Ruperto amaneció un día más casi sin poder levantarse de la cama. Había mejorado mucho en poco más de un mes, pero la terrible herida que le habían hecho cerca de la columna no había cicatrizado bien, se le había infectado y le provocaba fuertes dolores y unas fiebres muy altas. Comenzó a empeorar y empeorar, y quedó en un estado de extrema debilidad. Cada día estaba peor, y el Catalán, que había estado visitándoos cada semana, temía por su vida.
En cambio, Simplicio y Ventura se habían recuperado completamente, y al mes ya estaban totalmente repuestos de sus heridas y podían cumplir sus funciones como soldado y artesano, respectivamente.
Xoan Manoel tardó un poco más, pero también se repuso. Recibíais cada cierto tiempo visitas de Monseñor Luis, que se interesaba por la salud de todos y aseguraba que rezaba cada día por Ruperto.
Por su parte, Íñigo había empezado a trabajar casi de inmediato, y ese día se encontraba en compañía de otros soldados, haciendo la ronda por el valle.
En estos casi tres meses habéis tenido tiempo de conocer mejor a la gente del castillo* y comprobar que le son absolutamente fieles al barón don Ramiro. Y no ha habido ningún incidente digno de señalar, a pesar de las amenazas del caballero don Lorenzo de Antequera. Os habéis hecho ya a la vida del castillo, y ahora sabéis perfectamente cómo funciona todo y cuáles son los procedimientos a seguir. Sancho, el castellano, que tanto recelaba de vosotros, os ha terminado aceptando, pero os deja claro en todo momento que él está por encima de vosotros en la cadena de mando.
Motivo: Ruperto: Curación 1ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 1ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 63 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación 2ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Medicina 2ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 58 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación 3ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Medicina 3ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 97 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 3ª semana
Tirada: 2d4
Resultado: 4
Motivo: Ruperto: Curación 4ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Medicina 4ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 57 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación 5ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 3
Motivo: Ruperto: Medicina 5ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 4 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación adicional 5ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Curación 6ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 6ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 80 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 6ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 4
Motivo: Ruperto: Curación 7ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 7ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 93 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 7ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Curación 8ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Medicina 8ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 94 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 8ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 4
Motivo: Ruperto: Curación 9ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 9ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 63 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación 10ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 10ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 78 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 10ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Ruperto: Curación 11ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 11ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 62 (Exito)
Motivo: Ruperto: Curación 12ª semana
Tirada: 1d3
Resultado: 1
Motivo: Ruperto: Medicina 12ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 93 (Fracaso)
Motivo: Ruperto: Empeoramiento 12ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 3
Motivo: Simplicio: Curación 1ª semana
Tirada: 1d10
Resultado: 9
Motivo: Simplicio: Medicina 1ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 36 (Exito)
Motivo: Simplicio: Curación 2ª semana
Tirada: 1d10
Resultado: 10
Motivo: Simplicio: Medicina 2ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 84 (Fracaso)
Motivo: Simplicio: Empeoramiento 2ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Simplicio: Curación 3ª semana
Tirada: 1d10
Resultado: 1
Motivo: Simplicio: Medicina 3ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 100 (Fracaso)
Motivo: Simplicio: Empeoramiento 3ª semana
Tirada: 2d4
Resultado: 3
Motivo: Simplicio: Curación 4ª semana
Tirada: 1d10
Resultado: 8
Motivo: Simplicio: Medicina 4ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 58 (Exito)
Motivo: Ventura: Medicina 1ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Ventura: Medicina 1ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 85 (Fracaso)
Motivo: Ventura: Empeoramiento 1ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 1
Motivo: Ventura: Curación 2ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Ventura: Medicina 2ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 98 (Fracaso)
Motivo: Ventura: Empeoramiento 2ª semana
Tirada: 2d4
Resultado: 4
Motivo: Ventura: Curación 3ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 1
Motivo: Ventura: Medicina 3ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 70 (Exito)
Motivo: Ventura: Curación 4ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 2
Motivo: Ventura: Medicina 4ª semana
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 2 (Exito)
Motivo: Ventura: Curación adicional 4ª semana
Tirada: 1d4
Resultado: 4
Increíble, después del proceso de curación, Ruperto caería de nuevo en coma después de casi tres meses, pero voy a dejarle con 3 PV al menos para que pueda andar, y a lo largo de la semana irá perdiendo PV hasta caer inconsciente al final.
Para Simplicio la recuperación es de 1D5 PV semanales, pero como no viene ese dado, he tirado 1D10 y lo he dividido entre 2.
* Ver Dramatis Personae
Esta mañana, como decíamos, Ruperto se encuentra débil como siempre. Acabáis de recibir la visita del Catalán, y por su cara véis que no le gusta nada el aspecto que tiene su herida.
