Partida Rol por web

¿Qué? ¿Estaba loco? ¿Ahora? Sin embargo, lo peor es que tenía razón. El ruido de una ducha es mejor que el ruido de dos duchas. Y somos adultos ¿no?

Saco las piernas de debajo de las sábanas dirigiéndome al baño, mientras le veo por la rendija que ha dejado la puerta entreabierta

- Just for the hurry - especifico, mientras, descalza paseo por las baldosas del baño sin querer mirar para ninguna parte, porque se como reaccionamos ambos, poniéndonos sentimentales. Y son las 6:30 de la mañana

Sus boxer vuelan a un lado. Puedes notar claramente que los "sentimientos" en el se mantienen muy firmes... Aprovechando que no le miras fijamente te toma por detras a gran velocidad, poniendo sus manos sobre tus hombros y deslizando el camison hacia abajo. La tela cae con un susurro al suelo... 

Lo siguiente que sientes son sus labios en tu nuca, despacio, y esos brazos que empiezan a rodearte los senos apretandote contra el. Su sexo se roza con tus muslos. Esta calido. Todo el esta calido. Sin embargo no hay casi presion en su abrazo, manteniendote sujeta como en un estado de ingravida firmeza. Poco a poco, a medida que sus besos corren por tu cuello, empieza a empujar para que ambos vayan dentro de la ducha...

La respiración se me vuelve agitada (¿Por qué?¿Por qué me haces esto JJ) Pero es normal.

Siempre había presumido de ser alguien correcta y recta. Excepto en la pasión. Es mi gran debilidad. Y es mi gran carga y culpa, el no mantenerme firme cuando debo serlo.

El calor de JJ me recuerda que llevo tiempo sin compañía masculina. Más de un año y que con el frenesí del caso apenas lo había extrañado.

Entro a la ducha, cediendo a su presión leve , pensativa, aún con la marca de su contacto ardiendo en mi piel.

El agua no apaga su calor. Lentamente, bajo las gotas frescas, esos labios bajan por tu espalda... El se toma su tiempo alli abajo, antes de voltearte hacia el y sujetarte por los muslos, alzandote. Son muchas, muchas gotitas...

7 y media son casi cuando bajan. Los tios estan levantados, tomando mate en la cocina. Si escucharon algo bajo la ducha mas larga de la historia, no hacen comentarios, solo saluda y les presentan el desayuno, listos para arrancar. El tio tambien les muestra entonces su arsena. Son 2 escopetas y un rifle. Las primeras son Remington, 870 y 1100, de 1 y 3 tiros respectivamente y 8 cartuchos. Armas de corto alcance pero poderoso impacto. El otro es un M1 Carbine, de menor poder pero mucho mayor alcance, y 15 balas en el cargador. 

-Bueno, elijan! ¿Cual prefieren usar? +pregunta tio lautaro con orgullo.

Con el pelo aún mojado bajo por la escalera y distraida busco algo para desayunar, mientras ojeo el armamento que mi tío tiene encima de la mesa como un mecanismo de defensa para no pensar en lo que  ha pasado arriba... después de un año aguantando la tentación.

Soplando sobre mi taza de café, despreocupada añado

- Prefiero la escopeta. Aunque trabajo mejor con armas a una mano - por encima de la taza, mis ojos toman contacto visual con JJ.

Algo se me escapaba... había olvidado algo, tenía esa sensación.

-Podemos compartir la pistola, si hace falta. +indica, viniendo detras. Se le ve relajado y contento. Delante de los tios te besa solo en la frente, algo casto despues de todos los lugares de tu cuerpo por donde ha estado hace unos momentos. El por su parte sujeta el rifle, casi un arma de guerra.+ Creo que me lo quedo... es precioso jaja +rie. Su felicidad es exagerada para tratarse solo de eso...

