Partida Rol por web

GELUS VIRICA

[ICEHOTEL] - Hobby Room

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05/08/2009, 19:32
Michael Fauchon (Loki)

yo soy Michael, enchante Respondo a Nadra con un marcado acento frances, aunque mi atencion parece estar mas en la respuesta de Madison

Miro por un instante los preparativos de Taylor y no puedo evitar contestar

parece que vas a tener bastante menos publico del que estas acostumbrado, no he visto a nadie mas viniendo hacia aca

Me aposento en uno de los taburetes junto a la pared, de repente interesado en el billar

Por lo menos la musica esta bien

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06/08/2009, 17:36
[Lex Czigany]

- ¡Madi!

Fue verla y alargar un brazo para hacerse con ella, plantándole un fraternal y sonoro beso en la mejilla a la canadiense. Le devolvió la sonrisa, soltándola de la presa. Adoraba a esa chica - Que guapa y que bien te veo... ¿Todo bien? - aquel chichón sospechoso la alarmó un poco, aunque dirigió la pregunta también a Michael. La húngara parecía más receptiva, mucho más serena que la última vez. Posiblemente, quien ahora quedaba tras ella abrazándola con un solo brazo tenía algo que ver con aquello. Él y la tila de hace un momento.

- ¡Hey! - sonrió ruborizada, dulcificando el gesto con el beso del finés, echando una miradita hacia atrás para darse de bruces con esos magníficos boxer... (...) Seguidamente, estupefacta, echó un vistazo hacia atrás para dar con los ojos ojerosos del guitarrista - Supongo que un jugador de cartas... - dijo, refiriéndose al dichoso Carlitos (se le había quedado eso de que el maltés se dedicaba al Póker) - ¿...Es que quieres que te de una hipotermia, Frosties? No es que me incomode verte en tu salsa, pero... No sé, ¿no tienes frío? - alzó las cejas, dibujando una sonrisa tierna y esperando una explicación lógica mientras aprovechaba para mimar con la mano libre la de Koivusaari, que la abrazaba.

Pero aquella muestra de cariño en público no tardó en hacer reaccionar a Czigany, quien, ignorando por completo la reacción que había tenido Scerri, acabó cruzando la mirada con Hawkins de manera casi inconsciente, como si recordara algo. Imaginó qué era lo que pasaba por su mente cuando asintió, y ella le respondió con una sonrisa natural. Un gesto carente de importancia de cara al resto, pero agradecido, mucho más de lo que Taylor podía imaginar. No importaba lo que hubiera hecho: parecía que siempre iba a recibir el apoyo de Hawkins...
Respirando hondo, sonriendo a Oluwatobi y al resto, casi se echaba a llorar con tanto buen rollo, pero optó por dejar a un lado aquel par de tumores que eran sus preocupaciones para darse un respiro...

Cita:

¿Hay…. ¿Puedo unirme?

- Ya estas en el equipo ganador, Madi - dio por hecho que la canadiense se añadía al bando femenino - ...Sólo que ellos aún no lo saben - bromeó a los chicos, guiñándoles un ojo para picarles. Hizo un gesto digno a la senegalesa para incitarla a empezar la partida, acercándose para colocar las bolas en posición - Nadra... Madi y yo te dejamos los honores.

Una vez todo listo, volvió enseguida junto al finés para entizar su taco antes de comenzar, sin poder evitar hacerle mimos con la mano...

- ¿No vas a jugar? ¿...Michael, tú te apuntas?

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06/08/2009, 21:02
[Madison Greens]

La sonrisa que casi amenaza con desaparecer con la primera respuesta, algo brusca para mi gusto, del que me confesó ser maltés, finalmente se expande cuando veo por donde va, cayendo en la cuenta de que no se debe a que sabe lo que me ha dicho Sven. Ayudada por la broma de la africana y la cariñosa acogida de la chica más tierna del hotel, se termina escapando una risita espontánea, con mejillas coloradas por el cumplido, hay cosas que no cambian… Tú sí que estás guapa. Madre mía, que alegría verla tan animada, otra ancha sonrisa mirándola, ea, para ella solita, por salá.

La cara se arruga entonces mirando a Andrea, Michael y Lex, con expresión de estar hablando de algo que realmente no tiene importancia. Mejor así. ¿Lo decís por esto? Lo señalo con el dedo, levanto las cejas…. Ah… nada, no es nada. Sólo que… ayer me caí. Perfecto, ya tengo la versión escueta y oficial. Estoy perfectamente, gracias. Asiento convencida, me encuentro como nunca, vaya que sí…

Guau, Brad Pitt, ese sí que es guapo…

Comienzo a quitarme la venda y esparadrapos con cuidado, sonriente y con una sola mano, pues la otra ya está cogiendo el palo este de madera que me ha dado el siempre amable Andrea, queda a la vista una pequeña hinchazón que no parece tener gravedad alguna. …No me duele ni nada de eso… me lo han curado muy bien. Y la hago un ovillo con la mano, guardándola en el bolsillo del pantalón rápidamente. Buena forma de asegurarme de no volver a llamar la atención sobre “eso”.

Suspiro y me encojo de hombros, mirando los ojos verdes del hombre que tengo delante, con creciente interés, ¿Se acordará de lo que hablamos ayer? Por mi parte sigue en pie, es más, voy a llevarlo a la práctica… Todo lo que me permita la situación actual, claro. Pero no es momento de este tema, ya lo he decidido antes…

Ahora quiero pasármelo bien con mis compañeros.

Mirada rápida a Taylor cuando habla, ¿Ves, Madi? Hasta él está de buen humor, o todo lo que su carácter le permite, claro. Suficiente para mí. No nos ha echado, sino que cuenta con que nos unimos… si ya decía yo que hay que ver a todo el mundo con nuevos ojos. Sin los prejuicios de cuando me causaba estrés cualquier cosa.

