Partida Rol por web

Rincón

CAPÍTULO II: PECADOS VENIALES

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04/02/2013, 15:06
Venancio

-¿Pero qué jauría nin qué narices? -replica Venancio con bastante mal humor-. ¿Queredes dexar ya de dezir sandeces, viejo?

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04/02/2013, 15:20
Ventura Montesinos

Me rasco el mentón preguntándome que será eso de lo que habla el viejo.

¿Y qué es esa Jauría de la que tanto hablades? —le pregunto directamente a Carnedo—. ¿Acaso un leyenda de por estos sitios?

Notas de juego

Ole mi castellano antiguo inventao... perdoneme el señor letrado y director por mis incorrecciones, me apetece utilizar algo de lenguaje de época pero no tengo ni idea. Acepto correcciones o apuntes muy gustoso.

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04/02/2013, 16:16
Simplicio Ruipérez

Simplicio asiente y mira de reojo por si el castellano se une a él.

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05/02/2013, 00:13
Gregorio de Carnedo

El viejo Gregorio, contento de ser al fin escuchado, se prepara para narrar la historia: bebe un buen trago de su hipocrás y trata de crear ambiente para que sus palabras suenen convincentes. El Milhombres y Venancio ponen la misma cara de hastío, pero el resto calla y escucha de nuevo una historia que deben saberse de memoria.

-Sabed, forasteros, que tiempo ha que vivía en aqueste valle un cazador, que con su arco et los sus perros andaba siempre por el bosque et nunca folgaba. Traía al varón buena carne, sabrosas liebres et aves abundantes, tan que rebosaba la despensa et pocas creaturas dexaba que poblaran la espesura. Et cubríalo el barón de oro porque por él cada día podía comer la mejor carne. Mas tan contento con él estaba el barón como odiado empezaba a ser por el pequeño pueblo que desque el mundo es mundo gobierna los bosques, que por su culpa veýan dañado el equilibrio de la Madre Tierra. Cruzóse un día el cazador con una grande mandrágora, et aquesta, por castigar su mucha avaricia et poco comedimiento, lanzóle tal maldición que los sus proprios perros devorádonlo vivo, et depués la jauría entera enloqueció, perdiéndose en el bosque. Et desque aquesto se avino, cuando uno camina cercano a los bosques del valle de Rincón, puede escuchar los ladridos de la jauría, mas nunca vella.

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05/02/2013, 00:14
Director

Y, nada más terminar la historia, fuera se levanta un terrible vendaval que ulula con fuerza, y acto seguido la puerta se abre bruscamente, dando un portazo contra la pared, y un grupo de hombres irrumpe en la sala. Son siete, van vestidos con petos y pieles y llevan pequeños arcos y ballestas como los cazadores.

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05/02/2013, 00:14
Criado (2)

-¡Posadero! -grita uno de ellos con voz estridente-. ¡Mueve el culo et trae vino caliente para mi señor!

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05/02/2013, 00:17
¿?

Otro de ellos se acerca a la mesa alargada que ocupa Carnedo.

-¡Quita de ahí, vejestorio! -le ladra, y a continuación le empuja, tirándolo al suelo. Gregorio se levanta de inmediato y se aparta de él y los demás recién llegados.

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05/02/2013, 00:17
Mateo de Antequera

El último en entrar viste ropas más caras y lujosas que los demás, y todos los que han entrado delante parecen pendientes de él.

-¡Anastasio! -grita al que ha ahuyentado a Carnedo-. Ve a traerme mis cojines, que non quiero ensuciarme el culo con aquestos taburetes llenos de polvo.

La orden es cumplida enseguida, y el tal Anastasio regresa con un par de cojines de terciopelo con bordados dorados.

El resto de parroquianos evita mirar a los recién llegados. El tipo se quita el gorro y lo deja sobre la mesa, justo antes de que Venancio se acerque con una jarra humeante y le sirva un vaso.

Notas de juego

Tirada de Descubrir.

Sharak, no hace falta correcxión, utilizas muy bien el castellano medieval. Yo lo he metido para que veáis que hay diferencia entre los vecinos de Rincón y la otra gente con la que habéis estado. De todas formas, no todos hablan con ese acento (por ejemplo, el sacerdote y el Catalán hablan "normal").

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05/02/2013, 00:25
Sancho

El tipo sale antes de que empieces a moverte hacia la salida. Cuando regresas al patio, lo ves hablando apresuradamente con uno de los soldados de guardia y señalando el edificio del que acabas de salir. Acto seguido, el soldado camina a paso ligero en tu dirección y se cuela en el salón.

Este tipo no se fía un pelo de vosotros...

Luego se acerca a ti, y te dice:

-Caminad vos delante.

Salís ambos del castillo y comenzáis a descender la empinada pendiente en dirección al pueblo. Sancho es parco en palabras y se limita a seguirte sin abrir la boca, esperando que le guíes hacia el lugar donde se encuentra el resto de tus compañeros. Cuando te da por mirar hacia atrás, ves a un soldado rezagado incorporándose a vuestra marcha desde el castillo, y oyes cómo la rejilla de la entrada baja bruscamente.

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05/02/2013, 00:48
Don Ramiro

Al poco de salir del salón Sancho y Simplicio, entra un soldado y se queda a una distancia prudencial.

