Partida Rol por web

-Bueno, bueno, bueno, parece que no hemos puesto el gorro de pensar y nos creemos listillo.- dice el hombre de la pared con voz gruesa y fría, la ira se refleja en sus ojos, se aleja de la pared y se acerca a ti con movimientos fluidos y elegantes, casi felinos, y con el mismo tipo de movimiento te arrea una patada de increible fuerza en el estomago, que te levanta del suelo; para impactar con pasmosa velocidad y tino un puñetazo en tu nuca, dejandote en el suelo a la vez mareado y descompuesto.

-Yo soy Berlum y tu jefe o tu verdugo como quieras asi que mas respeto andrajoso pedazo de hombre, y no soy tosco solo practico.- dice mientras te escupe mientras estas en el suelo.

-Estas segura Lissandra que necesitamos a esta escoria, a mi no me parece tan bueno que digamos, no parece ser él, el que mato a Devan.- dice dirigiendose a la pelirroja que sigue examinando a los documentos sin inmutarse por la escena ocurrida.

El golpe me toma por sorpresa, por lo que no logro encajarlo bien y el golpe en la nuca logra marearme un poco. Escucho las palabras de Berlum

Pues si que eres tosco...

Pienso mientras estoy tirado en el piso. Dejo escapar un par de quejidos mientras me tomo el estomago y me dedico a escuchar cuidadosamente lo que dicen

...no se de que hablan. Veamos que podemos sacar de esto.

-Pues si lo mato o no es algo que ya averiguaremos, en cuanto al trabajo ya sabemos que es bueno pasando desapercibido y actuando, el que le halla enseñado fue bueno, pero cambiemos de tema el aún esta consciente.- dice casi ronroneando Lissandra.

-Pues ya veremos, levantate y disculpa mis modales estaba molesto.- dijo mientras se acercaba y le tendía una mano para ayudar a ponerlo en pie.

Luego se alejo hacia uno de los muebles de donde saco una finísima botella de cristal esmerilado con filigranas de oro y plata. contenía un liquido amarillento, cuando lo destapo claramente se podía oler la miel y flores y por último el alcohol, sirvió en un pequeño vaso de igual trabajo y se lo tendió a Pellyn: -Para hacer las paces hermano de oficio.- dijo con una sonrisa encantadora.-ya no parecía el lobo rabioso de antes.     

Tomo la mano de Berlum y me levanto. Dejo escapar una sonrisa tímida mientras acepto el vaso que me ofrecía.

Esta bien, entiendo que a veces las cosas se ponen feas. Disculpas aceptadas.

Digo levantando el vaso hacia el y dando un trago mientras asiento con la cabeza. Luego fijo mis ojos en Lissandra y vuelvo a mirar a Berlum.

Bien, imagino que ahora es cuando me cuentan de que va todo esto, no?

Digo un poco mas tranquilo

-En realidad ahora es cuando te pedimos que hagas un trabajo para demostrar tus habilidades, y luego veremos de tu fidelidad a nosotros, y luego te diremos de que trata esto.

-El trabajo no es sencillo, pero así comprobaremos tus habilidades, deberás robar un zafiro estrella de la casa de un reputado joyero en el barrio mercantil, si aceptas te daré mas detalles, sino nuestras transacciones se terminan aquí.

Dijo con una voz sensual mientras posaba sus ojos en el mediano. 

Sonrio despacio

Pruebas y mas pruebas, bien. ¿Hay alguna información mas que puedas proporcionarme del zafiro y su dueño? ¿Alguna recomendación? ¿algo que deba tener en cuenta?

Digo cruzando los brazos

-Pues bien deberás disfrazarte como mercader, e ingresar al barrio comercial, allí tendrás un lugar para tu tienda ya preparado, el lugar está en frente a la casa-joyería del mercader, una vez allí tienes dos trabajos una es robar al mercader su tan preciada joya y la otra es vender a buenos precios nuestros artículos "adquiridos" para no levantar sospechas por supuesto. Por lo que sabemos guarda su joya en alguna parte de su casa o la joyería, tal vez en alguna caja fuerte enana, en algún panel secreto, tu ya verás como lo haces.  

-Ven y toma las cosas que te ayudaran a cometer esto.- dijo poniendo un baúl sobre la mesa.

En el se encontraba unos atuendos caros de mercader, unos cuantos documentos sellados con cera, una pequeña bolsa de cuero que contenía 50 po, un pequeño garfio de escalada, una soga elfica, un juego de herramientas de excelente calidad (+5 a abrir cerraduras, +5 inutilizar mecanismos), una pequeño frasco con ácido, y una cerbatana con un dardo que tenia una sustancia en la punta impregnado.

-Ah lo olvidaba tu nombre es Oswald Dimitry, mercader de Pontius.

Suelto un silbido mientras reviso el cofre

Interesante...

Digo golpeandome la boca con un dedo, luego levanto la cabeza y me fijo en Lissandra

...imagino que lo que tengo que vender esta en el puesto, no?

-Por supuesto que si no somos amateurs, ahora toma tus cosas alquila un buen lugar en alguna taberna decente hazte amigos, se un mercader y mañana marcha hacia el lugar indicado, tu contacto será Dikon, como le toca semana libre será tu guardia pago, es lo que se permite en la cuidad, bueno muchacho nos vemos cuando tengas el zafiro y por favor no intentes escapar, ahora estás marcado y la gente que te vigila esta vez es profesional.-dijo casi ronroneando la última frase.

Asiento tranquilamente.

Bien, nos vemos cuando traiga la joya.

Digo tomando las cosas y saliendo.

Camino un poco por la ciudad y me dirijo a una taberna cercana al barrio comercial. Alquilo una habitación, ceno algo y me voya dormir. Al otro día me pongo las mejores ropas de mercader, me meto al barrio mercantil y busco el puesto, la joyería y a Dikon. Una vez allí, reviso los elementos que debo vender.