Sonrío, cumpliendo y asintiendo a la proposición de Lex, que empiece Nadra, unas palmaditas de pura emoción al escucharla, con las chicas ¡bien, bien! y no me toca comenzar, mejor, así por lo menos me entero de algo… empezando por como se colocan las manos para darle bien a las bolas y eso…. que emocionante todo. Suerte, Nadra. La mirada se desliza a Lex, con expresión ilusionada, me muero de ganas por un rato agradable, seguro que ella también. El primero, creo recordar. Ya nos tocaba, la verdad.

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06/08/2009, 22:39
Andrea Scerri

Sigo con interés los movimientos de la chica, divertido, ¿se cayó?, bueno, mejor no indagar, está genial así, con esa sonrisa, le pega mucho más, hasta que guarda la venda en su bolsillo. Entonces, extiendo mi mano para acariciar la frente de Madison, alrededor de la hinchazón, con mirada experta, arrugando un poco el ceño y negando ligeramente con la cabeza.

Definitivamente, puedo asegurar que este pequeño chichón para nada te resta belleza bueno, tengo que hacer algunas comprobaciones, o me volveré loco, así que le sonrío cuando noto sus ojos posados en los míos. Finalmente le guiño un ojo, cómplice, amistoso, y le revuelvo el pelo antes de girarme hacia Alexandra, afilando el gesto. Pero joder, que se note a lo que me dedico, un jugador de cartas, así que vuelvo a recomponer la sonrisa profesional, El segundo mejor jugador de cartas pero la escena entre ambos me resulta de todo menos justa, así que alterno ahora al idiota del rockero, con sus continuos desprecios a Nadra.

Taylor y yo nos bastaremos para ganar la partida comenzaba a moverme con más soltura, después de todo, no es tan diferente a una partida, esconde tus cartas, acepta lo que hay en la mesa como si fuera justo lo que estabas esperando, siembra y recogerás, siempre me gusto ese pasaje, pero no contempló que la semilla no tuviera nada que ofrecer, que solo fuera una flor incapaz de abrirse.

Tomé el taco mirando a quien me lo tendía, sin verlo, escapando hacia mi particular cámara de torturas, tan listo para unas cosas y tan gilipollas para otras, cuánta razón tenía. Me han llamado cosas peores que Brad Pitt dije tras un momento de pausa, perfilando nuevamente los oscuros rasgos de la senegalesa, pero como oiga otra vez que te llama mami voy hasta el extremo de la mesa en la que está el americano, él y yo vamos a jugar a otro juego donde también usaré el taco, pero cambiando de agujero apoyo la mano con firmeza en el hombro de Taylor, con tranquilidad, buscando mucho más la comprensión que la pelea en mi gesto, fui a la universidad y no la terminé, así que puede imaginarte lo bueno que soy digo sin variar el tono de la frase anterior.

Venga Nadra, dale ya

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07/08/2009, 01:56
Nadra Oluwatobi

Las chicas eran muy amables, la felicidad de Madison habría contagiado a cualquiera y yo seguía deseando que Sven apareciera por la puerta, aunque en el fondo sabía que habría reprobado aquello. Miré a Lex y a Madi y sonreí como buenamente pude, no me gustaba ser la protagonista, mucho menos bajo todos aquellos ojos que parecían entenderse tan bien entre sí. De pasada le miré el culo al novio de Lex, ese chico no tenía cara, mira que salir así. Enarqué una ceja y sonreí alejándome al fin de Andrea que había tocado a Madison de una manera muy familiar, lo dicho, aquello era una familia extraña pero familia al fin.

-Lex, Madison, gracias pro la confianza... Aunque vengan detrás de mí, espero lo mismo-les guiñé un ojo y me centré en el maldito músico.

¿Quién mierda se creía que era para mirarme de esa puta forma? Estaba hasta la mismisima madre de su jodida actitud de superado, blanco neonazi que seguro tenía los machetes guardados bajo el ala. Lo miré con cierta ironía, no con asco como él me miraba a mí, era un jodido engreído, músico de cuarta, no valía nada como persona, al menos no ante mis ojos. Era igual que cualquier jodido cliente del maldito bar en que trabajaba; era peor que mi jefe y su gorda mujer juntos. Planté la mirada en la mano que Andrea en una amenaza velada había plantado sobre el hombre de aquel y respiré profundo. Me mordí el labio antes de responder, por un momento todo el mundo desapareció. Había alguien que me había dado alas, alguien que me había prometido un mejor futuro para mi hijo y para mí, no dejaría que Ty "muchos huevos" lo echara a perder. Dejé el taco sobre la mesa y me acerqué a ellos dos.

-Si quieres jugar deja de llamarme mami, estás bastante grandecito para ser mi hijo aunque no tengas... Bueno, lo que sea y si tienes pantalones suficientes, apuesta tú, Taylor "Rolling Stones". No te negarás a empelotarte o a responder una tripleta de preguntas...

No le di la espalda, caminé de espaldas hasta tomar de nuevo el taco, buscándolo con las manos pues como con los animales, no podías bajar la guardia desde ningún punto de vista. Sujeté el taco con fuerza, aquel imbécil me ponía de malas, me hacía enojar, echaba a perder toda la buena onda que pudiera haber cogido por la mañana. Doblé mi cintura sobre la mesa estirando mi larga mano sin que mi pecho rozara la mesa ni un poco, abrí el índice y el pulgar y zas, de un sólo golpe las bolas rodaron sobre la mesa, acomodándose de buena manera, aunque ninguna entró. Una desgracia, levanté la vista de la mesa al mismo tiempo que me enderezaba.

-La mesa es toda tuya, Taylor...-me volví a las chicas.-La próxima tomaremos las lisas.

Les guiñé un ojo y sonreí de espaldas a la mesa. Me había metido en un buen lío pero no era persona que abandonar las cosas por difíciles, si hubiera sido así, ni Roan ni yo habríamos sobrevivido, no había sido por suerte que lo habíamos conseguido. Aguardé para ver de quién era el turno mientras me acercaba a la máquina de café, no quería nada pero era más bien una excusa para estar un momento con mis pensamientos, instantes después volví, a ver a quién le tocaban las lisas en realildad.

