cargos y la infiltración como uno más aquí dentro. Tienen los uniformes de la flota pero no pertenecen a ella. - explica en un tono claro, mirando a los ojos por un breve instante al Vulcano y tras aquel intercambio visual continua avanzando. 

- Desde la Sala de Control nos vamos a enterar de la situación, hay cuartos que tienen cierres electrónicos y no se me da mal jugar a cazar ratones. Así que necesitaré de tu lógica y mente estratega. -  afirma ya disfrutando de la situación, todo lo que requería pensar y crear con astucia le apasionaba. 

Sirril respondió a la mirada de la comodoro tras evaluar la información en unas décimas de segundo. A estas alturas y como más que probable objetivo prioritario estará muerto o capturado. Esperemos que si hay cámaras podamos hacernos una idea de lo que esta sucediendo.

La mente del vulcano realizada cálculos de probabilidades conforme hablaba en base a la poca información que conocía aplicados contra la lógica tactica. No creo que se trate de un sabotaje ya que la operación habría sido más silenciosa, y con lo que ha dicho descartaría que se tratara de un ataque premeditado contra los oficiales de la flota... no tendría sentido iniciar un ataque así cuando menos altos mandos hay en las instalaciones... sin duda hay otro motivo detrás de todo esto... la mirada del vulcano pareció agudizarse mientras hablaba un motivo mucho mayor, cuentan con gente dentro, con información reservada y sin duda llevan tiempo planeandolo....

Creo que tan solo se trata de una primera fase, de un primer grupo de avanzadilla encargado de allanar el camino a un ataque de gran escala... es posible que traten de neutralizar las defensas terrestres e impidiendo la comunicación con la flota desperdigada.

Escuchó con agudeza mental cada palabra del Vulcano, el análisis de la situación era coherente y tenía bastante sentido. Ahora la pregunta que se hacía en aquel instante la Comodoro se basaba en lo dicho, esto se había planeado muy bien. 

- No se consideraba este lugar vulnerable hasta que se demostró lo contrario, es lo que está diciendo o aquí dentro existe algo muy bien escondido que sea de interés. Aunque si mantengo tu línea de razonamiento no deja de ser un sabotaje...  Tenemos que ir más lejos, la hipótesis es correcta y las respuestas las tenemos a unos metros. - responde al dedicarle otra mirada, ya muy cerca de la primer esquina. Había escaleras y al costado derecho la Sala. -Póngase sus galones. - Afirma al extender su mano tras haber sacado de su bolsillo lo requerido para dárselo al oficial. 

Jankowsky recoge lo que el Almirante le entrega, un rápido vistazo le es suficiente para entender que se trata de información importante, crítica. Hecho esto asiente con la cabeza al moribundo.

-Descanse Almirante, la doctora Walker es una gran profesional.

La propuesta de Unger no le deja muchas opciones, necesitan armas:

-De acuerdo Unger, iré, pero no deberíamos dejar a esta gente desarmada.- echa un vistazo al grupo - además de armas debemos traer instrumental médico para la doctora. ¡Vamos! no hay tiempo que perder.

El comandante se acerca a Unger con intención de hablar con el en privado.

-El almirante necesita que le entregue algo a de Alba con urgencia, son chips de datos, desconozco lo que contienen pero deben ser importantes y no pueden caer en malas manos.- 

- Hola señor Ollander. Estamos aquí, esperando la decisión de la capitana sobre que dirección tomar. Hemos tenido ciertas discrepancias, pero al final todo se solventa. ¿Están bien los demás? ¿Cómo andan los ánimos entre el resto de la tripulación?

Me muevo un poco en la estrechez del conducto.

- Sugiero que nos movamos, estar tanto rato aquí encogido me acabará produciendo claustrofobia.

Miro a Jack y a Cristina, esperando sus indicaciones.

La humana y el Vulcano no son tan sigilosos como ellos creen, pudiendo descartar cualquier movimiento y acción por sorpresa. Afortunadamente la Sala de control de vigilancia se encuentra vacía, sin ocupantes ni mucho menos enemigos.

Para sorpresa de ellos la sala se encuentra intacta, sin daños ni desorden, en donde lo único llamativo es un grafiti sobre la línea de monitores.

El grafiti es la representación de la tierra dentro de un triangulo azul. El símbolo es terriblemente llamativo y familiar para Sirril y Erika.

Incluso las gavetas de los guardias no presentan indicios de saqueo. Los compartimientos todavía están cerrados, con sus puertas sin daños.

Las pantallas muestran un edificio completamente vacío y sin puntos de interés. En realidad parece un edificio fantasma.

Hola señor Ollander. Estamos aquí, esperando la decisión de la capitana sobre que dirección tomar. Hemos tenido ciertas discrepancias, pero al final todo se solventa. ¿Están bien los demás? ¿Cómo andan los ánimos entre el resto de la tripulación?

-Si, están bien. Aunque no estuve mucho más tiempo que usted, Lightman. Apenas desapareció le seguí -indiqué-. Todavía los tiros no han llegado pero por lo que llegué a escuchar están preparando una respuesta, o al menos una resistencia.