Partida Rol por web

Sonreí. Llevaba deseándolo desde que habíamos llegado. - Hecho. - 

Giré la cabeza hacia Peterson: - A sus órdenes señor. - 

Palmeé amistosamente el hombro de Hanna y salí el primero por la puerta, miré a ambos lados del pasillo y esperé a que la chica saliera para avanzar juntos en alguna dirección:

- ¿Por dónde empezamos? -

Mire a Murphy sabía que no pondría impedimento alguno, todo lo contrario se mostro incluso deseoso con la idea.
Murphy, Hanna, extremen las precauciones y cuiden el uno del otro. Sobra decir que no pueden ser vistos, disponen de una hora desde ahora.
Dije en voz baja.
Cerré la puerta tras ellos sin hacer ruido.

Los chicos se despidieron de su capitan y salieron por el pasillo sin hacer ruido. Jermiah y Rachel parecian dormir placidamente.

Ethan cerro la puerta con cuidado de no hacer ruido, aun con dudas sobre lo buena o mala que habia sido esa decision, pero ya estaba tomada.

La puerta se cerro.

La habitacion que en silencio....

Demasiado silencio...

Ethan no queria dormir pero cabeceo. Solo cerro y abrio los ojos, solo unos segundos.

Al abrir los ojos de nuevo toda la habitacion habia desaparecido como engullida por una negrura total.

La imagen de una mujer se dibujo ante tus ojos, preciosa y fria como una mañana de invierno.

- Ethan, no te asustes. Soy una mutante, como tu. Una siquica. Estas viendo una proyeccion de mi en tu cerebro, no te hare daño. No tienes nada que temer de mi, por favor relajate y escucha. La niña, Berlin, la crearon en un laboratorio haciendo una copia artificial del genoma del profesor Xavier, mi maestro y uno de los mutantes mas poderosos del mundo. Hemos estado comunicandonos con ella pero es muy pequeña para entender, piensa que sus muñecos le hablar... por favor Ethan, no dejes que esa niña continue en manos de esos monstruos. Sacala de alli.. por favor...

Ryan y Hanna encararon el pasillo. No tenia nada de peculiar, era un pasillo corriente de hotel. Muy lujoso, por cierto, pero sin mas.

Al final del pasillo una sombra dando tumbos os alerto pero enseguida visteis que era una mujer borracha, completamente vestida de rosa.

La mujer tropezo con ella misma y cayo al suelo maldiciendo al pobre zapato que no tenia culpa de nada.

Miré a Hanna suponiendo que habría pensado lo mismo que yo, y me encaminé hacia la millonaria heredera con intención de sonsacarle algo de información. Que estuviera borracha podría facilitar o complicar un poco las cosas... ya veríamos.

Mis pasos se detuvieron junto a la mujer y le ofrecí la mano para ayudarla a ponerse en pie: - Buenas noches señorita Palax, ¿me permite ayudarla? - dije todo lo galantemente que pude.

Me sobre salte hasta el punto de coger mi arma y apuntar con ella a aquella mujer, poco a poco según me hablaba me acercaba lentamente alzando una mano hacia ella para intentar tocarla sin conseguirlo.
Baje lentamente el arma convencido que aquella mujer no podía hacerme daño porque no estaba allí. ¿Quizás era una jugada de mi cerebro por el tiempo que había pasado congelado? O ¿Sería verdad lo que me decía aquella mujer? Solo había una forma de averiguarlo y era hablar con ella, por supuesto en voz baja y cuidando que mis compañeros no me escucharan o pensarían que había perdido la cabeza.
¿Cuál es tu nombre? Todos nos llaman mutantes pero ni yo ni los míos tenemos poder alguno.
Por otra parte como sé que me dices la verdad y que no queréis hacer daño a la niña. Podemos protegerla… al menos por el momento, aunque no se por cuánto tiempo. Tenemos otra misión de vital importancia, si no la cumplimos muchos pagaran las consecuencias.
No sé por qué le cuento esto a alguien que ni siquiera está aquí, venid aquí a por ella y hablaremos.
Necesitaba respuestas aquello cada vez se complicaba más y más, sin que nadie diera una sola solución a todo aquel embrollo y para colmo las vidas que habían en juego ahora eran las nuestras.

