Partida Rol por web

ya hemos perdido un general, si vamos nosotros y no salimos de alli, la guerra estara perdida, el ejercito descabezado...no es muy prudente, ademas no creo que hayamos pasado inadvertidos precisamente...de todas formas si el consejo es lo que decide, yo Zoltak ire a esa ciudad y puede que hasta me tome una pinta....

Todas las ideas que los generales iban dando eran buenas, pero se tenia que decidir rapido el que hacer. Sira permanecio en silencio escuchando las distintas ideas que daban hasta que cuando todos se mantuvieron callados dijo Lo que esta claro esque en la ciudad no creo que dejen entrar asi porque si. seguramente nos estaran esperando. Debieriamos enviar unos cuantos exploradores a la cabeza de uno o dos generales y mirar si nos estan esperando o si no se han dado cuenta que queremos asediar la ciudad.

Despues ya miraremos. Propongo que salgan inmediantamente y si encima podemos infiltrar algun que otro general dentro de la ciudad para ver los entresijos de la ciudad mejor. Que me decis?

-Bien, a mi me parece bien. Ni todos los generales ni ninguno, y desde luego, los que entren, camuflados. ¿Por qué pensáis que van a estar esperándonos? No creo que nadie los haya alertado... ¿Lo veis así?

No creo que nuestro ejercito haya pasado desapercibido para sus centinelas, a menos que estén ciegos.

Calius da un paso al frente.

Generales. Estamos a dos días de la ciudad de Polopponi. Hasta ahora es imposible que conozcan nuestra presencia más allá de burdos rumores. Desde luego son conscientes de que Meirkon avanza con sus tropas conquistando el mundo, pero no saben que su ciudad es el próximo objetivo. A la vez que avanzábamos hemos ido eliminando todo posible rastro.- Calius extiende los brazos y señala el poblado que acabáis de arrasar, los cadáveres y los regueros de sangre.-Sin duda la espesura de este bosque además es una gran cobertura que nos cubre de que puedan vernos. Si deciden explorar, lo mejor sería avanzar mientras aun haya bosque.

Tras esto señala a uno de los soldados y le hace un gesto con la mano.

Me he permitido tras escucharles la conversación, conversar con los historiadores y me han dado ésto.-El soldado le trae un papiro. Calius lo desenrrolla y os muestra los patrones de un traje.-Según nuestros historiadores, éstas son las vestimentas típicas de un polopponita. Son ropas fáciles de coser.

Capitan Caius ,hasta el jefe mas tonto de los pictos habría colocado vigías en sus fronteras y sobre todo sabiendo que hay un ejercito en marcha.Ese bosque es un buen sitio para vigilar, ofrece escondite y una ruta de huida.

OK, creo que lo ideal es que tres de nosotros nos infiltremos en la ciudad y si nos vemos descubiertos hagamos de emisarios. Yo preferiria ir con alguien presto en recordar detalles, ¿quien se ofrece voluntario?, avanzaremos hasta donde no se vea nuestra presencia pero cerca de la cuidad. Si no volvermos en tres dias rezad por nuestra almas y con todo contra esos rebeldes.

¿Ok? Qué extraño lenguaje el tuyo bárbaro. Yo formaré parte de la expedición -sentencio.

-Yo vendré también. Y nos llevaremos a mis dos mejores hombres, son exploradores experimentados, huelen el peligro y la emboscada desde muy lejos. Asiento satisfecha, prefiero ver la ciudad con mis propios ojos antes de tomar ninguna decisión comprometida. ¡Vosotros! Les digo a unos de los hombres que han venido con Calius -buscad quien nos cosa esas ropas para camuflarnos, ¡deprisa!

Bien, lo facil ya esta hecho, ahora solo falta que llegue el dia de la sangre y la desesperacion...y que no sea la nuestra por Crom. Luego una gran risotada sale de la boca de Zoltak esta satisfecho, pues ve que el valor y el arrojo aun permanecen en el seno de este ejercito.