Tio Lautaro te cede el 1100, que tiene mas cartuchos por tanda, quedandose con la escopeta 870. Un buen cazador solo necesita un tiro, asevera. La tia desde luego no usa ningun arma salvo sus instrumentos de cocina. Toman las cañas y en pocos momentos estan en el bote rumbo al campamento...

Cazar, cazar, lo que es en sí cazar, propiamente dicho, no es algo que me guste demasiado, pero en este lugar es la única forma que tengo de practicar y afinar la puntería. Dudo que vaya a encontrar en este pueblo que no tiene ni granes almacenes, una galería de tiro. Mejorar es algo que no se puede discutir, se hace si o si.

Me acomodo en la silla junto a tía Rosario, cruzando la pierna y dejando una mano en mi regazo y la otra sosteniendo el café. Parece un crío en día de Reyes... uno de esos malditos críos que están contentos solo por el mero hecho de existir y joderle la vida a los padres. Pero un crío feliz.

Hacía tiempo que no veía a JJ reír de esa manera. El agente Williams es serio. Esa es la fama en el departamento. "Pero sabía reir" pensé " Y sus risas eran mías hace tiempo"

Instintivamente, también esbozo una sonrisa.

- La que me ha tocado no está nada mal. Esta noche nos ganaremos el alimento. Siéntete orgulloso - soplo el líquido y tomo otro sorbo corto, degustándolo. Es especiado y fuerte que me evoca aromas del pasado

"- ¿Y si puede saberse, qué hará hoy,Agente Dalmasi? - preguntó el hombre joven mientras servía una taza de café en la encimera metálica de la cocina.

-  Que curiosidad... Williams - dejando caer tu nombre, divertida - Creo que dos autopsias, un análisis de sangre y una recogida de muestras. ¿Por qué? ¿Tengo que guardarle hueco en la agenda?

- Me refería luego, preciosidad - pícaro tomó el periódico que la chica depositó doblado al lado del plato de tostadas

- ¿Es una insinuación, agente Williams? - falsamente escandalizada - Mmmmm...Este café está delicioso. No hay nada mejor para empezar el día de buen humor que un buen café ¿Colombia? - pregunta

- Colombia - confirma - Y si, es una insinuación, en toda regla. Tengo reservada mesa a las ocho y media en Pomodoro´s, ¿podrás salir antes, Sarah? Por favor... - se ve un tono de suplica implícito

- ¿Por qué... sucede algo hoy? - con un gesto inocente pintado en la cara

El hombre la mira, repentinamente palido e incrédulo. Parece que va a decir algo y hay un leve gesto de dolor que le cruza el rostro. Entonces ella se levanta con energía, termina el café y lo deja en la pila de lavar platos.

- Que si, tonto... que saldré temprano. ¿Como no voy a estar en el primer aniversario? -divertida le da un beso suave en los labios y va a coger una cartera, mientras mira el reloj - JJ, vámonos ya o llegaremos tarde a la oficina.

Él se relaja un poco, pero se nota que aún tiene cierto susto metido en el cuerpo. Con una mano en la cintura, le devuelve otro beso (un poco más posesivo) y se dirigen a la salida de la casa"

- Mmmm.... tía, el café está delicioso. No hay nada mejor para empezar el día que un buen café amargo y cargado - "entre otras cosas, claro" -  Me pone de buen humor ¿Es colombiano?

Te mira algo sorprendida. Se ve obligada a revisar el paquete...

-Mmm... no dice...Pero casi seguro es brasileño, querida. Cuando vaya al mercado me fijo si puedo conseguirte alguno de Colombia, si queres. +acota. Esboza una sonrisa.+ Premio a la valiente cazadora... Me pregunto quien lo llevara mejor de los 3. Lauti tiene mas experiencia pero poco estado, James esta en una excelente forma, y Sarah esta bien en forma pero mejor en intelecto...Ay, que inutil me siento. 

