Partida Rol por web

Observé aquel cartel levemente, no me daba interés alguno.

- Bueno, nunca me ha gustado el ballet ni nada de eso, así que realmente me es indiferente, para mi no se ven hermosas, simplemente se ven como mujeres explotándose para acabar con los pies y la espalda hecha mierda... Prefiero mil veces las obras clásicas como Hamlet, El fantasma de la ópera, etc.

Empezaba a estar un poco agotada, mi mente estaba ahora sumergida levemente en lo que debería hacer mañana, si prepararme algún material o repasarme algunos apuntes antes de acudir a las clases.

-No te falta razón la verdad, aunque ver de esas acá es rarisimo. Clasicas hay mas de españoles, como el "Lazarillo de tormes", "La vida es Sueño", o claro el Quijote y sus parodias... La otra vez me invito un chico del trabajo a ver "Ladran Sancho, señal que cabalgamos", pero no... no daba. No era tan lindo jaja.

Destapa la bebida que se trajo del shopping, dandole un largo sorbo con ansiedad. Luego te la ofrece, suspirando.

-Ahh.. Te parece si vamos volviendo? Me entraron ganas de una siestita antes de ir a trabajar. 

Niego el ofrecimiento de Ángela con un leve gesto. Seguidamente empiezo a andar.

- No me apetece beber ahora, gracias. Mejor vayamos regresando, así yo también podré descansar para mañana. Y leeré algún que otro libro, creo que empezaré por Drácula, aunque me lo haya leído muchas veces nunca me canso de leerlo de nuevo.

-¿Dracula? Jajaja que loca... Creo que lo leí en la secundaria para un trabajo, pero ahora... Suficiente sangre veo en el trabajo para pensar en alguien que se la toma, gracias.

Simula (o no) un escalofrio que resalta con el clima calido, y toma otro sorbo. Se que da pensando.

-Lo que si me acuerdo es que use una copia de la biblioteca Pedagogica, y era distinta a la del resto. Muy vieja, gruesa como una Biblia. Habia capitulos enteros que ninguno de los otros tenian, sobre la vida de Dracula antes de ser vampiro. Saque una muy buena nota en el trabajo por eso... a la profe Tomada, la loca de los pelos, le encanto.

Mis ojos se iluminaron de repente, agarré con suavidad pero dando un leve tirón a Ángela.

- ¿En serio? - con mi rostro mostrando con totalidad la sorpresa y el interés que sentía en mi interior, tragué saliva y miré a Ángela a los ojos - Oh, dios ¡Tienes que decirme dónde específicamente encontraste eso, por favor! ¿Ese tomo estaba en algún lugar o habitación especial de la biblioteca? De veras que me encantaría leerlo, mañana mismo iré a ver si lo encuentro... Debe ser algo fascinante, realmente fascinante.

Me quedé pensativa mientras esperaba la respuesta a mi pregunta. Impaciente. Era como aquellos arqueólogos o fanáticos del arte que, cada vez que se encontraban partes inéditas de algo e incluso obras de un autor que no habían sido encontradas anteriormente, se volvían totalmente locos por tener entre las manos aquella novedad y disipar el interés, guardando un inmenso placer interno en la mente tras saciar esa... atracción por las cosas inéditas de autores favoritos para ellos.

-Pedis mucho... eso fue hace como 10 años! +dice, algo sorprendida, rascandose el costado+ Me acuerdo que era un tomo encuadernado en cuero negro, con letras doradas, y escrito raro, asi tipo gotico ¿viste? Lo encontre en un rincon, pero ni ahi me acuerdo donde. Si queres, te acompaño... a lo mejor me refresca la memoria. No estamos lejos, 4 cuadras...

Te mira extrañada mientras habla, algo sorprendida por tu reaccion, sin detener no obstante vuestro andar por la peatonal. A tu alrededor, algun que otro comercio empieza a abrir, y la ciudad retoma su vida comercial diaria.

Sonreí, la verdad tenía ganas de leer la parte que había mencionado Ángela, era algo que no había escuchado jamás y seguro tenía información muy interesante.

- Sí, vamos - miré a mi alrededor - al menos muéstrame dónde está la biblioteca y ya iré yo otro día con más tiempo a buscar el tomo ¡Qué intrigante!

