Partida Rol por web

Graham sigue en el interior, mientras Garth y Sally hablan sobre quedarse o no. Cuando parece que Sally ha aceptado quedarse veis que Robert, Rebeca y una chica a la que no habeis visto aun, se alejan equipados probablemente para practicar escalada.

La mirada de Garth busca la comprensión de Sally, hablando siempre en un tono calmado para no alterarla más. Alza una ceja al ver al equipo que parece que se dirige a practicar la escalada. Alza una ceja y sonríe. 

- Ya nos contarán qué tal se está ahí arriba.

Miro al grupo y retiro al mirada al instante. 

- Si  si, ya nos contarán. Volvamos a la habitación y encerremonos. No confío más que en ti en este lugar del infierno.

Sin mirar a mi compañero emprendo la vuelta a la habitación, muerta de miedo.

¿Encerrarse en la habitación? Bueno, puede que no fuera mala idea del todo por el momento. No le hacía mucha gracia. No había pagado la reserva en este lugar tan apartado de todo, rodeado de naturaleza, con spa, jacuzzi y demás para quedarse encerrado como un animal. Las paredes se le echarían encima, pero podría aguantar un par de horas, hasta que a Sally se le pasara el susto... si es que se le pasaba.

- Está bien... pero no tienes que ser tan desconfiada. Y el sitio no está tan mal - se encoge de hombros - vale, un poco más cerca de la civilización no le vendría mal... pero tiene encanto - posó su dedo por la punta de su nariz, con ánimo de hacerle una caricia - como tú - y sonrió.

Parece que el plan era dirigirse a la habitación. Tal vez desde allí podría llamar a la entusiasta Meredith a que por fin le diera ese masaje, que ahora mismo su espalda le pedía a gritos.

Cuando subis a la habitacion os cruzais en la escalera con el hombre que os saludo anteriormente. El hombre se detiene al veros con gesto compungido.

Quisiera que me disculpasen por haberles importunado antes. No fue mi intencion. Si me lo permiten, quiza mas tarde pueda invitarles a tomar algo para compensarselo.

No queremos nada. Sigamos camino.

Camino por el pasillo rapido. Esto debe ser una pesadilla.

Mientras Sally sigue caminando, Garth suspira. Es raro verle a él ejerciendo del ser sociable de la extraña pareja.

- No pasa nada, caballero - dice al hombre - no es necesaria disculpa alguna. En cuanto hayamos descansado será un placer tomar ese algo. - se encoge de hombros, de nuevo... ya empieza a ser una costumbre que roza el tic - Ahora si me disculpa... - mira en la dirección hacia la que ha salido Sally y va detrás de ella devolviéndole un agradable y escueto saludo al hombre.

El hombre saluda de nuevo y se aleja escaleras abajo.

No tardais mucho en volver a llegar a la habitacion, donde todo esta exactamente como lo dejasteis.

Aún consternada por los eventos sucedidos, me saco los zapatos y me siento en la silla. 

Bien, debemos mantenernos despiertos en todo momento.... vale?

Llegaron a la habitación. Garth sigue el ejemplo de Sally y se quita los zapatos. Alguien le recomendó una vez en un vuelo hacia Los Ángeles que frotar los dedos de los pies con la alfombra después de un viaje largo relajaba una barbaridad, por lo que fue lo que hizo*.

Se volvió hacia Sally.

- Se me ocurre una forma de permanecer despiertos.... - alza las cejas y acto seguido suspira - y no, no es eso lo que estoy pensando antes de que me atices con el bolso. ¿Qué tal si pedimos algo de beber? Café, refrescos...¿unos tragos quizá? Si no te fías puedo prepararlos yo mismo, aunque ya sabes lo que puede pasar si me acerco a un electrodoméstico - ciertamente Garth era de todo menos mañoso en el hogar. - ¿Qué te parece, cielo?

Vale, te acompaño y los preparamos juntos. 

De pronto un grito llama vuestra atencion. Esta demasiado lejos para que sepais que dice o de quien procede, pero sin duda viene del exterior.

De pronto un grito llama vuestra atencion. Esta demasiado lejos para que sepais que dice o de quien procede, pero sin duda viene del exterior.

Me levanto de mi asiento muy rápido. Inmediatamente me acerco a Garth y lo agarro con fuerza.

¿Ves? Este lugar es raro, la gente es rara, las cosas que suceden son raras. Cierra con llave. RÁPIDO!

Me levanto de mi asiento muy rápido. Inmediatamente me acerco a Garth y lo agarro con fuerza.

¿Ves? Este lugar es raro, la gente es rara, las cosas que suceden son raras. Cierra con llave. RÁPIDO!

Garth parece que se yergue al escuchar el grito y abre los ojos por completo. 

- ¿Qué coño ha sido eso?

Se acerca a la ventana más cercana a toda prisa para asomarse a través del cristal a ver si consigue discernir algo. Cuando se da la vuelta para referirse a Sally y recomendarle que cierre la puerta mientras él va a echar un ojo se queda totalmente perplejo mirándole la cara.

- ¿Sally? - alza la mano, algo tembloroso mientras sus ojos se humedecen al sentir algo que hacía mucho que no sentía... miedo - ¿Sally? - no parece hacer caso a las palabras de la muchacha y sin embargo no deja de mirarla fijamente.

Su pecho comienza a palpitar, y a cada segundo parece más nervioso. Se echa hacia atrás dos pasos y nota el frío tacto de la pared. Está arrinconado.