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07/08/2009, 15:02
Antti Koivusaari

Antti observó un momento a Madison, apartando la vista justo a tiempo para que pareciera un vistazo casual. La felicidad repentina de aquella chiquilla... Tragó saliva y le besó el hombro a Lex. Él no sabía qué hacer para aliviar aquello, y sentía que si decía un "déjate de saltiiiitos" iba a ser peor. La situación en aquel grupito mejoraba, mejor no cagarla, a pesar de que hubo ciertas miradas que no le encantaron hacia su novia por parte del maltés.

Que juzgara quien quisiera.

Por otro lado la sonrisilla de Taylor le provocó una a él mismo, relajando un instante su ceño permanentemente fruncido. Profirió una risilla incluso cuando Alexandra le llamó "Frosties", y luego de dejar la taza ya vacía sobre el mueble bar, Antti rodeó con ambos brazos aquella perfecta cintura, dándose por enterado (suficiente información) acerca de quién era el tal Carlos.

- Estoy de puta madre, no te preocupes -no le gustaba "alardear" de lo de ser un perrito faldero de Isenhall, pero era un hecho. De los pocos pros que tenía aquello, uno de ellos era el tomarse un café en ropa interior, y ese día no pensaba privarse de ello a menos que quien ejercía de cartel censor en ese momento se lo pidiera. Pero descubrió al apartarse ella que había sido mala idea optar por aquel sencillo modelito. Se dio la vuelta rápidamente, sentándose en uno de los sillones de hielo con respaldo y apretando los dientes en el momento en que su espalda contactaba con él. Eso ayudaría.
Observó desde ahí la situación en general, negando cuando Lex le preguntó si jugaría y riéndose de aquello de "me han llamado cosas peores que Brad Pitt". La reacción de Nadra, en cambio, le pareció un poco exagerada.

- Tranqui, Nadra -alentó- . Además, con lo de "Taylor Rolling Stone" no le estás jodiendo precisamente -se aguantó una risilla. El cabrón de Hawkins sabía tocar los huevos que daba gusto, pero una vez uno se acostumbraba, resultaba divertido incluso- . El pobre está traumatizado porque la vez que intentó ponerse moreno en una playa nudista se le frieron las pelotas, desde entonces todo lo que tiene un color de piel más oscuro que él le provoca de todas las maneras... -y ahí acabó el chascarrillo por su parte. Solo faltaba que él lo rematara con alguna anécdota ficticia sobre sus huevos fritos, su salchicha quemada o el negro que se las incendió. Lo que fuera. El "viejo" finlandés se acordaba de las peleas subrepticias que tenía con Falken por llamar la atención de toda la mesa en las comidas.

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09/08/2009, 10:35
Taylor Hawkins

-Huuuuh!!!, huuuuh!!...Tiempo muerto.- dijo soltando el taco y haciendo una T con las dos manos. Retrocedió un par de pasos mirando alternativamente a Nadra y Andrea. El tipo era recio de mano: un mamporro del colega podría vestirte en un momento de bullfighter...y lo que algunos llaman cobardía, Taylor lo identifica como "la expresión práctica del instinto de supervivencia". Por eso achanta y saca el pañuelo blanco,...aunque una retirada sólo es satisfactoria si se le encaja al adversario la bandera y su palo por el ojo del culo. ¿Cobarde? Puede. ¿Chulo?. Como el puto Dolph Lungren en "Little Tokio".

-Sin tocar, Maverick.- el californiano se baja la parte superior del technopijama dejando ver el torso y los brazos tatuados. Algo así como aquellas mariposas con dibujos de los que acojonan en las alas: igual resultaba efectivo, aunque fuese a nivel subconsciente. Lástima que ese costillar marcado y el flotador de la cintura desluzca el resultado final.- La Señorita Mikado y tú parecéis muy nerviosos. Relajaos, joder.

La pausa y el ceño fruncido por el ataque y la sorpresa terminan cuando la saliva entra finalmente por el esófago. Para este tipo de casos era muy pertinente la compañía de aquel séquito de pelotas que lo acompañaban noche y (en menor medida) día: eran ellos quienes lo sujetaban cuando se iniciaba una trifulca con algún tipo 30 kilos y 30 centímetros más grande que él,...al tiempo que el rockero consentido y malcriado gritaba: "¡Soltadme, joder!...¡Soltadme, que le reviento la cabeza!". Qué tiempos. No hay nada de eso ahora,...y por eso mismo, Taylor sabe que si se envalentona se lleva una manta de ostias delante de (y esto es lo que más duele) su Musa.

-Lisa 3 a tronera superior izquierda.- dice tras haber agarrado de nuevo el taco, despacio, con la cara del que es víctima de un ataque. Se coloca en posición y niega con la cabeza. Chasquea la lengua antes de golpear la blanca y en ese momento Antti hace un comentario que Hawkins celebra con una sonrisa cómplice: era agradable escuchar a alguien hablando su mismo idioma.

- Ja!...Y eso,...¿Cómo lo sabes tú, tío?. ¿Te gustan los Picha Morena como yo o qué?. ¿O lo leíste en una de las siete...SIETE entrevistas que me han hecho en la "Rolling"?- Taylor enseña sus dientes amarillos. En realidad, el chiste de Koivusaari es bueno: lo suficiente como para que el payaso egocéntrico ría con él y lo apunte para hacerlo suyo en futuras ocasiones.-...pero te equivocas en una cosa. No tengo nada en contra de los negros.- mentira.- Dicen que somos todos Hijos de Dios, ¿no?...- también mentira, al menos bajo la opnión atea radical del californiano.-...y que todos, ya sabes, hemos salido del mismo horno divino.

Taylor vuele a fijar la mirada en la bola blanca, en la lisa 3 y en la jodida tronera. Se sorbe la nariz.

- La diferencia reside en los tiempos de cocción.