Reí levemente de felicidad, era lo más interesante que me había pasado en mucho tiempo... lo cual era triste... pero en fin.

Angela menea la cabeza, pero te guia. Las dos siguen por la misma peatonal San Martin, hasta donde termina, y continuan un par de calles mas. Al fin llegan a un edificio de arquitectura antigua, muy principios de siglo, con las banderas ondeando ... altos y estrechos ventanales dan una idea del interior, habitaciones repletas de librerias. Una plaquita al costado reza "Biblioteca Pedagogica y Popular"

-Si hubieras hecho la secundaria aca, seguro la conocerias... En la uni tienen bibliotecas propias, pero muchas de las primarias y secundarias no, o no tienen gran cosa, asi que la Pedagogica es donde veniamos los de recursos más limitados. Igual tambien viene mucha gente grande, al ser popular... ¿Queres que pasemos ahora?

Miro entusiasmada la entrada de la biblioteca.

- Bueno, vamos, a ver si es posible que me lleve el libro por unos días, para echarle un buen vistazo... Bueno, realmente... veamos a ver si aún está por la biblioteca...

Sonreí y cogí del brazo a Ángela, accediendo con paso acelerado al interior de la biblioteca. Miré a mi alrededor, mientras esperaba que Ángela me indicase algún lugar específico al que dirigirnos para buscar aquel tono inédito.

Entras a un recinto anticuado. El pasillo central se encuentra flanqueado a la derecha por muchas habitaciones similares a las que vieras desde fuera, mientras que del lado izquierdo, despues de un par de puertas, hay un patio interior con mesas y sillas donde jovenes y ancianos se entregan a la lectura. Tambien las piezas parecen contar con los muebles donde acomodarse. Reina un silencio fuerte, con aroma a papel viejo y tinta, nada desagradable.

Casi junto a la puerta, una mujer de lentes detras de una mesita de roble, les recibe con una sonrisa. 

-Señoritas, en que las puedo ayudar?

-Buenas... Buscamos una copia de Dracula... una en concreto. +pregunta con cierta timidez+ ¿Podemos pasar a ver?

-Por favor...adelante. Es una obra clasica, asi que debe ser en la tercer sala. Si necesitan ayuda no duden en avisarme. 

Angela te arrastra casi fuera de la vista de la mujer. Parece algo intimidada. No obstante, la tercer sala esta casi enseguida, un cuarto en apariencia no distinto al resto, con altisimas librerias, y alli se relaja. La mayoria de los volumenes tienen encuadernaciones elaboradas, como corresponde a titulos de importancia.

-Bueh... aca me mataste. Yo voy con los de la izquierda, vos de la derecha, ¿ok?

Miré a mi alrededor, nunca había estado en aquella biblioteca... libros y más libros, evidentemente, pero ¿cómo íbamos a encontrar la copia de Drácula? En fin, al menos la bibliotecaria nos dio una leve indicación.

- Sí, por supuesto, así terminaremos antes...

Me acerqué a la zona en la que debía buscar el tomo y empecé a buscarlo, esperaba no tener que tardar mucho, aquello era como un puzzle, cuando llevas mucho tiempo, todo te parece igual, hasta del mismo color.

Toma algo de tiempo. Hay no pocos volumenes de Dracula, en diversas ediciones y editoriales dispersos, pero finalmente das con el partiendo de la idea que debe ser uno poco conocido. Donde se meten esos? O muy alto o muy abajo... y en efecto, en un rincon de la 9na estanteria se encuentra el que decia angela...

Negro, letras doradas ya gastadas y el titulo del autor simplemente impreso en el mismo cuero de la portada. Las hojas no son de papel normal, notas al darlo vuelta, sino de uno casi mantecoso, muy muy suave. Estan amarillentas por el tiempo. Del mismo modo la escritura es de imprenta pero muy basica. Un leve repaso a las primeras hojas te refresca cosas del texto....

"Debo admitir que no me produjeron ninguna alegría, pues entre ellas estaban “Ordog” (Satanás), “pokol” (infierno), “stregoica” (bruja), “vrolok” y “vlkoslak” (las que significan la misma cosa, una en eslovaco y la otra en servio, designando algo que es un hombre lobo o un vampiro). (Recordar: debo preguntarle al conde acerca de estas supersticiones.)"

