Partida Rol por web

TURNO 103

Ante la llegada del hombre a caballo, armado, Groal se detiene en su tarea, azorado. Cuando pregunta por Letar, hecha mano a su gran hacha a dos manos, del estilo leñador, y simplemente se para detrás del capataz, en silencio.

Su enorme cuerpo forma una sombra protectora sobre el hombre. Si bien las palabras del jinete parecen sensibles y bien-intencionadas, el gigante ahora tiene un vínculo con la comunidad y los defenderá codo a codo.

Observa al hombre de arriba a abajo, y a su animal. Que el Oso esté contigo si vienes con buenas intenciones, dice, mientras apoya el hacha en el suelo ociosamente. Aunque esté lejos de ser un experto en usarla para defenderse, al menos puede intentar aparentarlo...

Vengo de parte del anciano Dorhand, a traerle una carta- Dijo Valdir entregando la carta al almadiero.

Tambien se fijo en los tres hombres que habia a la espalda del almadiero, la verdad es que no parecian del asentamiento, ¿mercenarios? ¿que podria pasar por alli para que necesitaran mercenarios? Todavia en sus pensamientos una de se dio cuenta de que uno de aquellos hombres le hablo asi que Valdir dijo, gracias por la bendicion y si solo vengo a traer el mensaje, la verdad es que no estaba acostumbrado a las creencia de otra zona, a pesar de haber viajado tanto era la primera vez que alguien le vendecia hablando de un oso, pero las creencias de cada uno son suyas y el no iba a discutirselas a nadie. 

TURNO 103

Groal se mantuvo expectante, a ver qué decía la carta que le entregaban a Letar. Tenía ganas de conocer qué era todo este asunto, aunque esperaba que no retrasara el viaje hacia el sur... 

 RESOLUCION TURNO 103

El jinete se presento como mensajero, y asi lo constato cuando le entrego a Letar un pequeño sobre de cuero con dos cordones del mismo material para cerrarlo. En los cordones habia un sello lacrado.

Letar lo cogio despacio, sin dejar de mirar a Valdir, bueno mas que mirarle a el, observaba su espada, colgada del cinto.

El capataz rompio el lacre tras observarlo un rato. Del interior saco una carta y comenzo a leerla en voz baja. Parecia que no acabaria nunca de hacerlo, peus el tiempo en silencio se hacia enterno para el resto de curiosos que aun permanecia detrás. Finalmente levanto la cabeza serio.

- Vayamos a comer, hay que terminar hoy los preparativos. Mañana partiremos. - dijo sonriendo - puede acompañarnos si lo desea - añadio dirijiendose al jinete.

Todos, incluido el mensajero, se acercaron a las mesas ya preparadas, y se dispusieron a comer.

Durante la misma, Letar estuvo algo mas contento que de costumbre, auqneu tambien un poco pensativo.

Un enorme perolo de hierro habia servido para hacer un delicioso guiso. Habian echado todo cuanto les quedaba. Patatas, carne, tocino, verduras y legumbres. Todo habia sido cocinado a fuego lento desde la mañana temprano y ahora estaba listo. Dos mujeres se afanaban en repartir los cuencos que llenaba una tercera. Junto a los cuencos entregaban ademas un pedazo de pan, algo duro, pero que ablandaba en cuanto tocaba el caldo del completo cocido

Habia para todos, tanto que muchos no dudaron en repetir, e incluso pedir otra racion de mas.

Cuando todos hubieron reposado, después de comer, se levantaron casi al unisono para continuar el trabajo. No habian recibido orden alguna para ello, pero la costumbre convertia a todos los trabajadores en uno.

Letar se levanto tambien, y pidio un poco de atención con un profuso grito, hizo que todos se detuvieran para darse la vuelta…

 Turno 104

- Señores, hemos de trabajar duro lo que queda del dia, hay que reforzar todas las balsas, usaremos brea para que el agua no penetre entre los troncos. - miro la cara de perplejidad de los trabajadores - Hay que conseguir que en lugar de almadias parezcan gabarras. Mañana tendremos visita y tendremos que llevarlos rio abajo.

Todos comprendieron entonces el motivo de la brea, y decididos se fueron a trabajar.

- Espera Groal, quedate con nosotros un momento - dijo señalando tambien al mensajero.

