Partida Rol por web

La cueva es grande en ella se encuentra los psj mas 6 osos, y 7 Beornidas 3 con arco y 4 con espadas y escudos mas un viejo lleno de pintura por la cara plumas y que siempre esta recitando o murmurando algo, por lo que suele no hablar ni hacer otra cosa, pero es respetado por los beornidas.

Los dumbenors no paran en espiral de volar por la entrada sin entrar.

En otra ocasiones un brazo se la espiral se separa y busca alguna entrada o recobeco en la cueva que no sea la puerta.

En ocasiones parece que encuentran alguna pequeña fisura, pero no es así, y conforme entran por la fisura salen sin conseguirlo.

Parece que se pasara el resto  dia y la noche en ese lugar.

Por lo que malleus puede decirle que les puede ofrecer a los Beornidas  para su lucha 

1 malleus

2 kryl

3 Malleus

4 Sam

5 Triton 

6 Nomdil

O Osos

B Beornidas

Ch Chaman

El medaino se sentó en el suelo de la cueva, cerca de la pared, una vez que Kryl y Malleus hubieran conseguido escapar de esas avispas gigantes.

Le escocía por todo el cuerpo, lleno de picotazos afilados y profundos. Al menos, pensó, no llegué a caerme del caballo, que era lo que más temía.

Miró por toda la cueva, intentando que su vista se acostumbrase a la penumbra y a las sombras que danzaban en su interior. Mientras el chamán murmuraba una especie de letanía o hechizo, los osos se acomodaron cerca de donde estaba sentado Sam. Los beórnidas se situaban más cerca de la puerta, con el resto de la Hermandad.

Al llegar a la cueva, Kryl soltó un suspiro aliviado y cogió algo de aire. Con la carrera, apenas tenía aliento y algo de descanso no le venía nada mal.

-Ufff, eso estuvo cerca, amigos. - Dijo momentos antes de sonreír y soltar una carcajada.

Aún así, el aparente buen ánimo del joven no le libraba del picor que sentía. Aquellos dumbenors se habían cebado con él... tenía picaduras por casi todas las partes de su cuerpo... pero al menos estaba con vida.

El beornida mira las armas y enseres, las sopesa y asiente con la cabeza diciendo algo 

- Os escoltaremos, los viajeros que dan lo que pueden se merecen nuestra protección podeis descansar un poco esta noche, montaremos guardia - dice contento por los regalos y mormurando- esperamos cortar muchos orcos con estas armas.

La noche sera larga con los zumbidos de los Dumbenors cerca.

la cueva es ancha humeda y las paredes tiene trozos de musgo.

No se ve nada especial, muchos van a refugiarse en esta, al fondo hay un tunel, es una zona no iluminada no se ve que hay más halla, el Chaman no anda lejos del tunel, parece que te mira o mira algo que llevas.

Este continua con sus canticos. 

Tras un par de picotazos mas y de las consiguientes burlas por parte de Kril, llegamos a la cueva donde los hermanos y los beornidas nos están esperando.
Me acerque a los hermanos dolorido y escociendome todo mi lindo cuerpo y les traduje lo que estaban comentando. -Hermanos, los beornidas comentan que ellos mismos montaran guardias esta noche y que agradecen de antemano las armas que les vamos a ofrecer - tras eso agarre a primorosa y la ofrecí al beornida - mi señor, le hago entrega de esta maravillosa espada, forjada en el folde este por mi padre, Reusen, la cual me ha dado mas de una alegría en mas de una batalla, le tengo gran cariño y deseo que os de la misma felicidad que a mi en mis combates - tras eso, me retire a un pequeño rincón para descansar e intentar sanar mis heridas.

Sam miró la cueva con detenimiento pero parecía que era sólo un refugio. Quizás había juzgado mal a los beórnidas. Mientras miraba las paredes de la cueva intentaba curarse algunos de los picotazos que había recibido.

-Malditos dumbenors-repetía una y otra vez mientras intentaba hacer lo que podía con los granos.

Un rato más tarde, después de descansar un poco, se acercó a Malleus y, cuando estaba cerca de él, se acordó de que lo le hablaba, así que se dirigió a Tritón y le dijo:

-Allí al fondo hay un túnel, cerca del chamán. ¿Adónde conducirá?

Unos mal y otros peor logramos llegar al refugio, un lugar donde de momento estábamos a salvo de esos molestos insectos, en seguid comencé a notar un pequeño dolor en todos los lugares de mi cuerpo donde había recibido una picadura.

Vaya, si que son molestas estas picaduras.......

