Partida Rol por web

Herkus frunce el ceño y entreabre los labios... Pestañeando incrédulo.

- ¿Y... Yo? - traga saliva, mirando al resto, viendo venir una metida de pata inminente por su parte - Yo no... No siquiera hablado bien inglés... Yo no bueno hablando, soy vagabundo... Ésto cosa tendría que desirla Donovan, Michael... - repara en una escrutadora mirada de Antti y devuelve la vista a Lior, que no le quita ojo de encima - No... No sería bueno companiero si tuviese que... - aprieta los dientes... El momento es ideal para no acordarse de las palabras adecuadas en inglés... Idealmente horrendo - No puedo yo sólo desir porqué bueno uno o malo otro... No sería... - suspira - Donovan. Tu sabes que quiero desir, ¿no? Yo no hablado bueno inglés pero tú entiendes mí... - asiente con la cabeza, mirándole - ¿Cuáles son palabras...? - dedica una mirada grave a Donovan.

Herkus guiña el ojo a Donovan con suma discrección. Sabe que es mucho mejor orador que él mismo... No sólo demostrarían complicidad y compañerismo frente a Lior, sino también ante el resto de compañeros... Quizás eso les inspirara un poco de "sentimiento de manada"...

- [ES]Por favor que no la caguen, que no la caguen, por favor, que no la caguen, por dios, por la virgen y por todos los muertos de Cristo, que no la caguen... ¿Porque coño ha elegido al muerto de hambre para hablar? ¿Es que su palabra vale mas que la de alguien que no duerma encima de cristales de botella? Joder[ES]
Rezo a todos los santos que me esten escuchando ahora mismo porque Donvan no lo joda todo. Menos mal que tengo a Maria al lado para hablarle en español. Le cuento todo lo que hay en voz bajica y termino
- [ES]Y ahora si tu Romeo la caga despues que el otro le haya colgao el muerto, somos todos cadaver.[ES]
Me acerco un poco a Donovan y le susurro
- Esta escena solo la puedes rodar una vez, y el Oscar es la vida de todos...

Buenas tardes
Responde Donovan al saludo de Lior con bastante buen humor en el tono de voz.
Luego escucha atentamente las palabras de la chica fría como el hielo que los rodea y se estremece bajo su ropa, apretando un poco a la niña contra sí, intentando que la gelidez que deprende Lior no le llegue.

Capta la insinuación de Herkus y al momento comienza a hablar, tras haber captado también el mucho menos discreto ánimo por parte de Balaguer.

