Partida Rol por web

La noche pasó tranquila en la mansión Vanderboren, al parecer durante la tarde había habido algún tipo de discusión entre el Capitán de la Enlutada y su segundo oficial, la joven no estaba presente y el capitán se mostró abatido durante toda la cena. Kora que se mostraba igual de abatida que Lavinia durante toda la velada les informó que la Señora Lavinia debía reunirse con todos ellos al medio día del día siguiente. La cena fue triste y silenciosa entre ambos hombres.

Los dos extraños y condenados a entenderse.

Después de que al fin el terrible enano desapareciera de su vista Kora, pálida aún se presentó con una cena ligera en la habitación de la joven. Sucintamente la informó que al día siguiente la Señora Lavinia debía reunirse con todos ellos y que si se encontraba furzas su presencia tambien sería requerida.

Aguanto con estoicidad las curas/torturas de Urol. Cierro los ojos fuertemente, con la convicción de que así todo pasará más rápidamente. Me da una cosa asquerosa para beber. Me cuesta mantenerlo en el estómago, pero con un poco de esfuerzo lo consigo. Por fin se va y respiro tranquilamente.

Poco a poco me voy quedando dormida, dejándome llevar por el sueño profundo que me va arrastrando a la oscuridad. De repente escucho como la puerta vuelve a abrirse, rápidamente abro los ojos, llevando mi mano hacia el costado... Me doy cuenta que es Kora, que por fin estamos a salvo y no tengo nada que temer. Me informa de que Lavinia requiere mi presencia al día siguiente, asiento con la cabeza. Veo los alimentos que me deja sobre la mesa y sin provar bocado me doy media vuelta y vuelvo a dejarme llevar por la oscuridad que todo lo envuelve.

Abatido, con una mueca de pesar en su rostro, asi estaba jack mientras mareaba la comida sin probar bocado. Jack sabía que debía canalizar todo ese dolor, y rabia. En la cabeza de jack todos los pensamientos se entremezclaban en estos momentos de pesar. intentaba hilbanar alguna ideas sobre el asunto en que se habían metido, pero su mente siempre acababa sumido en el mismo asunto

Viendo a la señorita Lavinia, a Jack y el estado en el que se encontraba Jazzmine, preferí volver a guardar silencio, aun que habían varias cosas que acudian a mi mente de forma incesante, ¿que contenía esos papeles que Lavinia llevaba desde que salimos de las mazmorras y que parecía afectar a todo aquel que lo leía?

Incluso kora que aparentaba ser de lo mas duro de corazón, estaba afectada tras salir de la habitación de Lavinia.

Y ese tal Urol al cual me pareció entender que aprendió la canción que cantaba cuando trabaja de aprendiz en el matadero.

Espero que ese no sea su trabajo actual, ni que Jazzmine sea su primera paciente o de lo contrario el equipo se vera reducido antes de partir.
 

Esta situación es de lo mas incomoda, sera mejor cenar y acostarme cuanto antes, mañana por la mañana daré orden a Timoty de que tenga el equipo a punto.

Mientras seguía inmerso en mis pensamiento note como un cosquilleo en mi pierna, Nordal reclamaba mi atención.
 

Cogí de mi propio plato varios trocitos de mi cena y se los pasaba a Nordal, quien mordisqueaba la punta de los dedos indicando que el también tenia bastante hambre.

Kora.- dijo el capitán con la voz quebrada aún por el dolor.- Hay algo que debería contaros a Lavinia y a tí, es importante.- Sus ojos tristes miraron a Kora.- Y no puede esperar.

Jack dejó de jugar con la comida y centro ahora toda su atención en Kora.

Está... bien. Sube a ver si la señora te puede recibir...

A la mañana siguiente Jazzminne se despertó con el estómago revuelto, dolorida y oliendo a rayos, pero la herida del estómago estaba casi cicatrizada. Al final resultaría que Urol sabía lo que se hacía. Era casi la hora de la reunión y las tripas rugieron de hambre.

El mediodía, tan caluroso y agobiante como todos los demás llegó pronto, poco a poco el comedor que daba al jardín de la Mansión de los Vanderboren su fue llenando de rostros, algunos habían vivido en días lo que otros no llegan a vivir en años, otros apenas se conocían y algunos eran completos desconocidos.