Y golpea.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Ty vs. Providencia (Lexy dixit)
Resultado: 92

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09/08/2009, 18:50
Michael Fauchon (Loki)

La partida comienza, y sigo la accion bastante atentamente, aunque sin duda fijandome bastante mas en las personas que en las bolitas de colores

El intercambio de sutilezas es de los mas revelador, y no puedo evitar unirme a ello, mirando por un instante fijamente a Taylor cuando se abre la parte de arriba del pijama

Tio, crei que nunca diria esto, pero estoy contigo, si os habeis jugado la ropa, te juro que quiero que ganes

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09/08/2009, 19:47
[Lex Czigany]

Alex había hundido el taco en la nieve, haciéndolo oscilar de una mano a otra con aire distraído mientras esperaba su turno. Sonreía a Madi, amistosa, aunque extrañada por la repentina felicidad de la canadiense. Parecía que se había metido un tripi, o que el chichón se lo había propinado el mismísimo Dálai Lama antes de regalarle una charla tibetana sobre "Las 7 razones por las que vale la pena sonreir estando jodido". Pero hasta ella se sintió mal por extrañarse de la actitud de la adorable Madison, y casi sintió que le debía una disculpa. Tan acostumbrada al desánimo y ahora lo raro era echarse unas risas... Lamentable.

Dibujó una sonrisa al cruzarla con Nadra y dio gracias a que Koivusaari contribuyera de aquella manera, escapándosele una risilla con el comentario sobre las pelotas fritas del californiano. Notaba a Nadra, y sobretodo a Andrea, más tensos de lo que la situación requería. Aún así, ello no le hacía cambiar la cara, y alzó las cejas con la explicación de Hawkins sobre la proeza del horno divino mientras éste jugaba su turno...

Una vez hubo tirado este último, quien descubría toda una retaila de tatuajes (valdría la pena escuchar la historia de cada uno, seguro), se adelantó hacia la mesa para posicionarse.

Cita:

La diferencia reside en los tiempos de cocción.

- Por eso te los freíste, ¿no, Ty? Te quedaste insatisfecho con el tuyo... - le sonrió bromista, descubriendo una hilera de dientes blancos al hacerlo, inclinándose ahora sobre la mesa de juego para centrar su atención en la bola blanca, haciendo acercamientos con el taco... - ¿Me lo parece a mí... - finalmente, un golpe seco a la blanca - ...o el amigo Taylor no ha sido el único en sufrir un percance con el sol en la playita? - la jugada se producía sola al tiempo que la joven volvía a erguirse dedicando una sonrisilla pícara hacia donde quedaba sentado el "viejo" Koivusaari. Habría sido un buen momento para que la rayada se colara en la tronera, pero no. Dios no lo quiso así. Y Alexandra miró a Andrea y a Taylor, ya que, por el momento, Michael no parecía querer unirse - Turno de los caballeros...

Se acercó al finés y tomó asiento en el reposabrazos del sillón, cruzándose de piernas y con el palo de nievo hincado en el suelo para volver a prestar atención a la partida desde ahí. Eso sí, no olvidó revolverle el pelo cariñosamente al finés tras aquella broma tan típica entre ellos: Adoraban picarse el uno al otro, y qué decir... Ella reconocía una piel de "cangrejito" en cuanto lo veía.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Agi - Lexu vs Providencia
Dificultad: 86-
Resultado: 52 (Exito)

Notas de juego

Adiós Providencia!! Saludad a las tiradas de Agilidad/2. Si se saca se mete, si se falla a fastidiarse / Crítico: Metes dos / Pifia: Metes la del contrincante mientras éste se ríe... Y por supuesto, si la sacas se vuelve a tirar xDDDDDD

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10/08/2009, 01:26
[Madison Greens]

Poniéndome inmediatamente tensa, muy quieta, cuando empieza la revisión de Andrea, dudó, con miedo de lo que pueda averiguar... Justo cuando termina de hablar deja de tener eso la más mínima relevancia…

Parpadeo sorprendida, desconcertada como pocas veces, jolín, él está presente en la mayoría… son su culpa. La mezcla entre recibir el halago, que hace que el corazón se quiera salir a bailar en lo alto de la mesa de billar, y el bochorno de que se fije y diga esas cosas delante de los demás, se muestra en forma de (gran novedad para Madison Greens) sonrisa que lucha en los labios por ser contenida, con muchísima dificultad, bajando la mirada a la misma vez que noto como el rojo del jersey, el chillón, comienza a subir, inundando mi cara. Que… tonto.

El guiño del atractivo hombre y que me revuelva el pelo después no es que ayude a la calma, precisamente.

…Pero me da la excusa perfecta, coloco las manos en mi enrojecido rostro haciendo como que me vuelvo a reestructurar el pelo, desapareciendo así de todos… yo es que me muero de vergüenza. Ofu, Andrea... me has despeinado… Con un tono que intenta aparentar que el enfadillo, la incomodidad, se debe a eso, con tintes de algo… como…alegría, que no se pueden tapar tampoco. A ver, si es que es una de las cosas más bonitas que te han dicho desde ni se sabe cuándo… agradable es, enormemente, por lo menos no te mientas a ti misma como has hecho hasta ahora.

El resto de las conversaciones paralelas que tiene lugar casi ni se escuchan, sólo alcanzo a percibir el tono distendido, mis sentidos están puestos en como van dándole a la blanca, como colocan sus manos en el palo ese, lanzan... Aprendiendo sobre la marcha. Suspiro infundiéndome ánimos, la suerte me abandonó el día que llegué a este hotel… pero quizás me pueda cambiar de nuevo.

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10/08/2009, 18:21
Andrea Scerri

Por más que ahora mismo me pesara, Antti y Taylor tenían razón, no era momento para armar jaleo, y también saltaba a la vista que Nadra podía defenderse sola perfectamente, pero desde luego, resultaba tentador la idea de desahogarse con aquel cobarde capullo. Hay que mantener la compostura, y las bromas entre ellos parecen que vuelve a relajar el ambiente, casi que mejor.

Sigo la evolución de la partida, medio sentado en una de las frías mesas, echando una mirada de reojo a Madison, conteniendo una sonrisa al recordar su reacción, resulta sorprendentemente encantador que se sonroje de tal manera, en cierta manera, no se aleja tanto de algunas de mis primeras reacciones. Entre eso, y la actitud del finlandés con Alexandra, me gesto se vuelve más serio, pero hay que ser un profesional y comportarse de manera políticamente correcta.

