Partida Rol por web

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Este de Helgen 

 "Así me gusta, serios y enfocados. Esto tampoco es un juego para mí, es una misión y estoy agradecido de no tener más distracciones y boberías que desvían la atención y hacen perder tiempo. Es hora de partir."

El legionario, Einar si no recordaba mal las presentaciones, le había mantenido la mirada al hablar. Como si aquello tuviera que impresionarlo. Aster les dio la espalda mirando a Vikar, antes de retomar el rumbo que seguían antes de la llegada de los jóvenes.

¿Misión?...esto es mucho más serio que todo eso, aunque al menos parece estar centrado en lo que hay que hacer…pensó mientras un largo suspiro salía de sus labios negando con la cabeza espero no equivocarme al permitir que nos acompañen, no soportaría cargar con sus muertes también…

Caminaba con paso firme pero permitiendo que pudieran seguirle el ritmo, su rastreadora caminaba junto a ellos con su pequeña bestia atenta a todo y a todos. El bretón tomo ejemplo de la joven pelirroja y comenzó a prestar más atención a su entorno que a las personas que lo acompañaban. A penas llevaban unos minutos caminando cuando aquella que se llamaba Eldrid lo a bordo de nuevo con un tono curioso en su voz.

- ¡Sí! Por supuesto que puedes…- esa fue toda respuesta que obtuvo de él en ese momento

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Tras un principio de sociedad algo complicado, finalmente decidisteis proseguir el camino en conjunto. El sendero apenas sugerido en la foresta se hacía en ocasiones complicado de seguir, pero Hati pudo encontrar la ruta óptima para llegar adónde pretendíais.

Lo primero que os recibió en aquel lugar fue un coro de ensordecedores graznidos de cuervo, no los veíais, pero casi estabais seguros de que por las copas de los árboles pululaban muchas de esas aves de plumaje azabache. De alguna forma os sentíais vigilados, pero eso no parecía inquietar a Vikar que seguía adelante con el hacha en ristre dispuesto a todo.

Luego pudisteis apreciar un claro, bastante grande, ubicado en la ladera de la Garganta del Mundo. Los árboles se retorcían en formas pesadillescas, y sus ramas configuraban una inquietante techumbre verde oscura. Aun así, justo en el centro de aquel claro se pudo apreciar un conjunto de rocas enhiestas de origen indudablemente artificial, aquella estructura lítica parecía una suerte de conjunto de menhires dispuestos para sostener una plataforma de roca elevada, de la que salía un visible humo negro hacia el cielo. Por el olor, alguien estaba cocinando algo.

Algo llamó vuestra atención antes de seguir adelante, y fue una silueta menuda y furtiva que se movía delante del menhir volcado que ejercía de acceso a la plataforma elevada. Era una niña, probablemente algunos de los presentes la reconocerían.

La niña parecía estar jugando a algo, canturreando una canción infantil, cuando os vio llegar se quedó totalmente inmóvil, su rostro reflejó terror, pero no se movió.

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

A parte de hacerse cada vez más imposible el camino, este se hacía también aún más tétrico, y de eso no le quedo duda cuando sintieron a los cuervos escondidos entre las copas de los árboles que precedían a aquel claro al que les había llevado el rastro. Era como si les vigilaran.

Al parar para contemplar el lugar que habían hallado, se llevó una mano a la empuñadura de su espada derecha, escudriñando el sitio con la mirada y con los pelos de la nuca erizados. Su mirada se paró al ver a la niña, que por las apariencias estaba bien, pero al ver el terror en su pequeño rostro… el mismo miedo que había visto aquel día… No por ella, si no por ellos

- La encontramos susurro para su compañeros Pero sea lo que sea, es muy peligroso, ya la otra vez lo noté, y ahora esta aún más intensificado. Deberíamos intentar ver que es sin ser descubiertos y hacer un plan de acción a partir de ahí.  Yo soy la más pequeña en estatura, así que sería lo más lógico que yo lo intentase.

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Por fin habían llegado a su destino, Roca Huérfana. En ocasiones parecía que el terreno estaba en contra de ellos, complicándose cada poco. El grupo apenas había cruzado un par de palabras durante todo el camino y Aster agradecía que fuera así. Normalmente era un hombre dado a la chachara sin sentido pero a medida que se acercaban a su destino, siguiendo a su rastreadora pelirroja y su pequeña “bestia”, su ánimo se volvía más adusto y taciturno. Acompañado de un semblante serió con el ceño fruncido en todo momento.

El graznido de los cuervos, ocultos de la vista curiosa de todos, los recibieron como única melodía de bienvenida.

“Cuando alguien muere, un cuervo se lleva su alma a la Tierra de los Muertos…” recordó el bretón del comienzo de un viejo relato que le había contado su viejo maestro.