Donovan Dryden, un placer conocerla al fin.
Se adelanta un par de pasos al tiempo que se presenta, sin reverencia o gestos de saludo, esperando que la mujer entienda que carga con un bebé dormido. Y si no lo entiende, tampoco es su problema. Es lo que hay.
La explicación del porqué de esta situación es mas sencilla de lo que parece, aunque las circunstancias que nos han ido trayendo hasta aquí son harina de otro costal... Si le parece bien le relataré en primer lugar esa pequeña historia y mas tarde, cuando pueda juzgar los hechos por usted misma, le diré, desde mi poco humilde -pero válido- punto de vista, porque merecemos todos la cura.
Coge aire y abandonando por completo su tono teatral, opta por exhibir una completa y demoledora sinceridad.
Todo comenzó cuando llegamos al aeropuerto de Estocolmo. Allí fue donde nos vimos la mayoría de nosotros por primera vez. Tras un viaje realmente duro, los militares comenzaron su acoso en las mismas puertas de desembarque. Una serie de medidas de seguridad mas tarde, estábamos en las puertas de salida, donde de nuevo fuimos acosados por los militares. Un malentendido estuvo a punto de costarnos la libertad, pero creo, cosa que no puedo afirmar por completo, que nos libramos gracias a un conjunto de actuaciones, de las que las mas destacables son las de maría y Michael.
Los señala a ambos con un gracioso gesto de la mano y les dedica una sonrisa de gratitud que hasta ese mismo instante estaba guardando.
Aunque debo reconocer que Michael actúo de forma un tanto egoísta mientras que María fue todo altruismo, gracias a ellos dos estamos la mayoría de nosotros antes usted en este momento.
Se encoje de hombros y continua.
Mientras decidíamos que hacer y a donde ir -refugiados bajo un árbol-, una vez fuera del aeropuerto, Rewell, mi hermano mayor, apareció para invitarnos a acompañarles - a él y al grupo con el que viajaba- en el viaje hasta aquí. Las cosas se complicaron de nuevo cuando Art y Taylor, los chicos americanos, decidieron que eran capaces de hacer las cosas por si mismo y que no nos necesitaban al resto para absolutamente nada. Tras un pequeño altercado, logramos llegar todos hasta la caravana propiedad de Lex. En ella encontramos al primer herido, Antti, cuyas heridas son anteriores a mi llegada, pero que aún siendo tan graves como parecen, no le impidieron conducir hasta dejarnos a todos a salvo en la segunda señal.
Señala a Michael esta vez con un gesto un tanto sombrío en la mirada.
Los pequeños altercados que tuvieron lugar antes de llegar hasta nuestro destino fueron en parte responsabilidad de este hombre, Fauchon, que teniendo una idea equivocada de lo que es la protección, decidió actuar por cuenta propia para salvaguardar la integridad de algunos de sus compañeros en detrimento de otros de ellos a los que consideraba peligrosos. De este modo y por culpa de un desliz de mi hermano -que hizo gala de su naturaleza mutante delante de la escuadra que guardaba las puertas del aeropuerto-
Niega un par de veces y en sus ojos se puede leer un claro: "No tiene remedio"
Hubo un enfrentamiento entre esos soldados y Art -Aseguraría que obligado por Michael- y Rewell. A su favor debo decir que salieron ambos dos indemnes no solo gracias a sus propios méritos, sino también a la intervención de Arthur.
Hace una pequeña pausa para reordenar sus pensamientos y retoma el hilo de la historia.
El viaje comienza entonces y cada uno toma la decisión de ir a lo suyo. Debo acotar que nadie se preocupó lo mas mínimo por nuestra extraña y desventurada situación. Al parecer... A nadie le preocupaba demasiado tener el virus. Por lo menos hasta que Falken no dio a todos una pequeña lección sobre lo que nos esperaba, intentando inculcarnos a todos un poco de sentido común. En algún momento entre nuestra salida y nuestra llegada, Michael volvió a considerar que Art Connor sobraba en el grupo... así que le ordeno que saliera. La vida de Falken se habría acabado en ese mismo instante, pues Art, fuera de sus cabales, estuvo a punto de matarle de un golpe que arrancó la puerta del vehículo de forma impresionante... Gracias a Hugo -al que le reconozco el mayor mérito de todos nosotros detrás del de María- nuestro afectado compañero sigue entre nosotros. El salvó el día. Sin duda alguna.