Cuando llega mi turno, sopeso mi taco, y miro la mesa, intentando concentrarme en las jugadas, han dejado las cosas relativamente fáciles, se nota que no han jugado demasiado, o bien eso, o bien yo lo he hecho en exceso. Taylor prefería las lisas, así que vamos con las rayadas, la diez y la doce caen veloces en las troneras, con dos tiros seguros, uno potente y otro mucho más hábil, podrías seguir con alguna más, pero mejor que juguemos todos. Levanto la cabeza mirando a las chicas con un ligero encogimiento de hombros.

Dejaré que tire Taylor, para que esto no sea demasiado aburrido con una evidente y distendida chulería. Me vuelvo hacia el rockero, y le esbozo una sonrisa que pretende ser amistosa, venga, tío, la trece en el centro izquierda, y con salida para la once arriba a la derecha miré a Nadra y señalé una taza de café que había sobrado de hace unos instantes, para luego ir hasta la posición de la canadiense, que parecía muy atenta a las jugadas.

Deberías estar acostumbrada a que te dijeran cosas bonitas aparto un poco el pelo de la cara, que empieza a ser algo molesto, sonriendo, porque era evidente que, Dios sabe porque, no se las dicen. Quizás su belleza y timidez sean una barrera demasiado alta para la mayoría de chicos de su edad. ¿Sabes jugar? cambio de tema rápidamente, tratando de no incomodarla en exceso.

Notas de juego

NDM: Seguid con las tiradas.

Agilidad/2
Acierto: Se mete bola, se sigue hasta que se falle.
Fallo: No se mete ninguna bola.
Crítico: Metes dos.
Pifia: Metes la del contrincante, y en el caso de que quede solo la 8, se mete en mal sitio.

Graciah Neeh XDDDD

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10/08/2009, 20:57
Nadra Oluwatobi

Observé al novio de Lex, no sé qué le veía ella. Es decir, no era un tipo feo pero dejaba mucho que desear o será que yo era demasiado quisquillosa, quizás eran las costumbresde una afrikans contra las de ellos, todos de mundos distintos al mío, quizás era eso pero no me gustaba en absoluto y lo fulminé con la mirada para luego dedicarle una sonrisa fría que decía claramente: "eres un idiota".

-Si, claro, no odia a los negros y yo soy la madre Teresa de Calcuta... ¿Por qué mierda vine a tomar café con Andrea? ¿Por qué?

Miré fijamente a Taylor a los ojos y respiré profundo, no quería que me sacara de quicio, ni siquiera se merecía eso de mí. Clavé la punta de mi pie derecho en la nieve, como solía hacer desde que era pequeña y algo no me gustaba. Sentía más frío allí dentro que allá afuera sentada en la misma nieve y cogí la tiza y el taco nuevamente, esperando mi turno.

-A veces tus palabras dicen más de ti que lo que crees, Ty...-murmuré desviando mi vista de sus tatuajes y su soberbia.

Miré entonces la taza de café y luego a Andrea, negué con la cabeza y me retiré un poco de la mesa sacando la punta del pie de la nieve. Busqué donde sentarme y lo hice mientras miraba los dos buenos tiros que había hecho el rubio, no estaba mal, quizás después de todo sí que era muy bueno jugando billar. Y luego sus palabras a Madison, quizás yo no me había equivocado la primera vez o quizás él era así, ese era su juego. Me sentí enfadada de inmediato y miré al suelo, era mejor pensar en otra cosa y mantener la cabeza en frío. Cuando levanté la vista, quien estaba por tirar era Taylor, me quedé unos instantes mirando fijamente sus tatuajes, preguntándome si habrían dolido mucho y no me di cuenta que miraba de más.

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10/08/2009, 21:51
Antti Koivusaari

- Si, Taylor: Por mucho que lo disimules, tienes buen gusto. Tus palabras apestan a Absolut bien fresco -apuntó Antti, reposando la mano en el muslo de la húngara para dedicarle unas caricias mientras devolvía miradas tan frías como podía a aquellos novatos gilipollas. ¿Irían con ganas de cambiar el mundo o nacieron así? Palmeó la rodilla de Lex alzando las cejas, retomando el tema anterior. Todo estaba tranquilo, y por mucho que él "no estuviera para idioteces" no quería romper el clima con una de sus consentidas "rabietas de rockero". Hablando de Absolut, se preguntaba cómo es que no lo había probado en al menos una semana, y entonces aferró de nuevo la pierna de la muchacha, dejando salir una sonrisilla entre pícara y melancólica.

- Lo de tus pelotas lo leí en la "Roasting Stones", macho, en una de las quinientas, QUINIENTAS entrevistas que te han hecho -se carcajeó, cansado, imitando también el tono de su compañero. Tiró en ese momento de la cintura de Alex para que cayera sobre él, vigilando que no se hiciera daño- Tiempos de cocción, ¿eh? Pues qué de puta madre le salió éste plato -rió frotando su nariz con la de ella. La dejó sentarse bien y se rascó la nuca guiñando un ojo, con el gesto torcido. El dilema era verdaderamente Shakespeariano: ¿Partir caras y tirar al suelo la mesa de billar... O no ser? Esa era la cuestión. No quería caldear el ambiente, y eso era un problema, porque era su capacidad más desarrollada en todos los sentidos- Nena, Taylor tiene razón: El billar es un juego de mierda, y ya me ha presionado bastante con sus encantos. Tengo que ir a los baños a cascármela, o lo que sea, pero me da vergüenza que me vea colorado -un besito cariñoso en la mejilla de la húngara, una sonrisa conforme con su modus operandi- . Me voy a vestir y a ver a Valdemar, a ver si me da un desayuno decente a base de vodka y Lakkakermakakku. El que quiera que se venga -cogió en volandas a la chica para levantarse y la dejó suavemente en el suelo, revolviéndole el pelo y marchándose después.

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10/08/2009, 23:50
Michael Fauchon (Loki)

Me aguanto una risilla al escuchar a Antti, hoy esta sembrado y dandole caña de verdad a Taylor, el problema es que ahora como se largue vamos a tener a MR miradme todos en su mejor plan, y hay cosas que no tengo por que aguantar, no sin cobrar, y desde luego no a el.