Sira ve complacida que los barbaros sean los que se infiltren en la ciudad y dice algo extrañada Barbaros haciendose pasar por emisarios? jaja. Y ahora dime Zotak te pondras esos pantalones Pelopponienses. Sois tremendos estos barbaros . Sira se levanto mirando hacia donde estaban las fogatas de los soldados y dijo Bien mientras tanto algunos otros podian dedicarse a intentar sabotear las defensas del poblado. asi nos sera mas facil atacarles. Que me decis?

No parece que tengáis mucho aprecio por la vida de los "emisarios" .Si saboteamos algo mientras ellos estén dentro sus vidas valdrán menos que la virginidad de una zamoriana-replico mirando a Sira

veras, nosotros mismos no creemos en los emisarios por principios y creo que cualquiera de nosotros que recibiera un emisario lo que haria es cortarle la lenga, sacarle los ojos y decapitarlo y enviar su cabeza de esta guisa en una bandeja al que envio el emisario. Asi que con esta idea, creo que no esperamos salir muy bien parados de alli. Desconfia de aquel que te envie de emisario, pues te esta enviando a una muerte segura y sin dignidad ni batalla.

Asiento ante las palabras de Zoltak : No te falta razón, mi tribu usaba los cráneos de los emisarios como copas pero los de esa ciudad son gente civilizada .Ya sabes bellas palabras en la boca y veneno en la copa

Los historiadores dibujan una serie de patrones que alguno de vuestros soldados más hábiles convierten en trajes usados en la ciudad.
Os ponéis los trajes y encajan. Las mangas anchas y el cinto ceñido os permite ocultar vuestras armas en los antebrazos sin que se note demasiado. Avanzáis por el bosque dejando atrás a vuestro ejército. Según os vais acercando a la ciudad podéis ver que hay torres de vigilancia situadas en los alrededores, exactamente una por cada camino posible. Son torres en donde no hay una gran cantidad de soldados, tan sólo unos 10 en cada una de ellas, pero sin duda podrían dar problemas a la hora de avanzar, puesto que tienen una posición privilegiada para hacer daño.

Tras dos días caminando llegáis a la gran muralla que rodea Polopponi.

Es una muralla tan ancha como esperabais. Vuestros ojos se fijan en los detalles, las almenas son una constante y protegen los puntos más débiles de entrada a la ciudad: sus puertas. Os dais cuenta de que si rompéis cualquiera de las puertas, podríais tirar abajo una gran parte de las murallas como si fuesen fichas de dominó.
Entráis junto con los mercaderes que traen sus productos a la ciudad. Las calles están a rebosar. Hay viejas ofreciendo objetos inútiles, magos callejeros y PLOFFF una gran explosión ocurre a vuestra derecha. Un hombre con una especie de pañuelo gigantesco que le envuelve la cabeza, acompañado por otro que tiene un color de piel totalmente amarillo, sostienen unos cuencos de madera y cada vez que acercan al cuenco una llama, explosiona en pequeñas chispas. Lo llaman explosivos. Un poco más allá hay una serie de criadores de animales.
El camino continúa con más mercadería. Veis que es una ciudad con muchas opciones. Tenéis posadas en donde beber lo que no habéis bebido desde que sois generales. El gran palacio se encuentra al fondo de la ciudad, hacia el sur.

-Por Erlik que esta ciudad es extraña -digo caminando con mis compañeros, sin dejar que la sensación de asombro aflore en mi cara, y que los paseantes oigan mis palabras. Luego presto toda mi atención en esos explosivos, y me hago una idea de donde los guardan, como podríamos hacernos con ellos, o utilizar esa información.

Quiero saber:

-Donde se vende el material inflamable.
-Como lo transportan.
-Camino de acceso a los lugares donde se venden.
-De donde lo traen a los puntos de venta. Algun almacen general o algo asi.
-Como son de grande los recipientes de madera.

-Cuantas puertas y cuantas almenas hay, y su distribuición.
-Me gustaría dibujar un mapa de la zona de acceso a la ciudad, sus murallas exteriores, y la distribución interior. Es muy importante para empezar a colocar en él las cosas que nos interesan, y hacer el plan posterior. En el mapa quiero colocar las torres de vigilancia que hemos visto al acercarnos.

De momento no quiero nada más, gracias.

Sigo caminando junto a mis compañeros, sin perder detalle.