- Mañana hemos de bajar a una buena cantidad de gente, espero que no te importe compartir el viaje y tu sitido en la barcaza que preparamos, bajareis todos en ella. - espero a que contestara - Bien, ahora manos a la obra, tu ayuda ser crucial para terminar la nueva tarea. Hay que impermeabilizar el fondo para que el agua no cale entre los huecos, y conseguir asi mas flotabilidad y por tanto mayor capacidad de carga - le explico a Groal sin que nadie le preguntara. - ahora manos a la obra… - añadio invitando al beornida a marcharse educadamente. Espero a que se marchara para continuar hablando con el mensajero.

 Turno 104

- Bueno, según la carta, bien entrada la noche, llegaran Drohand y otras cuatro personas, acompañadas de una nutrida escolta. He de llevarlos hasta Burh Marhlinge. - comenzo a informarle Letar - En la carta me piden ademas de transporte, que mantenga la zona segura. Y ahí es donde entras tu. - Miro al rohir a la cara. - Dorhand me dice que estas a sus ordenes y que seras tu quien se encarge de la seguridad hasta que llege el.

Un corto silencio se produjo entonces. Valdir no se esperaba eso, pero en definitiva, su rey le habia pedido que se pusiera al cargo de Agranil, y por tanto de Dorhand. Letar no veia muy convencido al rohirrim, por lo que le propuso algo.

- Puedes coger a cuantos hombres quieras, pero ten en cuenta que estaran cansados por el duro dia de trabajo. Piensa como lo vas a hacer y dimelo en cuanto lo sepas, yo lo organizare para ti. - le dijo decidido - Ahora he de volver al trabajo.

El capataz se levanto y a toda prisa de dirigio hacia el rio, donde su compañeros ya habian comenzado las tareas.

TURNO 104

El beórnida observó a Letar, explicándole el trabajo. Realmente, le estaba ordenando que hiciera algo. Pero Groal se dió cuenta de que tampoco lo molestaba... el hombre estaba acostumbrado a manejar a sus hombres, y él había pagado el viaje justamente haciendo ese trabajo.

Dedicó una última mirada al extraño y marcial jinete. Nunca había visto a alguien como él, y su acento era extraño. De donde dijo que era? No podía recordarlo. Intentaría quedar cerca de él durante la próxima comida, y tal vez intercambiar algunas palabras. Conocer el camino permite llegar a destino, decía su madre. Eras sabia, madre.

Se marchó con paso lento a acompañar las tareas. Primero prestó visita a Wid, tomando un puñado de pasto para frotarle los flancos, más como caricia que porque realmente estuviera sucio. El compañero estaba de un humor excelente, siendo el objeto de las atenciones de las mujeres de campamento. No te pongas gordo, aún tenemos que caminar mucho... pero disfruta de su bondad, y agradécela, le dijo Groal en una de las orejas. La mirada del caballo así como el movimiento de sus orejas le confirmaron que había entendido.

Señalando al gran y poderoso animal del jinete, Groal rió y le dijo: Hey, al menos ahora tienes un congénere para conversar!

Y luego, sin demorar más en su tarea, se marchó a ayudar a los almadieros.

TURNO 104

Valdir espero a que todos acabaran de comer para poder leventarse y marcaharse, pero en ese momento el almadiero le empezo a hablar asi que con disimulo se volvio a colocar bien y escucho lo que tenia que decir.

La verdad es que la seguridad no es mi especialidad, pero si es una encomienda real lo hare lo mejor lo que pueda.

Ya cuando el almadiero se fue se quedo en la mesa pensando la situacion, la verdad es que no entendia por que le habian enconmendado la seguridad a él, a una persona que no conocian de nada, pero bueno eso no era escusa para no cumplir el trabajo que le habian encomendado.

Estuvo pensando un rato muy largo cuantos hombres necesitaria asi que penso en hacer una leva para la seguridad.

Asi que se dirigio donde estaba el almaidero y le dijo; Perdone que le interrumpa maese Letar pero estaba pensando en pedir voluntarios para la guardia ¿me podria decir el mejor sitio? Y tambien me gustaria tener al hombre con el que hemos comido, parece de fiar y un buen guerrero. Asi que espero la respuesta del almadiero.

 Turno 104

- Lo mejor seria esperar a la hora de la cena. Aqui anochece rapido y hemos de aprovechar la luz del sol para trabajar. Me parece bien lo de pedir voluntarios, pero estate tranquilo, creo que Dorhand lo que pedia es que esperases su llegada, aqui no hay dedmasiados peligros. - dijo sin dejar de trabajar. Solo un par de ayudantes estaban junto a el y pudieron escuchar la conversacion. No sabian a que hombre se referia, pero eso les daba igual, se afanaban en terminar sus tareas.