Pues voy al chaqueton, hace tiempo que no voy hasta alla y me vendra bien un poco de aire

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13/08/2009, 01:19
Taylor Hawkins

Como las animadoras.

Así gira el taco en torno a las manos de Taylor: después de todo un palo es un palo,...más grande o más pequeño, pero el juego de los dedos era parecido al de una baqueta. Sí, como las que hacía rotar durante la intro de "Under my skin", con el público loco perdido según sonaba el arpegio de inicio.

-Miradla.- dice divertido señalando a Lex con la barbilla.-Esta mañana se desayunó a Chevy Chase.

El rockero reía la chanza con ganas, negando con la cabeza. Lexy había sido protagonista en el pelopúntico destino de los señores Serlen y Connor, pero Hawkins no guardaba reproches para ella...sino para él mismo: no podría odiarla aunque quisiese. Muy al contrario, él supo reconocer al ángel que vivía en la húngara, y...¿quién puede odiar a un ángel?.

-Y tú, Thorin Escudo de Roble con sobredosis de hormonas para el crecimiento,...- señala ahora con la punta azul del taco al nórdico maromo de su Musa, sin perder la sonrisa.-...a tu lado, Powder tiene el color de la puta bola 8,...así que no me jodas con historias de bronceados, ¿vale?.

A Taylor le dan ganas de pedir cuatro botellas, y empezar a preparar mojitos como un loco: a Madison se le iban a subir los colores a la cara, pero con razón. Pero siempre que uno se encuentra agusto, aparece el típico listillo en plan sobrado que mete un par de bolas, te revoluciona las bilis y te agría el gesto...

- Habló el Gordo de Minesotta. Tranquilo, colega, que esa jugada ya la había visto antes de que tirases.

... o la típica pedorra que se hace la ofendida mientras te lanza un derechazo a la misma línea de flotación. A Taylor se le congela la sonrisa en una mueca de caricatura: eso ha dolido.

-Tú no me conoces.- farfulla respondiendo a Nadra. El taco ha dejado de girar y ahora está de nuevo sobre la mesa. Taylor lo sostiene con fuerza y sus ojos se centran en el tapete.

Cita:

...la trece en el centro izquierda, y con salida...

Fácil. Taylor arranca un buen gargajo de las narices. Éstos pasan a la boca y acaban en el suelo, La mirada sigue evitando a la senegalesa.

Cita:

...para la once arriba a la derecha.

Ésta entra como un cañón. Taylor evita que la blanca se vaya tras la once a la tronera impactando con el taco bien abajo y sacando un efecto hacia atrás.

-Nadie me conoce...

Ty está tentado de partir el jodido palo contra su muslo, lanzar los fragmentos astillados contra la pared y largarse de ahí con Koivusaari..., pero tragar con la compañía de Michael es demasiado. Al final, el taco está intacto: la serie acaba en dos y Hawkins no tiene ánimos ni siquiera para congratularse de haber parecido bueno.

- Tiradas (3)

Tirada: 1d100
Motivo: Scerri's advice
Dificultad: 45-
Resultado: 16 (Exito)

Tirada: 1d100
Motivo: Scerri's advice 2
Dificultad: 45-
Resultado: 16 (Exito)

Tirada: 1d100
Motivo: A la tercera...
Dificultad: 45-
Resultado: 54 (Fracaso)

Notas de juego

Siento la tardanza. Me despisté creyendo era turno para jugada de la Señorita Oluwatobi.

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13/08/2009, 10:30
[Madison Greens]

Cara impresionada al ver como acierta Andrea con evidente facilidad, rezando por no quedar en ridículo… a lo mejor me he pasado de impetuosa al apuntarme con tanta ligereza… que no, Madi, ¡Qué esto mola mucho!...

La nueva alusión a mi físico hace que me encoja de hombros, apartando la mirada de él y concentrándola en la tirada de Taylor, ¿Qué quiere el maltés que le conteste a eso? ya sé: Que la gente no se toma tantas libertades como él… pero la idea no cristaliza en mi cabeza, sé perfectamente la tonalidad que adquiriría mi tez, y con una vez, ya va bien. Por no hablar de la (enorme) posibilidad de tartamudear al decirlo y fastidiarla más. Uff, que a Taylor le salga igual de bien y que parezca empezar a estar molesto no ayuda a que me relaje. Pero bueno, me he propuesto divertirme y es lo que voy a hacer. Pasando de todo lo de alrededor.

Yo… en cuanto acabemos de jugar, que parece va a ser pronto, Sonrisa tímida mirando a Lex, iré también al pueblo, tengo que llamar a mis padres. ¿Cómo he podido olvidar algo así? ¿Qué pasa conmigo hoy? ¿Por qué no salgo corriendo a hacerlo? … Debo reconocerlo, es demasiado tentador probar esto. Un ratito sólo...

Procedo a inclinarme en la misma postura que han ido poniendo los demás, intentando colocar las manos de la mejor forma posible, la más parecida. Tardo un poco, pues con haber visto “El color del dinero”sólo me alcanza a lo de los turnos… sé que no es suficiente, tomo aire antes de lanzar… por favor... por favor… Madi, que estudias Física, jolín, que el tema de colisiones y todo eso va a ser útil….

Pero no. Le doy a la bola blanca de refilón pero con fuerza, la dirección esperada no era esa, acaban moviéndose todas las que hay, sin orden ni concierto. Ni una se mete por ningún lado, aunque por lo menos la negra tampoco. Tras haber estado con ojos abiertos de par en par ante el desconcierto que ha reinado por un momento… una risilla medio nerviosa se escapa sin poderlo evitar, expresión risueña y divertida mientras me froto el ojo derecho con la mano cuando quedan “estables” No mucho Andrea…. no mucho. Te toca.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100(+46)
Motivo: veamos si sigo la racha
Resultado: 75(+46)=121

Notas de juego

vale, he rellenado mal la tirada, pero el resultado es que he fallado. xDDD

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13/08/2009, 11:35
[Lex Czigany]

Alexa habría sufrido un tremendo ataque de risa con la referencia a Powder de no ser por la situación que, para la propia Czigany, y por lo visto para la gran mayoría, empezaba a alargarse demasiado. Como una telenovela en vacaciones...