Suspira entristecida, pero la verdad es que entre los dos hombres se ha encendido una mirada de amistosa rivalidad con sus palabras. Los pingos se ven en la cancha... dice el tio, y salen. A las 9 estan en la isla.

Durante el viaje no obstante, sucede un parate. El anunciado por el tio, en ese rancho miserable. Un hombre asoma al llamado del tio "Don JACIIIINTOOO!" Saluda y baja un balde oloroso lleno de grasosas entrañas de pescado con una cuerda y gancho... "La patrona anda enferma, disculpe que no baje!" indica. Tio Lautaro se hace cargo, y en una bolsita pone unos billetes, para luego atarla al gancho. Toda la maniobra tiene un aire de que los dos hombres ya se han entendido muchas veces asi y estan acostumbrados.

Sentada en la lancha, sobre la borda, miraba a JJ. Ahora casi sentía un poco de vergüenza y remordimiento. Como siempre que recaíamos. Esta última vez, ha sido la más espaciada de todas las anteriores. Pero no hay mal que por mil años dure. Y probablemente pasado el mediodía, habremos vuelto a la normalidad.

Todo a flor de piel. Juntos sobre la borda del barquito apoyada de la manera que buenamente se puede. ¿Ha rozado el muslo intencionadamente?

La operación compra de cebo vivo es realmente curiosa y espero que el tío no me de el cubo de vísceras, o prometo vomitar. Esta vez, aunque llevo el vestido blanco precioso, me he puesto unas chanclas de plástico blancas, para poder mojarlas. Se que voy a tener que saltar a la orilla. Y en la bolsita, algo más de ropa y un bikini de más. Y un libro. Pescar es aburrido.

Cruzaba miradas con JJ, que no sabía si decían algo o no.

James esta mas interesado en su rifle y en ti que en la escena, observandolos casi con el mismo deseo y admiracion a ambos. Casi. Los roces que propicia el bamboleo en la lancha son nada comparados a lo que sucedio bajo la ducha, pero aun asi estimulan. El arma no tiene la vida de tu piel, ni la suavidad de tu carne. Todas esas cositas que el estuvo disfrutando.

El balde de visceras es colocado cerca vuestro para que no se vuelque. Principalmente grasa, notas.

-Ahi donde vamos a pescar es donde llega el agua procesada, vieron?+explica tio+ Como sale con jabon o algo asi, a los pescados les encanta. Vos tiras con grasa ahi y tenes que pegarles para que se separen del anzuelo.

James toma nota de sus palabras, absorbiendo el consejo. El si que va metido en la aventura! La tia va mas en el paisaje, y es afortunada de tener el viento en la cara, que aparta el olor del balde. No es tampoco que te llegue de frente pero inunda la parte posterior. Puag...

Ya en la isla, encuentran todo tal y como lo dejaron anoche. Tras una rapida revision, donde confirman las apariencias, bajan las nuevas pertenencias, ropas, armas, municiones, etc... La caza sera de tarde, cuando los animales estan mas lentos, asi que todo esto ultimo va dentro de la carpa. Ahora son las 9 y seria mas dificultoso. En cambio, es buena hora para pescar. Lautaro y James cogen el balde, las cañas...

-Vienes o te quedas?+pregunta JJ, notando el libro. En el campamento se quedara solo la tia Rosario, asumiendo su rol de femenina cocinera... 

Me aparto del cubo de vísceras y eso me hace tener que acercarme un poco más a JJ. Al llegar a la orilla y comprobar que todo es igual, miro la laguna.

- Creo que me gustaría nadar un poco.

No se si eso molestaría a los peces del tío Lautaro. Lo mismo nos quedabamos sin almuerzo. Además, me daba apuro dejar sola a la tía Rosario

JJ Asiente, mirando el agua. La verdad no esta nada mal, tranquila y relajante. El tio no obstante es mas precavido.