Aquellos nobles animales eran considerados emblemas de la guerra y la muerte, aunque para él tenían otros muchos significados que no tenían porque ser tan negativos. Los cuervos recuerdan.  Olvidándose de los animales se centro en la sensación extraña de ser vigilados por “cientos” de ojos. Vikar encabezaba el grupo junto a Hati, abriendo el paso hacia un tétrico claro.

El lugar estaba vació en apariencia, la única señal de vida era aquella columna de humo negra que salía de aquella estructura. Entonces, al buscar una manera de acceder, la vio. Su corazón dio un vuelco relajando completamente la tensión de sus hombros, hasta que vio en los ojos y rostro de la pequeña el terror. No pretendía ignorar las palabras de la joven nórdica, simplemente toda su atención estaba centrada en la niña. Se movió con pasmosa calma, tratado de contenerse, hasta estar al frente siendo bien visible para la pequeña.

Danna, mi pequeña dijo con voz suave y tranquilizadora, se aparto el pelo del rostro con la mano y avanzando un par de pasos para que pudiera verle bien todo estará bien…ven con papa

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Seretide siguió el camino en silencio, sin querer llenar el aire con mayores palabras vanas, consciente de que la situación era tensa y requería de cierta concentración y de una actitud acorde. Aguzó la mirada al llegar, notando un escalofrío al percibir el graznido de los cuervos. 

Observó el claro a continuación y elevó las cejas, al vislumbrar a la niña. Ella no la había visto antes, pero por la reacción de los demás, supo que se trataba de la cría en cuestión. Y no pudo sino mirar al recién llegado Aster, con sorpresa, al escuchar cómo hablaba a la pequeña, comprendiendo- Así que era eso...-susurró- No se irá a poner a gritar, ¿no? -preguntó, no exenta de cierta preocupación, musitando unas palabras ante las cuales la rosa de rubí de su báculo emitió un fulgor rojizo apagado, tras el cual su presencia quedó envuelta en una fina capa de escarcha adherida a su cuerpo y a su ropa, que parecía provenir de un aura espectral que erizaba el vello de quien pudiese acercarse lo suficiente.  

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Nuestro camino nos condujo a un extraño lugar con unas rocas, una plataforma y unos árboles que no invitaban precisamente a disfrutar del paisaje. Aquel claro, con aquellas formaciones, parecía ser perfectamente el sitio que buscamos, sobre todo cuando vemos a una pequeña niña que se aterra al mirarnos.

Aster le habla y se autodenomina "papá", lo que explicaría algunas cosas. Mantengo el hacha con fuerza en mis manos mientras me concentro en los alrededores, pues dudo que ese fuego y aquello que se cocina lo haya hecho la pequeña, lo que fundamenta la idea de un secuestro.

Mis ojos se mueven por los alrededores, mientras espero encontrar alguna otra figura que signifique un peligro para los ahí presentes, sobre todo para la pequeña.

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

El anciano sacerdote había permanecido vigilante hasta ese momento sin intervenir. Para cuando disteis con el claro pareció concentrarse, murmuró una suerte de oración en voz baja y por un instante refulgió un brillo extraño en la mirada. Al dar con la niña, viendo como Aster se apresuraba a llamar la atención, Vikar se acercó al hombre y le puso una mano en el hombro.

Calma, muchacho.. calma.. y lo siento. dijo con un deje de tristeza que pudo abrirse camino en la actitud severa del sacerdote de Talos. Las palabras no tuvieron mucho sentido al principio, pero lo que sucedió a continuación lo aclaró todo..

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

La niña siguió quieta en su posición, su mirada volvió hacia Aster, pero no hubo cambio alguno en su semblante. Mientras Aster parecía reconocerla, no había correspondencia en su actitud.

No es vuestro lugar. No es vuestro lugar. repitió con una entonación infantil, inquietante hasta cierto punto. No aquí. Ya no es vuestro lugar.. no es mi lugar.. padre..

Dio un paso atrás, rápidamente la figura de la niña empezó a deshacerse como si fuera humo. En su lugar quedó una silueta fantasmal que se encaramó en lo alto del dolmen. Allí desapareció por unos segundos, y tras unos instantes de silencio, un graznido de cuervo que prendió el coro de grajos que os rodeaban escondidos en las ramas.

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

En lo alto del dolmen apareció una mujer humana de rasgos bretones, pero envuelta en plumaje negro y mirada torva. Poseía movimientos erráticos, rápidos y avanzaba encorvada, recordaba por su actitud a un pájaro, y por el graznido que soltó desde lo alto bien lo parecía.

