Partida Rol por web

Estoy de acuerdo, pero antes quiero ver que nos ofrecen las calles de Neemara. Sea lo q sea necesitaremos veneno o explosivos. Y toda la información que podamos sacar. Lo ideal sería distribuir tareas pero al ser una primera toma de contacto toda la información que reunamos será bien recibida

Saluda a todos con una leve reverencia y sale por la puerta al tiempo que Amras abre.

Nos podríamos encontrar aquí de nuevo en unas horas ,aunque no sería descabellado encontrar un lugar mejor y mas seguro donde reunirnos. Si les parece les estaré esperando en la taberna más grande de la ciudad. Siempre será mejor que un almacén de contrabando

Suerte a todos

Suelto una carcajada.

- ¿Cómo vamos a matar a un simple hombre si somos incapaces de ponernos de acuerdo y nos retamos unos a otros?

Sigo sentado, mientras el grupo se va desbandando.

- Muchos a ordenar, pocos a obedecer... - musito casi para mi. - Pues venga, hagamos una primera inspección, sugiero que en un par de horas nos encontremos donde dice el capuchas, y compararemos datos. ¿Alguien se viene conmigo o seguimos con el rollo de lobos solitarios?

Dulack se gira y asiente con una sonrisa.

- Cuatro ojos ven más que dos, será un placer investigarjuntos señor Darklight.

Dicho esto espera fuera de los almacenes para iniciar su busqueda

Miro a la figura encapuchada, pero casi no logro vislumbrar su cara, escondida en la penumbra que arroja la tela sobre su rostro.

- Bien, vamos. - digo siguiendo sus pasos, y juntos nos adentramos en los callejones de la ciudad.

Estaba rodeado de profesionales, estaba conforme con aquel grupo. No hubo niñatos mimados que le siguieran provocando, y eso le permitió a él dejar pasar aquella disputa. Quizás este trabajo podría hacerse.

Esperó pacientemente hasta que la mayoría se fueron, le hubiera gustado ser el último en salir, pero los otros dos no daban indicios de estar vivos, por lo que decidió abandonar aquel depósito. Se relamía los labios en el camino, quizás podría encontrar alguna mujerzuela que intimidar, sí. Eso estaría bien.

Durante las siguientes dos horas, los personajes descubren la siguiente información mientras buscan de forma frenética:

Mercado negro:

La experiencia en el mercado negro está marcada por el tandem Dulack-Amras en el que el joven profeta aporta el aura de poder y Amras el descaro de un hombre acostumbrado a tratar con ese tipo de gente. Tienen la posibilidad de obtener explosivos en una cantidad moderada (Al fin y al cabo, les han convencido para obtenerlos, pero siguen siendo humanos y extranjeros) así como algunas granadas incendiarias y los planos de evacuación de la plaza junto a los mapas de la ciudad y arquitectónicos de la plaza. Los venenos que ellos os encuentran se os van por mucho de presupuesto.

Investigación:

El lugar del evento es revisado por los aspirantes una y otra vez, diferentes ángulos, diferentes enfoques de tácticas con discreción. Simulan cómo se moverían si fuesen ciudadanos siguiendo la evacuación para controlar la situación de nuevo. Esta fase es algo que cae en el talento del equipo Nick-Dulack que combinando sus puntos de vista crean algo increíble. Aplicando algo de oído a las habladurías se hacen con el soplo de que al Gobernador le protegerán unos 10 hombres, aunque otros hablan de 8. Además habría otros soldados en puntos clave del lugar. Del mismo modo, oís el soplo de que al Gobernador le tiene ganas una resistencia global llamada Sexto Día, formada por humanos en su mayoría para defender los derechos de éstos como minoría étnica en Neemara.

Cultura:

Mientras Nick-Dulack hacían el reconocimiento, el equipo formado por Amras-Wen'zi se dedicaban al resto de aspectos de cultura local. Ropajes típicos, tradiciones culturales, transportes habituales, saludos y gestos, etc. En concreto Amras consigue memorizar todo esto de manera sistemática. Una nueva cara que adoptar, ya que puede hacerse pasar por un humano nativo del planeta de manera lo bastante convincente para que el engaño dure un rato.

Almacén en los suburbios:

Cuando volvéis veis que Sheikan y Katán no están. Ahora tenéis información y suministros, podéis hacer un plan.

- Bueno chicos - digo mientras busco un sitio dónde sentarme, dejando mi fiel bastón cerca, a mi lado y quitándome la capucha de mi raída túnica - Ya tenemos algo más que antes, podemos pensar en como hacer la misión. Pero faltan esos dos, mejor irlos a buscar, ¿no? Tenemos que estar todos juntos o esto va a fracasar nada más empezar. Eso si no están borrachos en alguna taberna o han conseguido que los maten.