Le dedica un gesto de cabeza a Hugo, de nuevo expresando gratitud.
Al final, tras un par de discusiones, logramos llegar hasta la cabaña, donde conocimos a Balaguer. Nuestro anfitrión estableció un orden de entrada y ducha. No se en que se basaría, pero así lo hizo.
Se encoje de hombros no solo como si no conociera el motivo, sino como si le importara bien poco.
Un par de nuevas discusiones, esta vez suscitadas por mi hermana, Jolene Dryden, -de la que Balaguer está enamorado- que intentaba asegurarse gracias a su poder de quien podía o no fiarse, nos retrasaron de nuevo... Tras entrar todos en la cabaña la tensión era claramente demoledora. Se podría decir que se podía cortar con cuchillo y untar en tostadas para el desayuno de decenas de personas...
Esboza una sonrisilla ante la broma que acaba de hacer, sin necesidad que nadie mas la ría o sin considerar si es un buen momento para ese tipo de comentarios. Nadie ha querido hablar y le han pedido que sea el quien de la cara. Alguno se estará arrepintiendo. Pero si se les ha pasado por la cabeza que podrían mentir a la mujer que los ha reunido a todos... eran mas inocentes de lo que podría llegar a pensar.
Durante nuestra corta estancia en la cabaña de Balaguer se produjeron nuevas disputas y peleas. Una de ellas fue provocada de forma inconsciente por mi, ya que al dedicar una sonrisa a Lex, Herkus, su novio, actúo movido por los celos, dispuesto a golpearme. María saltó al instante para defenderme y fue quién recibió el golpe. Los poderes de Herkus se descontrolaron y se produjo una situación tan cómica como catastrófica cuando Falken cayó sobre Lex y esta a su vez sobre Art. Una bombilla estalló sobre ellos y una pequeña llama prendió sus pantalones, provocando esas terribles heridas... Que por otro lado podrían haber sido peores sino hubiéramos intervenido Hugo -de nuevo, siempre está donde hace falta- Taylor -sorprendiédonos a todos por su iniciativa- y yo mismo. Aunque poco fue en lo que pude ayudar.
En su rostro se puede ver con total claridad que aunque hizo todo lo que pudo en ese momento y lo volvería a hacer, no quiere ningún mérito especial por ello.
Las cosas después de ese momento se suavizaron un poco y algunos tomaron la decisión de hacer de comer. Cosa bastante necesaria. Así Alice, Sven y de nuevo Hugo, ayudaron en todo lo que pudieron para hacer la estancia lo mas cómoda posible. Pero de la nada apareció mi pequeña Amber, aterida de frío y con sangre en el pelo. Al instante Sven se lanzó a recogerla para comprobar que no estuviera herida. La sangre no era suya, pero su madre, mi hermana, no estaba en ninguna parte. Decidí tomar mi turno en el baño y malgastar todo el tiempo que necesitara en él para tranquilizar a la niña, que al parecer vio como su madre era atacada...
Llegado a este punto frunce ligeramente el ceño y baja la cabeza. Parece que está conteniendo las ganas de volverse para lanzar una mirada un tanto furibunda a cierto hermano mayor.
A la salida del baño y estando aún si vestir, con la niña en brazos, Marcos, el chico perturbado que no habla, movido de nuevo por una especie de celos, nos atacó a mi a mi sobrina. No tuve tiempo de reaccionar. En este momento estaríamos muertos. Los dos.
Se vuelve hacia María y esta vez no hay sonrisa. Se acerca hasta ella y la abraza con su brazo libre, sin importarle lo mas mínimo que lo que Lior pueda pensar sobre esa falta de respeto.
[Fr]Muchas gracias María. No hay nada en este mundo que pueda compensar lo que has hecho hoy por mi familia... Pero si alguna vez necesitas cualquier cosa, lo que sea... Te juro delante de todos que haré lo que esté en mi mano por conseguirlo[/Fr]
Dicho lo cual, vuelve de nuevo a su posición original para seguir con la explicación.