Nerviosamente todos los allí reunidos se miraron los unos a los otros, habían sido convocados por Lavinia, eso seguro pero el motivo escapaba a todos. Los participantes en aquella reunión no podían resusltar sujetos más dispares. El primero en llegar había sido un hombre de gesto hosco ataviado con las ropas de un artesano, por algún motivo aquellas ropas no parecían sentarle bien, parecían fuera de lugar. Llevaba gruesos guantes de piel y cuero casi nuevos a pesar de la calor. El siguiente comensal era un joven de clara ascendencia elfa, a pesar de ello su herencia humana se reflejaba en cada uno de los rasgos de su rostro que aún arrastraba lo que parecían secuelas de una paliza. Eol siguiente en llegar fue un humano vestido de marinero portando sable y espada corta, de mirada triste e imperturbable parecía haber pasado una noche terrible por las ojeras en la que se enmarcaba su mirada, silencioso tomó asiento. Casi a la par entraron los últimos invitados, un elfo con extraños ropajes carmesíes al igual que la máscara tras la que se ocultaba y una bella elfa de baja estatura y pelo oscuro que miró extrañada a alguno de ellos.

Se hizo el silencio, todos los invitados se observaban.

Jack miro a todos los presentes antes de hablar. - Mi nombre es jack. - Dijo poniendose de pié.

Parece que todos hemos sido convocados con un mismo objetivo. Estaría bien que nos presentaramos, si es que hemos de trabajar juntos tal como parece.  Veo entre nosotros personajes de lo mas dispar. - Jack esperó que estos nuevos fichajes aguantaran algo mas que los anteriores. El número de bajas en el bando de Lavinia era bastante alto

Varyan observó detenidamente, uno por uno, a todos los otros comensales. Deteniéndose algo más de tiempo en la joven elfa de verdes ojos y contorneadas caderas.

- De acuerdo, yo me llamo Varyan Woodbane -se irguió un poco- Quien me conozca, os contará que soy el mejor guía que podais encontrar en 50 millas a la redonda de Tashluta, aunque eso no es cierto... en realidad son 100 millas. - sonrió dirigiendo una mirada de soslayo a la elfa - Dadme una carta de navegación y un astrolabio y os guiaré a través de estos mares embravecidos, no importa cual sea el destino. - gesticulaba a la vez que hablaba, como intentando adornar sus palabras.

Despues de tan teatral presentación, esperó que el resto de sus compañeros hablasen.

Entro en el comedor, extrañada observo como hay dos personas más aparte del elfo que ya se presentó ayer... Vaya la Vanderboren esta sí que tiene recursos, a ver que tal salen estos... Por un momento mi mirada se dirige desilusionada a la mesa. No han traído el desayuno? Ahora que me encuentro algo recuperada mis tripas reclaman su derecho por nacimiento. Me siento en una de las sillas y escucho al que se presenta como Varyan, hablando después de Jack y haciendo que me olvide por un momento del desayuno todavía no servido... Le miro alzando una ceja y con un brillo pícaro en mis ojos... Menudo fantasma, ya veremos a la hora de la verdad sus conocimientos...

Bien, es grato saber que nos llevarías hasta los infiernos... Aunque promesas como las tuyas las he escuchado con anterioridad y en el último momento el horror les ha hecho huir... Digo con un poco de sorna en la voz. Bueno, mi nombre es Jazzminne, nunca he sabido venderme, ni tengo intención de hacerlo. Lo que teneis que saber es que si yo digo que una zona no es segura y no entro, mejor no lo hagais... Nuestro fallecido compañero entendió tarde mis palabras...

Al recordar a Finwë se puede apreciar en mis ojos una sombra de tristeza, aunque pasa rápidamente sin llegar a mostrar lo afectada que me encuentro.

OKIS

Me quede mirando al medio humano medio elfo como si de un bicho raro se tratase.

Por Lerethian, pero que...

Preferí callar mis pensamientos y centrarme en lo que nos había llevado a la mansión de la Señorita Lavinia.

Espere hasta que Jazzmine termino de presentarse, me levante e inclinándome para hacer una reverencia me presente: Mi nombre es Uldrich, soy un hechicero en busca de fortuna. Tras esto me volví a sentar añadiendo: En cuanto si soy o no útil para esta misión, ya se vera en su momento, pues el movimiento se demuestra caminando. Mientras decía esto en mi cara se había dibujado una medio sonrisa aunque me abstuve de dirigirla a nadie, pues el único alarde que iba hacer era de educación y modales. Tal y como me decía S'har en los entrenamientos “no digas de lo que eres capaz de hacer y hazlo”.

Ya habrá tiempo de comprobar si lo que dicen es cierto.

Los severos ojos de Cornelius se fijan en cada uno de los que van entrando. Sin intentar disimularlo, los estudia y los evalua, intentando saber a qué se dedícan, y su valor real.