- Pfff...- dijo Wen´Zi al escuchar aquello.- Estás diciendo que deberíamos postergar nuestro trabajo por un par de ineptos?- tras usar su mejor tono irónico continuó.- No. Esos dos ya están muertos, y si no lo están, debemos asesinarlos antes de que reclamen crédito por algo que no hicieron.- no parecía particularmente enojado, pero cualquiera con un buen ojo sabría que estaba intentando plantarles una idea, y ver quienes estaban de acuerdo con él.

Después de unas miradas a su alrededor con los presentes, propuso algo.- Yo digo de hacer las cosas fáciles, usamos las granadas y explosivos para explotar la parte de atrás del escenario, entonces el gobernador tendrá que ponerse a cubierto bajando del escenario. Allí uno o dos de nosotros, ya disfrazados de guardias por haber matado a los originales, lo esperamos y le decimos que escape con nosotros.- hizo una pausa para que los otros lo pensaran, y cuando sintió que hasta el más lento podría seguirlo, continuó.- El estúpido gobernador confiará, y lo llevamos al "refugio" en alguna nave robada en el calor del momento. Allí lo golpeamos y se lo llevamos a Oren, vivo y maltratado.

Caminando en un paso tranquilo sin prisa, Dulack se acerca a sus compañeros.

-Bien Bien, todo está marchando excelente, debo admitir que me gusta el plan de Wen’Zi, sin embargo deben saber que nuestro, objetivo, tendrá entre 8 a 10 guardias por lo que debemos usar la distracción y un señuelo para que solo se queden 2 que serán Wen'Zi y Amras…

Tras soltar una pequeña risa casi silenciosa que apenas se vislumbra entre la capucha continuo,

 -velando por la seguridad del querido gobernador, ustedes deberán convencer a los otros guardias de que deben tratar de atrapar a los incendiarios y deshacerse de ellos.

Carraspeé un poco para llamar la atención, pues parecía que se habían olvidado de las órdenes. – Se supone que tenemos que matarlo ¿Por qué íbamos a secuestrarlo y llevarlo donde está Darth Oren? – levanté mis hombros haciendo señal de que no entendía muy bien cuál era la meta de Wen’Zi y por que “El profeta” estaba de acuerdo con él.

- No me parece mal lo de infiltrarnos, pero tendríamos que matarle en cuanto tengamos una oportunidad y dejarnos de tonterías – la verdad es que prefería dispararle con algún blaster de calibre alto desde alguna azotea o alguna ventana y luego marcharme como si nada, pero no sería tan fácil si no disponía del arma.

- Otra idea sencilla es ir a la plaza con una túnica y un blaste, crear una distracción cuando esté dando el discurso, asesinarle ahí mismo y aprovechar la multitud para correr y escondernos. – propuse, aunque no tenía muy claro que les fuese a gustar, pues parecían más del tipo de “entro y me cargo todo lo que se mueva”.

Wen´Zi suspiró pesadamente. Si no hubiera tenido puesta la capucha, se le hubieran notado las venas a punto de explotar en la frente. "Aún no puedo matarlo, ten paciencia Wenn!" se dijo a si mismo en un intento de mitigar la sed de sangre creciente que estaba sintiendo.

Lo mejor hubiera sido que alguno de los otros le respondiera, pero como no lo hicieron, lo tuvo que hacer él mismo.- Escuchame, chico de ideas sencillas...- usó el tono más despectivo y conflictivo que pudo, pero antes de que pudiera continuar hablando, su sed de sangre se hizo casi incontrolable. Necesitaba torturar a alguien.- Me voy.- dijo, y sin más que decir, se encaminó hacia la salida del almacén.

"Una mujer, humana preferentemente, joven. Si, voy a torturarla." El plan no le importaba en lo más mínimo a estas alturas, matar era su única responsabilidad. Estaba inestable.

Wen'Zi había dejado el lugar, quedaban menos de 3 horas para comenzar el plan. Solo quedaban Amras, Nick y Dulack, ¿Esperarían o ejecutarían el plan? Siempre podían llamar a Oren e informar, sería algo mal visto pero la otra opción era esperar hasta un límite razonable o lanzarse al plan ellos solos.

Mientras buscaba, se relamía bajo su capucha. No había lugar en sus pensamientos para nada que no fueran las características físicas de una adolescente, ni mucho menos estaba en condiciones para soportar al grupo de ineptos que le había tocado como compañeros en la misión.

Viendo que el que más trabas iba a dar al plan se marchaba di un aplauso para dar finalizada la reunión. Como ninguno había dicho nada suponía que seguirían con el plan que teníamos hasta ahora. Conseguir un par de uniformes, hacer un alboroto para que sacasen a nuestro objetivo del lugar y asesinarlo en el coche de huida. – Bueno, pues manos a la obra. Que os parece si yo voy a conseguir los trajes con… - eché un vistazo rápido a los dos compañeros que quedaban – Nicolas y tu Dulack buscas un buen lugar desde el que crear un alboroto. Igual si puedes conseguir un traje de rebelde mejor, y si te ves capaz de matarlo en cualquier momento no lo dudes. ¿Qué me decis?