Aunque todos actuaron lo mas rápido que pudieron -Art y Hugo me volvieron a sorprender. Sobretodo Art, que aún teniendo una horrible herida en una de sus piernas... Fue capaz de levantar un sofá para interponerlo delante nuestra y así protegernos de los cuchillos que Marcos mantenía en el aire para lanzarnos- fue María quien nos salvó.
Vuelve esta vez la cabeza y le guiña un ojo a la española de forma cómplice para enfatizar la promesa que le acaba de hacer.
En ese instante, habiendo recibido ya un bofetón por error de Mrtymer y un puñetazo directo al estómago de Marcos, no me encontraba en condiciones de continuar en peligro constante, así que decidí que era un buen momento para irme a la cama con Amber... Y desde ese momento hasta ahora solo han pasado unos minutos.
Toma aire y los expulsa en forma de largo suspiro.
Los huecos que faltan por rellenar son responsabilidad de mis compañeros, pues no puedo inventarme que es lo que ha pasado en los lugares en los que no estaba y prefiero que sean ellos quienes cuenten sus partes de la historia...
Mira a Lior esperando la reacción de la mujer, pero en ese momento decide que es mejor responder a las preguntas que ha formulado... No por nada en especial, sino porque una vez que Donovan ha empezado a hablar es difícil pararle.
¿Por qué algunos de nosotros están heridos? Creo que lo que he contado ha dado respuesta a esa pregunta: Art, Lex y Falkes fueron presa del poder descontrolado de Herkus. Antti ya venía herido, imagino que de un accidente. Jolene ha sido atacada en el bosque por otro mutante. Yo he sido golpeado varias veces. Arthur sufrió un brote bastante virulento de la enfermedad que fue detenido por Balaguer. Michael sufrió el impacto de un aerolito de hielo en la cara... Y Marcos... No se que le ha sucedido... Pero parece drogado... Y esa es la respuesta a la primera de sus preguntas. La segunda... Bueno. Los que van en brazos son los heridos... Salvo en el caso de Jolene. Balaguer, como ya he apuntado, ha caído preso de los encantos de mi hermana y considera que es un acto de caballerosidad llevarla en brazos.
Hace un par de movimientos con la cabeza, hacia los lados, para liberar la tensión de los hombros y el cuello. Parece algo cansado, quizá los golpes que recibiera, el uso excesivo de su poder durante demasiadas horas seguida y la falta de sueño le están pasando factura... Bueno, realmente el quizá sobra de la suposición anterior.
También he hablado de mis compañeros... Aunque quizá debería añadir un par de cosas. Cada uno de nosotros pertenece a un ambiente claramente distinto al de los demás. Cada uno de nosotros ha pasado por experiencias y ha tenido una vida mas o menos sencilla que ha ido marcando nuestras personalidades. Algunos de nosotros no encajamos con otros y eso produce ciertos roces que pueden llegar a ser muy peligrosos... pero también es cierto que todos queremos esa cura. Todos, por los motivos que sean -desde el egoísmo de Michael pasando por el altruismo de María o Hugo- queremos esa cura. Muchos de nosotros tenemos esperanza. Otros nos queremos rebelar contra el destino o la propia muerte. Algunos les tenemos miedo al dolor y el sufrimiento... Incluso los hay que quieren cambiar el mundo... Sea como fuere, merecemos esa cura. No porque seamos mejores que nadie. No porque estemos por encima de los demás. No porque seamos mas poderosos, mas tenaces o un grupo mas sólido... Sino por todo lo contrario. Porque somos personas. Porque estamos vivos. Porque tenemos sentimientos, pasiones, fallos, errores, amores, odios, impulsos... Porque somos todos diferentes pero en el fondo nos une lo mas básico. Todos y cada uno de nosotros somos humanos. Y no queremos morir.
Entrecierra los ojos después de terminar su apasionado discurso. El relato de los hechos ha sido mas o menos frío, analítico. Pensado para parecer sincero y real, pero omitiendo ciertos detalles de poca importancia o demasiado desagradables... Pero este final... ha sido lo mas Donovan Dryden que nadie ha visto en mucho tiempo. Ni las cámaras. Ni sus amigos o familiares. Ni siquiera Luc Uliel, la piedra angular de toda su vida desde la adolescencia.
No se trata de si merecemos esa cura y la vida. Se trata de si merecemos morir... Y eso no se lo merece nadie.

