Partida Rol por web

La primera ronda daba comienzo. El primer torneo pokemon no hacía más que empezar y la gente no quería perderse tal evento por lo que el estadio pokemon estaba a reventar. Los primeros combates ya daban comienzo cuando en el campo de batalla aparecieron los dos contendientes llegados desde rincones dispares del planeta. Erik y Morti eran los dos entrenadores en esta batalla.

Estaban dispuestos a dar todo en aquel combate. El árbitro alzó el banderín para que los técnicos dieran paso al terreno de juego.

Las compuertas que había bajo los atriles de ambos entrenadores se abrieron y tras ellas apareció un campo usual. Esta vez ningún pokémon se vería beneficiado por las condiciones del terreno de batalla.

Una nueva señal del árbitro hizo que los técnicos escogieran el clima con el que se empezaría, de todas las paredes del estadio comenzó a soplar una fuerte brisa y a chispear, momentos después todos los espectadores habían sacado sus paraguas pues venían preparados para todo lo que podía suceder en aquel torneo.

Los espectadores gritaban de la emoción, la elección surgida de ambas combinaciones darían lugar, sin duda a un singular combate en la que los entrenadores pokémon darían todo lo que estuviera en su mano para clasificarse para la siguiente ronda.

Erik entró tímido al campo de batalla. Era la primera vez que se presentaba a un torneo y temía no hacerlo bien. Más que por los que pudieran verle, por sus pokémon. Si no demostraba lo buen entrenador que era, ¿le perderían el respeto? Y no podía dejar que eso ocurriera.

Avanzó con pasos torpes hasta el lugar del combate y tanteó su cinturón, donde estaban las pokéball. Estuvieron a punto de caerse todas, pero consiguió sujetarlas aunque formando una imagen bastante graciosa. Al final consiguió seleccionar una y la lanzó al campo de batalla.

¡Adelante, Axew!

Tercera competición. Había llegado el momento. No podía permitirse fallos. Ya había ganado dos veces la competición y sus rivales ya conocían su estilo de combate, por lo que cada vez era más difícil sorprender.

¿Lluvia? Lo que faltaba

Recordaba que en la anterior competición perdí mi único combate bajo este clima, por lo que los nervios se apoderaron un poco de mí. Tal y como se pedía en estos casos, saludé a mi rival.

Aunque solía tener muchas dudas de que pokemon elegir, en este caso, se prometió que para el primer combate iba a sacar a su pokemon dragón, a su pequeño Axew.

Confío en ti, demuéstrame todo lo que vale.

Adelante Axew.

Los combates de la primera ronda estaban comenzando. Jóvenes entrenadores de todos los rincones del mundo y todas las edades habían viajado hasta allí para demostrar su valía y la de sus pokémon. Pero no sólo eso, también tendrían que demostrar la confianza y la amistad que los unía, que en combates anteriores se había visto que era fundamental para llegar a la victoria.

Y allí, con los nervios a flor de piel, se presentaron Morti y Erik. Cada entrenador eligió a un pokémon en el que depositaron las confianzas del ganador.

Y allí, frente a frente, estaban sus dos Axew. Tan parecidos, pero seguro que muy distintos. Un gran combate se avecinaba, y el público podía notarlo.

¿Otro Axew? Esto se pone Interesante.

Axew, comienza con Enfado.

Erik observó al pokémon dragón de su rival y miró al suyo propio. Levantó levemente la comisura derecha de su labio. El mío está mejor entrenado pensó.

¡Axew, responde su ataque con el tuyo! ¡Enfado!

Los dos pokémon habían empezado a usar el mismo ataque. Pero, a pesar de que Morti había comenzado con su orden, el Axew de Erik empezó a gran velocidad.

Los ojos de ambos pokémon brillaron rojos, llenos de furia y enfado. Los dos salieron corriendo, el uno contra el otro. La fuerza de los pokemon de tipo dragón era increíble, y ver un enfrentamiento a esa escala era espectacular.

Ambos Axew se encontraron en el aire tras un gran salto. Su capacidad de ataque y de esquiva era enorme, pues sus golpes, aunque contundentes, parecían fallar. Cayeron al suelo, y, tras un grito que resonó por todo el estadio, volvieron a saltar. Pero parecía más veloz el pokémon de Erik, que ya estaba golpeando al de Morti antes de que el último pudiera ejecutar el ataque.

El Axew de Erik cayó al suelo sin un rasguño, mientras que el de Morti quedó inconsciente.

No no no no, Axew no.

¿Qué ha pasado aquí? Esto no puede estar pasando. Si seguimos así, va a ser imposible poder ganar. Tengo que parar el enfado de Axew y solo conozco una forma, aunque no se si podrá aguantarlo.

Adelante Venonat, ataque Somnífero.

Erik, sin inmutarse ante la caída del otro Axew, esperó de brazos cruzados la aparición del nuevo pokémon de Morti. Había escuchado que él había ganado un par de torneos, pero no estaba dando la talla en ese combate.

No se que te pasa, Morti, esperaba más de ti dijo a su contrincante, esperando que Morti sacara toda su energía para realizar un gran combate.

Mientras Axew seguía enfurecido, golpeando piedras y todo lo que tuviera a su paso, un rápido movimiento de Morti hizo que apareciera Venonat. El pokémon dragón, al ver un nuevo rival con el que desahogar su furia, se lanzó a por él con fuerza y determinación.

Axew, con toda la furia de los dragones, se lanzó contra el pokemon bicho de Morti. Sus ataques no eran tan sumamente efectivos como habían sido contra el otro Axew, pero Venonat se resintió. Le dio varios golpes, pero su rival se mantuvo en pie como pudo.

Ante la voz de su entrenador, Venonat comenzó a girar sobre si mismo, como si de una peonza se tratara. Un polvo brillante empezó a salir de su cuerpo, llenando el campo de batalla. Axew miró a su alrededor e intentó golpear esas pequeñas motas, pero sus ojos dejaron de estar rojos y sus párpados empezaron a caer. El cuerpo de Axew se relajó y se fue moviendo hasta estamparse en el suelo, donde empezó a roncar. ¡El somnífero de Venonat había funcionado!

Tal vez no estuviera preparado para este combate, pero te aseguro que el resto no te va a resultar tan fácil.

Venonat, Bomba Lodo.

El combate tiene muy mala pinta, su Axew parece demasiado fuerte, ya ha eliminado a Axew y casi acaba con Venonat. Mi única oportunidad es que éste aguante antes de que despierte.

Erik observaba con ojos fríos a su rival. En su interior, esperaba que su rival dijera la verdad: Que el resto no sería tan complicado. Bajó la mirada hacia su Axew, que estaba plácidamente dormido.

Axew, despierta y usa Enfado otra vez.

Aunque la voz autoritaria de Erik era clara, el somnífero de Venonat era muy poderoso. Axew seguía durmiendo tranquilamente, como si ese combate ya hubiera acabado para él. Pero Morti no podía perder el tiempo, y así lo demostró. Su ataque fue directo a su objetivo, impactando en la cabeza de Axew. El lodo se empezó a expandir por el cuerpo del pokémon dragón, dejándolo muy malherido.

Venonat termino con esto de una vez. Bomba Lodo.

Venonat está débil, debo acabar ya con Axew o no tendré posibilidad de continuar

Se cruzó de brazos y frunció el ceño. Axew parecía seguir dormido y su rival le iba debilitando lentamente. Y eso no podía continuar así.

Se acabó la siesta. Despierta y demuestra de lo que eres capaz. ¡Enfado!