Partida Rol por web

Ieps!!

lo de SQ aún no lo pillo.. e inglés es "Class Features" o "Special (Features)"... :p

a parte de esta duda terminológica menor... la ficha creo que ya está completada... sólo me quedaría la foto...

a ver si para el lunes ya la tengo.... :p

Mea culpa SQ (Special Qualities) apareció por primera vez en los PNJs de Paizo, incluye habilidades como podría ser respirar debajo del agua, más movimiento o habilidades especiales dadas por la clase que no se incluyeran en ningun otro sitio.

¿Como has calculado los PV? Se calculan de dos formas:

1.- Maximo PV a Niv 1 y el resto la mitad del dado +1 + ajuste por contitución (para tí un total de 6 PV por nivel)

2.- Maximo PV a Niv 1 + las tiradas de dado correspondietes.

Ponle nombre al chucho. Sigo sin el manual a mano para el tema de los idiomas, terminamos los flecos y emepezamos ya.

Ah... ni idea de las SQ... pero si.. son las Dotes de Clase o raza...

los PV los calculé al màximo por nivel... :p como no sabía como hacerlo dije.. pues ya me dirá que no!!

Ok... ya lo cambio...

nombre para el perro... con lo que me cuesta tener un nombre para mis pj, ademàs ponerle un nombre a la bestia...

bueno.. ya lo pensaré... ahora no me viene ninguno digno... además será un perro pulgoso, haciendo conjunto con el aspecto poco cuidado del propietario... :p

OK, te dejo hasta mañana, por la tarde recopilo todo lo hablado y te finalizo la ficha y el 24/12/08 empezamos ya esté como esté.

Siento el retraso, empacho de langostinos el 25 y de canelosnes el 25 (to el gimnasio pa nada sigh!!), tienes el chucho terminado, ponle nombre y empezamos.

Una cosa, paso de trucos al perro y demás... el animal ara logico para un "superperro", pero no vamos a volvernos locos con le he enseñado tal truco o no sabe dar la pata  porque me he quedado sin casillas...

¿Que raza quieres?

raza...

vamos a ser coherentes... Un can infernal, zombie, planario, terrible (ah, no.. que no es un bicho natural!!)... :p

esta ciudad está en una zona cálida, no? (mm huskies y mastines descartados que se asan... :p) pues iremos a lo fácil... un pastor alemán algo holgazán.

Y su nombre... Kunder (??).

Aquella noche a tromba de agua del mes de las lluvias caía con fuerza, tanto Cornelius como Kunder estaban calados hasta los huesos aunque a Kunder parecía no importarle, chapoteaba en el agua como un cachorro mientras que su dueño andaba cansinamente por las calles de Psamma. No era un mal sitio si te gusta la vida en la frontera, libertad absoluta, pocas consecuencias a tus actos y ningún alguacil, solo hombres como él para llevar a los criminales a Thindar para ser rapidamente ejecutados.

Avanzó por el lodazal que era la calle sin asfaltar hasta el unico edificio construido con piedra del pueblo, hacía las veces de alcaldía, posada y burdel y para Adler ultimamente de oficina. El cazarrecompensas había pensado en dejar aquel sitio y cambiar de aires, los contratos que le llegaban allí eran los que ninguno del gremio de las grandes ciudades quería o se molestaba en ejecutar, con las pocas monedas de oro que ganaba por cada ladrón de ganado o cultista de los Yu-anti entregados jamás lograría retirarse. Por enesima vez aquella noche pensó en volver a Narubel, ciudad donde se crió o residir en Thindar directamente donde pordía pelear por los mejores contratos.

Cavilando llegó ante la puerta de madera del "Antro de Pegin". Flexionó sus manos haciendo que el cuero de los guantes crujiese, le dolían las manos, siempre le dolían con las lluvias. Kunder lanzó un gruñido de protesta al olfatear la puerta, reconocía el sitio, desde que le pegó una dentellada a Pegin cuando hizo trampa a los dados no era bien recibido. Kunder si dirigió a un pajar cercano entre gruñidos para guarecerse. Otro motivo para largarse de aquí pensó mientras habría la puerta. El aire caliente del interior le golpeó, una mezcla de humo, sudor y perfume barato se mezclaba con la carne asandose enmedio del hogar. Parecía que no había nada nuevo, los mismos rostros de cada noche y las mismas canciones de borrachos noche tras noche. Pidió un poco de comida con vino aguado y se colocó en un rincón apartado, en penumbra y siempre con la espalda contra la pared observando la puerta. Tras unos pocos minutos de espera le sirvieron un cuenco de arcilla con agua humeante y algún trozo de carne flotando.