-Ojo 'mija con los remansos... El rio parece tranquilito, pero tiene la maña de hacer remolinos abajo, en el fondo de barro. Te chupa, se te enredan las piernas y fuiste. No te metas demasiado lejos.

Con este aviso, los dos parten. El lugar de pesca elegido esta a unos cientos de metros mas al Oeste, en direccion a los edificios amarillos que vieran ayer. Te quedas a sola con la tia, quien apila la leña que cortaran ayer los muchachos en el fogon, preparandose. Tiene una mesa desplegable, donde van las verduras.

Por tu parte tienes un bikini que probar y piernas que estirar. Los muchachos no vendran hasta mediodia, 3 horas de relajacion y soledad. Al parecer, tu ex se acuerda bien las medidas de tu cuerpo, y el color contra tu tez queda de maravilla. En que habra pensado al elegirlo..

Al elevarlo, me doy cuenta que yo no pude meterlo porque no es mío. De hecho tiene la etiqueta. Es precioso, de lazada anudada a los lados de la cadera y superior anudado al cuello, de estos que se llevan ahora, de croché y punto. Y ciertamente, si que recuerda bien mis medidas.

Coloco mi ropa bien guardada en la tienda y salgo vestida con el biquini

- Tía voy a darme un chapuzón y enseguida estoy contigo. No me tardo

Poco a poco entro en la laguna, con cuidadito y no me voy a lo hondo ni nada. El objetivo es burlar el calor

El agua esta deliciosamente fresca en pocos instantes luego del frio inicial. Se siente bien. Si bien su color marron no inspira confianza, es por la arena que arrastra. Estos rios pasan por muchos campos, y todavia les queda largo camino hasta el mar, alla en el Rio de la Plata. Luego de bracear un rato, al mirar la costa notas algo...

La cabeza de algo, del tamaño de un perro grande, asoma entre las altas hierbas. Te mira un instante, pero al notar tu inspeccion, se apresura a huir! Fugazmente notas que la onda en el agua es acorde al tamaño aproximado de la bestia. 

¿Que era? Su forma recuerda un poco a las ardillas, pero una ardilla inmensa ha de ser... Lo viste antes, algun recuerdo de la infancia te lo dice, pero no logras ubicarlo con exactitud. Fuera de eso, el nado es tranquilo, y volves junto a tia Rosario sin contratiempos. La mujer ya ha prendido el fuego, uno pequeñito, que alimenta con lentitud.

Sorprendida, retrocedo un poco pensando que podría ser agresivo, pero al notar como se marcha, nado relajándome durante más de una hora que salgo por una toalla y las chanclas.

- Tía, ¿puedo ayudarte? - escurriendo el pelo que se me está volviendo a rizar en ondas húmedas.

Como buenamente puedo, me quito todo el agua del traje de baño y finalmente me quedo así, para que se seque con el sol y la brisa

- Tengo que confesarte que no soy muy cocinillas.

-Bueno, no te preocupes, tampoco es que hagamos cocina gourmet jaja. +rie, suspirando+ Traje unas papas que vamos a hervir en el anafe, lechuga, tomate, morron, cebolla... Todo eso lo lavamos, corte, vinagre y listo querida

Sonrie, enseñandote las cosas sobre la mes, asi como cuchillo, colador y tabla de picar.

-Y si nuestros pescadores no tienen suertea por las dudas hay salchichas y hamburguesas. Pero no le digas a Lauti, ¿Eh? O va a pensar que dudo de el...

Las ensaladas se hacen en poco rato, por lo que luego podes tirarte hasta mediodia a leer. Es cuando aparecen los hombres. Tio Lautaro carga dos notables presas de buen porte, 3 o 4 kilos cada uno. JJ solo trae las cañas, el balde de cebo, y una expresión de orgullo herido mezclado con diversion... 

Son peces gordos, de varias aletas, y barbas, asi como ancha boca. El tio los alza, exultante.