No podemos ir. Nos estamos preparando para detener al mutante que a hecho esto al mundo. Va a ser una ofensiva dura, si fracasamos, en tres dias el mundo sera completamente destruido.- explico la mujer.-Un hombre de gran poder a movido la tierra de sus ejes naturales. Si no lo detenemos, no habra mañana para nadie.

La mujer se volvio algo mas traslucida, parecia muy cansada.- Los mutantes son personas que evolucionaron mas rapido que el resto, tu eres uno de ellos... tienes poder...tienes....no puedo mantener la cone....

La chica se desvanecio por completo y volviste a la habitacion.

Me quede a media conversación y esperando respuestas que por el momento no llegarían y lo que era peor… con la duda de si aquello que me acababan de contar era cierto o no.
De todas formas aquella cría había huido y se escondió por algún motivo parecía que realmente tenía miedo y si era la hija de Orphen ¿Por qué tendría que tener miedo? Y por otra parte mantener oculta a esa niña durante el tiempo que durase la misión no iba a ser nada fácil y contárselo al equipo aun menos.
Durante un buen rato seguí dando vueltas a todo aquello mientras controlaba el reloj para saber cuánto tiempo les quedaba aun a Hanna y Murphy.

Tu percepcion del tiempo tambien se habia alterado un poco por la intromision en tu cabeza. Miraste el reloj, habian pasado unos 20 minutos. En la habitacion tanto Jeremiah como Rachel dormian a pierna suelta pero la niña se habia despertado y salia de la habiatacion abrazando a su osito.

- Mi osito no puede dormir.- dijo la niña culpando al peluche de sus problemas para conciliar el sueño

Apenas habían pasado 20 minutos desde que deje marchar a Hanna y a Murphy, esperaba que regresaran sin contratiempo alguno. El resto del equipo dormía a excepción de aquella niña que salió de la habitación abrazada a su osito.
Hola preciosa, dije en voz baja sonriendo, me agache y tendí los brazos para acurrucarla.
A pesar de no tener hijos, mi familia era o había sido lo suficientemente grande como para haber tenido contacto con niños o cuando no las amigas de mi madre traían a sus hijos a casa, no sabía si aquello me seria de alguna ayuda con aquella niña supuestamente autista.
¿Te has despertado? Ven con migo pequeña.

La niña dudo un poco pero estaba tan necesitada de cariño que se acerco y se dejo abrazar. Tuviste la sensacion de que eras el primero en demostrarle un poco de ternura en mucho tiempo cuando la niña se acurruco agarrando tu ropa para que no te apartaras.

- Me despiertan las voces.... oigo a todo el mundo... lo que piensan lo oigo en mi cabeza. Orphen quiere que solo se lo diga a el, lo que oigo que dice la gente en mi cabeza. Aveces se para un ratito y puedo dormir, cuando estoy muy cansada... pero hoy no. Hay mucha gente llorando, que tiene pupa o a perdido a sus niños bajo el agua mala.

Me pillo un poco por sorpresa que la niña me contase aquellas cosas apenas sin conocerme, la acurruque entre mis brazos como pude pues aun sostenía mi pistola con una mano, me senté en la silla frente la puerta para estar más cómodo y seguir controlando la entrada a la espera que regresaran el equipo de reconocimiento.
Acaricie el cabello de la niña mientras le sonreía.
Tranquila cielo no permitiré que Orphen ni ningún otro te hagan daño, te sacaremos de aquí, pero aun no podemos irnos estamos buscando un cubo, es muy importante para que no hagan pupa a más gente. Puedes escuchar lo que pienso preciosa para que veas que no miento, con nosotros estarás bien.
A mí tampoco me gusta Orphen hace muchos años el me hizo mucha pupa y a mis amigos también. Por eso quiero que me prometas que te esconderás muy bien si vuelven a buscarte.
Aquella niña había pasado un calvario al lado de Orphen, no hacía falta que me dijese se le notaba.

