Partida Rol por web

La lengua de Lara lucha ferozmente contra la de Mike, mientras ésta desliza sus manos suavemente por debajo de la camiseta del chico para acabar subiéndosela. Termina la guerra unos segundos para poder quitársela, mientras hace que sus botas caigan al suelo silenciosamente.

Mike se levanta un poco de la cama, para que le pueda quitar la camiseta y una vez conseguido.Comienza a besar a la chica en el cuello, despacio,arrastrando sus labios por el.
Despues vuelve a poner su mano en las nalgas de la chica y comienza a subirle el vestido/camison hasta meter la mano por debajo de el,acariciandole mientras seguia levantandoselo mas.

Lara dejaba ir algunos gemidos dificilmente silenciados al sentir las manos de Mike en su cuerpo y los labios de este en su cuello. Ella, mientras tanto, deslizaba una de sus manos por el pecho del chico a modo de masaje, con delicadeza y ternura. Mientras que con la otra se apoyaba en la cama.

Su mano hacía el recorrido de arriba a abajo, y al llegar al pantalón, la chica hábilmente lo desabrocha pero se detiene ahí. Se sonroja levemente e incapaz de mirar al chico a la cara, fija su mirada en el pecho de éste. Yo verás..es que nunca...bueno..he estado a punto pero no me sentía preparada.. ¡Deja de hablar tanto! vamos que soy... Susurra. Dando por hecho que él la había entendido, se queda en silencio, muerta de vergüenza, mordiéndose el labio inferior y con una expresión de inocencia en la cara.

Mike se incorpora un poco en la cama y con una mano levanta la barbilla de la chica hasta poder mirarla a los ojos.

Hey...No te pongas asi,no pasa nada. Yo tambien lo soy. Dice acariciandola la mejilla,con la misma mano.

Pero podemos esperar si quieres.Se levanta un poco mas hasta llegar cerca de ella y la besa suavemente en los labios.

A penas llevaban juntos medio mes, pero Lara no se imaginaba estar con otra persona. Había pasado por esa situación con algunos chicos, pero no sintió ni la mitad de seguridad que sentía con Mike en aquel momento.

Cuando Mike se incorpora, ella, con una rodilla a cada lado del chico, acaba sentada en las piernas de éste. Ese beso fue el último nivel de seguridad que necesitaba. Lo mira algo avergonzada y niega con la cabeza. Después lo abraza por el cuello y le susurra al oído: Hazme tuya... con tono seguro y casi suplicante. Después le muerde provocativamente el lóbulo y continua su juego por el cuello.

Si era con Mike, estaba bien. Tal y como estaban las cosas ahora, si algo ocurría, no quería arrepentirse de no haber llegado a ser una con él. Era lo que sentía en ese momento.

Mike sonrie al escuchar a la chica.Despues se vuelve a tumbar en la cama y pone su mano izquierda tras la nuca de la chica para besarla, mientras que con la mano derecha comienza a bajar la cremallera del vestido.

Sin dejar de besarla comienza a quitarle los tirantes de los hombros, dejando a la vista los pechos de la chica. Ayuda a la chica a quitarse el vestido y despues da la vuelta poniendo el encima y la chica debajo para poder quitarse los pantalones.

Lara ayuda a Mike a deshacerse del pantalón y de la ropa interior, y luego se deshace de lo poco que la cubría y así queda completamente desnuda, algo sonrojada. Después la chica lleva la mano, algo temblorosa al miembro de Mike, acariciándolo y provocándole placer.

Después de protegerse y estar excitados al máximo, Lara se sentía preparada y se lo hizo saber con un fogoso beso. Al principio a la chica le dolió bastante. Tenía las manos en la espalda del chico, donde apretaba con fuerza los dedos. Se mordía el labio inferior para intentar acallar el dolor que sentía. Poco a poco, su cara fue cambiando y ya no mostraba dolor, sino placer: su espalda se arqueaba y le costaba mucho reprimir los gemidos.

Cuando ambos llegaron al clímax, algo exhaustos, y después de deshacerse del condón, se metieron entre las sábanas. Lara se acomodó en el pecho de Mike con una sonrisa, y después de darle un dulce beso al chico cerró los ojos.

Mike se queda mirando al techo, algo sudoroso mientras juguetea con el pelo de Lara, hasta quedarse dormido.

A la mañana siguiente se levanta temprano haciendo el menor ruido posible para no despertar a la chica.Despues de coger ropa limpia de su habitacion se mete a la ducha y baja a desayunas,ya preparado.

