Esma se despidió de su hechizado lagarto y echó una rápida mirada a la cazadora con cabellera de fuego. Se sintió aliviada al saber que Espinela protegería a Zadia, era una mujer muy capaz, pero quizá su interior deseaba que la protegiera a ella en lugar de a la ilustre maga.
Bajó uno a uno los escalones con aprensión y no pudo evitar dar algún que otro traspié. Tras digerir la macabra escena que se disponía ante ella, intentó ser de ayuda, por muy simple que fuera la tarea. Mientras Nariya inspeccionaba el agujero, se dirigió a tientas hasta la puerta de hierro.
Había estado demasiado ensimismada y no había reparado en la petición de la pícara. Era posible que la puerta estuviera sellada por algún encantamiento y no por la fuerza de su cerradura. Esperó a que volviese la luz de la antorcha para analizar con mayor atención aquella imponente entrada.
-No encuentro ningún hechizo que emane de esta puerta...-susurró la barda.
Ante el comentario de Jarsen, la chica se espantó.
¡No! ¡Este lugar ya ha sufrido suficiente!-espetó, colocándose frente a la puerta-Estoy segura de que hay alguna forma de abrirla...
Esma leyó y releyó las inscripciones del dintel, devanándose los sesos por descodificar su mensaje ¿Tendrían los monjes algún mantra para abrir los secretos de Nébula? Según tenía entendido era la diosa del misterio, por lo que tal vez la clave se hallase en sus prácticas y rituales.
Motivo: Conocimiento de bardo
Tirada: 1d100
Dificultad: 23-
Resultado: 32 (Fracaso)
Motivo: Acerca de Nébula
Tirada: 1d20
Dificultad: 16-
Resultado: 13 (Exito)
Nariya se adentró en la oquedad en la piedra dándose cuenta que aquel agujero distaba mucho de haber sido producido de forma natural, como en apariencia parecía, daba la sensación como si ese agujero comunicase con las mismas profundidades bajo tierra del Gran Pantano durante kilómetros de distancia.
Resultado tirada de INT: No sabes nada que pueda ayudarte en concreto en relación a la puerta de las catacumbas, aunque identificas claramente los símbolos como correspondientes a la religión de Nébula, diosa del misterio, el conocimiento y la magia.
Tras unos minutos volviendo hacia atrás poco a poco, la pícara consiguió salir del agujero, pero ahora tenía algo claro ¡¡Iba a volver!! Y si alguien quería impedírselo que la siguiese haber cuando se quedaba atorado.
–¡Es un túnel excavado!¡Un camino!– exclamó –Y los lagartos no pueden pasar por aquí. ¡Quizás algún clérigo de Nébula que fuese delgado haya podido utilizarlo! ¡Caray! De quizás nada. ¡Es muy probable!
La pícara parecía más contenta que unas castañuelas a pesar de que aún no habían conseguido abrir la puerta. Eso le dio una idea.
–Mientras investigáis si decir el nombre de Nébula es lo que abre la puerta o si la tiráis abajo y os ponéis a ello voy a investigar un poco más al fondo ¿vale? Cuando hayáis terminado dadme una voz.
Jarsen se acerca a la puerta.
- ¡ABRETE EN EL NOMBRE DE NEBULA!
Nariya se introdujo en el estrecho pasaje para explorar mientras el resto discutía cómo actuar respecto a la puerta cerrada.
En ese momento, Esma afirmó que no debían destrozarla como muestra de respeto a ese lugar. El enano se aproximó a ella y expuso su opinión con calma: - Te honra la consideración que muestras, joven. Pero ya hemos intentado todo cuánto estaba en nuestras manos. No la podemos forzar y tampoco tenemos las llaves. Además, tú misma has dicho que no detectas ninguna emanación arcana, no se abrirá por mucho que se lo "pidamos". No es sensato quedarse aquí discutiendo qué hacer cuando la respuesta es bastante simple. Mil perdones Esma, pero la madera no impedirá que crucemos al otro lado.
Ösrik se aproximó entonces a la puerta y, dando un violento puntapié, trató de echar abajo la recia puerta.
- Muchachos, avisad a Nariya, debemos continuar juntos.
Motivo: Patá
Tirada: 1d6
Dificultad: 4-
Resultado: 3 (Exito)
Podemos suponer que si no hay encantamientos activos, tampoco se abrirá con una "contraseña", ¿no?. Si estoy meando fuera de tiesto, rehacemos post y yastá.
A priori, a menos que la puerta esté cerrada mágicamente o con una cerradura del mil, la echaría abajo.
El golpe que propinó el enano resonó con contundencia en la puerta, la qual vibró debido al impacto lo suficiente como para hacer desprender parte del polvo y escombros que durante años se habían acumulado en sus bordes. La puerta cedió levemente, sin embargo de forma insuficiente, como para abrirse por completo.
Nariya se adentró en el estrecho agujero natural con una de las antorchas, no divisando más que piedra deformada y oscuridad que parecía no tener fin, como si aquello conduciera al mísmisimo corazón de la tierra. ¿Qué oscuros misterios y peligros se podrían esconder allí?
Hay que desencajar esa puerta! Vamos a raspar la escoria dnelos bordes.
Valerian coge una herramienta y empieza a raspar los bordes de la puerta
Jarsen empezo a ayudar a Valerian.
Estoy un poco bloqueado
–¿COMO VAIS?– gritó la pícaro desde el fondo del túnel. La muchacha había continuado arrastrándose y gateando por aquel túnel, pero no parecía que hubiese rastro de una "estancia" de descanso.– ESTO SIGUE Y SIGUE... ¿¿¿HOLA??? ¿HAY ALGUIEN AHÍ?
Cita:
Como la puerta
Tras raspar un bue rato por los bordes para aflojar la puerta, Valerian reclama la ayuda de osrik y Jarsen. Vuelven arriba y bajan con una recia viga del monasterio, que usarán par darle caña a la puerta a modo de ariete
Esma arrugó ligeramente el ceño al ver sus súplicas echas oídos sordos. Iban a derribar igualmente la puerta quisiera o no. Otro recuerdo de aquel lugar convertido en escombros. Tal vez no hubiera alternativa que destruírla para desentrañar sus misterios, pero cada golpe le iba a doler en el corazón.
Esma se acercó al túnel.
-¿Estás bien Nariya?-espetó la barda-Estamos... están intentando abrir la puerta ¿Necesitas ayuda?
Prefería no ver cómo echaban abajo la vetusta puerta de unos pobres monjes asesinados. Esma analizó el agujero y luego se miró las caderas. Iba a ser complicado.