-Yo no puedo hacer nada más por él -os explica al resto, Simplicio y Ventura, que estáis presentes en la visita del médico a Ruperto, el único que tras estos meses no se ha recuperado-. Reconozco que la herida era demasiado grave, y no he tenido la suficiente habilidad para sanarla. Incluso podría morir...
El Catalán calla mientras le cambia la cataplasma, y al retirársela se ve una la fea herida junto a la columna, impregnada de un líquido pastoso y amarillento de muy mal olor.
-Esto tiene mala pinta -comenta-. La infección empeora.
Después, saca un tarro con un ungüento verdoso, lo unta en un lienzo limpio y lo aplica a la herida.
-Dudo que esto sirva de algo.
Una vez ha terminado, coge su zurrón, pero antes de irse, se queda unos instantes pensando, hasta que finalmente os dice:
-Hay una mujer en Estañedo*, una aldea que hay al otro lado del puente, a la cual llaman la Abuela. Tiene fama de excelente curandera, aunque otros dicen que no es más que una bruja chiflada... Yo de vosotros cogería un caballo y llevaría allí a vuestro amigo; sin correr, pues ni siquiera soportaría el trote. Nada se pierde por probar.
El Catalán se dirige a la salida de vuestra torre, y antes de marcharse, añade:
-Que tengáis buena suerte. Ya sabéis que si necesitáis mi ayuda, me podéis encontrar en mi casa.
Saltaba a la vista que el médico se sentía muy mal por no haber sido capaz de salvar a uno de los héroes que lucharon contra aquel asesino de Mateo. Pero tal vez podría haber una última esperanza...
* Ver mapa.
Nota: se suponía que este interludio iba a ir sobre la historia de Ruperto, pero las circunstancias han provocado un cambio de trama. Aunque si Ruperto quiere, puede arriesgarse a ver si sobrevive sin más ayuda (ya sabéis que al final de semana Ruperto caerá de nuevo en coma, pero podría mejorar después... y también morir, claro) y seguir alguna de las pistas que tiene sobre su padre (el medallón, la extraña reacción del cura al verlo, la posada del Arriero...)
Simplicio escucha complacido la idea de salir del castillo, no solo por estirar sus ya largas piernas, si no tambien, porque en ese pueblo, puede haber mercado para algunas de sus mercancias antequeranas.
Antes de que Ruperto decida o no si está para viajar, Simplicio quiere buscar informes entre lugareños y acastillados, sobre lo que habrán de encontrarse en Estañedo y en los caminos que van y vuelven.
Quien me lo iba a decir. Había huído de todos, superado las peores circunstancias... Y por una casualidad del destino, allí estaba. La herida había sido grave, sí, pero la había superado. O eso creía, hasta que empecé a empeorar.
Y es que ese "médico" no me gustaba. Algo me decía que sabía de medicina lo mismo que yo. La única diferencia es que yo al menos había salvado una vida y para mi disgusto, ahora era la mía la que se escapaba de mis manos.
Con resignación, posiblemente producto de la fiebre, me noto cada día más débil. Al final, acabaría en una cama de un castillo, muerto fruto de una mala herida. La única pista que tenía sobre el paradero de mi padre, qué fue de él, seguiría siendo un misterio.
¡NO!
Sacando fuerzas de flaqueza, me mentalizo día tras día de que eso no es posible. No voy a morir sin saber qué ocurrió con él. Al menos, me quedará el consuelo de haberlo intentado, aunque muera en un camino.
Tal vez por ese arrojo tan impropio en mí, es por lo que el catalán comenta lo de la bruja. Normalmente, diría que son pamplinas y habladurías, pero todavía recuerdo entre pesadillas lo que me ocurrió hace casi cuatro años. Además, buscar a esa mujer es mi única esperanza.
Así, como buenamente puedo, casi a rastras, y apoyado en un improvisado bastón, me dirijo a uno de los establos. Apenas si puedo andar, y si lo hago mucho, puedo notar como me sube la fiebre, se me va la cabeza, y la herida me supura.
Por suerte, tengo compañeros menos desesperados que yo, pero sí más gratos. Mis antiguos compañeros, Ventura y Simplicio, deciden no dejarme solo. Dicen que me acompañarán.
Pues que así sea. Noto como cada vez estoy más débil. No tengo mucho tiempo. Si tenemos que buscar a esa mujer, tenemos que partir ya.. O puede que cuando la encontremos, no sea más que un cadáver...
Lo dejo un poco abierto, más que nada a que mis compañeros digan cuando partimos. Pero estando como estoy, poco más puedo hacer que montarme la película que me acabo de montar.
Mientras Ventura prepara las cosas para el viaje, Simplicio se dedica a indagar sobre esa aldea a la que vais a ir y la supuesta bruja.