Valdir estaba contrariado, ¿por que dejar en manos de un extraño una supuesta seguridad?. Bueno, realmente el no habia leido la carta, y no sabia si eso era cierto, la verdad es que cabia la posibilidad de que el almadiero se aprovechara de el en parte, dejando a un hombre bien armado para la proteccion del asentamiento, si es que habia de protegerse de algo. Seguramente eran todos imaginaciones suyas, lo realmente cierto es que su rey, a traves de una carta, le habia puesto a las ordenes de Dorhad, y por que no decirlo no era tan malo en el manejo de las armas, en caso de conflicto, sabria actuar. Solo el hecho de que el mismismo rey de Rohan, dispusiera su servicio a Dorhand, era mas que valido para que este gozara de la confianza para con Valdir.

 RESOLUCION TURNO 104

El mediodia habia quedado muy atrás. Solo quedaban una o dos horas de luz para poder terminar los trabajos que los almadieros, ayudados por Groal, debian acabar. No planteaba demasiado problema, iban muy adelantados, y ya solo les quedaba embrear la ultima de las secciones de las dos almadias.

En un principio, se iba a bajar con una unica almadia de cuatro secciones, aprovechando el aumento de caudal del rio durante las ultimas lluvias, pero dado que viajarian con mas carga, dividieron esa unica embarcación, en dos mas pequeñas. Ademas embrearon todas las juntas, mezclando el potingue negro con paja para darle solidez. De esa manera la capacidad de carga de cada balsa, se veria aumentada con creces.

Quedaban los ultimos detalles, tan solo dar la brea a esa ultima balsa y unirla a su gemela para formar la segunda alamadia.

Todos cooperaban en esa ultima labor. En apenas una hora todo estaba listo. Las dos almadias flotaban en la orilla, bien atadas a sendos tocones de arbol, que ese asentamiento usaba para ello a menudo.

Era la hora del descanso. Al terminar muchos se tumbaron bocarriba, para disfrutar los ultimos rayos de luz mientras su espalda recuperaba su posición. Habian pasado todo el dia agachados y haciendo esfuerzos. Los huesos de la espalda agradecían la superficie dura del suelo.

Entretanto Valdir, poco habia hecho, habia estado dando vueltas alrededor del asentamiento, buscando dios sabia que. Groal y el resto de trabajadores entretanto terminaban sus trabajos.

Cuando el sol ya se escondia, una campana sonó desde una de las cabañas. Era la hora de la cena. Todos se dirigieron hacia alli, hambrientos y sedientos. Cuando llegaron se llevaron una sorpresa…

No habia cena…

¡Era un festin!, Habian acabado a tiempo, y como era costumbre habia que celebrarlo. Las mujeres habian estado toda la tarde cocinando. Dos enormes corderos en pedazos se repartian por toda la mesa. Una mesa alargada, repleta de jarras de cerveza, vino, frutas, carnes y dulces. No habia donde sentarse, pues todo estaba dispuesto para dejar sitio para la fiesta. El cansancio desaparecio de repente…

 Turno 105

Todos entraron, pero ninguno se atrevio a comenzar a comer. Esperaban las bendiciones de su capataz. Este se adelanto y subido en una banqueta dijo unas palabras…

- Amigos, el trabajo ha finalizado ya, esta noche la mayoria volvera a sus casas, hasta la llegada de la temporada, en primavera. Quiero agradecer a todos y cada uno de vosotros, el excelente trabajo realizado, vuestra dedicacion y entereza a la hora de aguantar. - era el mismo discurso de siempre, algunos hasta lo recitaban en voz baja entre risitas acalladas. Siguio hablando.

- Gracias a nuestro amigo Groal, sin su ayuda estas tareas nos habrian llevado mucho mas tiempo. Pero lo mas importante de todo, es que este viaje… ¡¡Nos reportara a todos una buena suma!! - todos vitoreaban, aplaudian y silvaban - ¡¡Ahora que empiece la fiesta!!

Uno de los hombres, saco una especie de pequeño acordeón y comenzo a tocar alegres tonadillas. Con el ambiente caldeado, todos se lanzaron al ataque. Pedazos de carne y cerveza eran llevados a la boca para gusto del paladar. Groal participaba tambien de la fiesta. Para el era mas una recompensa por el trabajo realizado que una fiesta por las ganacias futuras. Aunque no era muy dado a ese tipo de celebraciones, se integraba muy bien.

