Partida Rol por web

Os encontráis a bordo de la fagata Verinian recién despegada de la Ciudadela en función diplomática varios meses después del ataque del Soberano a la estación espacial. La fragata es una nave de tamaño medio, parecida la primera Normandía, diseñada para misiones independientes, cuenta con una tripulación de 15 tripulantes, repartidos entre sus diferentes funciones y cuenta con una lanzadera para depositar tripulación en caso de que la nave no pueda aterrizar.

En el comienzo de vuestro viaje os encontráis en la sala holográfica de comunicaciones recibiendo los detalles de vuestra misión del Consejo de la ciudadela. En la habitación estáis los cinco (dos quarianos, una asari, un turiano y un humano) además de un Volus y los hologramas del Consejo (incluyendo el recién añadido consejero humano).

-Consejera asari: Buenos días, nos alegramos ver que el despegue ha sido un éxito y estáis de camino a vuestra misión, os recordamos la importancia de esta para la reconstrucción del a ciudadela. Vuestro destino es una pequeña estación minera en un planeta del Cúmulo de Valhalla, en el sistema Terminus, donde deberéis encontraros con la diplomática Quariana.

-Consejero Udina: Como ya sabéis nuestra autoridad no es muy respetada en ese sistema así que esperad complicaciones. Pero el equipamiento y tecnología de soporte vital que la Flota Nómada puede proporcionarnos es de inmenso valor así que la relación con los Quarianos debe ser cuidada en extremo. 

-Consejero turiano: Dado el deplorable estado de nuestra flota, sigh, hemos tenido que asignaros una de las fragatas de la flota turiana. Tratadla bien. Os acompañará un representante de la compañía Elkoss, su función es ayudar a la transacción dado el papel de la compañía en los esfuerzos de reconstrucción.

El Volus se adelanta y os saluda con un amago de reverencia. Pese a que habla a través de los filtros de su traje se distingue un deje despectivo y orgulloso en su voz.

-Encantado de estar a su servicio, consejeros.- Y dirigiéndose a vosotros- La compañía está muy interesada en los frutos de esta misión, por ello hemos financiado gran parte de ella. Estoy seguro de que, como responsables de llevarla acabo, os aseguraréis de que todas las partes acaben beneficiadas. 

En cuclillas frente al dispositivo holográfico se encontraba Seena'Koris nar Qwib-Qwib, enfundada en su traje ambiental característico de colores enfrentados con el que siempre se había mostrado ante cualquiera que no formara parte de la Flota Nómada. Su atención mostraba más interés en el perfecto funcionamiento del objeto que emanaba una imagen ligeramente anaranjada del cuerpo del consejero salariano, que del sonido vocalizado por los altavoces. De su brazo izquierdo sobresalía una Omni-Herramienta que apenas apagaba, combinando con su vestimenta como si de un accesorio más se tratase.

Se incorporó con un movimiento rápido tras escuchar las primeras palabras procedentes del Volus y, con un paso ligero y despreocupado, se acercó a él. - Me llamo Seena'Koris nar Qwib-Qwib, ¿y tú? - Acercó su mano de tres dedos en dirección al pequeño Volus, siguiendo una pauta que le habían enseñado y que servía para saludar a alguien desconocido. - Es la primera vez que conozco a alguien de tu especie. ¿A qué fabricante le compras tus recambios en filtros? Yo solo he utilizado el de los laboratorios Aldrin. Según mi padre, son los que mejor calidad en manufacturación tienen. - Su voz, aunque ligeramente distorsionada, sonaba aguda y alegre. Sumado eso a su forma veloz y casi atropellada de hablar, parecía más una niña a la que le hubieran regalado un juguete que una quariana competente en su profesión.