Por una parte, respondía de buena gana a las carantoñas del finés sentada a su lado. Por otro, escudriñaba la situación de la partida con tanta atención que prácticamente no se dió cuenta de que la sonrisa se había borrado de sus labios. Las ganas de billar habían volado lejos de Jukkasjärvi... De hecho le daba la impresión de que incluso algunos no habían tenido siquiera las ganas de empezarla... Pero Andrea y Nadra comenzaban a ponerla de malísimo humor (y esto era todo un mérito), como por ejemplo esas miraditas subtituladas a un idioma que no le gustaba un pelo dedicadas a su "maromo nórdico". O la ya excesiva bordería con la que estaban atacando al pobre Taylor. Se suponía que iban a pasar un buen rato de cachondeo, no un combate de miradas afiladas...

¿Y a santo de qué aquella actitud? Alexandra no salía de su asombro. Ya no es que le pareciera una niñería el desperdiciar un momento cotidiano tan codiciado como aquél... Es que no entendía cómo era posible que, aún con todo, hubiera problemas para disfrutar de una maldita e inofensiva partida de billar en grupo. Joder, ¿es que no veían a Madison? ¿Tenía que morirse alguien delante para trabajar en grupo?

Estamos en mitad de una guerra, joder...

De todas formas, aquello no había impedido que la joven respondiera a los mimos de la "víctima". Ya sentada sobre sus largas piernas, Alexa sonreía como una idiota respondiendo al besito esquimal del finés, con una dulzura y un pacifismo de quien no podía tener los nervios más destrozados después de esa semana. Sabía que sus ánimos no estaban muy allá después de lo de Falken, y quizás por eso se tomó tan mal ese rechazo que se estaba paseando por la sala desde que él entró. Cuando éste la levantó y ella hizo toma de contacto con el suelo, ella le besó la mejilla y le cogió de la mano para retenerlo un momentito antes de marcharse, volviendo los ojos hacia la mesa de juego para estudiar por última vez la situación...

Una expresión de hastío que enseguida se transformó en una sonrisa cordial; pero sin pasarse:

- Chicos... Perdonad pero voy a pasarme por la enfermería un momento, por si tengo que echarle una mano a Sven - un estirón de comisuras. Más que mal humor, sus ojos reflejaban decepción - Parece que hemos pasado una mala noche - dejó el taco donde quedaban el resto - Si no habéis desayunado, lo mejor es ponerle remedio a eso. En cuanto termine me paso por donde Valdemar... Ya terminaremos la partida en otro momento- Un guiño cómplice dedicado al californiano. Se dió la vuelta y empezó a andar hacia la puerta, girándose sin parar para dirigirse a Madison - ¡Si quieres nos vemos luego, guapa! Así aprovechamos y damos una vuelta por Kiruna...

Y de esa guisa, Lex terminó por abandondar la habitación junto a Michael y Antti. Aquel amago de trifulca casi le había venido hasta bien. Tenía que pasarse a ver a Sven y, sobretodo, rezar por no tener una razón por la que echar una mano...

Notas de juego

Disculpado, Cavas. Qué risa con lo de Powder... XDDDDDDDDDDDDD

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13/08/2009, 12:50
Andrea Scerri

Lanzo un pequeño suspiro cuando Madison desvía la mirada, llamar a sus padres, un chollo de jugadora, si, aunque, ¿es justo ganar a alguien que no sabe jugar?, seguramente las opiniones variarían, pero el problema es que nadie le ha preguntado si quiere participar en la partida.

Observó la jugada de Taylor mientras el finlandés medio desnudo sigue con su sarta de gilipolleces, mejor ignorarlo, pues las bolas que Taylor va embocando son muchos más interesantes, pulso firme mientras reniega, ¿nadie te conoce Hawkins?, ¿acaso has dejado que lo hagan?, bah, no soy desde luego, el más indicado para reprochar tal actitud, con la diferencia de que el californiano parece tener miedo, curiosamente, no a perder. Lo había visto una vez, Steven Frandsen, un tío con carisma, nunca dejaba indiferente, con un montón de pasta, pero nunca lo vi ganar una partida. Era un buen jugador, pero tenía miedo a ganar, el mejor perdedor que he conocido. Quizás hasta estos últimos días. Mis ojos verdes se detienen en aquel hombre, quizás no fuéramos tan diferentes.

EL sonido del impacto de las bolas me devuelve al juego, la canadiense falla, pero parece que le da igual, y le sonrío siguiendo sus gestos, No es difícil, sólo hay que practicar un poco, pero seguro que eres una buena estudiante, y por eso no se te da bien me adelanto un par de pasos mirando a la mesa, calibrando la nueva situación. Alzo el brazo como única despedida a la húngara, era fácil largarse, siempre era la solución más sencilla, de eso se bastante.

Quince y catorce desaparecen de la mesa con velocidad, sólo falta una y la ocho, tiro con fuerza, la trayectoria es buena, pero no logra entrar, picotea los bordes de la tronera y sale despedida hacia atrás, ¿qué ha pasado?, frunzo el ceño, y levanto la mirada claramente enfadado, negando con la cabeza, ganar o perder, es mucho más importante de lo que parece, mucho más.

Doy un paso atrás mientras miro a Nadra, es su turno, más le vale que lo aproveche bien, porque no volverá a tener otro en esta mano, y me giro de nuevo hacia Madison, Cuando quieras, te enseño le digo con una media sonrisa.