La figura de Lior intimida algo a Mortymer, pero aun asi, le inspira seguridad y una puerta de esperanza... No como sus compañeros. Escucha las palabras del nervioso Herkus que busca la ayuda de Donovan, asi que el chico espera que este se la preste.

Con el rostro sereno mira un segundo a Balaguer cuando este habla en otro idioma con toda la tranquilidad del mundo - empezamos bien... ahora este habla en otro idioma delante de Lior... geeeenial... primera falta de educacion - piensa con fastidio

- Buenas tardes... - musita educadamente Alexa desde su posición al presentarse la británica.

Sufriendo al ver a su pareja angustiada y entre la espada y la pared, le frota suavemente el pecho con una mano con la intención de darle ánimos...

Vamos, cielo... Vamos, no estes nervioso...

Viendo a Lior, esta más que segura que ésta sólo va a querer la respuesta del vagabundo, ya que es a quien ha preguntado... Pero aún así la situación es insufriblemente tensa, y la dramática herida resultaba una anestesia contra los nervios, otorgándole el valor para abir la boca, cogiendo aire con la intención de hablar, pero Donovan es quien se adelanta y lo hace primero...
Observa a Lady Lior de arriba a abajo, atenta a su posible reacción de mandarlo a la mierda: una mujer bellísima, elegante, con escasa joyería a pesar de su estat...

(...) ¿¿EEEEEHHHH??

Derrepente la húngara abre los ojos cual niña del Exorcista con la mirada fija en el medallón que cuelga del cuello de la británica, atónita a lo que ve... No puede ser.

Me... Me, me me... - se vuelve hacia el colgante de Herkus, entrecerrando los ojos y analizando su medallón, después el de la monja. Luego mira a la monja, el medallón, la monja, el medallón de Reisel, y finalmente clava una mirada estupefacta en su novio, al que da un par de toquecitos pausimónicos en el pecho, señalando su colgante con la mirada, pestañeando... O no se lo cree, o tiene miedo de decirlo... o deben de haber colado una cámara oculta desde que empezaron el viaje. Sea como sea, empezaba a explicarse el por qué de haber elegido a Herkus para hablar...

"Ugh... Que ajetreo ¿Es que ya es de dia?." De repente abro los ojos y empiezo a sentir mi alrededor, no consigo asimilar del todo esta escena. Al parecer habia pasado de estar en la cabaña y en los brazos de Maria, a estar en plena escapada con maletas y todo, y entre los pechos de Maria, como si fuera un muñequito de feria.

Iba a decir algo, hasta que vi algo que realmente me saco de mi sueños y me trajo a un mundo de pesadillas. Ahi delante habia una bruja, una bruja sin piel verde y arrugas, pero aun asi una mujer que podia aterrorizar niños pequeños y con una mirada que sugeria haber repasado parrafos que gente normal no deberia leerlos sino quieren acabar ciegos y locos.

Y de repente, como si el instinto me ordenara hacerlo, me olvido de los demas y empiezo a analizarla. Todos los sentidos gatunos se centran en descifrar la verdadera personalidad de aquella bruja y que sentimientos ocultaba detras de ese gelido rostro.

Lior escucha atentamente a Donovan sin apartar los ojos azules cual glaciares del muchacho, pestañeando largamente de vez en cuando pero sin variar la expresión en absoluto.

Mira a María y al gato en tantas cuantas veces son mencionados... Al resto no les presta demasiada atención, salvo a Lex, a la que le hunde una mirada escrutadora cuando la señala.

El resto del tiempo observa únicamente al joven Dryden. Cuando éste acaba, sonríe de nuevo con aquella incómoda e indescifrable sonrisa.

- Un discurso vehemente a la par que natural... Pero yo no recuerdo haberle dado pié a que hable, aunque su compañero, el señor... Herkus... Reisel, así lo haya hecho - alza un poco la mirada, entre altiva y analítica, observando al resto... - Conozco las andanzas de Balaguer y Connor... Pero no las del grupo de la caravana... - Observa a Antti, de nuevo adquiriendo una seriedad mortal en el gesto - No se me ocurriría dar la palabra a aquellos que tengan ese don natural... De manera que descarto a Falken y a la dulce Alice Doyle para que relaten cuáles son las lagunas en la historia del señor Dryden... Tampoco a los héroes altruistas... No quiero un relato pasional - niega con la cabeza - ¿Cómo fué ese golpe, señor Koivusaari?

Taylor escucha con atención las palabras de Donovan. Es imposible distraerse ante esa voz hirientemente melodiosa, la pulcritud de sus formas y su embaucadora dicción. Su perfección es absolutamente odiosa.

De todas formas, y a pesar de la dulzura empalagosa del discurso, Taylor no puede evitar ponerse en el pellejo de Lior y, sabiendo lo que sabe, se echa las manos hacia atrás y cruza los dedos:

¡Hostias! ¿Ha pasado todo eso? Joder..., parece que llevo semanas viéndoles los caretos a esta jodida piara!- piensa, negando con la cabeza.
¡Menudo discurso! ¡Te habrás quedado agusto, hijoputa! Si es que...parece una partida del "Worms Armageddon" en vivo!.