Valdir en cambio, parecia mas serio, claro que le gustaban esas fiestas, pero tenia algo que hacer. Se acerco a Letar y le dijo algo al oido. Despues cogio de nuevo la banqueta y se subio en ella. Con una seña al musico, le hizo callar, por lo que todos se le quedaron mirando.

- Amigos, antes de continuar con la fiesta, nuestro invitado Valdir, ha de deciros algo - dijo con una potente voz, serio pero a la vez condescendiente. Se bajo de la banqueta e invito al rohir a que se subiera en ella…

TURNO 105

Valdir se subio a la banqueta y dijo, Como ya es sabido mañana llegara una visita y se me pide que sea responsable de la seguridad hasta entonces, asi que me gustaria saber quien de vosotros se ofrece voluntaria para dicha tarea, el que quiera que hable conmigo, gracias por vuestra atencion. Dicho esto se bajo de la banqueta y se acerco a donde Groal y le dijo, Perdonad maese pero me gustaria contar con usted para la guardia, pereceis de fiar y un buen hombre. Dicho esto espero la respuesta.

TURNO 105

Groal masticó la abundante y exquisita comida. Sorbió cerveza, y agua. Vió que Wid estaba bien atendido, como siempre... costará quitarle esos malos hábitos!

Las palabras del capataz le gustaron, sencillas y directas al grano. Por ese mismo motivo también le pareció simpático el jinete, pero... el hombre no había ayudado a los hombres. Había oído, y visto en Ciudad del Lago, que algunas personas consideraban ciertos trabajos como fuera de su incumbencia, y no se molestaban en ayudar a otra persona. Le parecía un concepto extraño.

- Señor, lamento no poder serle de ayuda. Señaló la espada que el rohirrim llevaba al cinto. No soy un guerrero, entiende? Solo un viajero hacia el sur. Solo eso.

Pero su curiosidad pudo más. Tal vez, si puede perdonar mi pregunta... quién es esta visita? A dónde se dirige usted? Es posible que tengamos un camino en común.

RESOLUCION TURNO 105

Valdir, el misterioso jinete que había llegado horas antes, participaba como uno más del festín que se había preparado. Algunos le miraban un poco fastidiados, pues pensaban que las viandas eran la culminación de un trabajo terminado, y no una simple celebración. Como invitado de Letar, el rohir estaba en pleno derecho, y no le daba mayor importancia.

Todos disfrutaban de la cerveza, el vino y el cordero asado. Este último estaba especialmente delicioso, había sido asado lentamente, sazonado con especias y su  propia grasa y estaba tan tierno, que parecía deshacerse en la boca. Entre bocado y bocado los hombres reían y bailaban al son del pequeño acordeón que sonaba en la estancia.

Valdir, subido en la misma banqueta en la que Letar había dado su pequeño discurso, pidió voluntarios, la tarea… seguridad. Esperaba que algunos se apuntaran rápidamente, pero no fue así, estaban demasiado ocupados degustando la cerveza. Tras bajarse, se dirigió directamente hacia Groal. Le quería en su guardia, era un hombre enorme, de brazos aparentemente fuertes y le pareció de fiar. El beornida, asombrado no pudo si no rechazar la “invitación” no se sentía un guerrero, ni alguien capaz de defender a aquel grupo de trabajadores. Sin embargo, cortésmente trato de mantener una conversación con el rohirrim. Le pregunto por el camino que seguiría, y a quien esperaba. Tal vez encontrara en el jinete un compañero de viaje con el que tener una conversación. Su fiel amigo Wid, era buen compañero, le quería, pero hablar con personas de vez en cuando le mantenía cuerdo.

Letar, junto a Groal y Valdir, hablaban sobre lo que la noche les depararía, el día siguiente y otras conversaciones banales. La noche continuaba, aun era temprano y el calor del fuego calentaba la estancia a la vez que alumbraba esta con una bailarina iluminación. Casi sin darse cuenta, cuando ya había pasado mucho rato desde que Valdir se bajara de la banqueta, una pequeña congregación de casi diez trabajadores, esperaban a Valdir, dispuestos a prestarle la ayuda solicitada. La mayoría estaban ya algo borrachos, o eran demasiado jóvenes.

Valdir se excuso ante su compañía y en poco tiempo había seleccionado a los más validos, cuatro fuertes hombres que aun estaban lo suficientemente serenos como para no quedarse dormidos. A ellos les pidió amablemente que se abstuvieran de continuar bebiendo, cosa que obedientemente hicieron. Valdir volvió junto al capataz y el beornida, que habían estado presenciando en todo momento el “proceso de selección”, divertido en cierto modo.

