Partida Rol por web

Una vez revisada la zona e inspeccionado como buenamente nos dejó la niebla, conseguimos encontrar lo que parecía una entrada medio bloqueada que daba acceso a la torre. Miré a Tara - ¿esta es la mejor opción para entrar a la torre? pues si no hay otra forma, no deberíamos perder tiempo, nos pondremos de acuerdo en ayudarnos los unos a los otros para que nos resulte más facil poder acceder, con los contratiempos justos - le pregunté pues ella es la única que había estado aquí - Tara, otra cosa más ¿podrías describir como es el acceso a la planta, en la que está la Espada de Ahûme, por dentro? -

La joven nos explica a groso modo como sería la entrada a la sala. Una vez acabada la explicación de Tara sobre el acceso, espero tranquilamente a que Tara y Lycyn den el visto bueno a entrar por esa zona.

-Yo logré subir la escalera y luego me quede en el rellano, allí tuve el encuentro con el avolakio. 

y La entrada no estaba antes tapada, más bien había una reja metálica que hacía de puerta. -Miro a Lycyn y ha malleus- podemos intentar tumbar o desplazar la piedra, si se esta de acuerdo, solo espero no encontrame con ninguna sorpresa cuando la quitemos.-me quedo pensando y digo- muy fuerte ha tenido que ser el que la puso

Bueno, creo que si el objetivo es la espada, esta roca es la que nos impide llegar a ella así adelante! - Miro a Malleus y a Tara indicando que entre los tres al tiempo lograremos moverla...

Luego de un rato de búsqueda, llegamos a lo que parece ser la entrada y ante nosotros se impone una gran roca. Veo como Tara sin pensarselo dos veces, pero sorprendida por haber encontrado esa roca ahí delante, se remanga y con una fuerza descomunal comienza a empujar junto con Lycyn, el cual parece tener problemas para mover el pequeño chinito. Me coloco junto a mis dos compis y me remango tranquilamente - Lycyn, amigo, te noto un poco debilucho ¿que paso al otro lado del rio mientras nosotros estábamos luchando con los sapos? - le comento mirándolo mientras empujo con fuerza la gran roca que nos corta el paso.

La roca empieza a moverse, primero lentamente como si el hielo de las juntas no quisiera despegarse, Luego se le une Lycyn y la roca continua moviéndose muy despacio( a Lycyn se le ve algo apurado), empieza a caer nieve y hielo acumulado en la roca y  se escucha un ruido en el hueco de la entrada  es el efecto eco con el roce de la roca. 

Malleus se queda fascinado por tan fuerte mujer y decide ayudar al grupo, la roca es arrastrada y llevada a un lado, del hueco de la entrada sale un olor fuerte a musgo en  mohecido. 

Lycyn detecta fuerzas oscuras en la torre.

Tal vez sea el avolakio, tal vez un poderoso Nigromante, tal vez un Turmulario hermano de los Nazgul.

Algo extraño,Oscuro y poderoso detectas.

Ante vosotros esta la Entrada unas escaleras inclinadas hacía arriba y El interior esta completamente oscuro.  Pero hay antorchas colgadas en la pared (apagadas). Estas antorchas están sujetas por manos esqueléticas de mármol color hueso.

Los peldaños de la escalera tienen grabados de Caras de Carabelas y los  cuencos  de los ojos están con mármol muy rojizo, dando un efecto tenebroso, (por lo menos eso es lo que se ve en el primer escalón, pues en los demás la luz no pasa)  

Hasta los Isidur más poderosos se lo pensarían antes de continuar su avance...

¿cual es vuestro próximo movimiento?

Tras un gran esfuerzo por parte de los tres, la roca decide moverse al verse impotente de sostener la tremenda fuerza de Tara, Lycyn y mia juntas.

Conforme la roca cede, un ambiente dantesco comienza a invadir todos nuestros pensamientos tras la visión de unas escalinatas con calaveras grabadas en ellas, y las antorchas de las paredes que son sostenidas por manos esqueléticas - Lycyn, por la cara que tienes, me da que no hay nada bueno si seguimos subiendo las escaleras ¿me equivoco? - comento mientras miro a Lycyn - Pero he venido decidido a hacerme con los favores de la Espada de Ahûme y despues de ver las ganas que le ha puesto Tara a separar esta roca, no me voy a detener aquí -

Dando un paso, pongo un pié sobre el primer escalón de la escalinata y me dispongo a agarrar una de las antorchas que hay colgadas - Animo amigos, que estos grabados son solamente eso, grabados y no creo que hagan nada - Una vez tengo la antorcha en una de mis manos y la he encendido, desenvaino a Reflejos y la empuño firmemente con la otra mano.

Con destreza 5 la enciendes ya que tara he visto que tiene Yesca y Pedernal.

La espada corta tiene un daño de 1d6+3 y eso le añades por tener el mecanismo de la hoja 1d6 por el impacto pues la hoja se abre, rasgando más la herida. Es una obra maestra es decir un arma artesanal y muy laborada.

Pero no es mágica y a los espectros, Balrog, Nazgul... no dañará. 

Le pido a Tara prestados la Yesca y el Pedernal y, con un poco de trabajo, - Por todos los Valares, esto no se enciende.... Tara ¿estas segura de que me has dado Yesca y Pedernal? me da la impresión de ser dos trozos de piedra.... - finalmente consigo encender la antorcha.