No sé que pretendes colega, pero la sinceridad brutal nos va a mandar a todos al agujero.

Antti, ya un poco cansado y sedado por el dolor de su ceño, que le cargaba toda la zona superciliar, sonrió un poco ante la pregunta de Lior.

- Me... El puto taxi en el que viajaban Sven y los demás se me cruzó delante yendo en la caravana... La... Caravana... Era una puta mierda y no tenía airbag... Así que me la metí contra el volante jodiéndome vivo... Je... Y... Tiene gracia: Por que los mariquitas éstos no se hicieron NADA yendo en el puto taxi...

Traga saliva, tambaleándose un momento y forzándose con un paso atrás en mantenerse de pié.

- En serio...: Si no fuéramos los mejores... No habríamos sobrevivido los unos a los otros. Sólo falta... Comunicación y unas clases de idiomas.

Lior pone los ojos en blanco al escuchar hablar a Antti, relajando los hombros y mirándoles a él y a Falken como si fuesen casos perdidos.

- Menos mal que os dijimos a los "infiltrados" que no os metiéseis, que os mantuvierais al margen y evaluarais objetivamente... Todo para que Falken se ponga a hacer discursos moralistas sobre el Ígnea y tú te juegues el pellejo (como siempre) gratuitamente... - resopla - ¿No podíais ser un poco más... Distantes, como vuestros compañeros, por ejemplo...

Falken abre los ojos y mira a Antti, éste dibuja una "O" en su boca, indignado, devolviéndole la mirada y tragando saliva, como callándose algo.

Sven suspira y finalmente habla.

- Ninguno ha sido objetivo, Lior: A Falken le perdieron rápido los ojillos negros de Alice y se chivó pronto, a Antti como siempre le pudo el instinto "jackass" y lo mismo: "Ojos tuyos morena", solo que con Alexa y Jolene; Arthur igualito con Jolene, y hasta se puso a meter miedo en la comida.

- ¡Eso era una prueba de reflejos, profesor...! - le espeta Arthur Hayes, mirándole con el gesto torcido.

- Lo que tu digas - pone los ojos en blanco y los aparta a un lado, para de nuevo dirigirse a Lior - Y como colofón, Renka ha matado al mutante que intentó violar a Jolene. Era un Infectado, creo. Además: Descuidamos todos al grupo en algún momento.

Renka se encoge de hombros, como quien dice "es lo que hay".

- Chivato de mierda - le espeta Antti.

- Se habría enterado tarde o temprano - se encoge Sven de hombros, nuevamente - Pero por cierto... ¿Dónde diablos está Kramer?

Herkus palidece al oir hablar a Antti, quedando boquiabierto.

- Antti... - le dice - Me... ¿Me estás disiendo que ésto sabes desde prinsipio...? - parece ansioso - Has... ¿Has dehado que sufriéramos esa noche en tu casa pensando que podía pasarte alguno cosa...? ¿¡Dehaste que me persiguieran con esas heringuillas por Vilnius, Antti...!? - los ojos del lituano se empañan de lágrimas y decepción mirando los de Koivusaari - Dehaste... ¿Que ese coche se estreiara...?

Antti se mantiene firme, mirando al horizonte más allá de Lior, sin devolver siquiera la mirada a Reisel...

Donovan observa el "supuesto" final de la pequeña charada del grupo con una sonrisa torcida en los labios y una mirada suspicaz, sin perderse detalle de nada.
No se de que te sorprendes Herkus... Estaba claro que alguno de ellos tenía que estar vigilándonos. Lo que no me esperaba es que fueran todos ellos... De Renka me lo olía... No creo en las casualidades, como ya le dije a Michael el día que supimos que ambos teníamos una carta de ella... Y Jolene llegó muy convenientemente acompañada por Arthur... -estará Morty en el ajo... ¿o es demasiado tonto?- No me lo imaginé de Antti, la verdad... pero ya ves, como son las cosas... Falken era obvio... Los horrores del virus andando libremente por el mundo... Y un médico muy conveniente... por si acaso... Y para mas conspiranoia... familia... ¡¡que bien montado!! ¡Yo quiero ser gancho para la próxima!... Si es que la hay, claro.

