Partida Rol por web

En el interior del templo suenan derrepente gritos de mujeres y niños, parece que alguno se ha asomado y ha visto lo que se acerca. En el exterior se escucha maldecir a Baern mientras arroja una cota de escamas, una cota de bandas y una exquesita lanza de la carreta a Erik y Svein. El Mago ha echado a correr como si hubiese visto al mismisimo Orcus hacía el templo. En los alrededores del templo cuatro necrofagos se empiezan a acercar, aún no se lanzan a atacar pero parece que se lo toman con calma. Quizás un ruido fuerte los ha atraido o el movimiento descuidado de alguna persona, sea lo que sea...tienen hambre.

Yo sólo doy un paso y saco mi jabalina. K7. Me quedo a expensas, de lo que pudiera pasar, por si hay que ayudar a transportar a Svein o frenar el avance de los necrófagos.

Si me excedo en acciones, corrígelas como desees.

Me parecia haberlo puesto, pero en fin, voy a k9

Cáledan ante el peligro que se avecinaba reconoció rápidamente lo que probablemente fuera una torre o un campanario de aquella capilla, y el preguntó a la joven:

- ¿Se puede disparar desde ahí arriba? - dijo señalando la entrada de la torre, y viendo como Fitha asentía. Luego se dirigió a subir rápidamente las escaleras y le dijo en el último momento a la pequeña:

- Si sabes usar esa ballesta, lo mejor será que me acompañes - y continuó subiendo escaleras arriba sin esperar la respuesta de la joven.

-Ya los he visto, Sköll!-gritó el guerrero norteño preparando su arco corto.

Svein supo inmediatamente que, aún y no temer a la muerte, sería una locura abalanzarse a un ataque cuerpo a cuerpo contra aquellas criaturas del demonio. Sabía como lo habían dejado en su último encuentro y si debía morir, quería que fuera en condiciones algo más...épicas.

Por si los compañeros no los habían visto, les informó:

-Son 4...y esos cabrones tienen cara de hambre! Que coman acero! HA HA HA HA!!!

El paladín avanzó hasta colocarse junto a sus compañeros frente a la puerta del templo. Afianza su posición junto al Barbaro y se dispuso a combatir hasta el último aliento. Veía como los necrofagos avanzaban situandose frente a ellos. La batalla sería ardua.

Desde la altura, lanzo el hechizo de dormir de tal forma de que pueda alcanzar a todos los enemigos que pueda.

Cáledan aprovechó su posición ventajosa para disparar tranquilamente, "Paralizarme ahora si tenéis cojones" pensó para sí, mientras tensaba el arco y disparaba, no fue su mejor tiro, pero al menos alcanzó al necrófago sin problemas. Desafortunadamente se le clavó en el hombro y el monstruo a apenas se inmutó tras recibir el disparo. "Joder, necesitaré dos carcajs enteros si quiero matar a esta gente a base de tiros en el hombro, tengo que acordarme de dispararles en la cabeza"

Fitha llega a la torre junto al extraño y poco fiable explorador. Apunta con su ballesta y su virote impacta en el dedo gordo del pie del necrofago que ya tenía una flecha lanzada por Caledan clavada en la mano. (J6)

Valion, dame coraje y certeza en mi brazo. Mis compañeros me necesitan mas que nunca, y por encima de ellos, están estas inocentes personas, que yo mismo privé de su seguridad. Permíteme, estar el mayor tiempo posible en pie para poder subsanar mi error.

El necrófago se acercó lo suficiente, a esa distancia no debería tener demasiados problemas, aunque la tensión del momento y la la oscuridad, reducían las posibilidades del bárbaro.

Trágate esto criatura de las sombras!!!_ Espetó Blür, al mismo tiempo que arrojaba su jabalina con todas sus fuerzas.

Nada mas soltar la jabalina, el norteño desenvainó su recién adquirido espadón.

Svein hubiera preferido atacar con su espada. Pocas veces había utilizado su arco para enfrentarse en contienda al enemigo. le gustaba ver, cara a cara, la mirada feroz del oponente sediento de sangre, con ganas de acabar con su vida al igual que él mismo. Pero su estado no le permitía meterse en tales trifulcas...de momento.