La niña levanto la vista con los ojos llorosos e hizo unos pucheros adorables mientras asentia.-Lo se.... se que sois buenos... me lo dice mi osito...por eso vine aqui... Orphen es malo, quiere la cajita de musica para hacer cosas malas, yo lo se....tambien se que os hizo pupa pero el no se acuerda de vosotros...hizo pupa a mucha gente, hace daño a la gente desde hace muchos muchos años... yo no le he dicho quienes sois pero si se entera que os hablo me castigara.

La niña se acurruco y temblo solo pensando en lo que podia hacerle.

La mujer sonrio, mareada y con el rostro grasiento por el sudor.- Claro guapo, llevame a mi habitacion y te devolvere el favor con la mejor mamada de tu vida.- dijo con una sonrisa llena de intencion. Una de sus manos se movio para tocar el paquete de Ryan, sin importarle o notar la presencia de Hanna.

Hanna era muy inocente, miro a Ryan sin saber en que consistia la recompensa ofrecida aunque imaginaba que seria algo sexual por el tono empleado.

Ryan, ¿Te quedas ayudando a la señora y yo voy a eso...?.- pregunto con un susurro, esperando que separarse le diera mas opciones de conocer gente y sacar informacion

Abrace a la niña para que se sintiese segura y darle un poco de consuelo ante tanto miedo.
Tranquila Berlín ¿por qué te llamas Berlín verdad? No te preocupes cariño tu solo procura esconderte bien y no hacer ruido cuando nosotros te avisemos o cuando notes que alguien que no seamos nosotros se acerque a esta habitación.
Era una suerte saber que Orphen tampoco recordaba nada de lo sucedido antaño. Pero… ¿cuánto tardaría en recordar? El tiempo jugaba en nuestra contra.
Entonces caí, era posible que esa caja de música fuese el cubo que buscábamos, estaba clarísimo si Orphen lo buscaba tenía que ser eso.
Berlín cielo esa caja de música es muy peligrosa, ese es el cubo que buscamos. ¿Cielo tu sabes donde esta o quien lo tiene? Tranquila si no lo sabes no pasa nada, nosotros te cuidaremos de todas formas.
Seguí acariciando su cabello para calmarla y no quería que pensase que nos movía el interés nada más lejos. La seguridad de aquella niña junto a la recuperación del cubo eran prioritarias, la cuestión era como explícales todo aquello al equipo sin que pensaran queme había trastocado por la congelación o algo similar.

A Ryan le preocupaba la seguridad de Hanna ante todo. Más teniendo en cuenta que no era muy sensato dadas las circunstancias quedarse sólos... así que negó con la cabeza. Además, por muy tentadora que fuera la oferta de la señorita Palax... sobretodo después de tantos años sin usar *aquello*, ahora estaba trabajando, y Murphy era ante todo un profesional.

- Llevemos rápido a la señora a su habitación y sigamos juntos. Creo que es más sensato. -

Ryan volvió a mirar a la heredera mientras le obligaba a pasar un brazo alrededor de su cuello para llevarla con mayor facilidad.  - Señora, ¿dónde está su habitación? -

La mujer levanto la vista al oir a Hanna y sonrio.- Un trio tampoco estaria mal.

Al levantarla la mujer sonrio aun mas.- Ummm... chico fuerte y chica guapa, lo vamos a pasar bien.... al fondo, la tercera puerta...- dijo sacando una llave de su diminuto bolsito. En la llave ponia el numero de la habitacion, asi que fue facil dar con ella.

Ryan abrio y metio a la mujer dentro, despues paso Hanna.

La habitacion era impresionante, con una vista espectacular del mayor desastre natural de todos los tiempos.