Alexa olvida el asunto del medallón para pasear la mirada por todos los presentes, sorprendida. Infiltrados... De Falken se lo habría esperado, de hecho es del único que se lo habría esperado, pero lógicamente del que más se sorprende es de Koivusaari... Traga saliva, apartando la mirada de éste último y suspirando... No dice nada, sino que se limita a escuchar atenta, con ceño fruncido, tragando saliva nuevamente... De nada servía ponerse a discutir ahora. Habían sobrevivido y habían llegado a Lior... Eso era lo principal.

Al oir las ultimas palabras, no puedo evitar salir del calido lugar en el que estaba y saltar al suelo. Para cuando ya habia aterrizado, ya era un humano bipedo y desnudo como una mona. No le preste mucha atencion a ese detalle, ya me habia acostumbrado ir en bolas siendo gato y no era momento para buscar calzoncillos y pantalones.

-Señora Lior.- Dije serio pero haciendo una breve reverencia a la bruja.- Con todos mis respetos, no me interesa para nada verla regañar a sus infiltrados, ni oir como mis compañeros se ponen a pensar que son unos traidores...- Desvio la mirada brevemente, pensativo.- Aunque no veo porque, ya que ellos se han arriesgado tanto como nosotros.- Vuelvo a mirar fijamente a la bruja.- Lo que me gustaria, es poder oir que si nos van a dar la cura y que tenemos que pagar por ello. Despues de todo, este cuestionario es una perdida de tiempo...- Los ojos se fijan mas y empiezo a sonreir levemente.- ¿O acaso niega que no hace tiempo que nos vigila y ya ha evaluado si somos validos o no validos?

Ahi vamos, no solo nudista, sino ademas bocazas. Tenia que reconocerlo, dentro de mi habia un pequeño masoquista que me incitaba a meterme en situaciones en que las feminas, al final, estaban tentadas con darme una hostia y cerrarme la boca.

Comenzando por Donovan, con su gran discurso, paseo la mirada de uno a otro de los interventores, menos por la de Lady Lior. Esa mirada no puedo soportarla, ni de coña. Pero la conversación va demasiado deprisa, forzándome a poner en ella toda mi atención y mis sentidos, para captar todo lo que se dice. Con el ceño fruncido por el esfuerzo y preguntándome cómo debe sentirse la pobre María en una circunstancia como esta, que incluso a mí me cuesta captar, termino de darle vueltas a la cabeza, sintiéndome orgulloso y satisfecho conmigo mismo. Primer punto: Hugo. Gran tipo, ha salvado a mis hermanos y las situaciones varias veces, debo apuntarme un agradecimiento sincero a la lista, igual que para Lex y Herkus, cosa que ya pensaba hacer pero no se ha podido porque se fueron a dormir muy rápido. Segundo punto: Rewell, cacho de carne, la próxima vez aunque tengas que tragar mierda te vas a quedar detrás de tus hermanos por si pasa algo, mongolo de mierda. Vaya forma de ejercer de hermano mayor y tío... Tercer punto: Infiltrados. Falken, Antti, Renka, Sven y Arthur. Más que nada porque el último ha llamado "profesor" al penúltimo. Pero si el tal Arthur es un mafias... ¿Qué coño es Sven? ¿He viajado durante una semana y poco más con un Padrino, o algo así? No me toques los cojones...
Terminado el análisis, observo a Herkus. Pobre tipo... sí que le ha jodido lo del capullo de Koivusaari, que según se ve pasa de todo hasta el culo... Aunque podría no ser más que una simple pose de tío guay y ultra duro. Sin embargo, la duda me asalta rápidamente... Renka. ¿Estuvo todo el rato fingiendo o de verdad piensa de Jolene todo lo que me dijo? Tuvo que ser verdad, lejos de lo que haya podido pasar aquí... No, no debería desconfiar de ella... Agacho la mirada, que no la cabeza, nuevamente, esperando a que Lady Lior retome sus explicaciones, reprimendas, elecciones o lo que tenga que hacer. Sólo espero, confío y deseo que al menos permita a mis hermanos y a mi sobrina pasar a donde sea que tengan que hacerlo... Lo demás poco me importa. Pero eso sí, siempre sin mirarla a los ojos. Recordar ese rostro lacrimoso sin... sin sentimiento, sin emoción... Me provoca un escalofrío terrible. Observo a Mortymer de reojo cuando espeta a Hugo algo sobre el turno de palabra... Ya estamos otra vez, joder, ya van a volver a empezar...