-Vayan preparando, chicas! Se van a chupar los dedos con unas postas de estos muchachitos... ¿Te animas a desentrañar, Sarah?

Limpio y hago la ensalada con la tía. Eso es fácil. Hasta que llegan los muchachos y sacan esos bichos enormes y feos. Pobre la cara de JJ. Si es que parece un cachorrito herido.

- Claro, dame el rifle y lo desentrañaré - indicando que ni loca

Generalmente pido comida pre-hecha y a domicilio para no tener que cocinar ni mancharme las manos limpiando pescado.

- ¿Todo bien? - amable a mi ex-esposo herido en su hombría, mientras me dirijo a coger el vestido y ponermelo, ya que se secó el traje de baño

-Si... No conozco el río, es todo. +suspira, dejando las cañas, mientras los dos tios van al rio con cuchillos y riendose, a desentrañar los pescados.

Se recuesta cerca del fuego para calentar los pies mojados, mientras sus ojos observan tu figura en bikini, y como la cubres con el vestido. Asiente levemente para si, aprobador a ... ve tu a saber. Frota sus ojos luego, despejandose. Tanto mirarte fijo le va a hacer daño o a tí.

-El tio me hablo de la zona mientras estabamos alla... Parece que vamos a buscar algo llamado "carpincho", y nutrias, para cazar. Se lo que son las nutrias, he visto esos tapados, es algo como una foca de rio. Pero lo otro... Dijo que es como una rata, pero del tamaño de un cerdo mediano. No estoy seguro de que quiera comer ni cazar nada de eso, aunque aseguro que son sabrosos.

- Creo que he visto algo así mientras me daba un baño en el lago. Al principio...me dió algo de grima pero parece inofensiva

Termino de cubrirme con el vestido y me siento en una de las sillas a su lado, cruzando la pierna de forma femenina y metiendo tras mi oreja un mechón de pelo rizado y rebelde.

- ¿Y qué se hacen en cosas como estas?

No estaba acostumbrada a relajarse en situaciones familiares. Quizás por eso no era cercana con la gente ni se sentía comoda, poniendo un muro delante de ella y sus sentimientos.

-No se... hablar... contar historias... sentirse bien. Estar juntos. +responde, y hay un enfasis importante en la ultima parte.

Los tios vuelven con los pescados ya limpios. Es interesante verlos trocear con total tranquilidad, ensartar las postas de carne cruda en pinchos, y ponerlas junto al fuego. Mientras se cocina, Tio Lautaro destapa un vino (la tia agua) que comparte con JJ. Les hablan de la zona, e intercalan cuentos. Quizas por ser ambos extranjeros les cuentan del Embolsadito.

-Dicen que se llamaba Jhony, un marinero gringo... europeo, rubio y muy guapo. Llego cuando el puerto era floreciente a principios de siglo, con un baul repleto de monedas de oro, y se mudo a nuestra zona a vivir como estanciero rico. Pero nada mas llegar, se enamoro de la chica mas linda del pueblo, que resultaba estar casada... Eso le trastoco los planes. La empezo a cortejar igual, y el marido se entero. Era un hombre enorme, fuerte y muy celoso. Para colmo, carnicero. Sorprendio a Jhony una noche que volvia de ver a la muchacha y lo corto en trozos con sus herramientas. Luego lo metio en una bolsa, y esta en un tacho con cemento, para luego tirarlo al rio... Los que saben, dicen que una bruja que admiraba al muchacho lo siguio. No pudo evitar que lo matara, pero mientras se hundia el tacho lanzo un hechizo, en el cual, cuando esa prision se rompiera, Jhony volveria a la vida y podria vengarse... Yo no se si sera cierto o no. Pero en el cementerio de Rincon esta el altar del embolsadito, con el tacho de cemento del que asoman algunos huesos, y los que le suelen rezar, dicen que cuando alguien que ha derramado sangre anda cerca, parece como si se movieran...