Y muchas cosas le dicen, pero como suele ocurrir con aquello que no se conoce de primera mano, la información que proporcionan se contradice en varios puntos.
Sobre la aldea, dicen que Estañedo es una villa franca* que se encuentra al norte del valle en el territorio del monasterio de San Gabriel, pero que tanto el mantenimiento del puente como de los caminos corren a cargo del barón, que además imparte justicia en todo el valle, de manera que a veces los vecinos de los pueblos de alrededor acuden al castillo para solucionar sus pleitos, y no al monasterio.
Dicen que hay un castillo en ruinas cerca de Estañedo, y que es mejor no acercarse a él porque cuentan que están maldito, pero también os dicen que los estañedenses son muy fantasiosos y les encanta inventar leyendas sobre el castillo.
Sobre la tal "abuela" las contradicciones son aún mayores. Unos dicen que es partera, otros que una bruja peligrosa a la que es mejor no acercarse, otros que vive escondida en el bosque cerca de Estañedo, y otros que es la máxima autoridad de esa aldea y que todo el mundo allí le hace caso. Hay quien dice que ha estado allí desde siempre y que incluso vio nacer al viejo barón, pero también dicen que no ha salido nunca de Estañedo.
En fin, lo que cabía de esperar cuando hablan de brujas, o de presuntas brujas.
Cuando Simplicio vuelve y os cuenta todo esto, ya estáis listos para partir. Habéis tomado prestado el magnífico caballo de Mateo, que ahora se supone de Xoan Manoel. Él no está hoy por aquí; debe estar en el pueblo hablando con su amigo el cura o tomando algo en el Buen Hipocrás, pero desde luego que aprobaría que os llevaseis el caballo.
Ruperto se aferra bien al corcel y Ventura coge las riendas para que vaya despacio.
Esperáis no encontraros en vuestro viaje con los famosos bandidos que están asolando el valle, ese tal Alvar el Sanguinario y sus hombres, aunque hace tiempo que no oís de ellos. De todas formas, no tenéis elección.
* villa franca: que goza de algún privilegio, como por ejemplo exención de impuestos.
Saliendo del pueblo por el camino real os encontráis con Leandro, el arriero que conocisteis en el Buen Hipocrás a vuestra llegada al pueblo. Anda aporreando a la mula, que se ha plantado allí y no quiere avanzar.
-¡Será hija de la gran puta la mula de los güevos! -maldice con toda su mala leche. La verdad es que es un tipo desagradable y a casi nadie le es grata su compañía; sin embargo, al veros os saluda-. ¡A la paz de Dios! Paréscesme fuerte tú... -le dice a Simplicio, y le da las riendas de la mula-. Toma, ayúdame a tirar daquesta puta bestia que me quiere dexar aquí plantado.
Simplicio al ser el unico hombre de armas propiamente dicho de la expedición, decide tomar el mando de la misma.
Ha colocado a Ventura dirigiendo la cabalgadura del enfermo Ruperto y le ha dicho que tenga la ballesta a mano. Tambien quiere que Ruperto a lomos del caballo, pueda hacer buen uso de la ballesta si se tuerce la cosa.
Él abriria la marcha con su escudo apoyandose en la lanza.
La expedición avanza, hasta que se encuentra con Leandro y los problemas con su mula.
Ante la interrupción en forma de Leandro y su mula, antes siquiera de mirar al arriero, otea los alrededores y huele el aire, por si algún problema se aproximase, ya se sabe cosa acostumbrada para los de su oficio.
Hecho lo cual, se aproxima a Leandro y coge las riendas de su mula intentando ayudarles.( ¿puedo tirar conocimiento animal?)
- Dicese que los animales acaban pareciendose a los sus amos. jejej
- ¿que sus trae a aquestas horas y en aquestos caminos?
-¿Que qué me trae? ¡Pues nus ha jodío el hombre! ¿Pues qué otra puede fazer un arriero que recorrer los caminos? Ya quisiera yo pegarme la vida en el castiello del barón, mas nin Dios nin el demonio me dieron nin valor nin fuerza pa bravuconear con una lanza.
Los arrieros como Leandro se dedicaban a recorrer los caminos transportando mercancías en sus bestias. Era oficio peligroso, pues los bandidos acechaban, y muy sacrificado por las largas distancias que habían de recorrer andando, pues la mula cargaba con toda la mercancía sobre sus lomos y no quedaba sitio para el arriero.
-P'allá que voy al monasterio de San Gabriel a llevalles a los dómines el diezmo, que tres viajes me quean toavía. Encima la mula non anda, que es más terca que mi santa. ¡Maldicta la mi suerte!
Haz la tirada de Conocimiento Animal, y si no resulta, una de Fuerza x2 pondrá en marcha a la bestia.
Tras fallar la tirada de conoc. animal.