Aun debía de quedar mucho tiempo para la llegada de los visitantes, y todavía quedaba carne en la mesa, y bebidas en las jarras. Continuarían por un rato mas la juerga, pese a que la luz del sol hacia ya tiempo que se había ido. Quedaban aun al menos tres horas para la medianoche…

Turno 106

La verdad es que Valdir no se esperaba la negativa de aquel hombre, pero bueno no le iba a obligar en contra de su voluntad asi que respondiendo a lo que le pregunto Valdir dijo; En cuanto a lo de la visita solo se que es un anciano llamado Dorhand y fue el que me dio la encomienda de traer el mensaje, y en cuanto a donde me dirijo antes de que me encomendaran esta mision iba camino a casa, a Edoras. Le dijo a Groal con tado la educacion del mundo.

Turno 106

En cuanto Valdir acabo de hablar con Groal,Letar y termino la seleccion de voluntarios, que le hubiera gustado tener a alguien mas pero bueno se pañaria con lo que tenia, empezo a pensar en como organizarlos de tal manera que le seguridad fuera buena.

Penso en situar a dos en la entrada del recinto (si solo hay una) haciendo cambios con los que estuvieran mas cansados de la patrulla, y los demas que patrullaran alrededor con él.Asi que una vez pensado en todo el plan Valdir se lo esplico a todos los voluntarios haber si estaban de acuerdo y asi poder empezar su labor.

TURNO 106

Groal asintió ante las palabras del jinete... Erodas, es tu tierra natal, verdad? Hacia el sur? Me dirijo hacia Minas Tirith...

El beórnida dejó en el aire la idea de hacer parte del camino juntos. Ya se vería, de todas formas, puesto que los próximos días serían en compañía.

Dejó luego a Valdir tratar con los hombres que serían la "seguridad". No entendía la idea... el bosque era seguro para aquellos que no molestaban al bosque. La naturaleza no tenía odio, o rencor; y no había visto hombres de corazón oscuro en su deambular por la zona.

Tras intercambiar palabras amables y palmadas en la espalda con los almadieros que tanto habían trabajado, y felicitándolos por tan honrado y capaz trabajo, el gigante se dirigió a un costado, donde Wid pastaba semi-dormido. Se sentó en el suelo, a su lado, con una fresca jarra de cerveza, y el cansancio tirando de sus párpados como pesas invisibles. Así es, amigo mío. Hombres, un sorbo de la jarra bajó por su garganta, las pastosas palabras del cansancio apenas inteligibles, tan convencidos, tan fuertes. Con poca consciencia de lo que significa vivir, para ellos y para los demás. Un hombre empuña las armas, y sin dudarlo lleva consigo la violencia. Cuando más fácil sería todo si, solamente, nos dedicáramos a trabajar y ser felices, verdad?

Cabeceó en el lugar, mientras los alegres sonidos del resto de la noche se perdían en sus oidos...

 Turno 106

Groal, se preguntaba el por que era necesaria esa seguridad, el bosque parecia tranquilo, al menos lo que habia conocido de el.

Hace ya mucho que el mal habia desaparecido, si bien aun hay pequeñas huestes de orcos y otras criaturas vagando por el mundo, ya no presentan un problema. El problema viene de otro lado. La pobreza, fue en aumento desde la unificacion de los reinos, mucho tiempo atras. Muchas personas no lograban encontrar una manera de subsistir, asaltaban, robaban e incluso en ocasiones mataban, no eran delicuentes sueltos, si no más bien se organizaban como bandas de asaltantes. El mal aun acecha en los viejos bosques, pues en ellos son ajenas la política y las guerras.

En el caso de ese asentamiento no habia tanto problema, carecian de nada de valor material. ¿que podian robar? ¿Tal vez las herramientas?, eran muy valiosas para los trabajadores, pero sin ningun uso fuera de su contexto. Esa necesidad de seguridad se debia sin duda a la persona que llegaria esa noche, tal vez era importante, tal vez llevaban algo valioso, o quizas era una estratagema para desviar las miradas. No lo sabias, pero una cosa estaba clara, no parecia haber ningun peligro inmediato...

Wid estaba tranquilo, y al beornida le estaba entrando un sueño, quizas mas debido a la cerveza que al propio cansancio, tal vez deberia de irse a dormir, aunque tambien podria esperar para averiguar quien o que era lo que llegaria en unas horas. Fuera como fuese, Groal continuaba disfrutando de la noche, sus sonidos y su compañia...