¿Puede sentarme? -Su olor la delató antes de que Cornelius tuviese opción de levantar la vista del puchero. Se trataba de Arlin, una belleza morena de cabellos ensortijados que normalmente no se rebajaba a buscar clientes en la posada. Ni ella ni Neima una voluptuosa bailarina rubia bajaban al piso de abajo. Tenían suficiente calentando las camas a los adinerados y los comerciantes que se detenían en el publo para remontar río arriba sus mercancías. 

Miro a la muchacha, por un momento, con cara de sorpresa. Rápidamente cambio a mi expresión seria de siempre mientras por mi cabeza pasan infinidad de ideas sobre porqué podría haber bajado hasta mi mesa.

Con cierto desdén le indico que puede sentarse, que no hay problema.

Mientras, sigo comiendo sin dejar de vigilarla discretamente, y observo la sala (también con discreción) por si acaso fuera una broma de mal gusto de alguien...

Lo primero que pensó el cazarecompensas era que debía ser una broma de algunbo de los parroquianos, seguro era que Arlin no había venido buscando su dinero, hacía un par de semanas que no tenía trabajo y sin dudas no podría costearse un lujo como ella. No vio a nadie riendo y haciendo chanzas a su espalda, solo algún que otro parroquiano soprendido mirando hacia la mesa de Cornelius y volviendo con desgana a la mujerona que se sentaba a sus rodillas. 

Arlin con un giro estudiado de cabeza miró lascivamente a la concurrencia de la posada para luego dirigir su mirada directamente a los ojos de Cornelius. ¿Tu eres el cazarrecompensas no? Eres el llamado Cornelius Adler verdad? -La mujer acercó el rostro casi con ansiedad al de Cornelius esperando una respuesta-.

Ahora la veía con claridad, debía tener unos treinta años, sus rasgos eran finos y nobles e iba maquillada como una dama de cualquier corte, no como las fulanas que solían visitar el antro. A pesar de ello, todo aquel artistico maquillaje no podía evitar que se evidenciase a través del carmín rojo intenso un labio hinchado y que la sombra de ojos ocultase un moratón que sin duda iba a ir creciendo.

--Señorita, no se puede hablar de trabajo con la comida en la mano, además, se quedará empapada si que queda encima mío. Si me permite, la dejaré a usted en otra silla, el cuenco de sopa en la mesa, y hablaremos relajadamente.

Y antes de dejarle pensar una respuesta, deja en cuenco -derrama algo de sopa en la mesa por las prisas y mira el desastre con su cena- y la coge con toda la delicadeza posible para dejarla en la silla más proxima mientras piensa que no puede hacer negocios con tal provocación a sus instintos.

Después se acerca su silla a la de ella, cierra los ojos y respira hondo para relajarse. Abre los ojos de nuevo y le dice (observandola en general, pero sin mirarla a los ojos):

--Lo siento, pero mis trabajos normalmente no incluyen tipos que no quieren pagar los servicios prestados. Sólo dan problemas y se pagan mal. Pero si es algo diferente, soy el hombre que busca.

La mujer pareció sentirse un poco zaherida por las ultimas palabras del cazarrecompensas, pero recuperó inmediatamente la compostura. Si se tratara de eso -dijo con delicadeza- de un cliente que no paga tendría otros metodos para recuperar lo mío... No, quiero que encuentres a un hombre y a mi hermana Neima. Él se la ha llevado y Pegin me dice que eres el mejor encontrando personas.

Arlin era a todas luces un mujer fuerte y segura de si misma, tenía que serlo para sobrellevar la vida que había escogido, a pesar de ello las últimas palabras la llenaron de congoja y no pudo evitar que unas lagrimas asomaran por sus hermosos ojos castaños. Ese hombre está loco, tengo miedo por ella.