Tras las palabras de Seena'Koris se hace un silencio en la habitación. El Volus se queda parado, si no fuera por la máscara podríais ver en su cara lo poco que se esperaba que se dirigieran a él de esa forma:

-Señorita, soy Botnar Hun, representante de Elkoss, como ya ha dicho el Consejo. Y me aseguraron que este equipo sería especialmente elegido para la misión. - Dicho estoy le dedica una extensa mirada de pies a cabeza a la Quariana antes de darle la mano.- Espero que estén a la altura de las expectativas.

-Consejero salariano: El consejo tiene un horario apretado. ¿Tienen alguna pregunta más o podemos quedar a la espera de buenas noticias de ustedes?

Cumpliremos con la misión, consejeros- digo al mismo tiempo que me encuadro llevando mi mano extendida delante de mi frente. Y le aseguro que estaremos a la altura, señor- digo mirando a los ojos del Volus. Dicho esto, rompo mi encuadre para adoptar una postura más relajada, esperando que la quariana no siguiera haciendo gala de la curiosidad de su raza, y aún más acentuada si, como creo poder deducir, está haciendo el Peregrinaje. Así que tenemos a una jovencita a bordo.

Escuchó atenta las palabras de todos los presentes, vestida con un práctico pero elegante traje espacial. El viaje al Sistema Términus era peligroso, pero el riesgo podía merecer la pena si lograban obtener un trato favorable. Después de observar el ritual del extraño humano, dio un pequeño paso al frente y se inclinó ligeramente ante los tres mandatarios antes de hablar:

-Sí, con mis respetos me gustaría dirigir una pregunta al estimado Consejo. ¿Qué capitán de nave será nuestro enlace con la Flota Quariana? -Zellisa había estudiado a los Quarianos hasta cierto punto, y sabía que lo más parecido a una autoridad en dicha especie eran los altos mandos de cada nave. La situación nómada podía convertir una tripulación desesperada en peligrosos piratas, y siempre era bueno contar con el respaldo y la protección de algún capitán.

En aquel momento el quarisno presente se acerco a la joven quariana y le puso la mano en el hombro, era alto para los de su raza aunque de una contextura bastante delgada, los tonos de su traje espacial eran claros y discretos y su visor era totalmente espejado lo que evitaba que se le viera el rostro, al acercarse al Volus (quizas demasiado) y verlo hacia abajo menciono, mi nombre es Zaas'Gerrel nar Neema y te puedo asegurar que al menos mi amiga y yo estaremos a la altura y muy por encima mi señor, aquello era sin duda un juego de palabras que se veia traicionado por el tono despectivo que lograba adivinarse tras el respirador, sin lugar a dudas aquel Quariano era engreido y no le habia gustado aquel deje de duda en el tono del burocrata que los acompañaba.

Al escuchar la pregunta de la asari se volteo dandole la espalda al Volus y observando en holograma, buena pregunta mi estimada, el consejo puede informarnos con que nave de la flota tendremos contacto? para un quariano aquellas preguntas significaban lo mismo.

Permanecí con los brazos cruzados mientras el consejo nos daba las instrucciones precisas, vestia le típico traje turiano, interiormente daba las gracias por que pudieramos levar una nave de mi raza, el viaje podia ser peligroso y no habia naves más preparadas para la guerra que las de su raza.

---Así se hará consejeros, por mi parte podemos partir cuando querais- digo inclinando levemente la cabeza ignorando los comentarios de algunos de mis compñaeros

-Consejera asari: Lamento informarles de que la emisaria no proviene del grueso de la Flota Nómada. Si no de su nave de exploración Idenna. Según se acerquen a la estación ella contactará con ustedes, su nombre es Shule'Shemin vas Idenna.

-Consjero turiano: Les hemos dejado más detalles en los archivos de la nave, su viaje de ida no debería tardar más de dos días, dado lo apartado de la ubicación. Mucha suerte, y recordad que representáis a la enteridad de la Ciudadela. 

El holograma se apaga y la habitación vuelve a iluminarse con la luz ambiental normal de la nave.