Una vez más te introduces en el mundo de los sueños... lo ves todo desde un punto de vista externo, volando. Enseguida distingues a donde estás: Montana. Ves casas aisladas, algun pueblo... incluso un edificio blanco apartado, y finalmente, todo el Campus Universitario.

Sigues volando... hasta que empiezas a aterrizar.

No sabes a dónde te encuentras, ni a dónde estás exactamente, parece un bosque... caminas, como si supieras exactamente por dónde ir, y a los pocos segundos te encuentras con una casa, con una casa medio en runas, pero una casa, al fin y al cabo. Los cristales están limpios, y no hay ni uno roto, a pesar de la casa estar en bastante mal estado.

Tiene un montón de terreno, e incluso puedes escuchar como un rio pasa cerca.

Cuando te fijas, ves salir a alguien de la casa... alguien a quién conoces, no muy bien, pero que lo conoces, al fin y al cabo: Taylor Bennedict, de la Residencia I.

De repente, como si algo te tirara por el jersey, apareces sentada en un sofá... no, en EL sofá, el de la residencia, sin duda. Ves a Mike charlar a quién no llegas a reconocer, hablan algo sobre un... ¿viaje?

- Debéis ir - una voz realmente conocida llego a tus oídos... y giras la cabeza, apoyado a la pared que hay a tu lado, al lado de la estantería. ¿Qué hace él aquí?

Está sonriendo, como siempre que se dirige a ti.

- Debéis ir a este viaje... ¿vale? Todos.

Justo en este momento... todo se desvanece.

Tú corazón late rápido, más por la emoción de haber visto a tu amigo de la infancia en sueños que no por lo que ha dicho... de hecho, no caes hasta más tarde en lo que ha dicho y en todo el sueño en general... también en la casa vista... ¿y Taylor? ¿Por qué estaba allí?

Lara despierta poco a poco. Sin duda había sido una premonición, algo confusa, pero una premonición al fin y al cabo. Sin embargo, esa vez la premonición no le había dejado el estómago revuelto, al contrario, le dejó una buena sensación. ¿Buena sensación? De repente se acuerda de lo de anoche y que está desnuda. Mike no está, pero ahora eso no le importa.

Con una sonrisa en la cara, se levanta y se ducha. Después baja a desayunar.

Lara entra con decisión y cogiendo la mano de Mike. Una vez dentro, cierra la puerta. Y sin soltar su mano, se acerca a él para acariciarle la cara con la otra.

Pero antes de contártelo... ¿he dicho algo malo? Le miraba a los ojos, un poco preocupada.

Mike sigue a Lara completamente seguro de lo que le iba a decir... Cuando escucho la pregunto que esta le dijo, se llevo una sorpresa bastante agradable, no parecia que iba a pasar lo que habia pensado.

Ehm... No se... Dice algo avergonzado. Es que eso de volver a la realidad, sono como que no ibas a querer saber nada de mi...

Lara no se podía creer lo que estaba oyendo. Le abraza con fuerza y luego se separa para mirarle a los ojos.

¿Eres bobo? Como no voy a querer saber nada de ti... Dice acariciando su mejilla. Después mira de reojo a la cama. Lo de ayer, fue lo mejor que me ha pasado, como un sueño. Le sonríe con ternura. Con realidad me refería justo a lo contrario: volver a las clases, empezar a entrenar y a ser conscientes de nuestros poderes y de lo que Genetics nos tiene preparado. Hace una pausa mirando al suelo. Pero luego vuelve a elevar la vista.

Pero tú...eres mi fortaleza. No me he derrumbado gracias a ti. Quiero que estés en mi vida. Le besa dulcemente.

Mike abraza devuelve en abrazo a Lara y vuelve a sonreir aliviado. Normalmente le costaba relacionarse con la gente y si su relacion con Lara hubiera terminado de la forma que el creia iba a ser dificil que volviera a confiar en una chica.

Me alegro de escuchar eso... Y espero que sea verdad y si necesitas algo, cuentes conmigo. Besa de nuevo a la chica y abre la puerta para bajar.

Ahora tengo que bajar, porque tengo clasa dentro de nada... No como otras. Dice sacandola la lengua.

Lara se queda con los ojos abiertos por la rapidez y cuando el chico sale de la habitación, ella suspira y también se dirige abajo. Pero con más calma.