Desconcertada, bien... ahora podremos trabajar todos más relajados...

La mira a los ojos, con cara seria.

Mmm... eso suena más interesante... supongo que entiende que debo hacerle preguntas que quizá no le gustará contestar... pero le aseguro que son importantes... toda la información que pueda darme será de utilidad, por estúpida que pueda parecerle a primera vista...

Por ejemplo y para empezar... ¿quién es ese tipo, y que relación tiene con su hermana? ¿y con usted? y añadiré otra a esta primera ronda de preguntas... ¿porqué cree que ese tipo está loco y que merecen su preocupación?

Dicho esto le lanza una fugaz mirada al bol de sopa. Hoy comeré frio, pero con un poco de suerte comeré mejor la proxima vez...

Los ojos de Arlin se recuperaron con asombrosa rapidez, era un mujer fuerta a la par que hermosa, experta en ocultar y fingir sentimientos así que supuso Cornelius no volvería a pillarla con la guardia baja. Su pose dejó de ser la de  una mujer asustada y volvió a la de cortesana. Con un tono que sería más adecuado para sugerirle subir al piso de arriba que para el tema que estaban tratando. Un silencioso y provocativo silencio le indicó a Adler que empezara con sus preguntas.

Cita :
 

Ese tipo, es un hijo noble de la ciudad de Tashlutta. Su nombre es Vanthus Vanderboren y subió a la habitación con mi hermana y conmigo, quería jugar con las dos a la vez. Tenía mucho dinero y no le importaba pagar lo que fuera para subir. A mi no me hizo gracia pero Neima insistió en que subiesemos los tres, me... me dijo que no me preocupara, que estando las dos juntas no nos pasaría nada... -Su voz se quebró un  instante, y Adler pudo ver como la mujer luchaba unos segundos para recuperar la pose.

Cita :
 

Arlin continuó su relató sin mirar directamente a la cara a Cornelius, alguno de los parroquianos de la posada empezaron a preguntarse que podía hacer que el cazarrecompensas, el hombre más afortunado del mundo en aquellos momentos tardará tanto en subir con la mejor zorra de 100 millas a la redonda.

Era ya de madrugada -empezó a relatar Arlin en tono vajo- había llegado de río arriba una caravana que iba a partir en tres días. Había poco dinero, la mayoría mercaderes de frutas, verduras y comerciantes de madera. Entre ellos estaba Vanthus, se hizo notar nada más llegar, con aires de señor de ciudad y con una bolsa de monedas que parecía inagotable... Estabamos el el piso de arriba yo, Neima dos comerciantes de seda y un par más de tipos... La noche era tranquila y yo ya estaba preparando a uno de los comerciantes para subir mientras Neima bailaba en la tarima cuando llegó él... 

Inmediatamente se fijó en mi hermana obligandola a prestarle toda su atención a base de plata... cuando terminó se sentaron en uno de los reservados, el tipo iba bastante borracho así que supuse que Neima lo manejaría sin problemas... Yo estaba subiendo por las escaleras con mi mercadrer cuando Neima me detuvo agarrandome por el brazo, me dijo que Vanthus, un noble de Tashlutta pagaba 100 mo a cada una por acabar de pasar la noche las dos con él, que le hizo gracia que ambas fueramos hermanas.

El relato de Arlin se interrumpió a mientras buscaba las palabras adecuadas para escribir el resto de la escena. Había algo en él ... no sé algo que me dijo que era mejor perder esa fortuna pero ella insistió tirandome del brazo, mi mercader se cansó de esperar y ya había subido con otra chica así acepté. Anters de que Neima nos presentara me dijo que el tipo, Vanthus quería que llamase a mi hermana Lavinia...

Todo... todo fue mal desde el principio... subimos los tres, Neima y yo esperabamos que se tratase de jugar entre nosotras como ya habíamos hecho otras veces, pero el tipo quería cosas más especiales... a mi casi me ignoró por completo centrando solo en Lavinia. Empezó... empezó a tratarla mal y a llamarla Lavini y hermana y porque no la quería... aguante mientras la insultaba pero cuando empezó a querer hacerle ciertas... cosas... traté de agarrarle y llevarmela de allí. Ese hijo de puta era borracho pero era fuerte, empezó a golpearme con el puño cerrado en la cara hasta que perdí la consciencia. Cuando esa tarde me he levantado mi hermana no estaba y Vanthus había desparecido. Me dijeron que había comprado una carreta y que se la había visto cargar un bulto que podría ser mi hermana...