Afirmó enérgicamente con la cabeza tras la primera frase que Zaas'Gerrel nar Neema le dedicó a Botnar Hun, sin perder detalle del Volus. Había leído sobre dicha especie de pequeña, e incluso visto fotos; pero sus recuerdos a veces se enrevesaban por una imaginación demasiado vívida. En su memoria, a diferencia de la realidad, los Volus medían lo mismo que ella y eran incluso más regordetes y esponjosos; casi como un peluche de tamaño sobredimensionado. Por desgracia, la evidencia decía lo contrario, lo cual le resultó ligeramente decepcionante.

Solo el nombre de una nave la sacó de su ensimismamiento, girando su cabeza para mirar de soslayo en dirección al visor del Quariano. - Ese nombre me suena. Recuerdo escuchar a mi padre hablar de esa nave durante días. - Apoyó lo que sería el dedo índice y corazón en una mano humana en el lugar donde se podía intuir que se encontraba la barbilla de la Quariana. - Algo sobre que se separarían de la Flota Nómada para... - Encogió los hombros en un signo de indiferencia, dando a entender que no se acordaba y tampoco le resultaba importante no hacerlo.

Seguidamente centró su atención en la Asari y, con paso ligero, se acercó a ella elevando la mano por el camino para repetir el mismo saludo que utilizó con el Volus. - Me llamo Seena'Koris nar Qwib-Qwib, ¿y tú? - Ladeó la cabeza, mirándola de abajo arriba. - Me gusta tu color. -

Sonrió a la joven quariana, e hizo una ligera inclinación de cabeza a forma de saludo.

-Gracias, Seena'Koris, un placer conocerte. Soy Zellisa Helyne, y trabajo actualmente para la embajada Asari. -echó un vistazo rápido al otro quariano -He tenido trato con algunos miembros de tu especie, pero no muchos. Espero que nos llevemos bien y que esta experiencia sea enriquecedora para todos -dijo mientras miraba también a los presentes. -Señor Hun, debo decir que me agrada tenerle aquí. Conozco algunas líneas de productos de su empresa y sé que hacen un buen trabajo. Sin duda el Consejo agradece la ayuda que Elkoss Combine pueda aportar para llevar a buen puerto esta empresa. ¿Qué puede contarnos según su experiencia en este sector?

Botnar está visiblemente relajado ante la apariencia de profesionalidad del resto del equipo y se dirige a Zellisa con un tono que todos asociáis inmediatamente a empresarios haciendo negocios en las plantas más altas de la ciudadela. 

- Sí, los intereses de la Ciudadela son claros. Conseguir la mejor tecnología para la reconstrucción al mejor precio y aunque el Consejo hayan decidido, para bien o para mal, no recurrir a las mayores industrias en este aspecto no por ello tiene por que ser perjudicial para la reconstrucción. - Se gira hacía los quarianos presentes y añade.- Este es un trato muy lucrativo, y está claro que la Flota Nómada intentará sacarnos todo lo que pueda, hay que presentarse firmes y no ceder terreno. Si me necesitáis, estaré en mi camarote.

Dicho esto sale de la sala, cuando las puertas se abren veis a sus dos guardaespaldas esperándole, un humano y un krogan uniformados con el logo de la compañía. Las tres figuras desaparecen rapidamente por los pasillos.

Escucho atentamente a todos los que hablan, dirigiendo mi mirada a cada uno, luego de que Botnar se retira añado, Mi nombre como quizás ya habrán escuchado es Zaas'Gerrel nar Neema, mi especialidad se encuentra tras los comandos de cualquier nave, creo que nací pilotando así que a eso me dedico, si necesitan algo de mi estaré en el puente familiarizandome con los controles de esta espectacular dama, para poder tratarla con todo el respeto que se merece... Dicho esto el Quariano se retira de la habitación, consultando en su omni-herramienta el mapa de la nave.