-Ah, aqueste Sancho -se queja el barón, pero enseguida vuelve a prestarte atención a ti-. Bien estonces, Manoel Xoan; los de baja cuna non dan tantos problemas, et casi siempre son los más leales. Ah, sí, las bestias... cuatro veces con aquesta atacados han a las gentes del valle. El primero fue el posadero, a principios del estío; su pobre fijo Venancio hubo de encargarse de la posada con solo diecisiete años. Depués otro más en Carrigón, et el último antes daqueste fue en Estañedo, dos aldeas cercanas. Por lo que contó el Catalán, el médico del pueblo, todos los finados habían feridas de colmillos, mas non fueron devorados; como si las feras más quisieran fazer daño que comer, cosa asaz estraña. En cuanto a los bandidos, muy temido en aquestas tierras es Alvar el Sanguinario et sus hombres. Antes de los ataques de los lobos mataron a uno de mis caballeros et algunos de sus hombres, et por tal creýmos que era él que estaba matando a los vecinos; mas en verdat meses ha que non dan señales.

Don Ramiro te cuenta todo esto mientras te invita a salir del salón y paseáis por el patio de armas, pero antes de mostrarte el castillo aguarda por si tienes más preguntas. El soldado os sigue en todo momento.

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05/02/2013, 01:00
Ruperto
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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05/02/2013, 01:45
Director

Cuando el tipo con pinta de noble se quita el gorro, observas que tiene una pequeña tonsura, propia de frailes y goliardos.

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05/02/2013, 10:48
Íñigo de Arreba

¡Jodidos Nobles!

Lo que disfrutaría Íñigo metiéndole un palo por el culo a aquel estirado para que se estirase aún más y con motivo... Claro que tampoco el de Arreba iba a mover un dedo por aquellos mataos.

- Tiradas (1)
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05/02/2013, 10:43
Xoan Manoel

Respondo a Don Ramiro respecto a las compañias:

-Non creas, Cheguei á conclusión de que a única cousa leal, son cans, e si dalles comida.

Sopeso su respuesta sobre a los animales:

-Moy raro que ataquen et non coman a la presa, os animais poden ser enfermos con la rabia ou a saber que - me santiguo al decir esto-

Repito el nombre del bandido:

-Alvaro el sanguinario, nestes tempos, a fame fai que as persoas obteñen o que necesitan, por calquera medio, o problema é cando se abusa, entón temos que erradicar esta plaga. Se non o houbera sinais de vida, os animais poden haber hecho la faena, o hayan huido. Quen sabe ...

Mientras paseamos, le comento:

-Estamos á súa disposición para todo.

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05/02/2013, 22:05
Simplicio Ruipérez
Sólo para el director

Más que yo tendreis que ser vos el guia, pues no cognosco estos lares. Digame pues vuesa merced el sendero  más recto y más mejor para la posada, pues creome que morarán alla.

Simplicio no está cómodo con la compañia que le ha tocado. Intuye que para el castellano él es poco más que una mala bestia. No le hará cambiar de opinión por mucho que se esfuerce, asi que mantendrá con su guia "castellano " la misma indeferencia que percibe.

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05/02/2013, 22:59
Ventura Montesinos

Mi primer instinto es ir a ayuda al viejo Carnedo a levantarse pero ya se sirve él mismo. Con gusto hubiera sacado mi cuchillo y tirado de él de abajo a arriba dejando a la vista las tripas del maleducado mozo. Pero no era tiempo de eso. Lo más probable es que me cogieran entre el resto y acabara de decoración en una soga.

Me acerco a Venancio, que anteriormente se descubrió como el posadero y le susurro algo al oído.

Son habituales por estos lares aquestos "sangre buena"

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues me alegro oye... yo realmente no tengo ni puta idea, intento reproducir lo que hacías en Apocalypsis. Al final de tanto leerlo algo se queda.

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06/02/2013, 01:53
Sancho

-Vayamos pues a la posada -se limita a decir Sancho, y marcha ligero por delante, dejándote a ti entre él y el soldado que os acompaña.

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06/02/2013, 01:54
Director

Cuando el tipo con pinta de noble se quita el gorro, observas que tiene una pequeña tonsura, propia de frailes y goliardos.

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06/02/2013, 01:55
Venancio

Venancio, con cara de preocupación, se acerca a vuestra mesa antes de contestar en otro susurro a Ventura, para que todos le oigáis:

-Aqueste es Mateo de Antequera, fijo del caballero Lorenzo de Antequera, un hombre rico que vive en la cibdad. Allende las tierras del barón ha en el bosque una villa fortificada, mas solo la visita aqueste su fijo, que gusta de la caza. Favor vos pido, por Dios, de non le causar enojo, que pronto se habrá de ir.

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06/02/2013, 01:56
Director

Llegáis pronto a la plaza y os dirigís a un edificio de madera de dos plantas con un establo anejo. Por encima de la entrada hay un letrero cuadrado de madera suspendido del techo del soportal mediante dos cadenas, en el cual se ve escrito con carbón y horrible caligrafía el nombre que le han dado al local: el buen hipocrás. Sancho abre la puerta y entráis salvando el escalón a la sala principal, iluminada por varios candiles dispuestos en las mesas, que están lindando con las paredes a excepción de la más grande, frente a la chimenea del fondo. Todas están ocupadas, y en la segunda de la derecha se sientan tus compañeros.

No obstante, Sancho no les presta atención a ellos, sino al grupo que está sentado en la mesa frente a la chimenea, que tienen pinta de cazadores, ya que portan pequeños arcos y ballestas. Uno de ellos, vestido con ropas de calidad y sentado en un taburete sobre unos cojines de terciopelo, se levanta al ver a Sancho.

Notas de juego

Tienes el plano de la posada en la sección Mapas y planos.