Mientras analizaba mi cuerpo, escuche como Malleus (algo más maltrecho que yo) le ofrecía a los beornidas (que harían guardia esta noche) una de sus espadas, y enseguida cogí mi cuchillo largo del cinto y se lo lance con cuidado para que lo cogiera. Ten Malleus este cuchillo de mi parte para que se defiendan. 

Ya ocupando uno de los lugares de la cueva (no muy cerca de los osos), se dirigió a mi el pequeño Sam, haciéndome ver que había un túnel en el interior del refugio, Bueno pregunta amigo, quizás Malleus pueda resolvernos el problema...

-No ser más que  lugar de purificación haber un manantial y nosotros bañarnos para limpiar el alma.- Dice por primera vez el Chaman, dejando de cantar y con un acento muy muy pronunciado en Oestron o lengua comun del Norte.- una vez al año venir la dama de ojos penetrantes y lograr bendecirla hasta el año siguiente.  -Mira a Sam y a Triton- Ser un regalo por nuestra ayuda contra los orcos, a cambio dejar pasar a los suyos y los escoltamos, en nuestras tierras, Los dumbenor nunca entender por que no poder entrar aqui, hhehehe, ser lugar bendecido por dama, ellos pensar que ser por plantas , nosotros enganar a las avispas, hhhehe.

Ve como os llama la atención la zona del tunel y le dice a Malleus...

-si el que se baña en el agua sale mejorado en espiritu y cuerpo

Estaba en un rincón tranquilamente intentando curarme las heridas, cuando de repente la criatura que parece "Bob Marley" deja de cantar y comienza a hablar sobre el sitio en el que nos encontramos. - Vaya, un lugar sagrado bendecido por una dama de ojos penetrantes..... - de repente la imagen de Ergala se vino a mi cabeza.... - Malleus, no pienses tonterías colega.... - pensé agitando fuertemente la cabeza.

Me incorporé lentamente debido al escozor y dolor producido por las dichosas picaduras y me dirigí hacia el manantial. De camino a dicho manantial, Tritón II me lanzó un cuchillo para ofrecerselo al Beonida - Gracias Tritón, tienen pinta de ser buenos guerreros, supongo que harán buen uso de él - Me acerqué al beornida y le ofrecí el cuchillo agarrándolo por la hoja y ofreciéndole el mango - Mi señor, el enano se lo entrega con sus mejores deseos de que os sea de total utilidad en vuestras refriegas -

Tras eso, el Beornida me comentó y corroboró lo que el chamán dijo sobre el pequeño manantial. Fui lentamente hacia él y antes de despojarme de la armadura ni nada, observé al chamán y le pregunté - ¿han llegado a conocer directamente a la dama que purifica este manantial? ¿haría falta despojarme de mi armadura y armas para entrar en este manantial o si entro con ellas y mi armadura también serán purificadas? - comenté para intentar no cometer un error garrafal antes de meterme en el manantial y armar una gorda.

Sam agarró su daga y, no sin algo de miedo pero intentando que no se le notara, la dejó a los pies del guerrero beornida. No le hacía gracias desprenderse de ella, pero seguro que conseguía otra rápidamente.

Fue entonces cuando el brujo empezó a hablar con un acento muy marcado del norte. Hablaba de no sé qué dama que venía a purificar un manantial que había al final del túnel.

Por ahora el manantial no le interesaba mucho, sólo dormir y, si todavía quedaba algo de comida en su bolsa, llenar como pudiese el estómago.

Cuando  se entra se ve una sala no muy grande sale vapor de esta y el agua esta a buena temperatura y parece que cubre como mucho 1,30m

es clara el agua y esta iluminada por linternas de aceite el lugar esta como insonorizado y detectas algún tipo de poder de encantamiwntos

El chamán de aquellos hombres, contesto a la pregunta del mediano, y Malleus enseguida se intereso por aquel manantial que según nos dijo aquel extraño era mágico.

Yo por mi parte apoye la espalda en la pared de la cueva y coloque mo hacha junto a mí, era tiempo de esperar a que esos bichos se fueran, estábamos a salvo. Mire atento a nuestro compañero guerrero, quería saber que le iba a pasar. 

-Dama de ojos penetrantes... - Murmuró Kryl.

¿Será guapa?

Y es que el joven, más que pensar en el manantial solo pensaba en cómo sería aquella mujer. Hacía tiempo que no veía a una jovencita guapa y delicada... las enanas que había visto durante la fiesta tras la batalla, por supuesto, no contaban.

-Creo que me meteré yo también... - Le dio una palmada amistosa en el hombro a Malleus. - ... pero por supuesto, después de ti, amigo, jaja.