Los escucha con atención, intentando saber más de ellos.

Vaya grupo... un pirata, un brujo mercenario, un guía engreído y una elfa... que no dice a qué se dedica. Ya lo descubriré... motivos para observarla no faltan...

De momento parece que lo más parecido a un líder es el pirata... Sparrow ha dicho. Pero quien me mecere más confianza es el brujo... almenos no intenta engañar a nadie... pero el tiempo lo dirá.

Cuando acaba de divagar, se da cuenta de que le toca hablar a él.

ehem... Mi nombre es Cornelius Adler. Parece ser que mi camino y el de la Dama Vanderboren se cruzan. Después de hablar con ella, me uniré a ustedes para trabajar juntos. Yo soy cazador.

No sé ustedes, pero yo he perdido un tiempo muy valioso para mis fines, y no me gustaría perder más. Así que iré al grano.

¿Que saben de Vanthus Vanderboren en este momento?

Jack observó a cada uno de los nuevos compañeros, pero se detuvo un instante mas de la cuenta en Cornelius Adler, pero luego miro a todos en general. Bien venidos, es un placer conoceros, algunos es posible que hayais oído hablar de mi, otros no. Los que que habéis oido hablar de mi sabeis que cuido de los mios y que jamás les dejo tirados, asi mismo suelo castigar duramente a los traidores.

El señor Adler pregunta si conocemos a Vanthus Vanderboren, Vanthus es el hermano de Lavinia, y es un criminal de la mas baja estopa. Me gustaría saber por que le buscais, asi quizas pueda ayudaros

Ante la respuesta de Sparrow, Cornelius solo pudo pensar:

No empezamos bien... pero alguien tendrá que ceder, ¿no?

Con voz más bien desinteresada, como si lo contara de pasada, explica:

Las relaciones criminales de Vanthus me interesan poco, mientras me distraigan de capturarle. En realidad ni siquiera le busco a él. Busco a una joven a la que secuestró y que su hermana me pidió rescatar.

Acto seguido su voz se endurece.

Lo que yo sé y puedo aportar es que él es peligroso. Probablemente compró (y no pagó) una barca hace poco. No somos los únicos que le buscamos y que tiene una relación de amor-odio-odio para con su hermana, y vine a verla para avisarla, pero creo que la Dama ya lo sabía antes de mi llegada.

Cuando acaba, mira fijamente a Sparrow, esperando reciprocidad.

Note como Cornelius, un hombre mas bien tosco, con rostro de severidad y mirada penetrante me miraba detenidamente, gire la cara devolviendo le la mirada. Escuchando lo que el y Jack hablaban entendí a que venia todo aquello. Así que todo esto viene por el hermano de Lavinia, pero si es un maleante para que demonios quieren dar con el, aun faltan piezas en todo esto pero ya empiezan a encajar.

Perdón, pero hay algo que me intriga por que alguien de su posición y de su clase se convertiría en un vulgar delincuente, viéndose obligado a huir continuamente, para evitar ser capturado o incluso asesinado. Fíjense bien en la casa que nos encontramos, ¿les parece lógico? hay algo que se nos escapa.

Mirando fijamente a los presentes, ¿no les parece totalmente incoherente? Y ya no solo por el, que me dicen del nombre de los Vanderboren, quedaría manchado y mancillado su honor.

Poniéndome de pie y caminando de lado a lado de la habitación con la cabeza mirando al suelo y acariciándome la barbilla pensativo, finalmente tras unos instantes levanto la cabeza y continuo, Póngase por un momento en su pellejo, quien de ustedes arriesgaría todo esto, por convertirse en uno de los hombres mas buscados afectando negativamente al nombre familiar.

Hay algo mas estoy convencido.

Dicho esto tome asiento nuevamente.

Por mi recuerdo pasa la historia que contó Lavinia, solo hace unos días aunque me parecen eones, decido contarles un pequeño resumen...

Bueno, parece ser que Vanthus empezó a relacionarse con gente de reputación bastante dudosa. Cuando eran niños los dos hermanos siempre habían estado muy unidos. Pero debido a sus compañías, los separaron durante unos cinco años. Y cuando volvieron a verse él había cambiado respecto a lady Lavinia. Hemos de recordar que no es un simple truhán. Es el segundo al mando de los Dragones de Loto, una cofradía bastante influyente, aquí, en Tashluta. Termino diciendo. Mi mirada se dirige de vez en cuando a la puerta, atenta a si entra la Vanderboren y sirven el desayuno de una vez.