Quiero que me devuelvas a mi hermana.

La observo atentamente, mantengo la mirada fria, analítica, recordando todo lo que me dice para apuntarlo más tarde.

Probablemente no es un noble Tashlutta, aunque se gastó mucho dinero para poder secuestrarla... algo falla... mucho... tendré que pensar en ello...

Por cierto... Neima es la rubiales que anda por arriba con usted... así que supongo que Lavinia es su hermana... corríjame si me equivoco, por favor...

Murmuro un poco para mis adentros, cómo si tratara de encontrar una razón a todo esto...

Más preguntas... usted no estaba muy segura de querer aceptar... ¿tiene alguna idea de porqué? algun presentimiento, algo que vió en ese tipo, una marca especial por ejemplo... ¿y su hermana? ¿notó algo raro en ella? ¿hizó algo que le sorprendiera, fuera de lugar (por ser ella, claro...)? ¿Aceptó lo que le proponía el tipo, aunque usted no quisiera?

oiga... ahora que me fijo... nos están mirando mucho... ¿hay algún lugar más privado dónde poder hablar? ¿podemos subir a la habitación que ocuparon? es posible que se dejáse algo allí...

de esta no me salvo... seré la comidilla de este antro durante muchas lunas...

Los ojos de Arlin miraron con desafio a los demás clientes de la posada. De acuerdo, si esos cerdos quieren mirar que paguen. Acompañame. Agarró la manos de Cornelius y le guió escaleras arriba con un contoneo de caderas descarado que hizo lanzar más de un silbido y grito lascivo entre los parroquianos.

Subieron por las escaleras hasta llegar al tercer piso de la posada, una zona privada que nunca había visitado, forrada de paneles de roble y sin el tufo de las salas de abajo. Normalmente los clientes suben a este piso por la puerta de atrás para no mezclarse con los de la posada. Aqui es -dijo mientras habría una puerta con llave- no he tocado nada desde que pasó, adelante.

Una vez entró Adler, Arlin se apoyó en la puerta desde el interior atrancandola con su cuerpo, cruzó los brazos por delante del pecho y trató de reprimir un escalofrío. La habitación era grande y estaba ocupada casi por completo por una enorme cama con dosel, las sabanas azules estaban desechas y con manchas carmesíes, había un vestido tirado despreocupadamente en el suelo, junto al vestido un decantador de cristal casi vacío con tres copas, una de ellas hecha añicos.

Cita :
 

Neima, la rubiales es mi hermana, Lavinia es un nombre que no he oído jamás salvo de los labios de ese cerdo.

Cita :

Ese hombre no me gustó, era... era algo que no sabría describir... parecía una bestia, una animal peligroso que está atado y que se mantiene quieto esperando que le quiten la correa para lanzarse sobre alguien... Estaba... borracho, mucho pero sus ojos continuaban fríos. Como muertos, solo se encendían cuando llamaba Lavinia a mi hermana, si esa mujer existe y si es la hermana de Vanthus corre peligro. El mismo que puede estar corriendo ahora mi hermana. Las fuerzas de Arlin flaquearon, lloró y se enjugó las lagrimas corriendo todo el maquillaje por la cara y mostrando los moratones que ocultaba.

Neima estaba segura de poder controlarlo, hemos visto mucho en estos años, desde que eramos casi unas niñas y hemos hecho casi de todo -dijo sin pudor- pero cuando aquel tipo quisó empezar a cortar a mi hermana con la daga, un corte por año separados. Dijo... para que sepas lo que me ha dolido a mi estar separado de ti... dijo y hecho esto la cortó en la ingle. Neima quedó conjelada de terror sangrando sobre las sabanas, allí -señaló las sabanas de seda azul manchadas de sangre-

Los nombres ya me cuadran más... aunque sigue sin tener mucho sentido...