Cuando Donovan en su ilustrado discurso lo nombra, Mortymer completamente avergonzado se pone algo colorado y musita un - lo siento - el chico aun no entiende que demonios le paso, pero le sigue debiendo una disculpa al chico de "oro". Por lo demas parece mantenerse al margen como escondiendose de Lior por la severidad con la que habla a los "Infiltrados" asi como lo de valorar si merecemos morir o no, puede que esa tia no tenga derecho a ejercer semejantes decisiones... pero por desgracia tiene los recursos y la frialdad suficientes como para hacerlo.

Mira al desnudo Hugo y como sin pelos en la lengua suelta todo eso - genial... - ¿Es que no habeis oido que esta pidiendo turno de palabra? No os adelanteis... - les espeta en voz baja pero audible asustado por la posibilidad de quedarse en la cuneta

Escucho las intervenciones sin decir nada por ahora, puede saberse mucho mas escuchando que hablando y si tengo que hablar cuanto mas tarde mejor, pero no puedo evitar menear la cabeza en un gesto de negacion cuando escucho a donovan

Todos somos egoistas, tu puto problema es que piensas que tu grupo es todo el genero humano

Lior parece impregnar su mirada con cierta humanidad cuando ve a Herkus consternado, traga saliva y atiende forzándose al resto del entorno, para encontrar con impasibilidad la figura de Hugo desnudo. María alzó las cejas, se puso colorada y miró a otro lado, no sabiendo en absoluto de qué iba la película.

No obstante Lior sonríe ante lo que comenta Hugo. Se trata de una sonrisa de completa aprobación, y aún así asiente a lo dicho por Mortymer.

- Qué alegría ver que alguien escucha y no se envalentona...

Cierra el paraguas y se lo cuelga del antebrazo, sonriente.

- Supongo que con un poco de labia conseguiréis que Ella os de las habitaciones individuales y a tí el inductor, Falken... Pero dejad hablar a Adrien, por favor... Por vuestro bien, una vez más - les dice a los infiltrados.

Mira entonces a los demás, suspirando.

- Muy bien, muchachos y muchachas... Conmigo es relativamente sencillo... Pero la prueba de "hielo" más que de fuego es la Dama, Isenhall. Yo puedo hablarles perfectamente de vosotros, pero no es ni mucho menos idiota... No sé si lo vais entendiendo. Para empezar... Señorita Dryden: Use esas preciosas piernas que Dios le ha dado para caminar sobre el suelo que pisan el resto de mortales, por favor. A su adorador le pido que desista del honor que le debe ser el cogerla... Al menos en mi humilde presencia - sonríe, entre críptica y burlona, para luego mirar a Herkus - Señor Reisel: Yo llevaré a la señorita Czigany, usted cargue con el señor Connor, Koivusaari parece agotado y está herido...

Se adelanta hasta Herkus, y conforme se le acerca, sus ojos brillan más al ver al muchacho, incluso le es imposible reprimir una sonrisa. El muchacho parece no poder escapar a la mirada gélida de Lior, y tragando saliva se la entrega, sin saber muy bien porqué confía la seguridad de su amada a una completa desconocida. Tras eso, con mala cara, Reisel se acerca a Antti y alza la mirada en busca de la de Antti, que con cuidado le pone en los brazos al malherido Art.

Ya con Alexa en brazos, Lior empieza a caminar. Su ritmo es firme y bastante rápido para lo accidentado y difícil del terreno... Complicado de seguir, por lo que inmediatamente se pone en cabeza, a unos cuantos metros de la comitiva.