Tensó la cuerda del arco y lanzó el proyectil apuntando a uno de los necrófagos. Por mala suerte, la flecha salió disparada por uno de los costados del objetivo sin acercarse demasiado a su putrefacta carne.

-Mierda de arco!- escupió furioso.

-Qué? Cabrón de Sköll... Ya sé que tengo menos puntería que Haegen "el Tuerto", pero como mínimo intento hacerles daño y no parlotear como una caprichosa mujercita como tu. Cállate y haz alguna cosa de provecho, viejo loco!

Sir Erik avanza hacíendo con la espada el saludo de los Paladines de la Luz. Su capa ondeaba al viento mientras con paso firme se dirigía al Necrófago (K3). Lanzando un tajo paralelo al suelo, que se llevaría en su camino la cabeza de la criatura y sus hombros. El Necrófago yacía en el suelo destrozado.

-¡Por Velex y los Señores de la Luz, Cargad hermanos míos!

Resumen del Turno de loS Guerreros liderados por Jimmy

Baern intenta lanzar un conjuro dormir, pero está demasiado agotado para lanzar hechizo alguno.

Fitha y Caledan atacan desde su posición a los Necrófagos impactandoles en las extremidades, pero sin detenerlos.

Blür, lleno de ira y sintiendo empatía por los niños refugiados, lanza su jabalina henchido de coraje. El proyectil atraviesa de lleno a la criatura, clavandola en el suelo varios metros atrás.

Svein, quizás cansado del parloteo de Sköll lanza una flecha que se acaba clavando en la torre junto a Caledan y Fitha. Se le fue un pelín alta.

Erik, exhortado por el poder de los dioses y con la fiereza que le proporciona su fe avanza contra los enemigos con paso firme. En un alarde de disciplina y habilidad acaba con uno de las criaturas.

Repelido por la furia del Paladín y la fiereza del barbaro, uno de los necrófagos empieza a trepar el campanario con gran agilidad. Ha fijado su vista en Fitha y Caledan, le han parecido los mas débiles. Aún tardará unos segundos en llegar arriba. Mientras su otro compañero se lanza a la carrera contra Svein en linea recta.

"Joder, subí aquí arriba para evitar el cuerpo a cuerpo y ahora resulta que también saben escalar, ¡Malditos sean estos bichos del demonio!" pensó algo confundido ante la destreza de sus enemigos. Se colgó el arco y sacó sus dos espadas, y le dijo a la niña:

- Fitha, tú sigue disparando, yo intentaré evitar que ese malnacido suba. ¡Ah!, y que no te toquen, te paralizaran.

Luego miró por la torre a ver si había alguna piedra o barril que pudiera arrojar, y esperó impaciente el inevitable combate. Como le sobraba tiempo decidió hacerle una plegaria mental a Velex, "Por favor gran guerrero, ya me ayudaste una vez en el bosque con aquel tiro perfecto cuando más lo necesitaba, y he intentado no pedirte más nada para no aumentar la deuda, pero ahora mucha gente depende de que ese necrófago no entre y no sé si mis habilidades bastaran por sí mismas para defenderlos, ayúdame te lo imploro"

Svein observó como aquella criatura se acercaba, poco a poco, hasta su posición. Y pocas eran sus opciones... Volver a disparar? Después de su tremendo fallo en el tiro anterior, mejor dejar el arco para cazar ciervos. Salir huyendo? Nunca!

-Que comience la fiesta...y esperemos que no sea la última!

El guerrero desenvainó su espada, afianzó su escudo y esperó la llegada de su oponente. Si alguien se hubiera fijado en el rostro de Svein hubiera vislumbrado una cierta sonrisa en su rostro. Eran aquellos los momentos en los que el norteño realmente disfrutaba y se sentía vivo...aunque estuviera demasiado cerca de la muerte.

Viendo que mi cerebro no podía hacer un esfuerzo por mantener la concentración y poder lanzar conjuros, como mi baston y me pongo en marcha a por los necrófagos.

Van a probar el jarabe de palo....