Nada mas encender la antorcha esta prende haciendo una llama viva, de pronto se forma un fogonazo con rostro humano, este rostro de fuego parece que te mira, esto dura un segundo.

Luego la llamarada en forma de rostro  es atraída como imán al hierro por la siguiente antorcha, y esta a su vez por la siguiente y así tan místicamente veis como se van encendiendo una tras otras las antorchas de las escaleras.

Dejando ver perfectamente las escaleras hasta el rellano de arriba.  "

 

La presencia del poder oscuro en la torre es impresionante, siento que mi cuerpo flaquea al sentir el poder, miro a Malleus que percibe mi expresión - así es amigo mío, el mal vive en esta torre -digo mientras desenvaino mi espada. un arco en escalera puede no ser tan buena idea. Malleus enciende una antorcha y automáticamente se ilumina toda la escalera - Fue mi impresión o un rostro humano salia del ¿fuego? - observo con atención la estancia ahora iluminada antes de decidirme subir por esas escaleras, revisar si hay alguna trampa o pistas de alguna presencia más física.... 

En el rastreo LYCYN  descubre que en efecto el que ha puesto la roca y ha estado en la estancia no es Humano, más bien es un ser procedente de la Oscuridad, también ve que las huellas tienen dirección hacía la nieve y no hacía la torre.

Pero cual es su sorpresa al mirar por los escalones de la escalera, que ha visto los ojos de la calavera rojos y amenazantes esto le ha recordado algo en su pasado cuando era unos siglos más joven... y se ha quedado absorto el resto del asalto mirando los ojos rojizos. 

Toco el hombro del elfo y uso mis dotes de Bribona para ver si hay trampas en el trozo este de las escaleras.

Muy bien con un 9 es una df normal casí moderada, en un principio que no hay trampas. hasta llegar arriba. 

¿quien es el primero en subir?

Me pongo mi capa femenina color negra y la capucha, Respiro fuerte mente llenandome de valor  Y  Empiezo a subir casi de puntillas por las escaleras,  casi perfecto ni un solo ruido. (soy una verdadera Profesional).

Hasta llegar al rellano. 

Entonces miro de nuevo si hay trampas antes de pisar, señalo a mis compañeros con la mano que me pueden seguir.

_{-Esta despejado} -les susurro.

Y espero su llegada.

El rellano es amplio caben hasta dos personas a la vez. 

Mide 3x4 m. 

Justo enfrente continua la subida. esta parte si que permanece Oscura. Pero se ve una rampa a al derecha de unos tres metros y luego un solidisimo muro. y a la Izquierda esta la prolongación de la rampa, muy rampa hasta llegar al piso de arriba. 

No hay ni antorchas, ni luz y el fondo se pierde a la vista, menos el elfo que si llega a ver el fianal es decir un ligero giro y un pequeño rellano a la derecha.

(como se ve en el dibujo del mapa )

imagenes de mi padre, en los bosques, su muerte... ! no, no no... NO! - vuelvo a la realidad cuando una mano se posa sobre mi hombre - que?... o lo siento, el poder oscuro se cierne sobre mi,  - digo algo apenado mientras veo a la dama tomar la iniciativa de subir las escaleras, la sigo para encontrarnos con una rampa que la final sigue muy oscura, siguiendo el ejemplo de Malleus tomo una de las antorchas antes de seguir... sigo algo perplejo por las visiones...

La antorcha ilumina un diametro de 6m

En el momento de encender la antorcha, se produce una gran llamarada que toma la forma de una calavera que me observa fijamente durante unos muy breves intantes - ¡Joder...! - comenté sorprendido mientras Lycyn comenta que si eso era lo que le había parecido - Si hermano, es lo que te ha parecido, una dichosa calavera que ha salido disparada hacia la siguiente antorcha..... buufffff que susto..... - comenté mirando a Lycyn respirando agitadamente y terminando con un gran suspiro para calmarme.

De repente, observo como Lycyn se queda con la mirada fija como si no estuviera con nosotros y empieza a comentar cosas que no vienen a cuento. Voy a retroceder para intentar sacarlo de sus pensamientos, cuando llega Tara a su altura y colocando una de sus blancas manos sobre su hombro, lo saca del trance y vuelve a donde estamos todos - Lycyn, no es hora de que te vuelvas beodo.... dejalo para cuando salgamos de aquí - sin casi darme cuenta, la joven se coloca los arreos de ladrona y comienza a subir las escaleras tras una pequeña verificación de que no hay posibilidad de que haya alguna trampa y Lycyn va tras de ella despues de hacer un comentario que no me ha gustado nada - Lycyn ¿te encuentras bien?

Con mi antorcha todavía en una de mis manos, sigo los pasos de los dos compañeros intentando hacer el mínimo ruido posible, y tras unos momentos de ascenso por las escalinatas tenebrosas, llegamos al rellano - Espero no haber pisado demasiadas caras..... me da grima pisotear grabados de rostros - en el cual la luz brilla por su ausencia - Menos mal que hemos subido con las antorchas.... - comento en voz baja.

- Antes de seguir deberíamos cerciorarnos, en cada habitación, sala o escalinatas que pasemos, de que son seguras las estancias y que no tendremos demasiados problemas.... - comento en voz bajita mientras atisbo lo que puedo con la antorcha adelantándola con la mano para intentar tener mejor visión de la sala en la que nos encontramos.