- Tiradas (3)

Tirada: 1d100
Motivo: Bola
Dificultad: 49-
Resultado: 14 (Exito)

Tirada: 1d100
Motivo: Bola 2
Dificultad: 49-
Resultado: 42 (Exito)

Tirada: 1d100
Motivo: Bola 2
Dificultad: 49-
Resultado: 82 (Fracaso)

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13/08/2009, 20:11
Nadra Oluwatobi

Estaba ahí parada, mirando como los chicos hacían de las suyas sobre el paño verde. Cuando de nuevo resonó la voz del novio de Lex en la sala, respiré profundo e intenté no hacer caso a lo que decía; era increíble cómo todo el mundo creía que tenía la posta y hablaba sin saber, por decir algo, por hacerse el gracioso, daba asco, esa era la verdad. Me sentía terriblemente molesta, peor que en el maldito bar pero esta vez no dije nada, ni siquiera miré al rubio exhibicionista, pasé de él porque era lo mejor.

-No se entiende uno nunca con los necios.

Había menos público, eso era bueno o al menos eso creí, ya no estaba de humor para jugar, no con alguien que te mira de aquella manera o con quien no te mira como si fueras una puta cosa transparente y encima de pisotearte se hace el lindo. Y entonces don Sabiduría ambulante habló de nuevo. Cierto, muy cierto, nada más cierto en toda la vida: No, no conocía a Taylor y no quería conocerlo. Porque, claro, la vida está llena de momentos, algunos más agradables o menos que otros pero están, los guardas o no, te los llevas o pasas pero nunca falta que te encuentres al tarado de turno y te haga pasar un mal rato. Son todos iguales, quizás Hawkins era el imbécil diferente, el que da la nota y no a una revista, me encogí de hombros y le sonreí como si fuera mi mejor amigo.

-Ahí está, ahí queda. No voy a jugar más contigo, no al juego de las palabras y los desmerecimientos, mi tiempo no está para eso, tengo peores problemas que tú.

Las jodidas bolas rodaban por la mesa con tal facilidad que parecía que se habían puesto de acuerdo para jodernos a las chicas y a mí, realmente no me agradaba nada pero habría que cumplir, una Oluwatobi si empeña su palabra, la cumple. Una más y otra más, maldita suerte la que los embargaba pero así era el destino, ya todo está encaminado, tú, irónicamente sólo le das un empujoncito. Una sonrisa de descontento se grabó en mi rostro cuando la chica más linda y tierna del Icehotel falló. Posé mi vista en ella unos instantes, es entendible que todo el mundo le tenga aprecio, da la impresión de que hay una cierta paz cuando estás con ella.

-¿Qué diablos sucede?

La mirada que Lex me había dedicado me pareció por demás fuera de lugar, no entendía muy bien qué había sucedido pero parecía ofendida y encima que ella era quién había iniciado aquella batallita, ahora se metía las manos en los bolsillos y nos dejaba allí. Así es sencillo iniciar las guerras. No respondí a su sonrisa, ni a sus palabras, ni siquiera parpadeé cuando mencionó a Sven, ¿para qué? Simplemente asentí, mejor, si éramos menos. Hay quien aguanta las presiones y hay quien no, hay quien supera los problemas por más pequeños que sean y hay quien no, hay quienes creen que todo gira alrededor suyo y hay quienes hacen felices a las personas con una sonrisa, como Madi.

Tras la salida de la pareja, miré con atención a la otra pareja. La verdad es que estaba allí, clavada al suelo y me parecía estar mirando un flirteo pero no tenía tiempo para dedicarme a ellos, me agaché en uno de los costados más largos de la mesa, iba por la primer bola de nuestro bando y esperaba que la primera de muchas; me acomodé bien, estaba tranquila, controlando mi respiración y justo cuando iba a hacer el tiro, escucho aquello: "Cuando quieras, te enseño". Levanté el taco de mala manera, la punta fue a cualquier lado, las bolas se movieron pero sólo porque rocé una de ellas de forma tal que se salió de la mesa. Cerré los ojos más que fastidiada.

-Bien, pueden empezar las preguntas cuando quieran y quizás sea un buen momento para enseñar a Madi a jugar billar, Andrea...-intenté sonreír ocultando que estaba más que molesta.

Solté el taco unos segundos, levanté la bola y se la entregué a Tylor sin mirarle a los ojos, ya estaba bien de provocaciones; los ganadores se perfilaban, ni siquiera tenía la mente clara para saber cuántas bolas faltaban por clavar.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Bola
Dificultad: 35-
Resultado: 79 (Fracaso)

Notas de juego

¬¬ Mierda!!

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13/08/2009, 21:56
John R. Dryden

Entré en el Hobby Room, dirigiéndome directamente hacia Taylor con paso rápido. -Buenos días... -saludé a todos, eso sí. Al llegar junto al rockero posé una mano con firmeza sobre uno de sus hombros-. Macho, nos vamos a tomar unas cervezas y a hacer un par de cosas más, así que tápate un poco anda... -observé, sonriente, al ver que no llevaba puesta su camiseta-. Joder, macho... Si te tiramos a una piscina saldrás a flote... -añadí, al observar su cintura, antes de lanzar al aire una sonora carcajada. Esperaba que, después de aquella pequeña tontada, él me regalara con alguno de sus comentarios cabrones y potencialmente descojonantes. Después desvié la vista hacia Andrea, frunciendo esta vez el ceño-. Y a ti no sé quién te rompe los huevos cada mañana, pero empieza a cansar, amapola... -dije, serio esta vez, señalándole con un dedo acusador-. Y antes de que preguntes qué es lo que me pasa a mí, te lo explicaré: Antti, que es un muy buen colega, está ahí fuera rompiendo hielo con las manos... Y eso lo está haciendo para no romperte a ti la cabeza, así que te recomiendo que te bajes los humos si los tienes altos; que te guardes posibles miradas ofensivas en el culo y el culo te lo dejes en la habitación ; y que vayas pensando en lo MUY poco conveniente que es para ti hincharle los cojones a quien no debes -me di la vuelta, dispuesto a irme-. Mis disculpas al resto por el espectáculo... Ah, y aún nos queda pendiente una conversación, ¿estamos? Y a menos que decidas pirarte del hotel y pasar en adelante de las misiones... Vamos a tener ESA conversación -un nuevo comentario dirigido a Andrea, por supuesto. Me encaminé hacia la salida nuevamente, esperando que Taylor viniera conmigo.