Visto queda, que non sera con razones, sea pues con cojones.
Dicho lo cual el lancero tira de la mula logrando su proposito.
Ese monasterio que decis, ¿non queda del camino de Estañedo?
Compartamos si se tercia, senda y charla, que 4 espantaremos mejor que 3 o que 1 a la canallesca y los bandidos.
Motivo: conocimiento animal
Tirada: 1d100
Resultado: 58(+5)=63
Motivo: fuerza x2
Tirada: 1d100
Dificultad: 28-
Resultado: 15 (Exito)
-¡Al fin! -exclama Leandro, sin añadir ni una sola palabra de agradecimiento.
-Me place -contesta a la propuesta de Simplicio-. Anque si nos embosca el Alvar, poco podremos fazer contra él cuatro hombres... o tres, porque al que está en el caballo lo veo muy flojo et con poca chicha. ¿Et qué sus ha perdío en Estañedo?
Dicense que hay una curandera que puede revisarle los males.¿ conocesla?
¿ son seguros aquestos caminos?
¿ hay algo que saber de Estañedo?
-¿La abuela? Nunca la he vista. Nin quiero, que non me plazen los tratos con brujas. Et habemos buen médico en Rincón pa tratar aquestas cosas.
-Seguro non ha nada desque Alvar el Sanguinario et sus bandidos se pasean por el valle como don Pedro por su casa. Et si mataron a caballero et soldados, tanto más perigloso que se me parescen. Anque el caballero era mujer. Non sé cómo el barón quiso ponella en el castiello, que las mujeres na más que sirven pa follar, tener fijos et poco más; mira aquella, por jugar a los soldaditos adó está agora.
-En la aldea bien habredes de fazer pegando los culos a las casas si se vos acercan uno de esos mariconazos de Estañedo. Que otro nombre non merescen quienes se dejan gobernar por una mujer, et más por una bruja.
Tres toques de campana* debían haber dado ya cuando os separasteis de Leandro, que cogió un ramal del camino que llevaba al norte, hacia el monasterio. Su conversación era poco provechosa, ya que hablaba mucho sin decir nada, y quejábase de todo y de todos. Era un tipo amargado al que resultaba muy fácil odiar.
-Eheheheheee -arreó a la mula con la caña, aferrando las riendas y tirando para que que cambiara de dirección, y ni siquiera se despió.
*Unas seis horas
Ya es última hora de la tarde cuando llegáis a la aldea, aunque habéis estado viendo tierras de cultivo con cuadrillas de jornaleros desperdigadas desde que cruzasteis el puente.
Lo primero que divisáis a lo lejos es el castillo, ruinoso, abrazado por un pequeño bosquecillo, a varias leguas del pueblo.
Más adelante os recibe una enorme higuera solitaria a un lado del camino, que se erige como si presidiera toda la aldea. Tras ella, un puñado de casuchas y cabañas se arremolinan alrededor de un pozo comunal, en el que se reúnen varias mujeres con sus niños.
Me dirijo hacia esas mujeres y les pregunto por la "abuela de Estañedo".
Las mujeres se han puesto alerta en cuanto os han visto llegar, y han ido recogiendo a sus niños, tomándolos en brazos y situándolos detrás de ellas conforme os acercabais. Se ve que en este pueblo están menos acostumbrados a recibir visitas que en Rincón.
Una de las mujeres, la más adelantada, responde a Simplicio con una pregunta:
-¿Quién quiere vella et por qué?
Tenemosla por sanadora et guena, et aqueste enfermo quiere que se le remedien los sus males.
Me gustaria usar tiradas de descubrir, empatia...
La mujer observa a Ruperto. No hace falta ser médico ni curandero para saber que está débil y apenas se sostiene sobre el negro corcel. A pesar de que es un buen caballo y cómodo de montar, el camino siempre es duro para un enfermo.
-¿Quién vos fabló della?
Estañedo apenas es una aldea, y eso se nota en sus habitantes, mucho más cerrados que los rinconenses. Lo curioso es que esta mujer habla con confianza y autoridad, y las otras, aunque no hablan, tienen una actitud viril, cruzadas de brazos y observando. En otras palabras: se comportan como hombres.
Puedes hacer las tiradas que quieras.
El catalán, dijonoslo.
El muchacho anda debil, mejor fuere llevarlo ya a curar.
ese tipo de tiradas de percepción, son cosas del dj ¿ no?.
empatia para saber qué piensan de nosotros, si les hemos convecido....
descubrir, para conocer si hay algo de interes en los alrededores, o alguna cosa rara ...
-¿Un catalán? ¿Et qué sabe un catalán de nuestra abuela?
Bueno, no es necesario entonces, porque a simple vista ya estás viendo que no se fían de los forasteros, y no hay nada más digno de mención ahora mismo.