-¿La encontraste? Sii, que genia!! +te felicita Angela, al verte leer y aproximandose. Mira las paginas.+ Si, casi segura que es ese. 

Eché un leve vistazo a las páginas del libro. Sí, no había duda de que era ese. Ahora solo quedaba preguntar un par de cosas...

- Sí, voy a preguntar a la bibliotecaria si puedo llevarme el libro de préstamo por unos días o si tiene que quedarse aquí. En caso de quedarse aquí... supongo que trataría de leerlo en horas libres en las que pueda venir.

Seguía ojeando mientras nos dirigíamos hacia la bibliotecaria, seguidamente cerré con suavidad el libro y me dispuse a preguntar.

- Disculpe, para poder llevarme este libro ¿Debería hacerme un carnet bibliotecario para poder llevármelo en préstamo, por un tiempo? ¿o no es necesario?

-No hay carnet, señorita, en esta biblioteca. Solo necesito su documento y que llene una forma, para tomarle los datos e ingresarla al registro. Entonces puede retirarlo hasta por 15 dias. +explica+ Luego de eso debera devolverlo o renovar el retiro. Las moras si tienen un monto de multa, que debe abonar antes de que se le permita retirar otro libro. 

-Seguro que ni trajiste el tuyo... +suspira+ Deja, yo todavia debo estar anotada. ¿Tiene registrada todavia a Angela Larrea, no?

En efecto, ella todavia figura, aunque hace falta actualizar sus datos a la morada actual, cosa que toma unos minutos. Luego emprenden el regreso a casa, con el libro.

-Disfrutalo che, no me dejes clavada con eso. +te sonrie, antes de irse a dormir una siesta, dejandote sola.

Una vez en el departamento y con Angela durmiendo, podes revisar el libro con mas calma. En efecto, es la obra clasica, no una version condensada ni resumida. Primero parece normal, no obstante. Sin embargo, captas algunos matices, como que no hay signos de maltrato, como tampoco datos del autor ni de la editorial al frente. Al buscarlos al final, te das cuenta que donde termina la historia siguen unas 10 paginas adicionales al final. Si bien el papel es el mismo, la imprenta es otra, una de menor calidad. Arrancan justo despues del indice final de la obra. Tiene mas el aire de una carta o trabajo que de algo academico...

Hasta aquí la historia de Stoker. Es mi deber pues, añadir luz a la ficción.

La historia del Dragón.

El príncipe Vlad Drácula, segundo hijo de Vlad Drácul, gobernó el reino de Valaquia en la Transilvania meridional durante el siglo XV. El Sacro Emperador Segismundo ordeno al padre y al hijo como miembros de una organización monástica y militar llamada la Orden del Dragón. Esta sociedad secreta otorgo al Vlad de mayor edad el sobrenombre Dracul. Es un error frecuente confundirlo con Dragón, dado sus similitudes con el latín “draco”, pero realmente la palabra significa "diablo" y más exactamente "El diablo". No obstante, en aras de mantener una comprensión de la historia más acorde, lo dejare como Dragón.

Volviendo al relato, luego del nombramiento les encomendó las luchas contra los enemigos de la Iglesia, tanto naturales como sobrenaturales. Vlad llamo a sus hijos Drácula, es decir Hijo del Dragón, o Pequeño Dragón (tomar en cuenta la nota anterior). Solo más tarde, se ganaría el joven Vlad el sobrenombre de Tepes... el Empalador.

En aquellos tiempos oscuros, solo los frágiles estados de Serbia, Bulgaria y Transilvania se mantenían entre el Sacro Imperio Romano al norte y al oeste, y el islámico Imperio Otomano al sur y al este. La vida en esta vulnerable tierra de nadie era siempre peligrosa, y algo más que ligeramente esquizofrénica. Los sultanes turcos presionaban constantemente a los gobernantes transilvanos para que se convirtiesen al Islam, mientras que los reyes cristianos exigían a los transilvanos defender la fe y ser como un muro de fuego frente al avasallador infierno religioso del sur…