Partida Rol por web

Kenya se para delante de la casa, observándola minuciosamente... Se mantiene un paso detrás de B, esperando a que actúe.

Me acerco a la casa y llamo a la puerta.

Nadie abre.

Pero un furgón negro para justo delante de vosotros y de él bajan tres personas. Un hombre que se parece mucho al Profesor Phelps y dos militares.

Espero en la puerta de la casa esperando a que el profesor se acerque a decir algo.

Kenya se esconde bajo su capucha y detrás de su flequillo. Se pone algo nerviosa al ver a los militares... pero se mantiene detrás de B.

Se acercan a vosotros.

Vaya, vaya... ¿Así que vosotros sois estudiantes de la universidad a la que enseña mi hermano...? - coge una libreta, no llegáis a ver qué hay escrito, pero os mira a vosotros alternivamente y luego a la libreta de nuevo - Kenya y Bell...

Mira a los militares y le hace un movimiento de cabeza a uno de ellos, sonríe - Coge a la chica y súbela al furgón, con cuidado, no queremos hacerle daño. - mira a B, sin dejar de sonreir, el militar que tiene al otro lado eleva la arma y lo apunta - Y tú será mejor que te estés quieto, te aseguro que no me importa tener que dispararte - señala al hombre que lo apunta - tiene el Don de borrar la memoria

Antes de nada:

B, si intentas usar tu poder (que li intentarás) un dolor insuportable se apoderará de tu cabeza, y no podrás hacer ningún poder.

Kenya mira al "señor" asustada. Desvia alternativamente la mirada de B a cada uno de los 3 hombres que tienen delante. Se agarra a la chaqueta de B. Traga saliva. Niega con la cabeza.

En un momento, la expresión de su rostro vuelve a cambiar. Ya no está asustada (o no lo parece...), se muestra completamente fría.

Suelta a B y se acerca al furgón ella sola. Hace un gesto para soltarse del hombre que se hacerca a ella.

Dirige una última mirada a B... una mirada tranquilizadora.

Levanto las manos.
Todo está bien; tranquila Kenya.

Bajo la mirada del que parece ser el gemelo del Sr. Phelps, Kenya entra al furgón. El militar que la acompañaba cierra la puerta detrás de ella.

Puedes estar tranquilo, Bell. Tu amiga estará bien, no le haremos nada - sonríe entre divertido y con frialdad, se gira después de hacerle un breve movimiento de cabeza al militar que lo estaba apuntando - Vamos.

Antes de que lo siga, el hombre levanta la arma y la deja ir con fuerza y con un sonoro golpe a la cabeza de B, provocando que éste se caiga al suelo... Inconsciente.

Kenya fuera de escena.

Entras dentro el furgón. Está todo oscuro, no hay ventanas, solo una pequeña bombilla que ilumina levemente la estancia...

Tu móvil no funciona, está sin cobertura.

Dirías que pasen un par de horas... Antes de que abran la puerta y te pongan una bolsa negra a la cabeza, piensas que quizá te quieran ahogar, pero no la apretan. Escuchas un ruido de alguna puerta abrirla y te empujan dentro de lo que parece ser otro furgón... O algo parecido.

Kenya se mantiene callada durante todo el trayecto. Está claro que no va a sacar nada hablando con ellos. Está demasiado nerviosa como para mostrarse fría si intenta hablar.

No lo entiendo... no hemos hecho nada, ¿no? Yo ni siquiera sabía quien era ese hombre... el más informado era B... ¿Porqué no le han cogido a él? Quizá... no... no puede ser... deja de desconfiar de los demás, B no puede haberte llevado a una trampa. Linds te dió una buena lección aquel día al hablar de Él... Tranquilizate... no ganarás nada así...

Intenta sentir algo de su entorno. Algun sentimiento ageno, alguna sensación... alguna planta o arbol que esté cerca...

Empiezas a despertarte, te notas cansado y agotado... Y te duele la cabeza, como si te hubieran golpeado con algo muy fuerte. Ahora lo recuerdas, te han golpeado con algo muy fuerte. Tardas unos segundos en recordar todo lo que ha pasado.

Abres los ojos, poco a poco, todo a tu alrededor es blanco, ¿has muerto?

Por fin te despiertas, ¿cómo te encuentras? - giras la cabeza... No, no has muerto, estás a un hospital, y la enfermera te está hablando, empieza a mirarte las pupilas de los ojos, y comprueba tus reflejos a partir de las rodillas - Te han llevado aquí una pareja hace unas tres horas... Estabas tirado a la calle, alguien te golpeó a la cabeza, ¿recuerdas algo?

Ehm... No... Absolutamente nada...
Miro alrededor.
¿Dónde me encuentro?¿Cuándo podré volver a casa?

La enfermera te sonríe.

No tienes nada, simplemente un leve golpe en la cabeza. Pero si no te acuerdas de nada vamos a tener que hacerte más pruebas y puede que te tengas que quedar aquí más tiempo. ¿Estás seguro que no te acuerdas de nada?

Sí, perfectamente... Ya recuerdo...
Me levanto de la cama.
Creo que debería marcharme ya... Muchas gracias... ¿Hay algo que deba hacer antes de irme?

La enfermera te mira levantando la ceja.

No, nada, estás perfecto. Puedes irte - sonríe, aunque te mira preocupada.