Partida Rol por web

Algo frustrado el doctor se da cuenta que así no va a conseguir gran cosa. Deja pasar la luz por las ventanas y trata de estimularla usando para ello un objeto punzante, su estilográfica.

Usando técnicas aprendidas con el psicoanálisis, logras hacer que Angela reaccione y salga de su estado catatónico

Sabes que esto no va a durar mucho, que en cualquier momento volverá a recaer, así que aprovechas para tratar de hablar con ella lo máximo posible.

Victoria no parece escuchar nada de lo que le dices y repite una y otra vez unas frases, de manera que tratas de aguzar el oido para entenderla

Él ... no se encontraba... muy bien ... - dice Victoria, con los ojos que miran sin ver y una sonrisa demente en la cara, por la que chorrea un hilillo de saliva - claro que... usted tampoco lo estaría... si no pudiese sangrar... ¡¡¡NO PODÍA SANGRAR!!!

Tras este grito desgarrador, Victoria rompe en sollozos convulsivos

¿A quien se refiere? ¿Al chico de las noticias? ¿Y que es eso de que no se encontraba bien porque no podía sangrar? Parece una de esas cosas que le gustan a John. Revisar a Esta chica me provoca más preguntas que respuestas.

Mientras trata de analizar la situación y entender que pasa Ángel se sienta en la cama y recoge en su regazo a la chica con intención de calmarla.

- Victoria, ¿a quién te refieres? ¿Quién te atacó? Da igual... no te preocupes... aquí estás a salvo -besa su cabello mientras la abraza amigablemente-. Descansa.

Poco a poco, Victoria se va sosegando y se queda como inerte, sin fuerzas para nada, pero más tranquila.

Vaya doctor, parece que ha logrado sacarla del estado de catatonia en el que estaba. Ahora, con su permiso, le administraré un sedante suave para que descanse y la dejaremos tranquila. Voy a pedirle a una enfermera que venga a acompañarla permanentemente.

- Me parece bien señor Wallance. Ya pasaré en otro momento a ver como va evolucionando la paciente. Cuiden de ella y avisenme de cualquier cambio en su estado.

Inconscientemente se marcha sin despedirse camino de la recepción del hospital.

Vuelves sobre tus pasos, por esos pasillos que ya te son tan familiares. Sigues andando con tu despiste habitual, en los márgenes de tu conciencia, apenas quedan registrados los saludos que te dirigen. Casi sin darte cuenta, has llegado frente a la recepción del Hospital

- Buenos días -dice dirigiéndose al encargado de la recepción con una sonrisa-. Estoy tratando Victoria Nangelo y necesitaría saber si ha tenido alguna visita. ¿Me podría ayudar?

Buenos días doctor - te dice la enfermera encargada de la recepción. - permítame que consulte la ficha y enseguida le respondo.

Tras unos instantes rebuscando en su archivo, la enfermera se te acerca y te dice:

Doctor, aparte de la policia, nadie más se ha interesado por la chica. La familia vive lejos y la policía se iba a encargar de avisarles con un telegrama para que vengan a verla - te dice con una sonrisa - ¿puedo ayudarle en algo más?

- ¿Me podría indicar los datos de la familia por si puedo ponerme en contacto yo con ellos para entender que le sucede?

Ángel saca una libretita del bolsillo de su bata, se apoya en el mostrador y se dispone a escribir con la estilográfica.

Como no doctor, tras lo cual te dicta una dirección de Pascoag 

- Muy agradecido.

Ángel abandona el hospital y se dirige a la cafetería.