¡Craaaaaaa! Al final.. al final.. vinieron a molestar.. ¡Craaaaaa! tenía una voz desagradable, tanto como su mirada, junto a ella se materializó el espectro de la niña con cara compungida. ¡Niña mala! Trajiste a quien no debías.. ¡craaaaaaa! Pero bien.. ¿quién viene a vernos, sí? se acuclilló y avanzó gateando recordando a un felino hasta el borde de la roca. ¿A quién veo? Craaaa... ¿y huelo? Oh.. Aster.. Aster.. ¡craaaaaa! sonrió ampliamente, perversa. ¿Has llegado tan lejos? ¿Tanto? ¡Craaaaa!

Los ojos malignos de la mujer pasaron de uno a uno, os sentíais desnudos ante esa presencia que parecía llenar el claro. Los cuervos parecían corear a su anfitriona.

¿Quién traes?  olió. Es tan curioso.. divertido.. este grupo apesta tanto a daedra, querido.. señaló a Aster. Especialmente tú... craaaaa..

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Estuvo a punto de tirar del hombre cuando se puso al frente del grupo al encontrar a la niña, pero sus palabras la detuvieron en el actor. Observo de uno a otro con ojiplatica, sin saber muy bien que decir. Tampoco tuvo mucho tiempo cuando la niña empezó a hablar, y no le pasaron desapercibidas las palabras del sacerdote de Talos, que pronto cobraron sentido cuando vio con la pequeña se deshacía en volutas de aire y solo quedaba su espíritu. Ahora más que nunca el nombre con el que las gentes de Helgen la habían bautizado tenía más lógica

“¿Está muerta? ¿Todo este tiempo lo ha estado? ¿Prisionera de ese monstruo?”

Apretó la mandíbula y los dientes le rechinaron. ¿Cómo se atrevía? ¿Cómo se atrevía a usar el alma de una niña pequeña para hacer su voluntad? Aferro con más fuerza la empuñadura de la espada que tenía al lado izquierdo, con la mano derecha.

- Maldito monstruo… murmuro por lo bajo. ¿Y decía que los que olían a demonio eran ellos? 

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

La situación cambia cuando vemos que la niña es solo un espíritu atormentado y que aquel pájaro es en realidad una mujer malvada y muy desagradable. Entiendo de inmediato que es tarde para la pequeña, la hija de Aster, pues esta bruja la ha matado y atormenta su alma aun después de ello.

La rabia me inunda por aquel cruel y oscuro acto. Ni siquiera puedo pensar en el sufrimiento de esa pequeña a manos de este monstruo y, sabiendo que ya hemos sido encontrados, doy un paso al frente con mi gran hacha en las manos.

 - "No habrá piedad alguna contigo. ¡Monstruo!"

Sin esperar al resto, cargo contra el enemigo, preparado para enfrentarme a él. Estoy seguro de que Aster y Eldrid no se quedarán atrás y dudo mucho también de que Vikar permita que esa mujer salga impune de este lugar. Es hora de derramar la sangre de aquella bruja.

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Con la mirada fija en la silueta fantasmal, de la que había sido su hija, Aster permaneció imperturbable. Tan solo el tono de tristeza en las palabras del sacerdote de Talos y la leve presión sobre su hombro le hicieron reaccionar, desplomándose sobre sus rodillas. El brillo de esperanza que lo había acompañado, desde que había encontrado al anciano, desaparecía por completo cuando esta se elevo a lo alto del dolmen que se encontraba ante ellos.

Cuando el coro de cuervos comenzó su espeluznante son no le hizo falta alzar la mirada para saber a quién anunciaban.

Keira…- apretando los puños con fuerza y conteniendo la rabia que amenazaba con sobrepasarlo – Bruja…pagaras por lo que has hecho

Antes si quiera de tener tiempo para ponerse en pie el joven Einar se lanzo al ataque.

Muchacho imprudente ¿Qué pretende? 

15 de Fuego del Hogar, Tarde, Roca Huérfana

Seretide torció el gesto, con disgusto, al percatarse de lo que sucedía con la pequeña y escuchar las palabras de la bruja. Miró hacia Aster, con un gesto de disculpa y de nuevo hacia el dolmen, alzando las cejas, con sorpresa, al ver cómo Einar se lanzaba sin esperar a nada y a nadie, negando a continuación con el rostro, llevándose una mano al mismo momentáneamente- Y bien... Cuando leamos su lápida, pondrá "Aquí yace Einar. Era muy... Valiente".-acertó a decir, mientras lo observaba correr, aprovechando su imprudencia para fijarse en el terreno y en las acciones de la bruja, dirigiéndose de nuevo verbalmente a Aster- Lo siento mucho. Una cría no debería sufrir un destino como ese.